ESTE N A ima,mMimtetmmfím, Redacción y Adminisiración. Calle de Larra, 8. SiD Embajadas y legaciones ¿Está la dipUomana itodavía en 1815? Poi- lo mc-nos, no se ha alejado mucho on algunais de stíis pi-ácticas y de auts idioais, o die lo que haioe las veces da lais ideas,, que bien puede ser el respeto aü eaigradio protooolo. Ai oüjseó^'ar la importantía que ee da a da elevación de las lega^ dones a la categoría de erobajadas, rae o&nflnno en que la diplo maida está todavía en el Congreso de Viena o sus alrededores. El Coii^Teso de Vieraa, además de ocuparse en arreglar a su manera el maipa de Euroipa, terriblemento diesarreglado p o r NajpoJeón, so ocuipó en otros empeños menores, uno de los ouates fué esteblecer 1? tabla jerárquica de los diplomátifios. Be allí pi-flcede ©1 orden d*» pa!togprías, perfeccionado por el CJongreiso de Aqiudsgrán con un aipéndSce y todavía vigente que divide en cuatro clases a los legados ^te lajs naciomes: primera, em-bajadoréis; segunda, enviados extraor finamos y ministros plenipotenoiaríos; tareera, ministros resiidentes» ^uairba, agentes diplomáticos. des pott-ncias. En ©1 coro de las grandes potencias h a b í a aJgJín que otro pariente pobre, venido a menos, que oonsorvaba estas señales del pasado eapiendor. Mas ya las pequeñas potencias empier^in a iwm,brair embajadores, dándose la líatjsfaeción de que sus representantes ocupan un puesto mejor en los banquetes y en las ceremonias, aunque este plaosfr de etiqueta no pueda aumientav \\n átomo el peso de su influencia en «1 mundo. Figurémonos que los Estados Unidos no nombrason más que ministras plenipotenfciari'os, y q u e Austria, a pesar 4e su desmembración, siiguiese costeándoise la faistuosa humorada de mantener e m b a j a d o r e s . El embajador do Ausitria tendría i>reced'encia sobre el ministro de los Estados Unidos; pero al mirástro de los Estados Unidos S3 le haría más caso, porque, no obstante su inferioridad en galones y en preeminentías de etiqueta, tendría detrás de sí a uno de los pueblos más pod^erosos del mundo. Eli cuidado pu«isto en regular es. ^ <5U«istión de etiqueta es una s> fial del espíritu de corte que dominaba en Viena. y que era natural en un Congreso que pretendía Wfitaiuaiaa: ei principio monárquico y el esipírátu tradicional en E u r o pa. Tan cíaiseoiiente con d incento q u e cris.talizó en la Santa AlicMja ora invocar a la Santísima Trinidad en tres idiomas religiosos: católico, piotestante y cismático griego, como cuidarse de las galenos de lus diplooíiéticos y do su lugar en las cersmoni'as. Peico los t.íem'pos najn variado. La Eurcipa de hoy no ts la de 1815, ai la política universal se encierra , ya en Euroipa* Aüffunos años después se produjo con la doctrina de Monrea la primera manifestaaión de que en el mundo había más. Con todo, la diplomacia sigue a corta distancia de Viena. E^sto ya es menos natuTOJ, o menos raaomaMe. ,,_:.! Las nacáanas de América, por su constitución republicana, parecían las llamadas a wnovar y a siniplificar la etiqueta diplcmáitica. Si mol estaba a su amor propio nacional el que sus represantentes se sentaran en los banquetes dospuós de Icá embajadores europeos, tenían un procedimiento muy sencillo y menos oneroso que el de costear embajadas a estilo de las de Europa. Era dar títulos de Embajada a sus plsnipotencias; boan-ar la distinción de categorías establecida en el Comgi'«so de Viena por un medio indirecto, d de suprimir el título de ministro plenipoitenciario, sin ammentar los gastos de la dotación. Los diplomáticos de Viena no afinaroit tanto su plantilla de etiqueta que llegasen a señalar una tarifa general ae om.olumentos da embajadores. Claro está que en estas cuestionen de emolum^entos el parecer de la burocracia difiere de la opinión do los contribuyentes. » « « ¿En qué se distóngiue un embajador de un ministro plenipotencdiairio y enviado extraondinaario? Se disibinguie en Ja categoría y generalmenite en el srueldo, aunque esto depende del presupuesto de la nación a quo, de la nación que en^ al