Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública ANEJO Nº 5 IMPLANTACIÓN DEL RÉGIMEN DE CAUDALES ECOLÓGICOS Diciembre 2010 Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública 1. INTRODUCCIÓN ................................................................... 1 2. BASE NORMATIVA ................................................................ 2 2.1. Texto refundido de la Ley de Aguas ............................................................ 2 2.2. Ley 10/2001 del Plan Hidrológico Nacional y Ley 11/2005 por la que se modifica la Ley 10/2001 del Plan Hidrológico Nacional. .................................. 3 2.3. Reglamento de Planificación Hidrológica ...................................................... 4 2.4. Instrucción de Planificación Hidrológica ....................................................... 5 3. ANTECEDENTES EN LA DETERMINACIÓN DE CAUDALES ECOLÓGICOS....................................................................... 5 4. FASES EN EL ESTABLECIMIENTO DEL RÉGIMEN DE CAUDALES ECOLÓGICOS....................................................... 7 5. OBJETIVOS DE LOS REGÍMENES DE CAUDALES ECOLÓGICOS Y DE LOS REQUERIMIENTOS HÍDRICOS DE LAGOS................................................................................ 8 6. ESTUDIOS TÉCNICOS. ........................................................ 11 6.1. Introducción. ......................................................................................... 11 6.2. Regímenes de caudales ecológicos............................................................ 11 6.2.1. Componentes del régimen de caudales ecológicos. ...................................... 12 6.2.2. Ríos permanentes. ................................................................................. 13 6.2.3. Ríos temporales, intermitentes y efímeros. ................................................ 26 6.2.4. Masas de agua muy alteradas hidrológicamente. ........................................ 28 6.2.5. Régimen de caudales durante sequías prolongadas. .................................... 30 6.3. Lagos y zonas húmedas. ......................................................................... 30 7. RESULTADOS DE LOS ESTUDIOS TÉCNICOS. ......................... 32 7.1. Ríos y estuarios. .................................................................................... 32 Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública 7.2. Lagos y zonas húmedas. ......................................................................... 34 8. PROCESO DE CONCENTRACIÓN DEL RÉGIMEN DE CAUDALES ECOLÓGICOS..................................................... 34 9. PRESENTACIÓN DE LOS RESULTADOS .................................. 35 10. EXTRAPOLACIÓN DE LOS RESULTADOS A LA TOTALIDAD DE LAS MASAS DE AGUA DE LA DEMARCACIÓN...................... 39 11. REPERCUSIÓN DEL RÉGIMEN DE CAUDALES ECOLÓGICOS SOBRE LOS USOS DEL AGUA............................ 41 APÉNDICE I. FICHAS TIPO DE LAS MASAS DE AGUA ESTUDIADAS. APÉNDICE II. UMBRALES DEL RÉGIMEN DE CAUDALES MÍNIMOS. APÉNDICE III. CAUDALES MÁXIMOS A DESEMBALSAR. APÉNDICE IV. TASA DE CAMBIO MÁXIMA. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública 1. INTRODUCCIÓN El agua es un bien escaso en muchas zonas de España donde existe una importante presión antrópica sobre el medio hídrico debido a la utilización del recurso. El gran objetivo de la planificación hidrológica es lograr la compatibilidad de los usos del agua con la preservación y mejora del medio ambiente. Ello requiere de una planificación y gestión eficaces para asegurar el suministro a todos los usuarios y evitar la degradación de los ecosistemas fluviales. Con objeto de asegurar esta compatibilidad, se han establecido una serie de objetivos medioambientales cuyo cumplimiento debe asegurar la disponibilidad de recursos en cantidad y calidad suficientes. Pero además de estos objetivos, debido a la problemática derivada de la escasez de agua, se hace imprescindible establecer una restricción al uso del recurso, con el objetivo de mantener la funcionalidad de los ecosistemas, evitando su deterioro. Así queda plasmado en la legislación española, que establece la necesidad de determinar los caudales ecológicos en los planes de cuenca, entendiendo los mismos como una restricción impuesta con carácter general a los sistemas de explotación. Esta normativa incluye además las disposiciones que definen el concepto de caudal ecológico, su consideración como una restricción previa al uso en los sistemas de explotación y el proceso para su implantación. Es importante destacar que, si bien en la Directiva Marco del Agua (en adelante DMA) no se establece el requerimiento de establecer regímenes de caudales ecológicos, la determinación de los mismos y su mantenimiento supone un paso adelante en el camino hacia el logro del buen estado de las masas de agua, objetivo concreto y principio que inspira toda la DMA. Por lo tanto, los caudales ecológicos no se conciben como un fin en sí mismo sino como un medio para alcanzar el objetivo citado. En este anejo relativo a los caudales ecológicos se presenta la base normativa de aplicación, los objetivos y fases para su implantación, así como los trabajos llevados a cabo para su implantación y los resultados obtenidos. El apartado de normativa describe los artículos relacionados con el establecimiento de regímenes de caudales ecológicos recogidos en el Texto refundido de la Ley de Aguas (TRLA), la ley del Plan Hidrológico Nacional (PHN) y sus modificaciones, el Reglamento de Planificación Hidrológica (RPH) y la Instrucción de Planificación Hidrológica (IPH). El apartado de los estudios técnicos describe esquemáticamente la metodología y fases del estudio técnico. El apartado de presentación de resultados incluye una síntesis de los resultados obtenidos para las masas de agua estudiadas. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 1 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública El apartado de repercusión del régimen de caudales sobre los usos del agua incluye el análisis de las repercusiones económicas, sociales, en los usos del agua y en los niveles de garantía que el establecimiento del régimen de caudales ecológicos supone. El apartado de proceso de concertación describe las fases posteriores a realizar para la determinación de los regímenes de caudales ecológicos, mediante la concertación con usuarios y agentes interesados y el proceso hasta su implantación final. 2. BASE NORMATIVA El marco normativo en el ordenamiento jurídico español para la determinación de regímenes de caudales ecológicos viene establecido por el Real Decreto 1/2001, de 20 de julio, por el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley de Aguas (TRLA); por la Ley 10/2001, de 5 de julio, del Plan Hidrológico Nacional; por la Ley 11/2005, de 22 de julio, por la que se modifica la Ley 10/2001, de 5 de julio, del Plan Hidrológico Nacional y por el Real Decreto 907/2007, de 6 de julio, por el que se aprueba el Reglamento de Planificación Hidrológica (RPH). Además, la Instrucción de Planificación Hidrológica (IPH), aprobada por la Orden ARM/2656/2008, de 10 de septiembre, desarrolla los contenidos de la normativa y define la metodología de aplicación. Este apartado presenta un breve resumen de los contenidos relativos al establecimiento de regímenes de caudales ecológicos en estos documentos normativos. 2.1. Texto refundido de la Ley de Aguas La norma básica en materia de planificación y gestión de las aguas es el texto refundido de la Ley de Aguas (TRLA), compuesto por el Real Decreto Legislativo (RDL) 1/2001, de 20 de julio, y sus sucesivas modificaciones, entre las cuales cabe destacar para este documento la introducida por la Ley 11/2005, de 22 de junio, por la que se modifica la ley 10/2001 del Plan Hidrológico Nacional, que incorpora las bases de los caudales ecológicos. El artículo 42 del TRLA, Contenido de los planes hidrológicos de cuenca, establece lo siguiente: Artículo 42. Contenido de los planes hidrológicos de cuenca. 1. Los planes hidrológicos de cuenca comprenderán obligatoriamente: (…) b) La descripción general de los usos, presiones e incidencias antrópicas significativas sobre las aguas, incluyendo: (…) Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 2 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública c’) La asignación y reserva de recursos para usos y demandas actuales y futuros, así como para la conservación o recuperación del medio natural. A este efecto se determinarán: Los caudales ecológicos, entendiendo como tales los que mantienen como mínimo la vida piscícola que de manera natural habitaría o pudiera habitar en el río, así como su vegetación de ribera. Por otro lado, en el artículo 59.7 se establecen los caudales ecológicos como restricciones a los sistemas de explotación: Artículo 59. Concesión administrativa. 7. Los caudales ecológicos o demandas ambientales no tendrán el carácter de uso a efectos de lo previsto en este artículo y siguientes, debiendo considerarse como una restricción que se impone con carácter general a los sistemas de explotación. En todo caso, se aplicará también a los caudales medioambientales la regla sobre la supremacía del uso para abastecimiento de poblaciones recogida en el párrafo final del apartado 3 del artículo 60. Los caudales ecológicos se fijarán en los Planes Hidrológicos de Cuenca. Para su establecimiento, los organismos realizarán estudios específicos para cada tramo de río. 2.2. Ley 10/2001 del Plan Hidrológico Nacional y Ley 11/2005 por la que se modifica la Ley 10/2001 del Plan Hidrológico Nacional. La Ley 10/2001, de 5 de julio, del Plan Hidrológico Nacional, así como su modificación mediante la Ley 11/2005, de 22 de junio, desarrollan el artículo 59.7 de la Ley 1/2001 del Texto Refundido de la Ley de Aguas. Así, en el artículo 26 de la Ley 10/2001 (con las modificaciones establecidas por la Ley 11/2005), se establece lo siguiente: Artículo 26. Caudales ambientales. 1. A los efectos de la evaluación de disponibilidades hídricas, los caudales ambientales que se fijen en los Planes Hidrológicos de cuenca, de acuerdo con la Ley de Aguas, tendrán la consideración de una limitación previa a los flujos del sistema de explotación, que operará con carácter preferente a los usos contemplados en el sistema. Para su establecimiento, los Organismos de cuenca establecerán estudios específicos para cada tramo de río, teniendo en cuenta la dinámica de los ecosistemas y las condiciones mínimas de su biocenosis. Las disponibilidades obtenidas en estas condiciones son las que pueden, en su caso, ser objeto de asignación y reserva para los usos existentes y previsibles. La fijación de los caudales ambientales se realizará con la participación de todas las Comunidades Autónomas que integren la cuenca hidrográfica, a través de los Consejos del Agua de las respectivas cuencas, sin perjuicio de lo dispuesto en la disposición adicional décima en relación con el Plan Integral de Protección del Delta del Ebro. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 3 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública 2. Sin perjuicio de lo establecido en el número anterior y desde el punto de vista de la explotación de los sistemas hidráulicos, los caudales ambientales tendrán la consideración de objetivos a satisfacer de forma coordinada en los sistemas de explotación, y con la única preferencia del abastecimiento a poblaciones. Por su parte, el artículo 31 de la Ley 10/2001 del Plan Hidrológico Nacional establece lo siguiente: Artículo 31. Humedales. - El Ministerio de Medio Ambiente, en coordinación con las Comunidades Autónomas, establecerá un sistema de investigación y control para determinar los requerimientos hídricos necesarios que garanticen la conservación de los humedales existentes que estén inventariados en las cuencas intercomunitarias. - Asimismo, el Ministerio de Medio Ambiente y las Comunidades Autónomas promoverán la recuperación de humedales, regenerando sus ecosistemas y asegurando su pervivencia futura. 2.3. Reglamento de Planificación Hidrológica El Reglamento de Planificación Hidrológica (RPH), aprobado mediante el Real Decreto 907/2007, de 6 de julio, recoge el articulado y detalla las disposiciones del TRLA relevantes para la planificación hidrológica. El artículo 3.j) recoge y amplía la definición contenida en el TRLA, ligándola a los conceptos de estado introducidos por la Directiva Marco: j) Caudal ecológico: caudal que contribuye a alcanzar el buen estado o buen potencial ecológico en los ríos o en las aguas de transición y mantiene, como mínimo, la vida piscícola que de manera natural habitaría o pudiera habitar en el río, así como su vegetación de ribera. En su artículo 18 recoge lo referente a la implantación de regímenes de caudales ecológicos. Artículo 18. Caudales ecológicos. 1. El plan hidrológico determinará el régimen de caudales ecológicos en los ríos y aguas de transición definidos en la demarcación, incluyendo también las necesidades de agua de los lagos y de las zonas húmedas. 