TEMA 2 La acción social en los siglos XVII y XVIII. La política de la Ilustración Carmen Alemán Bracho 1 ESQUEMA Tema 2 La acción social en los siglos XVII y XVIII. La política de la Ilustración 1. El siglo XVII ¿CONTINUIDAD O CAMBIO? • La política de asistencia a la mendicidad y a la pobreza, aparentemente, el siglo XVII se nos presenta como una mera continuidad del siglo anterior: a) Persiste el protagonismo de la Iglesia en materia de beneficencia. b) Continúa siendo dramática la situación de los pobres en una España en crisis. • Sin embargo hay matices en el planteamiento de la cuestión con el nuevo siglo. Matices si se quiere formales, pero no por ello menos reveladores de los cambios en profundidad que simultáneamente se estaban produciendo en el conjunto de la sociedad y que van a afectar decisivamente al tratamiento del problema. • Por tanto, es preciso examinar y enmarcar el tratamiento de la pobreza como una de las profundas modificaciones que se operan en el ámbito político y de las mentalidades. 1.1. Transformaciones estructurales: el nacimiento del Estado moderno. • • • El siglo XVI, pero de forma más acentuada el XVII, van a significar el comienzo de una nueva época en múltiples aspectos. El sistema económico, el desarrollo de la burocracia, los cambios en el derecho, la nueva concepción del poder político, denotan transformaciones decisivas que puede sintetizarse en la siguiente afirmación: se está fraguando el nacimiento del Estado moderno en nuestro país. En el ámbito de la asistencia social, la intervención del Estado se realiza en tensión. Por una parte con los sectores eclesiásticos, que siguen considerando la asistencia social un eficaz instrumento para la edificación moral de la sociedad. Por otra con los poderes locales, deseosos de seguir controlando y protagonizando la beneficencia. Conclusión: la intervención estatal en materia de asistencia social no sigue una evolución lineal, sino un incremento con oscilaciones y retrocesos. 1.2. Una nueva concepción de la pobreza. • Del bien común a la felicidad política: como consecuencia del proceso de secularización, la noción escolástica de bien común –basada en una definición objetiva, unitaria y trascendente de la felicidad- deja paso a la noción de felicidad política. Esta última se despoja de las connotaciones 2 • • • 2. religiosas o morales, requiriendo la intervención civil para que el individuo pueda lograrla. La valoración del trabajo: el trabajo en su sentido renacentista comienza a contemplarse en su carácter creativo e innovador. Simultáneamente, y como consecuencia de la nueva valoración del individuo, se hace del trabajo una esfera propia del intervensionismo estatal. Nueva concepción de la pobreza: la mentalidad del trabajo y el proceso de secularización impulsan cambios en la percepción de la pobreza. Esta deja de ser contemplada como un ideal ético, mientras que crece el intervensionismo estatal en la materia. Pero ese intervensionismo se vincula a uno de los fines del nuevo Estado moderno: la introducción de una política de justicia social que debe ser activada por el propio Estado. Conclusión: la originalidad de la visión y del tratamiento de la pobreza radica en su consideración como consecuencia del mal gobierno de los hombres. LOS PROBLEMAS SOCIALES EN LOS PENSADORES ESPAÑOLES DEL SIGLO XVII. • • El comienzo del siglo XVI lleva aparejado el afianzamiento de una convicción: los problemas existentes en la sociedad española afectan a toda la vida económica y social del país: la conciencia de crisis generalizada. El siglo XVII es el siglo de los arbitristas, es decir, aquellos que arbitrarán remedios para curar los males de la Monarquía. 2.1. Sancho de Moncada. (1580-1638) • La causa de los males de la sociedad española procede de la abundancia de los metales preciosos que estimulan la ociosidad • Remedios para los males de la Monarquía: a) Atención preferente a la manufactura b) Fomento de la industrialización. c) Política proteccionista d) Eliminación del paro forzoso e) Impulso de la inversión y política de pleno empleo 2.2. Caxa de Leruela. (1591-1646) • • Atribuye la abundancia de vagos en el Reino al abandono de la agricultura y confía el despegue económico a la ganadería y no a la industria Considera el comercio exterior una fuente de enriquecimiento y disminución de mendigos. 2.3. Martínez Mata. (1618-1670) • Considera que la principal ocupación de un gobernante es evitar el desempleo. Plantea el fomento del consumo y gasto de productos españoles como mecanismo para conseguirlo. 2.4. Alvarez Osorio. (1628-1692) 3 • • Atribuye los males del Reino a: el abandono de la industrial y el exceso de personas dedicadas al comercio Plantea como remedios el fomento de la agricultura y de la industria 2.5. Fernández Navarrete. (1588-1646) • • Vincula la decadencia a diversos factores, entre ellos el régimen de mayorazgos, la abundancia de vagos y la entrada de productos extranjeros. Plantea como remedio el fomento de la agricultura, fuente de empleo y de riqueza. 2.6. Conclusiones • Nos encontramos ante un análisis de la pobreza diferente al existente en el siglo XVI: la pobreza es presentada como un elemento más de una crisis generalizada que no encontrará solución sin unos cambios globales. Estos cambios afectan a la organización del sistema productivo y a la modernización de la economía. 4