No. 199, 2012 Monitoreo y evaluación periódica de políticas públicas: una responsabilidad Mariela Borge, CEGESTI Para que una política pública sea aprobada, debe -o al menos debería en la mayoría de los casos- atravesar un proceso de selección que determine su validez. El proceso empieza de lo más básico hasta implicar lo más complejo. como debería y, de ser necesario, qué cambios evitaría que se siga padeciendo de ineficiencia. La identificación y definición de un problema pertenece a la primera etapa del proceso, seguido por la formulación de la política, la adopción de la decisión, y la implementación de la misma (de ser esta aprobada). Para muchos, el proceso culmina en la etapa de la implementación, sin embargo, se dejan otras significativas etapas de lado. …el monitoreo y la evaluación de las políticas públicas es una acción de gran envergadura, pero no por ello compleja o tortuosa. Un primer paso para nuestras instituciones que aún no realizan actividades de tal naturaleza, consistiría en la confrontación o compulsa de los planes de gobierno con los informes correspondientes, a efecto de apreciar el grado de cumplimiento de las políticas públicas, valorar sus resultados y externar sus observaciones. El éxito de una política pública no está determinado por su capacidad de implementación, por el contrario, es su capacidad de producir respuestas para contrarrestar (reducir, corregir o eliminar) el problema identificado lo que la define. Se encuentra igualmente determinado, por la capacidad de la política de mantenerse activa y vigente para seguir produciendo respuestas. Con el objetivo de poder conocer si una política que ha sido implementada cumple con los deberes de una política eficaz, es imprescindible utilizar las otras etapas que, en ocasiones, se dejan de lado: el monitoreo y la evaluación periódica de las políticas públicas. Procurar el seguimiento de políticas implementadas en el país por medio las técnicas citadas en el párrafo anterior, no sólo acabaría con la implementación y vigencia de políticas obsoletas, sino que además sería posible determinar si el plan de acción seguido es el correcto, si está funcionando Éxito Empresarial / No. 199, 2012 Para Miguel Ángel Osorno (2002), Herramientas como las mencionadas resultan fundamentales, no sólo para políticas públicas, sino que además son básicas en procesos de implementación de proyectos y programas, tanto a cargo de instituciones estatales como de organizaciones no gubernamentales. De hecho, para algunos organismos internacionales (como la ONU en algunas ocasiones), resulta elemental que al proponer un proyecto o programa se valoren dentro de su planificación (e incluso presupuesto) el proceso de evaluación del mismo, lo que permite que se aprecien las experiencias adquiridas durante la ejecución del proyecto o programa. Según señala Feinstein (2006), exgerente y asesor del Departamento de Evaluación del Banco Mundial, Pág. 1 …la evaluación se lleva a cabo con dos propósitos principales: para aprender de la experiencia, extrayendo lecciones que puedan aplicarse con el fin de mejorar el diseño y la implementación de políticas públicas (y/o programas y/o proyectos), y para la rendición de cuentas al público y/o a quienes han aportado los recursos utilizados, y en algunos casos al Parlamento. El primer propósito se cumple con las llamadas evaluaciones formativas, cuya finalidad es el aprendizaje, en tanto que el segundo propósito caracteriza a las llamadas evaluaciones sumativas, que formulan un juicio sobre el valor de lo evaluado. La profesora Tamyko Ysa (s.f.) agrega a los anteriores propósito (experiencia/ retroalimentación o improvement y rendición de cuentas o accountabilily) un tercer propósito, el de la “Ilustración” (enlightenment), el cual tiene la función de “ilustrar, aclarar, dar luz, comprender qué está pasando y cómo funciona el programa. La evaluación suele producir un cambio, dota de nuevos significado sobre la realidad del programa y de su intervención” (p.5). A pesar de que los tres propósitos son relevantes, el propósito de la retroalimentación es fundamental porque mediante este proceso es posible determinar si la labor que se ha ejecutado es la correcta, si los beneficiarios están siendo realmente favorecidos, y si existen variables externas que inciden en el accionar de la política pública, proyecto o programa evaluado. Ahora