2. Este régimen de caudales ecológicos se establecerá de modo que permita mantener de forma sostenible la funcionalidad y estructura de los ecosistemas acuáticos y de los Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 4 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública ecosistemas terrestres asociados, contribuyendo a alcanzar el buen estado o potencial ecológico en ríos o aguas de transición. Para su establecimiento los organismos de cuenca realizarán estudios específicos en cada tramo de río. 3. El proceso de implantación del régimen de caudales ecológicos se desarrollará conforme a un proceso de concertación que tendrá en cuenta los usos y demandas actualmente existentes y su régimen concesional, así como las buenas prácticas. 4. En caso de sequías prolongadas podrá aplicarse un régimen de caudales menos exigente, siempre que se cumplan las condiciones que establece el artículo 38 sobre deterioro temporal del estado de las masas de agua. Esta excepción no se aplicará en las zonas incluidas en la red Natura 2000 o en la Lista de humedales de importancia internacional de acuerdo con el Convenio de Ramsar, de 2 de febrero de 1971. En estas zonas se considerará prioritario el mantenimiento del régimen de caudales ecológicos, aunque se aplicará la regla sobre supremacía del uso para abastecimiento de poblaciones. 5. En la determinación del flujo interanual medio requerido para el cálculo de los recursos disponibles de agua subterránea se tomará como referencia el régimen de caudales ecológicos calculado según los criterios definidos en los apartados anteriores. 2.4. Instrucción de Planificación Hidrológica La Instrucción de Planificación Hidrológica (IPH), aprobada por la Orden ARM/2656/2008, de 10 de septiembre, recoge y desarrolla el articulado del Reglamento de Planificación Hidrológica (RPH) y del Texto refundido de la Ley de Aguas (TRLA). La IPH en el apartado 3.4 recoge ampliamente la cuestión de los caudales ecológicos, desarrollando tanto sus objetivos como las fases en que debe implantarse y las metodologías a seguir para ello. Puesto que la IPH establece todas las bases metodológicas que han de considerarse en la implantación de caudales ecológicos y necesidades hídricas de lagos y humedales, se omite en este apartado la trascripción de la citada norma, recogiéndose en los apartados posteriores. 3. ANTECEDENTES EN LA DETERMINACIÓN DE CAUDALES ECOLÓGICOS. Los antecedentes técnicos de estudios de caudales ecológicos en el ámbito de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir están en el proceso de planificación hidrológica y sus estudios anejos entre los que resulta especialmente destacable el “Estudio de caudales ecológicos por tramo de río en el ámbito de la cuenca hidrográfica del Guadalquivir” desarrollada entre 1996 y 1997. en dicho estudio se abordó la definición de los caudales Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 5 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública ecológicos de un total de 13 tramos que representaban el tronco principal del Guadalquivir y al río Genil, así como a otros afluentes menores (Guadiana Menor, Guadalbullón y Guadaíra). El trabajo, llevado a cabo siguiendo la metodología IFIM (Instream Flor Incremental Methodology), constituyó una experiencia piloto que, por un lado, hizo posible la formulación concreta de los caudales ecológicos en los puntos más sensibles de la cuenca y, por otro, empleando técnicas de regionalización, permitió extender los resultados a otros tramos de la cuenca hasta que nuevos trabajos permitan su confirmación. En el Plan Hidrológico de julio de 1995 se establece en su Capítulo IV, sobre la Asignación y Reserva de Recursos, la asignación específica para la conservación y recuperación del medio natural, en su artículo 19. 1. Para asegurar la aptitud del río Guadalquivir para el mantenimiento de la vida piscícola y restantes elementos bióticos y abióticos, de acuerdo con los objetivos de calidad del artículo 36, se garantizará la circulación de los caudales mínimos, en las secciones señaladas, que figuran en el cuadro N-1.12. CUADRO N-1.12. CAUDALES MÍNIMOS MEDIOAMBIENTALES PUNTO DE CONTROL CAUDAL MÍNIMO (m3/s) Río Guadalquivir aguas abajo de la presa de Pedro Marín 1,6 Río Guadalquivir aguas debajo de la presa de Mengíbar 4,4 Río Guadalquivir aguas debajo de la presa de El Carpio 7,2 Río Guadalquivir aguas debajo de la presa de Alcalá del Río 12,1 Río Genil en Puente Genil 1,45 2. Para una situación hidrológica de prolongada sequía invernal, la presencia de estos caudales continuos, se conseguirá mediante los desembalses que se señalan en el cuadro N-1.13. RÍO EMBALSE CAUDAL MÍNIMO (m3/s) Guadalquivir Tranco de Beas 0,10 Guadiana Menor Negratín 0,13 Guadalmena Guadalmena 0,14 Guadalén Guadalén 0,06 Guarrizas La Fernandina 0,05 Jándula Jándula 0,18 Guadiato La Breña 0,18 Genil Cordobilla 1,32 Corbones La Puebla de Cazalla 0,07 Rumblar Rumblar 0,06 Yeguas Yeguas 0,08 Guadalmellato San Rafael de Navallana 0,13 Guadajoz Vadomojón 0,18 Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 6 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública RÍO EMBALSE CAUDAL MÍNIMO (m3/s) Bembézar Bembézar 0,16 Retortillo Retortillo 0,05 Guadalbacar José Torán 0,05 Viar Pintado 0,05 Montoro Montoro 0,05 Fresneda Fresneda 0,05 Aunque todos estos trabajos han aportado una información muy útil para el conocimiento de las necesidades hídricas de los ecosistemas fluviales, han sido realizados en base a diferentes metodologías y sin seguir estrictamente el procedimiento actualmente establecido en la normativa para la implantación de caudales ecológicos. Por ello ha sido necesario acometer unos nuevos estudios que permitan esta implantación, de acuerdo al concepto actualmente aceptado de caudal ecológico. A continuación se presenta la metodología aplicada y los principales resultados obtenidos. 4. FASES EN EL ESTABLECIMIENTO CAUDALES ECOLÓGICOS. DEL RÉGIMEN DE El proceso general para la implantación de los regímenes de caudales ecológicos debe constar de tres fases: a) Desarrollo de los estudios técnicos destinados a determinar los elementos del régimen de caudales ecológicos en todas las masas de agua. Los estudios a desarrollar deberán identificar y caracterizar aquellas masas muy alteradas hidrológicamente, sean masas de agua muy modificadas o no, donde puedan existir conflictos significativos con los usos del agua. Durante esta fase se definirá un régimen de caudales mínimos menos exigente para sequías prolongadas. b) Proceso de concertación en aquellos casos que condicionen significativamente las asignaciones y reservas del plan hidrológico, definido por varios niveles de acción (información, consulta pública y participación activa). c) Proceso de implantación concertado de todos los componentes del régimen de caudales ecológicos y su seguimiento adaptativo. La complejidad intrínseca de este proceso y el gran número de masas de agua superficial en las cuencas intercomunitarias (superior a cuatro mil) impide la extensión de este proceso a todas aquellas en el reducido plazo disponible. También debe mencionarse la limitada experiencia en algunos trabajos inherentes a este tipo de determinaciones, que, siempre según la IPH, comprenden una doble vertiente. Por una parte, análisis hidrológicos de las masas de agua, a realizar en gabinete y para los que se dispone de información suficiente. Por otra la realización de estudios ecológicos “in situ” para conocer las especies que existen, Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 7 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública o podrían existir, en cada masa de agua y obtención de las curvas que relacionan el caudal con la disponibilidad de hábitat adecuado para las mismas. Esta segunda parte exige un tiempo y un coste apreciables. Por lo tanto, consideraciones obvias de índole práctica han llevado a aplicar en esta fase un procedimiento que asegura la compatibilidad de los objetivos buscados con los medios y plazos realmente disponibles. En este entendimiento se han realizado para todas las masas de agua estudios detallados de naturaleza hidrológica. Por el contrario, los esfuerzos relativos a los estudios de simulación de hábitat se han centrado en sólo un número limitado de masas de agua (del orden del 10% de su totalidad). La elección de las masas a estudiar constituye una decisión trascendental pues deben ser seleccionadas las que definan el régimen de los principales cursos de agua de la cuenca, puedan ser mantenidas con elementos específicos de regulación y sin olvidar las que puedan ser objeto, por diversas razones, de especial conflictividad. De esta forma, quedan cubiertas por estos estudios de simulación de hábitat las denominadas masas estratégicas, que son aquellas en las que el establecimiento del régimen de caudales ecológicos condiciona las asignaciones y reservas de recursos del Plan hidrológico de cuenca. Obviamente, la concertación debe limitarse a estas masas de agua en las que se han completado estos estudios. En consecuencia, la inclusión en la normativa del Plan hidrológico de cuenca de valores específicos para los caudales ambientales deberá limitarse en este proceso planificador a aquellas masas de agua seleccionadas en las que adicionalmente deberán existir elementos adecuados de medida para el seguimiento continuo de los mismos. Para las restantes masas de agua no se han podido alcanzar estas condiciones y los avances tienen que ser más modestos. La extensión de las determinaciones a todas las masas de agua a partir de las obtenidas en las masas de agua estudiadas se ha intentado realizar con el apoyo de bases cartográficas de hidrorregiones y los estudios hidrológicos, pero los resultados obtenidos no permiten su aplicación general a un tema tan delicado. Procede abrir, con posterioridad a la elaboración del Plan hidrológico de cuenca, una nueva etapa de estudios para avanzar en la determinación e implantación de caudales ecológicos sobre bases firmes. 5. OBJETIVOS DE LOS REGÍMENES DE CAUDALES ECOLÓGICOS Y DE LOS REQUERIMIENTOS HÍDRICOS DE LAGOS. De acuerdo con la IPH, el régimen de caudales ecológicos se establecerá de modo que permita mantener de forma sostenible la funcionalidad y estructura de los ecosistemas acuáticos y de los ecosistemas terrestres asociados, contribuyendo a alcanzar el buen estado o potencial ecológico en ríos o aguas de transición. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 8 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Para alcanzar estos objetivos el régimen de caudales ecológicos deberá cumplir los requisitos siguientes: a) Proporcionar condiciones de hábitat adecuadas para satisfacer las necesidades de las diferentes comunidades biológicas propias de los ecosistemas acuáticos y de los ecosistemas terrestres asociados, mediante el mantenimiento de los procesos ecológicos y geomorfológicos necesarios para completar sus ciclos biológicos. b) Ofrecer un patrón temporal de caudales que permita la existencia, como máximo, de cambios leves en la estructura y composición de los ecosistemas acuáticos y hábitat asociados y permita mantener la integridad biológica del ecosistema. En la consecución de estos objetivos tienen prioridad los referidos a zonas protegidas, a continuación los referidos a masas de agua naturales y finalmente los referidos a masas de agua muy modificadas. En la medida en que las zonas protegidas de la Red Natura 2000 y de la Lista de Humedales de Importancia Internacional del Convenio de Ramsar puedan verse afectadas de forma apreciable por los regímenes de caudales ecológicos, éstos serán los apropiados para mantener o restablecer un estado de conservación favorable de los hábitat o especies, respondiendo a sus exigencias ecológicas y manteniendo a largo plazo las funciones ecológicas de las que dependen. En el caso de las especies protegidas por normativa europea (anexo I de la Directiva 79/409/CEE, del Consejo, de 2 de abril de 1979, relativa a la conservación de las aves silvestres y anexos II y IV de la Directiva 92/43/CEE , del Consejo, de 21 de mayo de 1992, relativa a la conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestres) y por normativa nacional/autonómica (Catálogos de Especies Amenazadas, etc.), así como en el caso de los hábitat igualmente protegidos por normativa europea (anexo I de la Directiva 92/43/CEE, de 21 de mayo de 1992) y nacional/autonómica (Inventario Nacional de Hábitat, etc.), el objetivo del régimen de caudales ecológicos será salvaguardar y mantener la funcionalidad ecológica de dichas especies (áreas de reproducción, cría, alimentación y descanso) y hábitat según los requerimientos y directrices recogidos en las respectivas normativas. La determinación e implantación del régimen de caudales en las zonas protegidas no se referirá exclusivamente a la propia extensión de la zona protegida, sino también a los elementos del sistema hidrográfico que, pese a estar fuera de ella, puedan tener un impacto apreciable sobre dicha zona. La caracterización de los requerimientos hídricos ambientales de las masas de agua clasificadas en la categoría de lagos o zonas de transición de tipo lagunar tiene como objetivo fundamental contribuir a alcanzar su buen estado o potencial ecológico a través del Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 9 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública mantenimiento a largo plazo de la funcionalidad y estructura de