¿Qué tan importante es el empaque? 1 ¿Qué tan importante es el empaque? Si bien para todos es claro que el empaque es indispensable un del elemento producto, en muchos casos se considera un simple accesorio necesario pero no siempre se le da la importancia que merece. Desde una perspectiva meramente funcional, el empaque debe tener la capacidad de contener y proteger el producto durante todo su camino desde su producción, con el fin de que llegue intacto a manos del consumidor. De allí que sus características principales estén orientadas a “defenderlo” de todos los factores que puedan alterar de alguna manera sus características y propiedades, tanto durante su transporte como en el momento de su almacenamiento y exhibición. Sin embargo, el empaque cumple un papel muy importante y mucho más amplio de lo que parece. En especial en lo que tiene que ver con su promoción y con la venta misma. A continuación, se resumen algunas características fundamentales que se deben considerar a la hora de diseñar un empaque para un producto, más allá del cumplimiento de los requisitos básicos mencionados: 2 • Facilidad de manipulación y almacenaje: el transporte y el almacenamiento son dos aspectos críticos a los que necesariamente son sometidos los productos materiales. En ellos, los riesgos de deterioro son altos y el empaque, como mínimo, debe estar diseñado para proteger el producto de éstos. Pero además el empaque debe facilitar su manipulación (carga y descarga) y su disposición adecuada y eficiente durante su almacenaje. Un empaque difícil de manejar puede generar sobrecostos en la manipulación del producto o en su almacenamiento. • Facilidad de uso: desde el momento en el que el cliente adquiere un producto su interacción directa es principalmente con el empaque. Dependiendo de su diseño, éste puede obstaculizar o facilitar su uso. Este aspecto es tan importante que incluso el cliente puede elegir un producto frente a otro en función de la facilidad de uso que permite su empaque. • Atractivo: el primer contacto que tiene el producto con su consumidor potencial es su aspecto externo, su empaque. Éste debe ser capaz de atraer y, de alguna manera, “seducir” al cliente. También debe tener la capacidad de transmitir las características propias del producto (calidad, seguridad, funcionalidad, durabilidad, etc.). Dicho de otro modo, si el empaque no está bien alineado con el producto y no logra reflejar y realzar sus características, se convertirá en un factor negativo a la hora de la decisión de compra por parte del consumidor, lo cual puede dar al traste con toda la inversión que se haga en una campaña de mercadeo. Esto es muy importante si tenemos en cuenta que se estima que alrededor del 70% de las decisiones de compra se toman en el punto de venta, en función del precio, la imagen de la marca y la apariencia del producto. 3 • Facilidad de reciclaje: cada vez existe mayor preocupación por el cuidado del planeta. Así que un aspecto importante que está siendo tenido en cuenta por un número creciente de consumidores es el impacto ambiental de los productos que se consumen. La facilidad que tiene un empaque de ser reciclado está comenzando a ser tenido en cuenta como criterio de compra de un producto. En síntesis, el asunto del empaque de los productos ha dejado de ser un aspecto accesorio y secundario. Cada vez adquiere mayor importancia desde los puntos de vista del mercadeo y la comercialización. Por ello debe abordarse con mucho criterio técnico. Es un asunto para el que hay que dedicar tiempo y conocimiento, pues el empaque puede llegar a ser determinante para la conquista del mercado. 4