bien, para muchos países la necesidad de la evaluación ha trascendido el ámbito “individual” para convertirse en una responsabilidad gubernamental, especialmente en naciones de la Unión Europea. Por ejemplo, en 1995 se creó la Sociedad Europea de Evaluación (EESS) y desde el 2001 España cuenta con la Sociedad Española de Evaluación de Políticas Públicas (SEE). Existe además el llamado Atlas Internacional de la Evaluación que ilustra el panorama de la evaluación en Europa y el resto del mundo. Lo que genera que sean las instituciones europeas las pioneras en incorporar la evaluación de políticas públicas a su marco institucional, se vincula a la concepción sobre las responsabilidades estatales. Para el politólogo Johnny Meoño (2011), la evaluación debe ser parte esencial de la “gestión pública”, Éxito Empresarial / No. 199, 2012 …es un concepto que implica reconocer el fenómeno del funcionamiento integral del Estado y sus instituciones, manifestado dicho fenómeno en los fenómenos “subordinados” de dirección, planificación, organización, coordinación, control y evaluación de procesos, individuos y recursos hacia la consecución de objetivos constitucionales y legales del Estado en su total conjunto, y de cada ente en particular, así como de grupos de éstos –sectores de actividad- y su impacto regional. La evaluación de políticas públicas, proyectos y programas es particularmente importante en aquellos de corte ambiental, gracias a que la retroalimentación que se genera a partir de las experiencias que se adquieren puede ser fundamental para la elaboración, selección y mejora de otras políticas públicas, proyectos y/o programas. Para Carlos Eduardo Moreno (s.f.), la evaluación en aspectos de política ambiental precisa de representación y control de calidad. Para el autor, …en última instancia, se trata de cómo mejorar la calidad del proceso de política ambiental, una vez que los criterios que definen esa calidad se amplían para que ésta sea consiste con la naturaleza compleja de las problemáticas bajo escrutinio y objeto de una decisión, que finalmente privilegiará un curso de acción sobre otros. Finalmente, es preciso señalar que la evaluación de un proceso resulta verdaderamente primordial al revisar el accionar de dicho proceso pues se aprende siempre de los fracasos y de los éxitos; además por medio de la experiencia que se va acumulando se evitan y corrigen los errores tanto en políticas similares (proyectos y/programas) como en otros completamente distintos. Asimismo, se destaca que el monitoreo y la evaluación deben formar parte de los procesos desde lo más abstracto hasta lo más concreto (incluyendo su presupuesto). Además, en países que no emplean estos instrumentos deben irse formando, dentro de sus instituciones, espacios dedicados a la evaluación de políticas emitidas por el Estado, de manera que las experiencias sirvan para el personal y para el resto de las instituciones. Pág. 2 Referencias Feinstein, O. (2006). Evaluación Pragmática de Políticas Públicas. ICE. Evaluación de Políticas Públicas. No 836. Recuperado de http://cgpp.app.jalisco.gob.mx/images/evaluacionpp.pd f. Meoño, J. (2011). Planificación del Desarrollo en Costa Rica. Lecciones de la experiencia. Ciencias Económicas 29 (2). Moreno, E. (¿?). Evaluación de Políticas Públicas Ambientales bajo un enfoque sistémico. Universidad Nacional de Colombia. Departamento de Ingeniería de Sistemas Industriales. Sede Bogotá. Recuperado de http://gemini.udistrital.edu.co/comunidad/grupos/trabaj o/complejidad/memorias/primer%20encuentro/DIA%20 1/06.%20ENFOQUES%20PARA%20EL%20ANALISIS %20Y%20EVALUACION%20DE%20POLITICAS%20A MBIENTALES.pdf. Osorno, M. (2002). Monitoreo y Evaluación de las Políticas Públicas. Conferencia presentada durante el VII Congreso Anual de la Federación Iberoamericana de Ombudsman (FIO). Lisboa, Portugal. Recuperado de http://www.juridicas.unam.mx/publica/librev/rev/derhu m/cont/58/pr/pr25.pdf. Ysa, T. (s.f.). Evaluación de Políticas Públicas. Institut de Direcció i Gestió Pública (ESADE). Recuperado de http://www20.gencat.cat/docs/economia/Documents/Ar ticles/Arxius/doc_22376634_1.pdf. Éxito Empresarial Es una publicación periódica de CEGESTI. Si desea conocer más acerca de cómo mejorar la competitividad de su empresa, accese los artículos publicados anteriormente en nuestro sitio web: www.cegesti.org Éxito Empresarial / No. 199, 2012 Pág. 3