dichos ecosistemas, proporcionando las condiciones de hábitat adecuadas para satisfacer las necesidades de las diferentes comunidades biológicas propias de estos ecosistemas acuáticos y de los ecosistemas terrestres asociados, mediante la preservación de los procesos ecológicos necesarios para completar sus ciclos biológicos. Para la determinación de los requerimientos hídricos de los lagos y zonas húmedas se tendrán en cuenta los siguientes criterios: a) El régimen de aportes hídricos deberá contribuir a conseguir los objetivos ambientales. b) Si son dependientes de las aguas subterráneas, se deberá mantener un régimen de necesidades hídricas relacionado con los niveles piezométricos, de tal forma que las alteraciones debidas a la actividad humana no tengan como consecuencia: • Impedir alcanzar los objetivos medioambientales especificados para las aguas superficiales asociadas. • Cualquier perjuicio significativo a los ecosistemas terrestres asociados que dependan directamente de la masa de agua subterránea. c) Si están registrados como zonas protegidas, el régimen de aportes hídricos será tal que no impida el cumplimiento de las normas y objetivos en virtud del cual haya sido establecida la zona protegida. d) También se deberán estudiar las circunstancias especiales de la zona inundada y su contorno para proponer medidas que permitan aumentar el valor ambiental de lagos y zonas húmedas. En caso de sequías prolongadas podrá aplicarse un régimen de caudales menos exigente siempre que se cumplan las condiciones que establece el artículo 38 del Reglamento de la planificación hidrológica sobre deterioro temporal del estado de las masas de agua, y de conformidad con lo determinado en el correspondiente Plan especial de actuación en situaciones de alerta y eventual sequía. Esta excepción no se aplicará en las zonas incluidas en la red Natura 2000, cuando su designación esté relacionada con la protección de hábitats y/o especies ligados al medio acuático, o en la lista de humedales de importancia internacional de acuerdo con el Convenio de Ramsar. En estas zonas se considerará prioritario el mantenimiento del régimen de caudales ecológicos, aunque se aplicará la regla sobre supremacía del uso para abastecimiento de poblaciones, según lo establecido por la normativa vigente. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 10 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública 6. ESTUDIOS TÉCNICOS. 6.1. Introducción. Como ya se ha mencionado, la metodología para la determinación de los regímenes de caudales ecológicos sigue las disposiciones establecidas en la IPH. Este documento establece los procedimientos técnicos básicos para la obtención de dichos regímenes y es, por tanto, la referencia fundamental en la que se han basado los estudios realizados. En el desarrollo de las disposiciones incluidas en esta Instrucción Técnica colaboró un amplio grupo de expertos representantes de diferentes universidades, centros de investigación y administraciones del agua y de conservación de la naturaleza. Asimismo, este grupo de expertos ha seguido dando apoyo para la realización de los trabajos mediante la redacción de la Guía para la determinación del régimen de caudales ecológicos, en la que se detalla la metodología, ilustrándola con ejemplos que complementan y facilitan su aplicación. Esta Guía, que aún se encuentra en fase de borrador, se puede consultar en la plataforma CIRCA, dentro del grupo de Caudales Ecológicos, al que previamente hay que solicitar acceso. Para la realización de los trabajos técnicos en todas las demarcaciones con cuencas intercomunitarias, la Dirección General del Agua contrató tres servicios de asistencia técnica que abarcaban todas las demarcaciones con cuencas intercomunitarias. La dirección de los trabajos técnicos para los tres estudios se ha llevado desde la DGA, en colaboración con las Oficinas de Planificación Hidrológica de las Confederaciones Hidrográficas, con objeto de lograr la mayor homogeneidad posible en los estudios y aprovechar las similitudes entre las masas de agua de diferentes demarcaciones para optimizar los trabajos. En todo este complejo proceso cabe destacar además el asesoramiento y colaboración del CEDEX en las tareas relacionadas con la dirección de los estudios técnicos. 6.2. Regímenes de caudales ecológicos. El ámbito espacial para la caracterización del régimen de caudales ecológicos se extiende a todas las masas de agua superficial clasificadas en las categorías de río y de aguas de transición. La determinación del régimen de caudales ecológicos de una masa de agua se realiza teniendo en cuenta los requerimientos ambientales de las masas de agua asociadas a ella, con el fin de definir un régimen consecuente con los objetivos definidos en el capítulo anterior. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 11 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública 6.2.1. Componentes del régimen de caudales ecológicos. 6.2.1.1. Ríos. El régimen de caudales ecológicos incluye los siguientes componentes: a) Caudales mínimos que deben ser superados con objeto de mantener la diversidad espacial del hábitat y su conectividad, asegurando los mecanismos de control del hábitat sobre las comunidades biológicas, de forma que se favorezca el mantenimiento de las comunidades autóctonas. b) Caudales máximos que no deben ser superados en la gestión ordinaria de las infraestructuras, con el fin de limitar los caudales circulantes y proteger así a las especies autóctonas más vulnerables a estos caudales, especialmente en tramos fuertemente regulados. c) Distribución temporal de los anteriores caudales mínimos y máximos, con el objetivo de establecer una variabilidad temporal del régimen de caudales que sea compatible con los requerimientos de los diferentes estadios vitales de las principales especies de fauna y flora autóctonas presentes en la masa de agua. d) Caudales de crecida aguas abajo de infraestructuras de regulación de cierta entidad, con objeto de controlar la presencia y abundancia de las diferentes especies, mantener las condiciones físico-químicas del agua y del sedimento, mejorar las condiciones y disponibilidad del hábitat a través de la dinámica geomorfológica y favorecer los procesos hidrológicos que controlan la conexión de las aguas de transición con el río, el mar y los acuíferos asociados. e) Tasa de cambio máxima aguas abajo de infraestructuras de regulación, con objeto de evitar los efectos negativos de una variación brusca de los caudales, como pueden ser el arrastre de organismos acuáticos durante la curva de ascenso y su aislamiento en la fase de descenso de los caudales. Asimismo, debe contribuir a mantener unas condiciones favorables a la regeneración de especies vegetales acuáticas y ribereñas. 6.2.1.2. Estuarios. Es conocida la complejidad propia de las masas de agua de esta categoría, incluso en ausencia de un régimen mareal. Los fenómenos propios de las aguas de transición no permiten un tratamiento general sino que demandan estudios específicos que permitan considerar sus especificidades. Existen estudios previos ya realizados para algunos de los casos, en particular en los casos del Miño y Guadiana, pero no se dispone de trabajos previos para la mayoría de los restantes, lo que dificulta una concreción en las determinaciones. Las lógicas condiciones de continuidad con los valores obtenidos en los tramos inmediatos aguas arriba facilita un valor inicial que puede colaborar en la definición. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 12 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Por lo tanto, las necesidades hídricas propias de las masas de agua de transición deben ser planteadas desde el conocimiento y la experiencia actuales, sin cerrar determinaciones definitivas que no estén debidamente fundadas. Los clásicos procedimientos de avance por aproximaciones sucesivas deben ser de aplicación. El seguimiento de la evolución es en este caso un punto fundamental. En este marco de situación, los estudios se han centrado en la definición de un régimen de caudales que asegure unas condiciones de salinidad próximas a las condiciones de referencia para las diferentes zonas del estuario, comparando el régimen obtenido con el propuesto para la masa aguas arriba del mismo. Sin embargo, por la ya citada complejidad propia de estas masas y al relativamente poco desarrollado estado del arte en estos ecosistemas, los resultados alcanzados deben ser considerados como un mero aunque interesante estudio académico, sin posibilidad de ser plasmados en normativa con vistas a un seguimiento y control del cumplimiento. Asimismo, tal y como se planteó en el punto 4 de este documento para la extensión de los regímenes de caudales ecológicos a todas las masas de agua, para los estuarios igualmente será procedente iniciar una nueva etapa de estudios para alcanzar un grado de conocimiento técnico que posibilite el establecimiento de unos caudales ecológicos en las susodichas masas de agua. 6.2.2. Ríos permanentes. De acuerdo con la definición número 59 del apartado 1.2 de la IPH, se entiende por ríos permanentes aquellos cursos fluviales que en, régimen natural, presentan agua fluyendo, de manera habitual, durante todo el año en su cauce. 6.2.2.1. Distribución temporal de caudales mínimos. La distribución temporal de caudales mínimos se establece mediante la selección de periodos homogéneos y representativos en función de la naturaleza hidrológica de la masa de agua y de los ciclos biológicos de las especies autóctonas, identificándose al menos dos períodos distintos dentro del año. Esta distribución se obtiene aplicando métodos hidrológicos y ajustando sus resultados mediante la modelación de la idoneidad del hábitat en tramos fluviales representativos de cada tipo de río. 6.2.2.1.1. Métodos hidrológicos. Para obtener la distribución temporal de caudales mínimos por métodos hidrológicos, la IPH establece la posibilidad de seguir dos criterios, partiendo de una serie hidrológica representativa de al menos 20 años, que caracterice el régimen natural presentando una alternancia equilibrada entre años secos y húmedos: Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 13 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública a) La definición de variables de centralización móviles anuales, de orden único o variable. En el caso de orden único, éste se identificará por su significación hidrológica (21 días consecutivos, por ejemplo), mientras que en el caso de orden variable, se tendrán en cuenta posibles discontinuidades del ciclo hidrológico para su identificación. b) La definición de percentiles entre el 5 y el 15% a partir de la curva de caudales clasificados, que permitirán definir el umbral habitual del caudal mínimo. El proceso seguido para la obtención del régimen de caudales ecológicos por métodos hidrológicos es el que se resume en la siguiente figura: Obtención del régimen natural a escala diaria La serie de datos debe estar caracterizada a escala diaria, siendo determinada a partir de datos mensuales obtenidos de diversas formas, dependiendo de los datos disponibles: Utilización directa de la red de aforos, de encontrarse las masas de agua en régimen natural. Mediante restitución de la serie en el caso de régimen alterado, que puede realizarse mediante las siguientes metodologías: o Restitución mediante balance de aportaciones, detracciones, derivaciones y retornos a escala mensual. o Por modelización hidrológica de series en régimen natural a escala mensual. De forma general se han utilizado los datos provenientes del modelo de simulación SIMPA I. Para obtención de las series diarias se aplica un patrón de distribución diario obtenido mediante el análisis de estaciones de control en régimen natural representativas del comportamiento hidrológico de la región. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 14 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Puesto que los caudales ecológicos, de acuerdo a la normativa vigente, han de ser determinados como una restricción previa a los sistemas de explotación, y que el apartado 3.5.3 de la IPH establece que la asignación y reserva de los recursos disponibles para las demandas previsibles se realizará con las series de recursos hídricos correspondientes al periodo 1980-2005, en aquellos casos en que ha sido posible, la serie hidrológica de estudio se ha tomado también para dicho período. Con esta premisa se asegura cierta homogeneidad en el origen de los datos con los que se lleva a cabo la modelación de los sistemas de explotación, a la hora de determinar las asignaciones y reservas de recursos. Métodos hidrológicos empleados Para la cuantificación del régimen de caudales mínimos por métodos hidrológicos, existen actualmente numerosas metodologías basadas en el análisis estadístico de los caudales medios diarios o mensuales con la finalidad de cuantificar un nivel adecuado de reserva del caudal base en la cuantificación del régimen de caudales ecológicos. Los métodos utilizados en el marco de los estudios realizados en las nueve demarcaciones hidrográficas con cuencas intercomunitarias son las que se citan a continuación: • Método QBM (Caudal Básico de Mantenimiento; Palau 1994; Palau & Alcazar, 1996). A partir de series de caudales medios diarios y mediante la aplicación de medias móviles sobre intervalos crecientes de datos, se obtiene una distribución de caudales mínimos acumulados, sobre la que se define el Caudal Básico como el correspondiente a la discontinuidad o incremento relativo mayor. • Percentiles 5-15. Tal y como establece la IPH, se han calculado los percentiles 5, 10 y 15 de la curva de caudales clasificados generada a partir de las series de caudales diarios en régimen natural. • Método de Hoppe (Hoppe, 1975). Este método trabaja con las curvas de caudales clasificados, estableciendo 3 niveles de caudales de mantenimiento, según tres objetivos (alimento y refugio, reproducción y regeneración del cauce), que define como caudales que son igualados o superados durante unos periodos de tiempo determinados. • Método 7Q2 – 7Q10. (Stalnaker & Arnette, 1976; Gordon et al. 1992). El caudal de mantenimiento es el valor correspondiente al caudal mínimo medio de siete días consecutivos, para un periodo de retorno de dos y diez años, respectivamente. • Método NEFM (New England Flow Method; USFWS, 1981). Se le conoce también como método ABF (Aquatic Base Flow). El caudal de mantenimiento se calcula como la media aritmética de los valores de la mediana calculada para los caudales medios diarios del mes de agosto, de cada año de la serie considerada. • Método 0,25 QMA (Caissie & El-Jabi, 1995). En este caso, el caudal de mantenimiento se calcula directamente como el 25% del módulo anual. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 15 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública En general, los métodos que han dado resultados más coherentes y que han tenido una aplicación más extendida han sido los dos primeros, mientras que el resto han sido de aplicación más puntual. En algunos casos también se han utilizado los métodos con ligeras adaptaciones a las circunstancias del régimen hidrológico de cada cuenca, como aplicaciones mensuales o sólo a determinados períodos, como el húmedo. En definitiva, con este conjunto de metodologías quedan cubiertos los dos criterios que plantea la IPH, tanto métodos basados en la definición de variables de centralización móviles como percentiles entre el 5 y el 15 a partir de la curva de caudales clasificados. Asimismo, se garantiza una batería de resultados que posibilita la elección de aquel caudal que más se ajuste a la dinámica natural, para posteriormente ajustarlo mediante los métodos de simulación de hábitat. 6.2.2.1.2. Métodos de modelación del hábitat. Los métodos de modelación de la idoneidad de hábitat se basan en la simulación hidráulica, acoplada al uso de curvas de preferencia del hábitat físico para la especie o especies objetivo, obteniéndose curvas que relacionen el hábitat potencial útil con el caudal en los tramos seleccionados. Para el desarrollo de estos trabajos se ha utilizado la metodología IFIM (Instream Flow Incremental Methodology), la cual analiza las diferentes condiciones hidráulicas que se producen en un cauce al variar los caudales circulantes, relacionando además las preferencias de las especies seleccionadas mediante el uso de curvas, y obteniendo finalmente una relación entre el caudal circulante y el hábitat disponible para la especie. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 16 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Figura 1. Representación esquemática de la metodología IFIM. Selección de tramos y especies De acuerdo con la IPH, la simulación se ha realizado en aproximadamente el 10% de las masas de la categoría río. En la selección de tramos a modelar se han tenido en cuenta criterios de representatividad, con vistas a cubrir los tipos más representativos, especialmente en lo que se refiere a diferencias en el régimen de caudales. Para evaluar las posibles diferencias en cuanto al régimen de caudales de las diferentes masas de agua, el CEDEX ha realizado un estudio para toda la España peninsular. La identificación de hidrorregiones en el conjunto de las cuencas hidrográficas españolas se ha llevado a cabo mediante el análisis, regionalización y agregación de un amplio conjunto de indicadores hidrológicos. El trabajo se ha basado en la información acumulada del modelo SIMPA. Se han seleccionado indicadores que definieran el comportamiento hidrológico intra e interanual, con una escala de subcuenca. La delimitación posterior de las hidrorregiones ha considerado diferentes tipos de ponderaciones entre indicadores, y distintos niveles de agregación. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 17 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Asimismo, en la selección se ha dado prioridad a las masas de agua con mayor importancia ambiental o que estén situadas aguas abajo de grandes presas o derivaciones importantes y que puedan condicionar las asignaciones y reservas de recursos del plan hidrológico. Para los trabajos desarrollados en esta demarcación hidrográfica se seleccionaron 32 masas de agua en las que desarrollar los métodos de simulación de hábitat. Código masa Descripción masa Estacionalidad Ecotipo Aportación natural ES0511002001 Tramo bajo del río Guadiamar y afluentes por su margen derecha Permanente 2 166,13 ES0511002008 Río Corbones aguas abajo del arroyo Salado de Jarda hasta la desembocadura Permanente 2 173,56 ES0511002040 Tramo bajo del río Guadiamar y afluentes por su margen derecha Permanente 2 137,40 ES0511100088 Arroyo Salado de Morón aguas abajo de la presa de Torre del Águila Permanente 2 120,51 ES0511100061 Río Viar aguas abajo de La Ganchosa hasta el embalse de Melonares Estacional 6 190,68 ES0511100063 Río Viar aguas abajo de la presa de Melonares Permanente 6 268,47 ES0511100070 Río Jándula aguas abajo de la Loma de las Buenas Hierbas Estacional 6 175,87 ES0511100092 Rivera de Huesna aguas abajo de la presa de Huesna Permanente 6 162,86 ES0511100094 Río Bembézar aguas abajo de la presa de Hornachuelos Permanente 6 278,04 ES0511007022 Río Guadalbullón desde las Infantas hasta el embalse de Mengíbar Permanente 7 88,49 Estacional 8 14,81 Permanente 8 116,42 Intermitente 8 7,66 Permanente 8 120,51 Estacional 8 175,10 Intermitente 8 44,53 Permanente 9 88,04 Permanente 9 41,09 Permanente 9 46,74 Permanente 9 199,34 Permanente 9 49,55 ES0511008005 Rivera de Hierro ES0511008008 Río Bembézar aguas arriba del embalse de Bembézar ES0511008080 Río Robledillo Rivera de Huelva aguas abajo de la ES0511100096 presa de Aracena hasta el embalse de Zufre Río Guadiato aguas abajo de la presa de ES0511100099 Puente Nuevo hasta el embalse de la Breña Río Montoro aguas abajo de la presa de ES0511100100 Montoro 1 ES0511009019 Río Guadalbullón hasta las Infantas Río Guadalentín aguas abajo del embalse ES0511100074 de la Bolera hasta el embalse del Negratín Río Cacín aguas abajo de la presa de ES0511100103 Bermejales hasta el río Alhama Río Guadalquivir aguas abajo del ES0511100104 embalse de Tranco de Beas hasta el río Cañamares Río Castril aguas abajo de la presa del ES0511100107 Portillo Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 18 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Código masa ES0511012036 Descripción masa Río Castril aguas arriba del embalse del Portillo ES0511014002 Tramo bajo del río Guadajoz Río Genil aguas abajo del embalse de la Cordobilla Río Genil aguas abajo del arroyo del ES0511100078 Pozo del Pino hasta el embalse de Malpasillo Río Guadalimar desde el arroyo de ES0511100079 Fuente Álamo hasta el embalse de Mengíbar Río Guadalimar aguas arriba del embalse ES0511016005 de Giribaile hasta el río Guadalmena ES0511100076 Estacionalidad Ecotipo Aportación natural Permanente 12 16,79 Permanente 14 239,89 Permanente 14 699,53 Permanente 14 462,98 Permanente 14 572,16 Permanente 16 354,78 ES0511100081 Río Genil aguas abajo de la presa de Iznájar hasta el arroyo del Pozo del Pino Permanente 16 452,00 ES0511100083 Río Guadiana Menor aguas abajo del río Fardes Permanente 16 297,76 ES0511100115 Río Guadalquivir desde la presa de Pedro Marín hasta Sotogordo Permanente 16 605,92 ES0511100110 Río Guadalquivir aguas abajo del río Guadajoz hasta el río Genil Permanente 17 3133,16 ES0511100111 Río Guadalquivir aguas abajo de la presa de Villafranca hasta el río Guadajoz Permanente 17 2448,78 La longitud de los tramos seleccionados se ha establecido buscando una representación adecuada de la variabilidad física y ecológica del río. La selección de especies objetivo se ha realizado considerando las especies autóctonas y dando prioridad a las categorizadas como “En Peligro”, “Vulnerables”, “Sensible” y “De Interés Especial” en los Catálogos de Especies Amenazadas, así como las recogidas en el anexo II de la Directiva 92/43/CEE. Además se ha tenido en cuenta la viabilidad en la elaboración de sus curvas de preferencia y su sensibilidad a los cambios en el régimen de caudales. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 19 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Figura 2. Tramos seleccionados para su estudio. Desarrollo de las curvas de preferencia En el momento de inicio de los trabajos para la determinación de los caudales ecológicos en las demarcaciones con cuencas intercomunitarias, la disponibilidad de curvas de preferencia era reducida. Se contaba con curvas genéricas para determinadas especies, teóricamente aplicables en cualquier territorio aunque de escasa resolución, y con curvas específicas de determinadas cuencas generadas en proyectos de investigación, cuya transferibilidad a otros ámbitos geográficos es bastante discutible. De esta circunstancia surge la necesidad de elaboración de curvas de preferencia de varios estadios de las especies objetivo, tarea realizada en el marco de los citados trabajos. Asimismo, se ha procedido a adaptar alguna de las curvas ya existentes, con vistas a posibilitar su utilización. Modelización Para el desarrollo de los trabajos de simulación de hábitat ha sido necesaria la utilización de modelos hidrodinámicos con los que poder simular las condiciones hidráulicas que se producen en el cauce al variar los caudales circulantes. Existen dos tipos de modelos: - Modelización en 1D. Se trata de modelos hidrodinámicos de resolución mediante el método del paso hidráulico calibrado en cada transecto para el ajuste del perfil de velocidades. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 20 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Figura 3. Representación gráfica en 1D, basado en celdas rectangulares entre transectos - Modelización en 2D. En este caso se trata de modelos hidrodinámicos bidimensionales por elementos finitos que caracterizan la velocidad media de la columna de agua, para uso en cauces naturales. Figura 4. Representación del hábitat en 2D. Representación espacial del campo de profundidades y velocidades. Con estos modelos y partiendo de las curvas de preferencia para las especies objetivo seleccionadas en cada caso, se obtiene la simulación de idoneidad del hábitat, reflejada en las curvas que relacionan el hábitat potencial útil con el caudal (en adelante curvas HPU-Q). Estas curvas se obtienen para cada uno de los estadios del ciclo vital de cada especie (alevín, juvenil y adulto, y en determinados casos también las necesidades de la freza). Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 21 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Figura 5. Esquema conceptual de la modelación del hábitat. La IPH contempla la posibilidad de que a partir de las curvas HPU-Q se genere una curva combinada, para facilitar la toma de decisiones y la concertación sobre un único elemento donde se refleje el régimen propuesto correspondiente al estadio más restrictivo o más sensible. Esta curva se genera mediante la combinación ponderada y adimensional de los hábitat potenciales útiles, determinados para los estadios predominantes en los periodos temporales considerados. La curva combinada se elabora para un periodo húmedo y otro de estiaje, considerando en cada uno de ellos la predominancia de los estadios de la especie objetivo. 6.2.2.1.3. Obtención de la distribución de caudales mínimos. De acuerdo con la IPH, la distribución de caudales mínimos se ha determinado ajustando los caudales obtenidos por métodos hidrológicos al resultado de la modelación de la idoneidad del hábitat, en función de alguno de los siguientes criterios: a) Considerando el caudal correspondiente a un umbral del hábitat potencial útil: - En ríos no alterados hidrológicamente el rango es del 50-80%. - En ríos alterados hidrológicamente el rango es del 30-80%. En general se ha tomado el valor mínimo del intervalo salvo en los casos en los que existe competencia por el recurso o existe algún elemento regulador aguas abajo de la masa de agua, en estos casos se ha optado por los valores máximos. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 22 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública b) Estableciendo el caudal que permite la conectividad del tramo evitando que fracciones el ecosistema. En los casos donde la curva de hábitat potencial era creciente y sin aparentes máximos, se ha adoptado como valor máximo de hábitat potencial útil el correspondiente al caudal definido por los percentiles 15, 20 o 25 de los caudales medios diarios en régimen natural, obtenido de la serie hidrológica representativa. La selección de los períodos para establecer el régimen ha sido realizada mediante la consideración de la variabilidad interna de los diferentes meses del año en cada una de las regiones hidrológicas, así como de de los ciclos biológicos de las especies autóctonas. Para la definición de las hidrorregiones se han seleccionado dos factores de variación uno de carácter anual y otro interanual, extrapolando la modulación establecida en los tramos seleccionados al resto de la cuenca, en base a la tipología del río y la hidrorregión en donde se enmarca. El factor de variación seleccionado para delimitar las hidrorregiones ha sido el cociente el caudal medio los tres meses más secos del año y el caudal medio anual. Para fijar la variación interanual se ha calculado el Coeficiente de Varianza CV como el cociente entre la descripción típica y la media. Distinguiendo tres zonas: ríos no permanentes, como aquellos en que existen valores nulos en sus series mensuales, ríos que se comportan de forma muy semejantes todos los años, CV bajo, ríos con significativas variaciones interanuales, CV alto. Para fijar la variabilidad anual se ha utilizado como indicador, la media interanual y al igual que el caso anterior se han distinguido tres zonas. La intersección de ambas clasificaciones fijan las hidrorregiones de la cuenca, que se representan en el gráfico adjunto. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 23 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Figura 6. Hidrorregiones En todo este proceso se ha intentando asegurar la continuidad de los tramos y la coherencia de los resultados dentro de cada cuenca. 6.2.2.2. Distribución temporal de caudales máximos. De forma general, los caudales máximos que no deben ser superados durante la operación y gestión ordinaria de las infraestructuras hidráulicas se han definido para dos periodos hidrológicos homogéneos y representativos, correspondientes al periodo húmedo y seco del año. Su caracterización se ha realizado analizando los percentiles de excedencia mensuales de una serie representativa de caudales en régimen natural de al menos 20 años de duración. Se ha considerado el percentil 90 de la serie de caudales medios mensuales máximos para cada mes, datos procedentes del SIMPA I. En algunos casos también se ha comparado este percentil 90 de la serie natural con el percentil 90 de la serie de desembalses de la infraestructura correspondiente. Este régimen de caudales máximos se ha verificado mediante el uso de los modelos hidráulicos asociados a los modelos de hábitat, para comprobar que se garantice tanto una adecuada existencia de refugio para los estadios o especies más sensibles como el mantenimiento de la conectividad del tramo. Para ello, se ha comprobado que al menos se mantenga un 50% de la superficie mojada del tramo como refugio en las épocas de Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 24 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública predominancia de los estadios más sensibles, analizando también la conectividad del tramo para aquellos casos en los que el refugio sea inferior al 70%. La IPH indicaba que las velocidades admisibles por la ictiofauna se extrajeran de curvas de relación entre el tamaño del individuo y la velocidad máxima admisible, en caso de encontrarse disponibles. Sin embargo, con carácter general se han utilizado los valores de velocidades máximas limitantes propuestos por la propia IPH: alevines (0,5-1 m/s), juveniles (1,5-2 m/s) y adultos (<2,5 m/s). 6.2.2.3. Tasa de cambio. Con objeto de evitar los efectos negativos de una variación brusca de los caudales, en las masas de agua ubicadas aguas abajo de infraestructuras de regulación, especialmente centrales hidroeléctricas de cierta entidad, se ha estimado una tasa máxima de cambio tanto para las condiciones de ascenso como de descenso de caudal, definida como la máxima diferencia de caudal entre dos valores sucesivos de una serie hidrológica por unidad de tiempo. Su estimación se ha realizado partiendo del análisis de las avenidas ordinarias de una serie hidrológica representativa de caudales medios diarios de, al menos, 20 años de duración y calculando las series clasificadas anuales de tasas de cambio, tanto en ascenso como en descenso. Sobre la misma se ha establecido un percentil de superación en ascenso de 9070% y de 90-70% en descenso, con lo que se obtiene una estimación media de las tasas de cambio. 6.2.2.4. Caracterización del régimen de crecidas. En los tramos muy regulados ubicados aguas abajo de importantes infraestructuras de regulación se ha definido la crecida asociada al caudal generador. Dicho caudal generador se aproxima al caudal de sección llena del cauce o nivel de bankfull o, en su defecto, a la Máxima Crecida Ordinaria (M.C.O.). La caracterización del caudal generador incluye su magnitud, frecuencia, duración, estacionalidad y tasa máxima de cambio, tanto en ascenso como en descenso, lo que se ha obtenido del análisis estadístico de una serie representativa del régimen hidrológico de, al menos, 20 años. Para la realización de este estudio se ha partido de los resultados obtenidos por el CEDEX en un reciente estudio respecto a los períodos de retorno de los caudales generadores, lo que ha permitido partir de unas primeras estimaciones basadas en un estudio homogéneo para toda España. Los resultados se han validado y ajustado en cada caso mediante modelación hidráulica del cauce, teniendo en cuenta los estudios existentes de inundabilidad del tramo afectado, las condiciones físicas y biológicas actuales, sus posibles efectos perjudiciales sobre las Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 25 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública variables ambientales y los riesgos asociados desde el punto de vista de las infraestructuras. Asimismo, y siempre que ha sido posible, se ha consultado los Planes de emergencia de presas y diversa información sobre deslindes, con vistas a corroborar que el régimen de avenidas propuesto no produce afecciones graves a personas y bienes materiales. 6.2.3. Ríos temporales, intermitentes y efímeros. 6.2.3.1. Clasificación de los ríos. La diferenciación entre estas clases de río y los ríos permanentes se establecen en las definiciones del apartado 1.2 de la IPH: Ríos temporales o estacionales: cursos fluviales que, en régimen natural, presentan una marcada estacionalidad, caracterizada por presentar bajo caudal o permanecer secos en verano, fluyendo agua, al menos, durante un periodo medio de 300 días al año Ríos intermitentes o fuertemente estacionales: cursos fluviales que, en régimen natural, presentan una elevada temporalidad, fluyendo agua durante un periodo medio comprendido entre 100 y 300 días al año. Ríos efímeros: cursos fluviales en los que, en régimen natural, tan sólo fluye agua superficialmente de manera esporádica, en episodios de tormenta, durante un periodo medio inferior a 100 días al año. Puesto que la normativa establece unos condicionantes diferentes dependiendo de la clase a la que pertenezca cada masa de agua, se ha realizado una clasificación de todas las masas de agua de la categoría río de la demarcación en estas clases. Para ello se ha utilizado el modelo SIMPA, procediendo a la desagregación de los datos mensuales a diarios, proceso ya descrito en el apartado 6.2.2.1.1., métodos hidrológicos. Utilizando estos criterios, las masas permanentes son un total de 198, suponiendo, sobre las 392 masas de agua tipo río del conjunto de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir, el 50% del total. También para el conjunto de las masas de la Demarcación, las masas estacionales suponen el 30% (un total de 116 masas), mientras que la representatividad de las masas intermitentes se reduce hasta el 16% (62 masas). La categoría de ríos efímeros se encuentra representada por 16 masas suponiendo para el conjunto de la demarcación el 4% del total. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 26 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública 4% 30% Efímero Estacional 50% Intermitente Permanente 16% Figura 7. Clasificación hidrológica del conjunto de masas de agua superficial de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Para la caracterización del régimen de caudales ecológicos en ríos temporales, intermitentes y efímeros se han aplicado los criterios metodológicos que se describen a continuación. 6.2.3.2. Ríos temporales. Se han utilizado, en la medida de lo posible, los criterios definidos para la determinación de la distribución mensual de caudales mínimos y máximos en ríos permanentes. Sin embargo, tras los primeros análisis se detectó que no todos los métodos aplicados para ríos permanentes son utilizables en ríos no permanentes. Para estos casos se desarrollaron varias metodologías alternativas: - Obtención de caudales ecológicos para cada mes, a partir de la curva de caudales clasificados específica de cada mes. - Obtención de caudales ecológicos para todo el año mediante metodologías para ríos permanentes, previa exclusión del período de cese de caudal identificado. - Identificar dos hidroperíodos y, tras excluir el período de cese, aplicar las metodologías para ríos permanentes en cada hidroperíodo. Tal y como establece la IPH, y como necesidad para aplicar las metodologías descritas, para estos ríos no permanentes se ha realizado una caracterización del periodo de cese de caudal anual, atendiendo a la frecuencia, duración, estacionalidad y tasa de recesión de los episodios de cese de caudal característicos del régimen natural, utilizando para ello una serie hidrológica representativa de, al menos, 20 años. La caracterización del período de cese se ha realizado de la siguiente forma: - Agrupar los datos de caudal diario en años hidrológicos, contando el número de días al año con caudal nulo (se considera nulo cuando es inferior a 1 l/s). - Determinar la frecuencia de los eventos de cese, contando para cada año el número de eventos y, a partir de la serie conformada de número de eventos al año, seleccionar ente el percentil 25 y 75. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 27 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública - Determinar la duración del período de cese, seleccionando entre el percentil 0 y 25 de la serie de número de días al año con caudal nulo. - Determinar la estacionalidad de los eventos, registrando el mes de ocurrencia de cada día con caudal nulo y determinando las frecuencias de ocurrencia para cada mes. Asimismo, se ha determinado el período de cese hiperanual, analizando los meses en los que el caudal es nulo (inferior a 1 l/s) durante varios años consecutivos y estableciendo una propuesta en base a este análisis. 6.2.3.3. Ríos intermitentes y efímeros. En los ríos intermitentes y efímeros se han caracterizado los siguientes aspectos: - Régimen de mínimos, aplicando en la medida de lo posible los métodos descritos para ríos temporales. - Periodo de cese de caudal atendiendo a la frecuencia, duración, estacionalidad y tasa de recesión de los episodios de cese de caudal característicos del régimen natural, aplicando la metodología descrita para ríos temporales. - Magnitud de la crecida y período de tiempo de recesión al caudal base, que permiten el desarrollo del ciclo biológico de las comunidades adaptadas, en aquellos casos en los que era procedente su determinación. - Caudal generador que permite mantener la dimensión del canal principal del río y su buen funcionamiento morfodinámico, en los mismos términos que el punto anterior. 6.2.4. Masas de agua muy alteradas hidrológicamente. Tal y como establece la IPH, se ha analizado el grado de alteración hidrológica de las masas de agua de la categoría río mediante el cálculo de índices de alteración hidrológica, los cuales evalúan la distorsión originada en los caudales circulantes con respecto a los caudales naturales, identificándose aquéllas masas que se encuentren en un grado severo de alteración hidrológica en la situación actual, presentando conflictos entre los usos existentes y el régimen de caudales ecológicos. Para realizar esta evaluación se ha empleado el programa IAHRIS, software diseñado a partir de un convenio entre la DGA y el CEDEX para la aplicación práctica de los índices de alteración hidrológica, basado en el manual “Índices de Alteración Hidrológica en ecosistemas fluviales” (Fernández Yuste & Martínez Santa-María, 2006). Esta metodología propone un conjunto de índices denominados de Alteración Hidrológica (IAH) que permiten evaluar de manera objetiva y eficiente, los cambios que sobre los elementos del régimen de caudales con mayor trascendencia ambiental, inducen los aprovechamientos de los recursos hídricos. