Secuestro República de Colombia P: ¿Se considera el secuestro una violación de los derechos humanos? R: Sí. El secuestro se considera una privación ilegal de la libertad personal, lo que constituye una violación a los derechos humanos. No obstante, el secuestro en Colombia es mucho más que eso. El código penal lo considera un crimen, y en el caso de miembros de la Fuerza Pública o funcionarios electos, se tipifica como secuestro agravado. Cuando el secuestro se realiza para efectos de pedir un rescate es una contravención al Derecho Internacional Humanitario (DIH). Por consiguiente, el secuestro en Colombia constituye una triple violación: a los derechos humanos, a las leyes Colombianas y al DIH. P: ¿Entonces por qué no condenan las ONGs y los grupos de Derechos Humanos al secuestro como una violación de los derechos humanos? R: Aunque Naciones Unidas y la mayoría de los miembros de la Unión Europea condenan el secuestro enérgicamente, algunas ONGs y grupos de derechos humanos no lo hacen, o en caso de hacerlo su condena no siempre es lo suficientemente fuerte. Lo anterior constituye un misterio a la luz del hecho de que cada secuestro viola al menos 3 artículos de la Carta de la ONU, la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y que las condiciones de cautiverio resultan en la muerte de muchas de las víctimas. P: ¿Las ONGs condenan otras violaciones de los derechos humanos? R: Algunas organizaciones, como la Veeduría de los Derechos Humanos, condenan el secuestro y otras violaciones de los derechos humanos. Otras no controlan las violaciones de los derechos humanos por parte de actores ajenos al Estado; si así lo hicieran, contabilizarían al menos 12.000 violaciones cometidas anualmente por las FARC, el ELN y las AUC. P: ¿El secuestro en Colombia principalmente es de carácter político. Es esta la razón por la que no se condenan estos actores? R: La mayoría de las víctimas son secuestradas por dinero. El secuestro es la segunda fuente de financiación de los grupos terroristas, después del tráfico de drogas. Las mafias del crimen organizado secuestran colombianos inocentes y venden las víctimas a los grupos terroristas, quienes los retienen para obtener un pago por su rescate. Casi el 20 por ciento de las víctimas son niños y el resto son en su mayoría civiles. Además, el Comité Internacional de la Cruz Roja considera que cualquier persona privada de su libertad con fines de extorsión es un rehén y la toma de rehenes constituye una infracción al DIH. Los grupos terroristas no cuentan con el apoyo popular, ni con legitimidad política. Estos grupos son organizaciones criminales, sin derechos políticos bajo las leyes colombianas ni internacionales. Las personas que privan de la libertad a hombres, mujeres y niños inocentes son criminales en Colombia y en cualquier parte del mundo. P: ¿Por qué el gobierno no intercambia los secuestrados por miembros de estos grupos capturados bajo un acuerdo humanitario, como lo proponen las FARC? R: El gobierno de Colombia no se opone al intercambio humanitario y, de hecho, ha ofrecido públicamente intercambiar miembros de las FARC condenados por rebelión por civiles y militares cautivos. Las FARC han rechazado esta oferta e insisten en que el intercambio debe incluir también a sus miembros (incluyendo líderes de las FARC) condenados por crímenes de lesa humanidad como asesinato, violación y secuestro. P: ¿Por qué secuestran estos grupos si esto únicamente los hace aparecer como criminales y deslegitima su intención de presentarse como revolucionarios? R: También se podría preguntar por qué asesinan profesores, líderes sindicales, candidatos a cargos públicos, o funcionarios electos es por dinero o con el animo de intimidar. Se estima que después del tráfico de cocaína, el secuestro es la segunda fuente de financiación de estos grupos terroristas. Es un negocio y se debe percibir como tal; una cruel versión de la esclavitud contemporánea. Es la reventa de seres humanos a sus familiares. Para más información visite: www.antisecuestro.gov.co P: ¿Ha logrado el gobierno algún resultado en la erradicación de esta práctica criminal? R: Sí, estamos logrado un progreso extraordinario. Hemos reducido el número de secuestrados en el país en un 26% el año pasado. Y desde que el Presidente Álvaro Uribe asumió la administración 830 personas han sido liberadas. P: ¿Por qué el gobierno no trabaja para asegurar la liberación de Ingrid Betancourt? R: Ingrid es una de miles de víctimas que permanecen secuestradas en Colombia, una cifra que incluye a varios extranjeros. El gobierno tiene una responsabilidad con todos ellos y trabaja todos los días hacia el logro de su liberación o rescate. No podemos determinar que la libertad de Ingrid sea más valiosa que, por ejemplo, la libertad de un niño retenido por las FARC. Esto enviaría, a las victimas y sus familias, el mensaje equivocado de que algunos son más importantes que otros. No sería justo con las miles de familias que no tienen la ventaja de ser famosas. P: ¿Las personas secuestradas son bien tratadas por sus captores y se encuentran en buenas condiciones de salud? R: El fenómeno del secuestro en Colombia ha atraído la atención de académicos debido a su singularidad, si se compara con el secuestro en otras partes del mundo. En lugar de ser un crimen efímero cometido por criminales comunes en asentamientos urbanos, el secuestro en Colombia es cometido por empresas criminales organizadas en ambientes selváticos hostiles por periodos prolongados, en ocasiones por años. Algunas veces se abusa de las víctimas física y mentalmente y sus familias han tenido que venderlo todo porque han dejado de percibir el ingreso de uno de sus miembros, con frecuencia cabeza de hogar. Muchos secuestrados simplemente son asesinados por sus captores. El secuestro también destruye las familias y su recuperación tarda muchos años, cuando se logra. P: ¿Muchos partidos políticos en Europa afirman que estos grupos tienen objetivos políticos, es esto cierto? R: Muchos de esos partidos conocen las FARC y el ELN por sus acrónimos y la propaganda en sus páginas web. En Colombia, los conocemos por sus actos de asesinato, secuestro y terror. Muchos de esos partidos en Europa simplemente no tienen una visión realista de quiénes son las FARC y el ELN y las acciones de estos grupos. Piensan que estos son de alguna manera diferentes a las AUC - grupos de auto defensa de derecha cuando de hecho todos son lo mismo; organizaciones criminales que emplean el terror y el narcotráfico para protegerse y lucrarse. No obstante, organizaciones europeas y funcionarios que han visitado Colombia y han presenciado la horrible realidad del secuestro, a menudo se solidarizan y empiezan a condenar estos actos públicamente. P: ¿Los grupos terroristas únicamente tienen como objetivo a ciudadanos colombianos? R: No. Aunque la mayoría de las víctimas son ciudadanos colombianos, los grupos terroristas también tienen como objetivo a extranjeros y frecuentemente exigen rescates extraordinarios por ellos. Dentro de las víctimas de secuestro se cuentan norteamericanos, británicos, alemanes, japoneses y españoles. Los costos de la seguridad y el temor al secuestro de los extranjeros constituyen uno de los principales impedimentos para el desarrollo de negocios e inverisones y para el turismo en Colombia. Fuentes: Ministerio de Defensa, República de Colombia, http://www.mindefensa.gov.co. Fondelibertad (Fundación colombiana anti secuestro), Para más información visite: www.antisecuestro.gov.co