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PIRAGÜISMO
La categoría reina de las diferentes modalidades que podemos usar
para descender por un río.
En otros artículos hemos intentado hacer una introducción al mundo de la navegación
hablando del rafting y del hidrospeed y en este vamos a adentrarnos en el fascinante tema del
piragüismo., deporte rey en el río. En esta explicación voy a dar una vuelta por todo el abanico
de posibilidades dentro del piragüismo para luego centrarme en el turismo náutico y en sus
variantes.
¿Qué es el piragüismo?
Evidentemente es el deporte que practica un piragüista. Y ¿qué es un piragüista? Os
preguntaréis. Piragüista es el tripulante de una piragua, sea cual fuere el tipo de embarcación
que utilice. El piragüista navega en dirección de la marcha e impulsa la piragua por medio de una
pala de una hoja (canoa) o de doble hoja (kayak). Las palas que se usan no están unidas a la
embarcación. Esto es lo que diferencia el piragüismo del remo, el sentido de la marcha y que las
palas no estén fijadas a la embarcación
El término piragüismo es exclusivo del idioma español y es el que define este deporte. El
resto de los países utilizan “canoe” o “kayak” para nombrar el deporte o para referirse al tipo
de embarcación. En algunos países centroafricanos se emplea la palabra “pirogue” para
denominar su tradicional embarcación fluvial, construida al vaciar y dar forma hidrodinámica a
un tronco de árbol y propulsarla con palas y pértigas de madera.
La palabra canotaje es sinónimo de piragüismo pero hoy en día está en desuso.
Modalidades.
Las piraguas reglamentarias son las siguientes: K-1, K-2, K-4, C-I, C-2 Y C-4, siendo la K
la inicial de kayak y C, la de canoa. El número que va detrás de la inicial nos dice cuántos
tripulantes van en cada barco.
• Competición.
En competición se usan ciertos de estos barcos en sus modalidades de aguas tranquilas o
pista, en aguas bravas, slalom y descenso, en ascensos, descensos y travesía y en
maratón.
• En Aguas tranquilas se compite en forma de carreras, en distancias de 500 y
1.000 metros.
• El Slalom tiene como objetivo descender un recorrido de aguas bravas pasando
por diversas puertas similares a las del esquí, que cuelgan de unos cables
colocados a tal efecto sobre el recorrido. Hay que hacerlo en el menor tiempo
posible sin cometer faltas como por ejemplo no pasar por una puerta o tocar uno
de sus palos.
• El descenso: Recorrer una distancia de al menos tres kilómetros de un río de
aguas bravas en el menor tiempo posible.
• Los ascensos, descensos y travesías son competiciones que transcurren por ríos,
lagos y zonas costeras siempre que la dificultad de las aguas sea suave y en
diversas distancias.
• El Maratón consiste en carreras donde la distancia es superior a los 20 Km. y
con varios porteos obligatorios (salir del agua y correr con la piragua al hombro).
La dificultad de los rápidos de los ríos de aguas bravas se clasifica con números
del I al VI, de menor dificultad a mayor.
Otro deporte que se empieza a practicar ahora es el kayak-polo. Es un juego de pelota
montado en un kayak y con porterías que se practica tanto en piscinas cubiertas como
descubiertas e en espacios naturales habilitados a tal efecto. Cada día tiene más
aceptación sobre todo en las ciudades donde no disponen de enclaves naturales para su
práctica.
Dentro del mundo de la competición éstas son las categorías más usuales, algunas de las
cuales son para damas (mujeres en el hablar del piragüismo) y hombres y en otras solo
compiten hombres.
Turismo Náutico.
El turismo náutico es otra modalidad que está apareciendo ahora, con gran auge,
superando incluso a las tradicionales. Tiene diferentes opciones que son las que enumero a
continuación.
Piragüismo de Recreo.
El que practica esta modalidad solo lo hace por disfrutar del deporte y de los lugares
que conoce gracia a él, sin entrar en ningún tipo de competición.
Dentro del piragüismo de recreo está la forma más tranquila que se basa en navegar por
ríos de escasa dificultad, embalses, lagos etc..
Kayak Alpino.