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 28 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública El proceso consta de dos fases principales encaminadas a la caracterización del régimen natural y a la evaluación de la alteración hidrológica gracias a los IAH. La caracterización del régimen natural de caudales se realiza, siguiendo dos vías paralelas: atendiendo a los valores medios o habituales como determinantes de la disponibilidad general de agua en el ecosistema. atendiendo a los valores extremos de dicho régimen: máximos -avenidas- y mínimos sequías- al representar las condiciones ambientalmente más críticas. A su vez, cada uno de estos componentes debe ser analizado en aquellos aspectos ambientalmente significativos. Los datos de partida están conformados por series de datos de caudal diario o aportaciones mensuales de, al menos, 15 años completos, tanto para el régimen natural como para otro régimen distinto, considerado como alterado. Finalmente, la aplicación suministra una serie de parámetros que caracterizan tanto el régimen natural como el alterado y un conjunto de 21 indicadores que evalúan la alteración de los citados parámetros. Como resumen y conclusión de la evaluación se presentan tres índices globales de alteración, uno para cada componente (valores habituales, sequías y avenidas). El IAHRIS se ha aplicado en todas las cuencas, con resultados en general satisfactorios. En aquellos puntos en que se presentaban resultados incoherentes, con la situación real de las masas, incoherencias procedentes de una mala interpretación de los resultados o datos de partida erróneos, se ha tenido en cuenta el criterio de los gestores de la cuenca para identificar la alteración de las masas. En definitiva, se ha considerado que una masa se encuentra muy alterada hidrológicamente cuando, de los tres indicadores globales que genera el modelo, uno de ellos presenta un valor muy deficiente (5), o dos de ellos un valor deficiente (4), o tres de ellos, simultáneamente, un valor igual o inferior a moderado (menor o igual de 3). En estas masas se ha definido un régimen de caudales con los criterios indicados para los ríos permanentes en el apartado 6.2.2. En los casos en que el modelo IAHRIS indica que se trata de masas muy alteradas hidrológicamente, identificación corroborada con el criterio de experto, la estimación para fijar el régimen de mínimos se realiza utilizando el rango comprendido entre el 30% y el 80% del hábitat potencial útil máximo para las especies seleccionadas. De forma general, y al igual que en el proceso descrito para las masas no alteradas hidrológicamente, se ha tomado el valor inferior del intervalo planteado. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 29 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Para los demás componentes del régimen de caudales se proponen escenarios adecuados a la intensidad de alteración que presentan. 6.2.5. Régimen de caudales durante sequías prolongadas. El régimen de caudales ecológicos durante sequías prolongadas está caracterizado por una distribución mensual de mínimos y se ha determinado mediante simulación de la idoneidad del hábitat. En los resultados de la simulación del hábitat se ha establecido un umbral de relajación con el objetivo de permitir el mantenimiento, como mínimo, de un 25% del hábitat potencial útil máximo. La distribución mensual de los caudales correspondientes a este régimen es proporcional a la distribución mensual correspondiente al régimen ordinario de caudales ecológicos, con el fin de mantener el carácter natural de la distribución de mínimos, conservando las características hidrológicas de la masa de agua. La adaptación desde el régimen ordinario será proporcional a la situación del sistema hidrológico, definida según los indicadores establecidos en el Plan especial de actuación en situaciones de alerta y eventual sequía, teniendo en cuenta las curvas combinadas elaboradas para tal fin, y evitando, en todo caso, deterioros irreversibles de los ecosistemas acuáticos y terrestres asociados. 6.3. Lagos y zonas húmedas. En el caso de lagos y zonas húmedas no se habla de régimen de caudales sino de requerimientos hídricos. Los estudios técnicos para determinar estos requerimientos hídricos se han basado en los criterios básicos establecidos en la IPH y en la Guía que desarrolla sus contenidos, aunque no en todos los casos ha sido posible aplicarlos con el mismo grado de exhaustividad, fundamentalmente por la escasa información disponible. Estos criterios son los siguientes: a) El régimen de aportes hídricos deberá contribuir a conseguir los objetivos ambientales. b) Si son dependientes de las aguas subterráneas, se deberá mantener un régimen de necesidades hídricas relacionado con los niveles piezométricos, de tal forma que las alteraciones debidas a la actividad humana no tengan como consecuencia: Impedir alcanzar los objetivos medioambientales especificados para las aguas superficiales asociadas. Cualquier perjuicio significativo a los ecosistemas terrestres asociados que dependan directamente de la masa de agua subterránea. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 30 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública c) Si están registrados como zonas protegidas, el régimen de aportes hídricos será tal que no impida el cumplimiento de las normas y objetivos en virtud del cual haya sido establecida la zona protegida. La caracterización de los requerimientos hídricos se ha realizado a partir de las variables físicas que reflejan más adecuadamente las características estructurales y funcionales de cada lago, como niveles piezométricos o flujos mareales. La información hidrológica necesaria se ha obtenido a partir de registros históricos y de modelización a la escala temporal adecuada. Se ha intentado asegurar que los criterios numéricos a partir de los cuales se han formulado las propuestas de régimen hídrico hayan tenido como referencia las condiciones naturales y permitan alcanzar condiciones coherentes con la consecución de las funciones y objetivos ambientales perseguidos. Los trabajos técnicos desarrollados han seguido el siguiente esquema: - Selección de lagos y zonas húmedas siguiendo los criterios establecidos en la Guía: lagos considerados como masas estratégicas, como masas de agua, con alguna figura de protección, afectados por presiones, conectados con aguas subterráneas y que alberguen especies en peligro de extinción. - Caracterización de los diferentes factores que influyen en el régimen hídrico: climáticos, hidromorfológicos, hidrogeológicos, biológicos, funcionamiento hidrológico y balance, presiones y usos del suelo. - Modelización del comportamiento hidráulico a partir de la información obtenida: modelo conceptual, balance aproximado o modelización hidrológica sencilla. - Establecimiento, en la medida de lo posible, de la relación del comportamiento ecológico con el funcionamiento hidrológico, identificando la relación existente entre una serie de indicadores, generalmente la orla de vegetación, y sus parámetros con el funcionamiento hidrológico del lago o zona húmeda, determinando qué rangos de valores de los parámetros hidráulicos mantienen las condiciones óptimas para los indicadores elegidos. - Determinación, a partir de la relación anterior, de los aportes superficiales y/o subterráneos necesarios para mantener: Valores de las variables hidráulicas durante episodios de mínimos y de crecidas. Valores máximos de las variables hidráulicas. Régimen estacional. Las necesidades hídricas de las zonas húmedas que no hayan sido identificadas como masas de agua y estén incluidas en el Registro de zonas protegidas se determinarán siguiendo, en Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 31 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública la medida de lo posible y de acuerdo con la información disponible, el procedimiento indicado para las masas de agua clasificadas como lagos. 7. RESULTADOS DE LOS ESTUDIOS TÉCNICOS. El desarrollo de los trabajos para determinar los regímenes de caudales ecológicos ha sido diferente en ríos y en lagos y zonas húmedas. Se presenta esquemáticamente el desarrollo de los mismos, diferenciando entre ambos sistemas hídricos y también entre diferentes métodos. 7.1. Ríos y estuarios. Para facilitar el oportuno análisis por las partes interesadas en este proceso, principalmente usuarios y organizaciones defensoras del medio ambiente, es imprescindible resumir los resultados en unos documentos rigurosos y manejables. Los principales análisis relativos a los caudales ecológicos en las masas de agua seleccionadas se extienden en la cuádruple dirección mencionada: a) Por una parte se han determinado los caudales mínimos precisos desde la perspectiva hidrológica y de simulación de hábitat. En forma independiente, se han estudiado sobre el terreno el hábitat potencial útil para la(s) especie(s) y estados relativos a cada masa de agua para diferentes caudales circulantes en la misma; según las regulaciones de la IPH se ha obtenido el caudal mínimo adecuado desde esta perspectiva. Finalmente, se determinan los caudales obtenidos por ajuste con métodos hidrológicos de los resultados obtenidos a partir de la simulación de la idoneidad del hábitat. b) Una segunda componente del estudio consiste en determinar los caudales máximos que pueden circular sin menoscabo de los valores ambientales del ecosistema. El estudio se restringe a aquellas masas de agua por debajo de las grandes infraestructuras de regulación y que forman parte de cauces que son utilizados como elementos de transporte de volúmenes relevantes de agua para grandes consumidores, generalmente de regadío. Los estudios tienen igualmente una doble componente hidrológica y ecohidrológica. c) Independientemente, se han obtenido en el estudio los hidrogramas de las avenidas que, con período de retorno limitado, deberían ser garantizadas en aquellas masas de agua en las que los embalses de regulación en operación las han erradicado. Estas crecidas sólo se deberán implementar con una periodicidad baja y, normalmente, coincidiendo con períodos hidrológicos húmedos. d) Se ha estudiado igualmente la tasa de cambio máxima admisible por razones ecológicas para los caudales. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 32 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Por lo tanto, se ha preparado para cada masa de agua una ficha con este objetivo de compilar los trabajos realizados y presentarlos en forma sintética y clara de tal forma que, con una mínima explicación, sea asequible a personas que no necesariamente sean expertas en estas materias. Obviamente, estos cuatro temas han sido explicitados en la ficha sintética en un equilibrio entre la aportación de un resumen de la información obtenida y el detalle de los puntos de mayor interés para el proceso de concertación. La función de esta ficha es servir como documento inicial del proceso de concertación. La ficha-tipo de cada masa de agua se acompaña como Apéndice I. Una parte esencial de la ficha-tipo propuesta la constituyen los datos relativos a su denominación, ubicación y características principales. La información hidrológica es bastante completa. Por una parte, se ha recogido en su totalidad la tabla que define la serie mensual de aportaciones en régimen natural y se ha completado con un resumen de los principales datos de carácter hidrológico característicos, incluso una estimación de su grado de alteración hidrológica. Entre otros, se aporta el llamado caudal básico, los caudales correspondientes a los percentiles 5 y 15% de la serie de caudales clasificados, así como los caudales Q21 y Q25. Se incluye finalmente una tabla que recoge la probabilidad, en régimen natural, de superar estos valores. También presenta bastante amplitud el espacio reservado en la ficha-tipo propuesta para el desarrollo y los resultados de los estudios de simulación de hábitat. Se mencionan la(s) especie(s) contemplada(s) y los caudales mínimos relacionados con distintos porcentajes del hábitat potencial útil para aquella(s). Como detalle se aporta la curva que relaciona el porcentaje de hábitat útil en los tres estados y el caudal circulante. Además, se incluyen los hidrogramas obtenidos por la extensión anual de los citados caudales mínimos; también en este caso se incluye una tabla con la garantía en régimen natural de dichos valores. Finalmente, se ha incorporado una propuesta inicial de caudales mínimos, siempre con las máximas reservas. En lo relativo a caudales máximos, en el apéndice III del presente anejo se muestran los caudales máximos a desembalsar desde los distintos embalses de regulación. Por último, en el apéndice IV se muestran los valores de la tasa de cambio máxima admisible calculados para todas las masas de agua de la categoría ríos en la demarcación. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 33 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública 7.2. Lagos y zonas húmedas. Los estudios realizados para los lagos y zonas húmedas seleccionados comprenden fundamentalmente dos apartados: - Caracterización del lago o zona húmeda, en la que se incluyen las características más relevantes en relación con la climatología, geología, vegetación y fauna, valores ecológicos más relevantes y un análisis del funcionamiento hidrológico e hidrogeológico del lago. - Estimación de las necesidades hídricas del humedal, en base al análisis de las características realizado en el punto anterior. Fundamentalmente, se ha tratado de establecer una relación entre las diferentes especies vegetales de la orla del lago, especialmente de aquellas con especial relevancia ecológica y alto grado de protección, y el mantenimiento de unas determinadas condiciones de superficie inundada y/o altura de la lámina de agua durante los períodos de tiempo en los que la vegetación presenta un estadio más sensible. Se concluye con una propuesta de umbral de altura de lámina o superficie encharcada que no debe ser rebasado en aras de la protección de la vegetación estudiada. El acercamiento de la planificación a esta materia pretende aportar también directrices para la mejor gestión de estas áreas singulares. En consecuencia los estudios, de los que se recoge un sucinto resumen al final de este documento, se han centrado en la aportación de sugerencias de índole práctica para aumentar los valores ambientales intrínsecos a los lagos y humedales. 