legaido. La catyegoría es una vaga eseaicda cjue supone ser el embagadoír un personaje de más oampanillais que el CTrñiido extraordinafrdo y minásteo plenipotenciario, Sus'efectois prácbicois son muy litoibaidos: en un banquete oficial o en una ceiiemomia palaibina los emt>ajadoires táeiMai precedenicia sobiB los mimistaiois plenápotenciarios, Lais artirihucJionjes e inimunidadeis 'dSpilioimáiticias de •wnoe y otros son \ias Hiásmajs. La imiporrtancia que so da si tóitjuio de embajador es un ijacaeoxlo da la época en que sólo ]fBB gsrawJea potencias tenían em^faJJaldioires ceirca de las ofa-as gran- POR LA CEN5UKA Fundado por D. Nicolás M. Urgoiti en 1920 Diario independiente de la noche ASPECTOS • ^ -'r-i¡i']vr EVISADO Embajadoras y agentes diploanáticos o cónsules generales investidos dol cairáiCter de agentes diplomáticos. No se necesitaría más en la planta de una diplomacia simplificada. La objeción de que la igualdad de categoría de representantes principales privaría a una nación de mostrar a otra una consideración o afecto especial es de poco paso. Estas amabilidades intemadonjales t i e n e n escasísima trascsndenda práctica. Lo que estrecha los lazos entre los pueblos no es enviarse mutuamente personajes de aiparato que se distingan por la am!enidad de sus saraos y la excelencia de su cocina, sino fomemitar los intereses comunes y resolver con cordialidad las diferencias. La diplomada, aunque camina a paso de carroza de ceremonia y no a raairoha de automóvil, se está transformando por 'la pres:ión de lois hechos. Ya en las grandjcs embajadas, junto a los personajes tradiicionales de la oaiTera,, al lado de los deganbss seoi-etarios y los agregados sobresalientes oñ el baile y en los talentos de sociedad, van apareciendo otros personajes miónos -vistosas, pero más útiles: aigaiufcos comerciales, indusftriales y hasta periodísticos. El lujo tradicional de las embajadas, los banquetes y las fieistas, tan importantes on la época da la polítiaa de cowta, no va teniendo ya en las sociedades democráticas otra importancia que la perfceneoiante a la jurisdicción de los iwvisteros de salones.. El verdadero lujo de las embajadas de los estados ricos irá consistiendo cada día más en fomientar la cultura y el bienestar de las colonias do sus naturales, en elevar su nivel en d país de residisiiicia y on realizar, sin esipíritu de eapionaje, un estudio impardal y profundo, sobre el tarreno, de las cirx3unatancias de Ha nación on que ol embajador está aei"oditadO'. Esto es lo que justifica <á mantenimiento de embajadas numerosas y permancratas, que de oti^o miado, dada la facilidad y rapidez de las,comunicaciones, serían casi saiparfluas. El espíritu informativo do las rdacsones ds los antig u o s embajadores venecianos, transf oiniado con arreglo a procedimientos más cientíñoos, sin dar ofeesiva importancia al micrófono de la murmuración, pai^ece llamando a ser la norma de la nueva diplomada. Por eso la cuestión de elevar las legaciones a embajadas tiene ese aire tan 1815. Paa-oce una figura de rigodón de un baile de corte. ANDRENIO Muerte de m notaWe egiptólogo ' PARÍS 23 (11 n.). —Dicen de El Cairo que ha fallecido repentinamente, en I-uxor, durante un Viaje de estudies, el conservador de la sección egipcia del Museo del Louvre, M. Jorge Benedite. (Radio.) * * • Jorge-Áaron Benedite, arqueólogo y orientalista francés, nació en NÍmes el 10 de agosto de 1857. Estudió en París la carrera de Letras, y después de licenciarse se dedicó especialmente al estudio ele arqueología egipcia. En 1887 fué nombrado miembro de la Misión francesa en El Cairo, y a su regreso a Francia quedó agregado al departamento egipcio del Museo del Louvre. En 1895 fué nombrado conseivador de dicho daparta-" monto, en el que realizó una reorganización completa. Actualmente ocupaba ese puesto. Eiti, además, profesor del Colegio de Francia, miembro dol Instituto y caballero de la Legión de Honor. ' Deja escritas l a s siguientes obras: "Catalogue du Musée du Caire" (1908), "Cairo et ses