Otra forma de piragüismo de recreo en aguas bravas es la que busca ríos de más
dificultad en sus modalidades de kayak alpino o extremo y que tuvo su aparición cuando
surgieron las primeras piraguas de plástico que se rompían al chocar con las piedras. Aquí la
competición no es contra otros participantes sino más en la línea de la montaña, luchando para
superarse uno a si mismo y poder descender, cada vez, ríos más fuertes. El kayak extremo es
probablemente el más peligroso pero también el que más posibilidades ofrece ya que en el
mundo hay muchísimos ríos y la mayoría son de una dificultad elevada.
Kayak de Mar.
El mar nos ofrece múltiples posibilidades para divertirnos con una piragua. Las más
conocidas son las travesías en piragua de mar recorriendo la costa. La menos vista, pero que se
está desarrollando a gran velocidad es una versión del surf de olas costeras pero en lugar de
una tabla, una piragua.
El Rodeo, Piragüismo Acrobático.
Consiste en efectuar en una ola, o en otras formaciones de agua, maniobras técnicas y
acrobáticas que son puntuadas por un jurado en función de su dificultad y vistosidad. También
puntúa el número de maniobras consecutivas que se realizan ya que esto aumenta su dificultad.
Esta versión del piragüismo requiere un período de aprendizaje largo peor luego es muy
agradecido. Muchos piragüistas de otras modalidades se pasan a ésta al descubrir sus encantos.
El rodeo y el kayak alpino probablemente sean los estilos de piragüismo más espectaculares.
Squirt.
El squirt es a la vez un estilo de piragüismo y un modelo de piragua. Su característica
principal es que se ha minimizado el volumen de la piragua dando sitio solo a las piernas. Su
ventaja es que resulta relativamente sencillo hundir tanto la proa como la popa, con lo cual las
maniobras para ponerla vertical se simplifican. Su desventaja es que se puede convertir en una
trampa ya que el piragüista va virtualmente encajado en él y resulta casi imposible salirse de la
piragua una vez se está en el agua, por lo que el dominio del esquimotaje tiene que ser absoluto.
El squirt está desaconsejado para piragüistas inexpertos.
Dónde practicarlo: Ríos de Aragón.
Existen ríos, lagos y mares en prácticamente todos los lugares del mundo. Las zonas más
famosas, y donde mayor afluencia de piragüistas hay, están en aquellos lugares con una gran
concentración de ríos o donde existe un río que por especiales características se gana un
prestigio y allí van gentes de todo el planeta en busca de sus rápidos.
Podemos destacar los ríos de Estados Unidos y Canadá (Colorado, La Fayette), los de
Costa Rica (Rebentazón), Chile (Bio-Bio, Fuy, Futaleful), Zimbawe (Zambeze), Nepal (Sun Kosi),
los de los Alpes (Sermerza, Gill, Dora Baltea) y por supuesto los españoles.
Galicia tiene una de las más grandes concentraciones de ríos de nivel algo. También hay
ríos clásicos en Asturias (Sella) y Navarra (Irati). Al otro lado de los Pirineos encontramos ríos
de gran calidad y por nombrar alguno destacaría la Gave de Gavarnie y la Gave de Cauterets. En
el lado español y concretamente en el catalán hay uno sobradamente conocido, que es el
Noguera Pallaresa.
En Aragón podemos presumir de tener ríos que combinan la belleza de nuestros paisajes de
Montaña con rápidos de dificultad alta, paraíso de los piragüistas alpinos. Se hallan todos ellos
en la provincia de Huesca y todos los valles pirenaicos tienen alguno. De esta a Oeste están la
Esca ( Valle de Roncal), la Veral (Valle de Ansó), el Aragón Subordán (Valle de Hecho), el Gallego
en su tramo medio a la altura de Murillo de Gallego, L’Ara (Valle de Bujaruelo y Ordesa), la
Cinqueta (Valle de Chistau) y la Ésera (Valle de Campo y Benasque).
Solo nos cabe lamentar el deterioro que están sufriendo algunos de estos ríos por la
contaminación, por la falta de caudal ecológico y también por la ausencia de un caudal suficiente
para poder desarrollar una industria turística a su alrededor, por la construcción descuidada
cerca de sus márgenes de carreteras y centrales y por la amenaza inminente de nuevos y
desmesurados embalses que anegarían bajo sus aguas riquezas naturales que ya conocen y
aprecian en muchos países del mundo, y son patrimonio irrenunciable de todos los aragoneses.