8. PROCESO DE CONCENTRACIÓN DEL RÉGIMEN DE CAUDALES ECOLÓGICOS. La implantación de los caudales ecológicos debe desarrollarse en cada caso conforme a un proceso específico de concertación, para conciliar los requerimientos ambientales, concretados en los documentos precitados, con los usos actuales dentro de cada masa de agua, manifestados en los correspondientes títulos habilitantes. La dificultad del proceso es evidente y exige un tratamiento particular, caso a caso, dentro de las reglas generales de información, consulta pública y participación pública activa, en el que también se pondrá de manifiesto la necesidad de buscar la compatibilidad entre los dos polos y las diferentes posibilidades espaciales y temporales que quepa concebir. Necesariamente, en los casos más complejos se deberá llegar a negociaciones directas con los agentes involucrados, tanto de forma sectorial como en un tratamiento conjunto. Como parte del desarrollo de las tareas de los respectivos contratos, las tres consultoras encargadas de realizar los estudios técnicos elaboraron diversos documentos en los que se plantean de forma teórica las diferentes aproximaciones posibles para realizar la concertación. Estos documentos están basados en buena medida en el Documento Guía nº 8 Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 34 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública publicado en el marco de la Estrategia Común de Implantación de la DMA, titulado “La participación pública en relación con la Directiva Marco del Agua”. En los mismos se recogen diferentes técnicas empleadas en procesos de participación pública, desde el análisis de las partes interesadas (“Stakeholder-analysis”) hasta la identificación de los problemas y posibles soluciones mediante los denominados “árboles de problemas”. También se expone, de una forma algo más aplicada, la estructura del proceso de concertación, planteando los diferentes momentos (trabajos previos a las reuniones, trabajos en las reuniones y trabajos posteriores) y detallando algunas características de cada hito del proceso. Estas aproximaciones planteadas en los citados documentos constituyen un punto de partida, aunque su carácter eminentemente teórico conlleva la necesidad de detallar y concretar los procesos de concertación, tarea que necesariamente requiere de una implicación importante de las respectivas Oficinas de Planificación Hidrológica. Asimismo, de forma coordinada con las OPH se propone desarrollar el proceso de concertación en las 32 masas que han sido objeto de estudios específicos (Tabla 1). Una vez finalizado el proceso de concertación, el cual tendrá lugar durante el período de consulta pública del borrador del Plan Hidrológico de cuenca, se plantearán tres situaciones: 1. Tras el proceso de concertación se decide mantener la propuesta de régimen de caudales ecológicos emanada de los estudios técnicos, bien por haber alcanzado el consenso entre las diferentes partes, bien porque, a pesar de las opiniones discrepantes, se acuerdan soluciones que satisfacen a los implicados. 2. Tras el proceso de concertación se decide modificar la propuesta de régimen en cualquier sentido, sustituyéndose por un nuevo régimen o componentes del mismo que se plasmarán en el apartado 9 de este Anejo. 3. Tras el proceso de concertación se decide acogerse a alguna de las excepciones previstas en el artículo 4 de la Directiva Marco del Agua, en base a las correspondientes justificaciones, que también deben adjuntarse. Estas justificaciones serán, por lo general, de índole socioeconómica, por la repercusión de los caudales ecológicos sobre los usos del agua presentada en el apartado 10 de este Anejo. 9. PRESENTACIÓN DE LOS RESULTADOS La presentación de los resultados de la determinación del régimen de caudales ecológicos se desarrolla en dos momentos diferentes: Una primera fase corresponde a los resultados provenientes de los estudios técnicos, previamente al proceso de concertación descrito en el apartado 8, y que son incluidos en el borrador de Plan Hidrológico de cuenca, el cual va a ser sometido a consulta pública. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 35 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Una segunda fase tendrá lugar una vez concluidos tanto el proceso de concertación de los regímenes de caudales ecológicos como la consulta pública del borrador de Plan. En esta ocasión, los resultados presentados serán los definidos en la citada concertación y se incluirán como parte de la propuesta de Plan Hidrológico, que será remitida al Consejo del Agua de la Demarcación para su consideración. Por otro lado, es destacable que la casuística es diferente en función de la consideración de las masas como estratégicas o no, así como de la categoría de masas (ríos, lagos). Para el caso de masas consideradas como estratégicas, en el Proyecto de plan hidrológico de cuenca ya se incluyen los regímenes de caudales ecológicos obtenidos en el estudio técnico, según la ficha-tipo presentada en el apartado 7. Posteriormente, en el propio Plan Hidrológico de cuenca se incluirán los regímenes de caudales ecológicos determinados tras el proceso de concertación, el cual abarcará en este caso los tres niveles de participación ya mencionados. Para el resto de masas que no han sido estudiadas en profundidad al no considerarse estratégicas, tal y como se ha mencionado en el apartado 4, los resultados obtenidos no permiten su aplicación general, por lo que procede desarrollar durante el período de vigencia del Plan Hidrológico de cuenca estudios más exhaustivos con vistas a definir un régimen de caudales ecológicos con unas bases firmes. En cualquier caso, el Plan puede contemplar algunas indicaciones sobre el rango de valores obtenido por métodos hidrológicos, lo que constituye un primer paso hacia la posterior concreción del régimen. Una vez establecida esta diferenciación, los resultados se presentan tanto de forma sintética y agrupada en dos tablas resumen, una de resultados y otra de propuesta de régimen, como de forma individual y más detallada en las fichas descritas en el apartado 7 y que se acompaña como Apéndice I. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 36 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Ecohidráulicos Código masa Descripción masa Tramo bajo del río Guadiamar y ES0511002001 afluentes por su margen derecha Río Corbones aguas abajo del arroyo Salado de Jarda hasta la ES0511002008 desemboadura Tramo bajo del río Guadiamar y ES0511002040 afluentes por su margen derecha Río Guadalbullón desde las Infantas ES0511007022 hasta el embalse de Mengibar ES0511008005 Rivera de Hierro Río Bembézar aguas arriba del ES0511008008 embalse de Bembézar ES0511008080 Río Robledillo ES0511009019 Río Guadalbullón hasta las Infantas Río Castril aguas arriba del embalse ES0511012036 del Portillo ES0511014002 Tramo bajo del río Guadajoz Río Guadalimar aguas arriba del embalse de Giribaile hasta el río ES0511016005 Guadalmena ES0511100061 ES0511100063 ES0511100070 ES0511100074 ES0511100076 ES0511100078 ES0511100079 ES0511100081 ES0511100083 ES0511100088 ES0511100092 ES0511100094 ES0511100096 ES0511100099 ES0511100100 ES0511100103 ES0511100104 ES0511100107 ES0511100110 ES0511100111 ES0511100115 Río Viar aguas abajo de La Ganchosa hasta el embalse de Melonares Río Viar aguas abajo de la presa de Melonares Río Jándula aguas abajo de la Loma de las Buenas Hierbas Río Guadalentín aguas abajo del embalse de la Bolera hasta el embalse del Negratín Río Genil aguas abajo del embalse de la Cordobilla Rio Genil aguas abajo del arroyo del Pozo del Pino hasta el embalse de Malpasillo Río Guadalimar desde el arroyo de Fuente Álamo hasta el embalse de Mengibar Río Genil aguas abajo de la presa de Iznajar hasta el arroyo del Pozo del Pino Río Guadiana Menor aguas abajo del río Fardes Arroyo Salado de Morón aguas abajo de la presa de Torre del Águila Rivera de Huesna aguas abajo de la presa de Huesna Río Bembézar aguas abajo de la presa de Hornachuelos Rivera de Huelva aguas abajo de la presa de Aracena hasta el embalse de Zufre Río Guadiato aguas abajo de la presa de Puente Nuevo hasta el embalse de la Breña Río Montoro aguas abajo de la presa de Montoro 1 Río Cacín aguas abajo de la presa de Bermejales hasta el río Alhama Río Guadalquivir aguas abajo del embalse de Tranco de Beas hasta el río Cañamares Río Castril aguas abajo de la presa del Portillo Río Guadalquivir aguas abajo del río Guadajoz hasta el río Genil Río Guadalquivir aguas abajo de la presa de Villafranca hasta el río Guadajoz Río Guadalquivir desde la presa de Pedro Marín hasta Sotogordo Conectivi dad Húmedo Propuesto Índices Hidrológicos anual (serie 1980/2006) Seco Propuesto Media Base Q347 Q330 Q310 Hoppe20 Caudales Naturales ABF MM25 Media Mediada 0,010 1,700 0,710 1,170 0,711 0,330 0,410 0,480 0,570 0,850 0,550 5,280 3,074 0,140 0,300 0,300 0,300 0,167 0,140 0,220 0,290 0,350 0,730 0,430 5,473 3,586 0,160 0,650 0,400 0,530 0,403 0,260 0,330 0,370 0,410 0,490 0,360 4,356 2,514 0,470 0,03 0,500 0,17 0,190 0,02 0,327 0,11 - 0,193 0,040 0,080 0,120 0,150 0,330 0,150 2,810 0,480 1,554 0,363 0,825 0,03 0,800 0,130 0,15 0,800 0,130 0,05 0,150 0,130 0,07 0,480 0,216 0,161 0,184 0,040 0,070 0,110 0,140 0,370 0,140 3,576 0,244 2,697 2,038 0,146 1,493 0,380 0,240 0,120 0,350 0,080 0,350 0,140 0,350 0,119 0,623 0,030 0,200 0,060 0,280 0,090 0,380 0,110 0,490 0,220 0,940 0,080 0,470 0,531 7,586 0,386 4,913 0,150 0,760 0,150 0,510 1,178 0,320 0,610 0,840 1,090 1,370 0,590 11,175 7,822 5,943 3,562 0,280 8,528 4,966 5,589 3,525 - 0,000 - 0,71 - 0,020 - 0,120 - 0,150 - 0,360 - 1,35 0,22 0,140 0,04 0,093 0,005 0,060 0,060 0,060 0,060 0,195 0,080 0,140 0,200 0,250 0,490 0,180 1,308 0,988 0,300 1,100 1,100 1,100 3,357 1,870 3,060 3,690 4,380 6,480 4,230 22,097 16,228 0,020 0,700 0,700 0,800 3,535 1,340 2,200 2,670 3,280 4,850 3,210 14,652 11,188 0,200 0,250 0,250 0,250 1,034 0,000 0,530 0,960 1,290 1,550 0,160 18,049 13,274 0,49 - - 0,080 - - - 0,140 0,040 - - 0,040 0,385 - - 0,183 0,140 - - 0,210 - 0,260 - 0,550 - - 0,300 0,770 0,770 0,770 2,456 1,290 2,180 2,710 3,250 4,710 3,210 14,298 10,787 0,500 0,510 0,510 0,510 1,386 0,990 1,420 1,760 2,200 3,330 1,770 9,435 6,505 0,240 0,240 0,210 0,220 0,138 0,040 0,060 0,080 0,090 0,170 0,090 2,048 1,413 0,350 0,500 0,250 0,400 0,213 0,040 0,080 0,140 0,170 0,280 0,160 5,162 3,135 0,140 0,300 0,250 0,270 0,477 0,020 0,100 0,260 0,330 0,710 0,350 8,808 4,972 0,160 0,380 0,170 0,260 0,143 0,000 0,040 0,100 0,130 0,260 0,150 3,759 2,797 0,13 0,84 0,13 0,45 - - - - - - - 5,500 3,718 0,1 0,35 0,1 0,18 - - - - - - - 1,272 0,779 0,220 0,220 0,220 0,220 0,258 0,130 0,200 0,250 0,330 0,400 0,260 1,480 1,015 0,250 1,280 0,370 0,840 0,857 0,280 0,450 0,600 0,740 1,310 0,450 6,300 4,723 0,250 0,250 0,250 0,250 0,348 0,100 0,190 0,270 0,310 0,650 0,240 1,582 1,144 1,000 4,600 4,600 4,600 14,431 7,630 9,970 12,270 14,900 18,900 12,360 99,352 69,018 0,010 2,500 2,500 2,500 6,802 3,890 5,400 6,750 8,190 9,820 5,870 77,392 54,884 1,000 1,600 1,600 1,600 2,194 1,640 2,320 2,990 3,660 5,260 2,760 18,905 13,748 Tabla 2.