PIDIÉNDOLE A DIOS Un niño de 10 años estaba parado frente a

Colegio Mª Auxiliadora – Béjar
Curso 2013-14
Buenos días 10 al 13 de Diciembre
ESO y Primaria
Solidaridad
PIDIÉNDOLE A DIOS
Un niño de 10 años estaba parado frente a una tienda de zapatos, descalzo, viendo a través de la
ventana y temblando de frío.
Una señora se acercó al niño y le dijo: "Mi pequeño amigo, ¿Qué estás mirando con tanto interés
en esa ventana?".
"Le estaba pidiendo a Dios que por si por favor me puede dar un par de zapatos, hace tanto frio ".
Fue la respuesta del niño.
La señora lo tomó de la mano y entraron a la tienda. Le pidió al empleado media docena de pares
de calcetines para el niño.
Preguntó si podía darle un recipiente con agua caliente y una toalla. El empleado le trajo lo que
pidió. Ella llevó al niño a la parte trasera de la tienda le lavo cuidadosamente los pies, y se los
secó. Para entonces el empleado llegó con los calcetines.
La señora le puso un par al niño y le compró un par de zapatos. Juntó el resto de los calcetines y se
los dio al niño. Le acarició la cabeza y le dijo:
"¡No hay duda mi pequeño amigo que te sientes más cómodo ahora!". Y más caliente dijo el niño.
Cuando ella daba la vuelta para irse, el niño le agarró la mano y mirándola con lágrimas en los ojos,
le preguntó:” ¿Es usted un ángel de Dios?".
Siempre que ayudamos a los demás, estamos prestando a Dios nuestras manos para que su bondad
llegue a todos.
Oración:
Danos ¡oh Dios! un corazón bueno y sensible ante las necesidades de los demás, que no pasemos
nunca de largo cuando podemos ayudar y dar alivio a los que sufren. Padre nuestro que estás el
cielo…
SOLIDARIDAD
Al autor y orador Leo Buscaglia se le pidió en cierta ocasión formar parte del jurado en un
concurso, para encontrar al niño más cariñoso de la ciudad.
El ganador fue un niño de 4 años, vecino de un anciano cuya esposa había fallecido recientemente.
El niño al ver al anciano llorar en el patio de su casa, se acercó, se sentó en su rezago, le abrazó
tiernamente y comenzó a llorar.
Cuando su mamá le preguntó que le había dicho el vecino, para que sonriera y le acariciara, el niño
le contestó:
"Nada, solo le quise con todo mi corazón y luego le ayudé a llorar".
Esa es la clave de la solidaridad, el cariño y el compartir.
Reflexión: Me pregunto ¿qué puedo hacer por los demás? ¿Qué he hecho para prestar mi ayuda
a los que han sufrido últimamente la catástrofe de Filipinas? ¿Tengo previsto ayudar de algún modo
durante las vacaciones de Navidad? Si no tienes respuesta piensa, que aún está a tiempo.
Colegio Mª Auxiliadora – Béjar
Curso 2013-14
Buenos días 10 al 13 de Diciembre
ESO y Primaria
Solidaridad
Siempre se puede ayudar
En la escuela, estaban preparando una obra de teatro con fines solidarios, Javier había puesto
todo su empeño para participar, pero la madre que conocía bien al niño, temía que no fuera
elegido.
Llegó el día tan esperado, y la tutora repartió, las intervenciones para realizar la obra.
La madre esperaba preocupada, de pronto ve salir al niño corriendo con los ojos brillantes, con
orgullo y emoción. "Adivina qué mamá" gritó y luego dijo las palabras que permanecerán como
una lección para mí:
"He sido elegido para aplaudir y animar". ¿No te parece maravilloso? Por fin yo también podre
ayudar a quienes tanto lo necesitan.
Reflexión: ¿Cómo me hubiera sentido yo si me asignan esa misma tarea? ¿Qué estoy dispuesta a
hacer para prestar mi ayuda en todo momento? Para entrenarme puedo comenzar ayudando en
casa. Piensa concretamente en que.
El sabio
Cierta tarde, llegó a la ciudad un hombre sabio. La gente no dio mucha importancia a su presencia,
y sus enseñanzas no consiguieron interesar a la población. Incluso después de algún tiempo llegó a
ser motivo de risas y burlas de los habitantes de aquella ciudad.
Un día, mientras paseaba por la calle principal, un grupo de hombres y mujeres empezó a
insultarlo. En vez de fingir que los ignoraba, el sabio se acercó a ellos y los bendijo.
Uno de los hombres comentó:
- "¿Es posible que, además, sea usted sordo? ¡Gritamos cosas horribles y usted nos responde con
bellas palabras!".
Es cierto amigo respondió el sabio pero es que "Cada uno de nosotros sólo puede ofrecer lo que
tiene"