Piragüismo Comercial.
Si nos decidimos a aprender este deporte podemos acudir a algún club de piragüismo o a
alguna de las muchas empresas que trabajan en este sector,. Los cursos que organizan los clubs
de Aragón son de aguas tranquilas o pista y las empresas suelen estar especializadas en los
cursos de aguas bravas, (iniciación a las aguas bravas, perfeccionamiento y kayak alpino y de
rodeo).
El curso mínimo para adquirir las nociones más elementales es de dos días. Eso nos
permitirá tener los conocimientos suficientes de palco, de cómo subirnos y bajarnos de la
piragua y las normas básicas de seguridad. El primer día se aprende todo esto en un pantano o
en el remanso de un río. El segundo día ya se puede ir a un tramo fácil (II grado) para asimilar
las técnicas y maniobras que se realizan aprovechando las corrientes del río. Para el caso de
vuelco, que resulta habitual en el río, ya habremos ensayado como salirnos de piragua el primer
día en el embalse.
En los cursos de perfeccionamiento se va directamente al río, incidiendo en la técnica de
aguas bravas y se empieza a enseñar el esquimotaje, una maniobra para desvolcar la piragua sin
salirnos de ella. Consiste en, una vez volcado, colocar la pala de manera que podamos hacer
presión sobre el agua y, apoyándonos en ella, hacer fuerza con la cadera para dar la vuelta a la
piragua. Esta acción la inventaron los esquimales, lógico con ese nombre, y evitaba que se
congelaran en las frías aguas de Groenlandia.
Los cursos de Rodeo son para piragüistas con un nivel medio que lleven un tiempo
remando y enseñan formas de navegar propias del rodeo, como poner la piragua vertical, hacer
360 (vuelta entera con la piragua plana en un ola) y otras. En estos cursos el piragüista tiene
que saber esquimotear con cierta soltura.
La última opción que ha aparecido recientemente es el kayak o piragua abierta (doble o
individual). Esta fórmula novedosa está teniendo un enorme éxito ya que permite a cualquier
persona entrar el primer día directamente a un río de aguas bravas sin pasar por el periodo de
aprendizaje en aguas tranquilas. Eso sí, en un tramo de dificultad baja. Se puede hacer así
porque en los kayaks de aguas bravas se va metido dentro de la piragua y para que no entre agua
se lleva un cubrebañeras. Esto complica la actividad ya que se tiene que aprender a salir del
barco, cosa por otro lado muy sencilla, pero que provoca un cierto rechazo antes de haberlo
probado. En el Kayak abierto se va sentado en la superficie de la piragua que ya tiene la forma
anatómica de la zona des cuerpo que se suele usar para sentarse con lo que en caso de vuelco
directamente caes fuera. Tiene otra ventaja añadida; al no tener volumen interior no se llena de
agua y con solo desvolcarla te puedes subir en ella.
Para los piragüistas ya experimentados también se organizan expediciones a ríos del
extranjero con un piragüista de alto nivel que los guíe.
Material
El material necesario par el piragüismo de recreo varía según la modalidad que
escojamos.
En el turismo náutico en lagos y mares necesitaremos la piragua, la pala, el chaleco y
dependiendo del oleaje un cubrebañeras que es una pieza de plástico o de neopreno que se
coloca en forma de faldón a la cintura del piragüista y que luego se ajusta a la bañera o hueco
por el que metes dentro de la piragua las piernas..
En los ríos de aguas bravas este material se amplía con el casco, el traje de neopreno y
en la modalidad de kayak alpino con un chaleco arnés.
En los ríos de aguas bravas, excepto en competición, recomendamos las piraguas de
plástico ya que las de fibra de vidrio o la de kevlar carbono son mucho más delicadas.
Para la compra de todo este tipo de material lo más adecuado es asesorarse en una
tienda especializada o en las mismas empresas de aventura.
Conviene que todo el material que usemos esté homologado según las normas europeas.
Esta ha sido una fugaz visión del enorme y apasionante mundo del piragüismo. Es una
pena que en nuestra comunidad aún no haya un gran número de piragüistas con la cantidad de
ríos que tenemos y que piragüistas de otros lugares los alaben y conozcan, extrañados de tan
escasa afición local. Os animamos, pues, a que os acerquéis a probarlo y disfrutéis del deporte
del río por excelencia.
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