- Resultados obtenidos en los estudios técnicos Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 37 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública Masa de agua Código Nombre ES0511002001 Tramo bajo del río Guadiamar y afluentes por su m.d. Caudal natural Media 5,28 Mediana 3,07 ES0511002008 Río Corbones aguas abajo del arroyo Salado de Jarda hasata la desembocadura 5,47 3,59 ES0511002040 Tramo medio del río Guadiamar y afluentes por su m.d. 4,36 2,51 ES0511007022 Río Guadalbullón desde las Infantas hasta el embalse de Mengibar 2,81 1,55 ES0511008005 Rivera de Hierro 0,48 0,36 ES0511008008 Río Bembézar aguas arriba del embalse de Bembézar 3,58 2,04 ES0511008080 Río Robledillo 0,24 0,15 ES0511009019 Río Guadalbullón hasta las Infantas 2,70 1,49 ES0511012036 Río Casril aguas arriba del embalse del Portillo 0,53 0,39 ES0511014002 Tramo bajo del río Guadajoz 7,59 4,91 11,17 7,82 ES0511016005 Río Guadalimar aguas arriba del embalse de Giribaile hasta el río Guadalmena ES0511100061 Río Viar aguas abajo de La Ganchosa hasta el embalse de Melonares 5,94 3,56 ES0511100063 Río Viar aguas abajo de la presa de Melonares 8,53 4,97 ES0511100070 Río Jándula aguas abajo de la Loma de las Buenas Hierbas 5,59 3,52 ES0511100074 Río Guadaletín aguas abajo de la presa de la Bolera hasta el embalse del Negrtín 1,31 0,99 ES0511100076 Río Genil aguas abajo de la presa de la Cordobilla 22,10 16,23 ES0511100078 Río Genil aguas abajo del arroyo del Pozo del Pino hasta el embalse de Malpasillo 14,65 11,19 ES0511100079 Río Guadalimar desde el arroyo Fuente Álamo hasta al embalse de Mengibar 18,05 13,27 ES0511100081 Río Genil aguas abajo de la presa de Iznajar hasta el arroyo del Pozo del Pino 14,30 10,79 ES0511100083 Río Guadiana Menor aguas abajo del río Fardes 9,43 6,50 ES0511100088 Arroyo Salado de Morón aguas abajo de la presa Torre del Aguila 2,05 1,41 ES0511100092 Rivera de Huesna aguas abajo de la presa de Huesna 5,16 3,14 ES0511100094 Río Bembézar aguas abajo de la presa de Hornachuelos 8,81 4,97 ES0511100096 Rivera de Huelva aguas abajo de la presa de Aracena hasta el embalse de Zufre 3,76 2,80 ES0511100099 Río Guadiato aguas abajo de la presa Puente Nuevo hasta el embalse de La Breña 5,50 3,72 ES0511100100 Río Montoro agua abajo de la presa Montoro 1 1,27 0,78 ES0511100103 Río Cacin aguas abajo de la presa de Bermejales hasta el río Alhama 1,48 1,01 ES0511100104 Río Guadalquivir aguas abajo del embalse Tranco de Beas hasta el río Cañamares 6,30 4,72 ES0511100107 Rio Castril aguas abajo de la presa del Portillo 1,58 1,14 ES0511100110 Río Guadalquivir aguas abajo del río Guadajoz hasta el río Genil 99,35 69,02 ES0511100111 Río Guadalquivir aguas abajo de la presa de Villafranca hasta el río Guadajoz 77,39 54,88 ES0511100115 Río Guadalquivir desde la presa de Pedro Marín hasta Sotogordo 18,90 13,75 Caudal básico 0,711 0,170 0,400 0,190 0,048 0,220 0,000 0,180 0,120 0,623 1,180 0,321 0,390 0,010 0,200 3,360 3,535 1,030 2,460 1,386 0,140 0,210 0,480 0,143 0,004 0,420 0,260 0,860 0,350 14,430 6,800 2,190 octubre 1,100 0,300 0,650 0,240 0,090 0,130 0,050 0,150 0,080 0,510 0,500 0,500 0,140 0,033 0,060 1,100 0,800 0,250 0,770 0,510 0,210 0,500 0,250 0,170 0,090 0,000 0,220 0,370 0,250 4,600 2,500 1,600 noviembre 1,300 0,300 0,650 0,240 0,090 0,130 0,050 0,150 0,080 0,510 0,500 0,600 0,140 0,033 0,060 1,100 0,800 0,250 0,770 0,510 0,210 0,500 0,300 0,170 0,130 0,200 0,220 0,370 0,250 4,600 2,500 1,600 diciembre 1,700 0,300 0,650 0,500 0,170 0,130 0,150 0,800 0,080 0,510 0,760 0,600 0,140 0,093 0,060 1,100 0,800 0,250 0,770 0,510 0,240 0,500 0,300 0,170 0,840 0,350 0,220 1,280 0,250 4,600 2,500 1,600 enero 1,700 0,300 0,650 0,500 0,170 0,130 0,150 0,800 0,380 0,510 0,760 1,350 0,140 0,093 0,060 1,100 0,800 0,250 0,770 0,510 0,240 0,500 0,300 0,170 0,840 0,350 0,220 1,280 0,250 4,600 2,500 1,600 febrero 1,700 0,300 0,650 0,500 0,170 0,130 0,150 0,800 0,380 0,510 0,760 1,350 0,140 0,093 0,060 1,100 0,800 0,250 0,770 0,510 0,240 0,500 0,300 0,380 0,840 0,350 0,220 1,280 0,250 4,600 2,500 1,600 marzo 1,700 0,300 0,650 0,500 0,170 0,130 0,150 0,800 0,120 0,510 0,760 1,350 0,140 0,093 0,060 1,100 0,800 0,250 0,770 0,510 0,240 0,500 0,300 0,380 0,840 0,350 0,220 1,280 0,250 4,600 2,500 1,600 Caudales mínimos abril mayo 1,300 0,710 0,300 0,300 0,400 0,400 0,500 0,190 0,170 0,170 0,130 0,130 0,050 0,050 0,800 0,800 0,120 0,120 0,510 0,510 0,760 0,760 1,350 0,400 0,140 0,140 0,093 0,040 0,060 0,060 1,100 1,100 0,800 0,800 0,250 0,250 0,770 0,770 0,510 0,510 0,210 0,210 0,500 0,350 0,300 0,250 0,380 0,380 0,430 0,430 0,100 0,100 0,220 0,220 1,280 1,220 0,250 0,250 4,600 4,600 2,500 2,500 1,600 1,600 junio 0,710 0,300 0,400 0,190 0,020 0,130 0,020 0,150 0,120 0,510 0,150 0,220 0,140 0,005 0,060 1,100 0,800 0,250 0,770 0,510 0,210 0,250 0,250 0,380 0,130 0,100 0,220 1,220 0,250 4,600 2,500 1,600 julio 0,710 0,300 0,400 0,190 0,020 0,130 0,000 0,150 0,080 0,510 0,150 0,220 0,140 0,005 0,060 1,100 0,800 0,250 0,770 0,510 0,210 0,250 0,250 0,170 0,130 0,000 0,220 0,370 0,250 4,600 2,500 1,600 agosto 0,710 0,300 0,400 0,190 0,020 0,130 0,000 0,150 0,080 0,510 0,150 0,220 0,140 0,005 0,060 1,100 0,800 0,250 0,770 0,510 0,210 0,250 0,250 0,170 0,130 0,000 0,220 0,370 0,250 4,600 2,500 1,600 septiembre 0,710 0,300 0,400 0,190 0,020 0,130 0,001 0,150 0,080 0,510 0,150 0,220 0,140 0,005 0,060 1,100 0,800 0,250 0,770 0,510 0,210 0,250 0,250 0,170 0,130 0,100 0,220 0,370 0,250 4,600 2,500 1,600 media 1,170 0,300 0,530 0,327 0,110 0,130 0,070 0,480 0,140 0,510 0,510 0,710 0,140 0,049 0,060 1,100 0,800 0,250 0,770 0,510 0,220 0,400 0,270 0,260 0,450 0,180 0,220 0,370 0,250 4,600 2,500 1,600 Tabla 3.- Régimen de caudales mínimos en m3/s. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 38 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública 10. EXTRAPOLACIÓN DE LOS RESULTADOS A LA TOTALIDAD DE LAS MASAS DE AGUA DE LA DEMARCACIÓN En el apartado 3.4.1.2. de la IPH se establece que el ámbito espacial para la caracterización del régimen de caudales ecológicos se extenderá a todas las masas de aguas superficiales. Como los estudios técnicos se refieren tan solo a 32 masas de agua de las 392 de la Demarcación es necesario estimar los caudales al menos en mínimos del conjunto, hasta que se desarrollen estudios específicos en cada una de ellas. Esta extrapolación se ha realizado clasificando los ríos por tipo o hidrorregión donde se encuadran y aplicando de forma proporcional los valores medios obtenidos en los estudios técnicos. El factor de proporcionalidad que se establece es la mediana de los caudales medios anuales registrados en los últimos 25 años. La elección de la mediana y no la media es debido a que es un índice mucho más sensible a las variaciones interanuales de la cuenca y por tanto más ajustado al régimen de caudales mínimos. Las leyes de extrapolación obtenidas se reflejan en la tabla adjunta y los valores de agua se detallan en el Apéndice II. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 39 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública ECOTIPO Umbral HPU mínimo ESTIAJE Umbral de caudales mínimos a respetar en ríos en % del caudal de referencia 1 Media Muy acusados 11 Montaña silicea 50% 15% 15% 35% 61% 61% 39% 39% 32% 18% 14% 14% 14% 30% 2 Media Caudales apreciables 2,6,7,9,12 Varios 50% 15% 15% 35% 61% 61% 39% 39% 32% 18% 14% 14% 14% 30% 2 Media Caudales apreciables 2,6,7,9,12 Varios 30% 11% 11% 14% 14% 14% 14% 14% 14% 14% 11% 11% 11% 13% 2 Media Caudales apreciables 14,16,17 Ejes 30% 7% 7% 8% 8% 8% 8% 8% 8% 7% 7% 7% 7% 7% 3 Alta Muy acusados 6,8 Ríos de piedemonte y baja montaña 50% 20% 21% 43% 49% 49% 49% 31% 25% 8% 5% 5% 5% 26% 3 Alta Muy acusados 6,8 Ríos de piedemonte y baja montaña 30% 6% 7% 12% 12% 14% 14% 11% 9% 6% 4% 4% 4% 9% 4 Alta Caudales apreciables 2 Ríos de la depresión 50% 31% 34% 41% 41% 41% 41% 29% 20% 20% 20% 20% 20% 29% 4 Alta Caudales apreciables 2 Ríos de la depresión 30% 15% 15% 17% 17% 17% 17% 15% 15% 15% 15% 15% 15% 16% 4 Alta Caudales apreciables 14 Ejes 30% 9% 9% 10% 10% 10% 10% 9% 9% 9% 9% 9% 9% 9% 20 21 22 30 31 40 41 42 TIPO Promedio oct nov dic ene feb mar abr may jun jul ago set 5 Ríos no permanentes 2,6,8 Ríos de piedemonte y baja montaña 50% 22% 22% 52% 52% 52% 52% 29% 29% 9% 4% 4% 4% 28% 5 Ríos no permanentes 2,6,8 Ríos de piedemonte y baja montaña 30% 7% 11% 18% 22% 23% 23% 16% 10% 7% 4% 4% 4% 12% 50 51 REGIMEN DE CAUDALES MINIMOS Nº Nº 10 VARIACION INTERANUAL HIDROREGION Caudal de referencia : Caudal medio anual que es superado el 50 % de los años en regimen natural en los ultimos 25 años Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 40 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública 11. REPERCUSIÓN DEL RÉGIMEN DE CAUDALES ECOLÓGICOS SOBRE LOS USOS DEL AGUA Es notorio el uso intensivo del recurso agua en gran parte del territorio español. Son muy numerosas las concesiones que han sido otorgadas para permitir dicho uso, así como el largo plazo restante hasta su extinción, que en muchos casos se extiende hasta el año 2060 (disposiciones transitorias de la Ley 29/1985, de 2 de agosto, de Aguas). Incluso en algunos casos, la misma normativa contempla la renovación automática del aprovechamiento, aunque se puedan introducir las oportunas modificaciones en el título habilitante. Obviamente, al implementar los caudales ecológicos en las distintas masas de agua es bien posible que se deriven afecciones a los usuarios de aquellas, en ciertos casos en un sentido negativo aunque también pueda presentarse el caso opuesto. Es necesario analizar cada caso concreto, pues la casuística es muy diversa. Sin embargo, pueden adelantarse algunas normas generales que se comprobarán en cada masa. Las principales afecciones se derivarán de los caudales mínimos, aunque también procederán de los máximos y de limitaciones en las tasas de cambio, y pueden producirse en un uso consuntivo o en uno no consuntivo. En algunos casos estas afecciones serán limitadas y podrán ser aceptadas por los usuarios dentro del proceso de concertación, con lo que no existirá problema alguno. En otros casos, aquellos usos caracterizados por una demanda determinada, como el riego, el abastecimiento, etc., sufrirán una afección de cierta entidad, pudiendo originarse una disminución de mayor o menor cuantía en la garantía de satisfacción de dicha demanda. También existen otros usos, por ejemplo la producción de energía hidroeléctrica, en los que sólo en contados períodos el caudal aprovechado se acerca al máximo concedido. En estas situaciones, la imposición de caudales ecológicos no compatibles con el uso preexistente originará una afección al reducir el volumen de agua aprovechado. Por ello, cuando existan afecciones de cierta magnitud, se deberá llevar a cabo un tratamiento singular de cada caso para intentar llegar a una solución viable y de general aceptación. La IPH establece también que los planes hidrológicos de cuenca deben recoger un análisis de la repercusión que tiene la implantación del régimen de caudales ecológicos sobre los usos del agua. Este análisis incluye: - Marco legal de los usos existentes, incluyendo las características técnico-administrativas de los mismos y un análisis jurídico de los efectos sobre los mismos. - Repercusión en los niveles de garantía de las unidades de demanda afectadas y análisis de la disponibilidad de caudales y compatibilidad con las concesiones existentes. - Repercusión económica y social de la implantación del régimen de caudales. Procede destacar, por un lado, la complejidad del proceso de implementación de los regímenes propuestos, derivada de la dificultad de conciliación entre los usos existentes y los requerimientos hídricos para alcanzar el buen estado de las masas, y por otro lado, que Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 41 Propuesta de Proyecto de Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir Documento para Consulta Pública el aprovechamiento constituye un derecho otorgado a los usuarios del que sólo pueden ser desprovistos por causa de interés público y en un proceso de expropiación. La normativa contempla la revisión de las concesiones para adaptarlas a las determinaciones de los Planes hidrológicos, previéndose en estos casos la oportuna indemnización. Pero hay posturas en la Administración hidráulica opuestas al pago de indemnizaciones por causa de la implementación de caudales ambientales, basada en que éstos no constituyen un uso sino una limitación de la disponibilidad del recurso. Por otra parte, la normativa otorga a la Administración hidráulica ciertas posibilidades para proceder a revisiones de oficio de las concesiones cuando se modifiquen los supuestos que las otorgaron y, en estos casos, no procede indemnización alguna. Finalmente, ciertas veces es el propio concesionario, en especial del sector eléctrico, el que solicita la modificación de la concesión lo que abre un proceso para negociar los nuevos términos. Este Anejo no es el lugar adecuado para tratar las distintas posturas existentes respecto al derecho a la indemnización precitada, tema que deberá ser resuelto oportunamente en los Tribunales de Justicia. Sin embargo, si debe contemplarse las soluciones posibles para las distintas masas de agua de esta demarcación hidrográfica en las que se implementan caudales ecológicos en este Plan hidrológico. Las posibles soluciones se integran en los siguientes cuatro (4) grupos básicos. Grupo 1º: En las siguientes masas de agua, y tras del proceso de concertación practicado, es posible introducir los caudales ambientales, en las condiciones consensuadas, y sin que deba entrarse en ningún tipo de compensación. Grupo 2º: En las siguientes masas de agua se aplaza la implementación de los caudales ambientales a la puesta en operación de determinadas medidas incluidas en el correspondiente Programa, básicamente de modernización de regadíos. Terminadas las medidas se procederá a su establecimiento según el consenso alcanzado en el proceso de concertación. Grupo 3º: En las siguientes masas de agua no es viable la implantación en este proceso de planificación de los caudales ambientales según se justifica adecuadamente. Se aplaza el buen estado de acuerdo con la normativa existente. Grupo 4º: En las siguientes masas de agua no se ha llegado a un consenso con los usuarios. Sin embargo, se considera que deben ser implementados en este proceso de planificación, sin perjuicio de las medidas legales que adopte el concesionario. Para cada una de ellas se acompaña una ficha resumen con los usuarios en los que recae la afección Para cada una de ellas se acredita a continuación que se satisfacen las condiciones reguladas en los mismos. Anejo nº 5.- Implantación del régimen de caudales. 42