environs» (1910), "Guido d'Egypte", "Un guerrier libycai.figurine egyptienne conservée au Museo du Louvre", "Une ncuvello roprcsentation d'Hoi-us, légionnairc", "La stele dite du roi Serpent", "Une nouvdle pelettc en schistc", "A propos d'un buste egyptien, acquis par le Musée du Louvre", etc. SIEMPRE ES UNA ECONOMÍA para no decirlo con Cemasiada crudeza) hay un motivo oculto que los convierte, de errores que eran, en expresiones inconscientes do una escondida verdad. ¿Qué verdad podrá esconderse entro las páginas de la Lista del Colegio de Abogados, que da eqiii-Tocadamente las seüMS de una oficina del Registro de la Propiedad de una ~ona do Madrid? •''a el interesado al número de la calle de Núñes de Balboa que la lista le dice. Se encuentra con un convento. Se extraña un poco; pero como en el mundo no hay nada imposible, se decide a preguntar V llama. Una voz femenina le contesta: —¡Viva Jesús! —¡Viva Jesús!—repite el interesado—. Dígame, hermana, icstá aquí la oficina del Registro do la Propiedad? La buena hermana tiene que apelar a toda su cristiana paciencia, a toda su humildad prohada, para no creer quo aquello es una burla, muchas veces repetida. ¡Si le dijeran que la culpa es del Colegio de Ahogados, por no corregir cuidadosamente las pruebas do su lista! PARISINAS La tragedia de Malvy "Yo no he sido jamás amante Un periodista francés, gran conocedor de las maquinaciones, de Mata-Hari. Es otro el minisde las conjuras y de toda habili- tro que la escribía. [Yo he sido dad de las que sirven a los hom- siempre un hombre honrado!" No pudo continuar. Descendió bres políticos para sus menesteres, hubo de decirme ayer, tsatis- trágicaniente las escaleras de la tribuna. Desplomóse sobre su esfecho de su advertencia: —No deje usted de asistir ma- caño. Se cubrió d rostro. Solloñana a la Cámara, El bloque na- zaba, "¡No puedo más! jNo puedo cional, que revive inopinadamente, va a acometer a Malvy de un más! ¡No veo!..." Y se desplomó modo terrible. Y como Malvy es como si un Vayo le hubiese herido de muG)-te. Todo el mundo so amigo de usted... puso en pie. Por nuestra parte, no Fué inútil que yo negase a mi amigo el periodista la amistad que quisir.ros dirigir la mirada hacia me atribuye. Yo no conozco a Mal- el Sr. Ibarnegaray. Pero suponevy. Ni a Malvy, ni a Caillaux, ni mos en su boca una ancha .sona ninguna de las víctimas meno- risa. « * « res de las crueles derechas de Mientras dos médicos rodeaban Francia. Yo he escrito sencillamente lo que me ha dictaSo mi en los pasillos a Malvy, inanimaconciencia. Y lo he escrito sin otro do, Briand, en la tribuna de la propósito que el de hacer llegar/iCámara, hizo revivir ante nu<; a mi país un rayo de luz de la tros ojos las terribles torturas da verdad. Sospecho que ni Caillaux Ku actual ministro. Todo el munni Malvy conocen mis comenta- do sabe del que es la corresponrios. Esto me llena de satisfac- dencia que recibía Mata-Hari. Peción. Es realmente inexplicable ro le cubre el respeto que impo' que un periodista francés no pe- ne la muerte. Nadie ignora taninetre el romanticismo d3 los es- poco que el plan de la batalla que los enemigos de Malvy decían quo pañoles... En resolución, esto importa hubo de entregar al enemigo se nada. Por mi parte, acepté con mu- halló sobre el cadáver de un sarcho gusto las indicaciones de mi gento. Pero iqué importan estas verdades al Sr. Ibarnegaray, adaamigo, Y estuve en d Congreso. Y EL SINDICATO CUIDARA iid intransigente y oportunista del * * * DE NO DIFICULTAR EL LI1 bloque nacional! Su verdadero Es posible que el espectáculo de triunfo es el cuei-po inanimado do BRE EJERCICIO DE LA MEDICINA ayer no tenga precedentes en la Malvy en los pnsillos de la CáBARCELONA 24 (3,80 t.). — historia del parlamentarismo. De mara. El gobernador civil entregó es- modo inexplicable se presentía alCuando el ministro abrió los ta mañana a los periodistas la si- go trágico, luospirábase en las tri- ojos estaba a su lado Herriot, d bunas con una extraña dificultad. hcnibre fuerte, quo puso .sus laguiente nota: "La Junta directiva dsl Cole- Un calor horrible congo-stionaba bios sobro las mejillas de Malvy, gio de Médicos, que es corpora- todas las cabezas. Desde el princión oficial, se ha ci'eído en el ca- cipio de la sesión o^iyoron los dar- Este volvió a desmayarse bajo so, en vista de ciertos rumores que dos de los mil ojos que conste- el fervor de aquel beso. Mientras, con respecto a la misma circula- laban la obscuridad de las tribu- en el salón do sesiones todos los ban, de visitar al gobernador papolíticos de buena voluntad se ra hacer constar que el Colegio nas sobre la faz de Malvy, de co- •igrnparon en tomo aV Gobierno. lor da muerto. B,tiand, sin abanconsidera que cumple con los fines Blum se dejó vencer por las e;MOque le están encomendados, y qiie donar s u s habituales actitudes cionca. siempre se ha inspirado en el más desdeñosas, mostrábase asimismo * *« puro afecto y adhesión a las ins- alterado. Herriot fruncía el ceño Por mi parte, he escrito esta tituciones y al fomento de io^s in- y cruzaba las manos sobre él vientereses de la nación, declarándo- tre en el alto sitial de la presi- doKordeníKla iftjpresión bajo el lo así en un documento fií-mado. dencia. eruirdecimifcuto de aquellos obscuro.s instantes, en un sórdido café El e:ccelentísimo señor goberEn este ambiente agitáronse las nador, después de estudiar la nodel bnlevar Sajnt-Gerraain, mienta y la situ,".ción del Colegio, aun furias políticas. Las derechas no LA NOTABLE BAILARINA YA NQUI GILDA GBAY iV." Vidal.) cuando contra él no se había ini- quieren resignarse a la continua- tras París acoge, emocionado y confuso, los ecos del toi-rible draciado procsdimiento alguno, esti- ción de Briand en el Poder, I/as ma político de esta noche, dcm.* mando en cuánto vakn las mani- derechas no renuncian a conscfestaciones anteriormente expre- gniir unas elecciones; es decir, a siado triste para Francia. He Vissadas, se ha dirigido al CJolcgio Kcmeter a Francia a los tumultos to pasar el auto que conduce al indicándole que, dados loa píbccp- peligrosos, en los que han de des- Congreso a la hija de Malvy, sxx tos terminantes de la Real oi-den oncadcnarsí-j todos los apasiona- secretaria. Va cucbicrta de una de 13 de marzo de 1924, existo trágica palidez. De ser yo a.mifTO una evidente infracción de los mientos. Pero las derechas son, al de su pad;x? me liubiera ptre:.:ío mismos quo es preciso corregir. fin, la representación de] imperia- a su disposición para abrirle otra Esta soberana disposición dispo- lismo, que no sabe ni quiere avene que no pueden entremezclarse nirse con la paz. Ei) las d<?irechas vez unos brazoa do España, De la con los colegios médicos otras en- están en contacto todos los polí- España que fué para su vida la tidades constituidas por profeso- ticos para los que las copqui.stas paz, el olvido y la dicha breve. OH res médicos, y en Barcelona r-e- de la República no importan naCEPEEINO . R. AVECILLA que viven confundidos c'l Co- da. Por una de esas contra<liccioLONDRES 22 (10 m.).—Acaba arrojadas al agua. Inmediatamen- sulta legio y el Sindicato Médico, pcf do regresar de Nueva Guinea ol te se ve cómo surgen los tiburo- cuVa causa el gobernador dispona? nes tan frocuontes en la historia Paris, 1926. de los pueblos, las derochas de doctor Jackson, que ha vivido du- nes de entre las olas, disputándoPrimero. Que en el plazo de Francia, tan bienquistas de la rante cinco años entro algunas se la presa. tribus salvajes de dicha región Mientras ésta desaparece, toda una semana ha do quedar deslin- reacción española, no ocultan, por la situación de ambas enti- su parte, una animadversión haoceánica. . la tribu entena un canto funeral. dada Ha manifestado que estas tri- Cuando el muerto ha sido arras- dades, no perteneciendo ningún cia España. Es preciso extender bus, que viven en el litoral y cerca trado por los tiburones al fondo individuo de la Junta dol Colegio entro nosotros esta paradójica verda unos grandes bancos de cora- del mar, la tribu se dedica a un a otra de cualquier entidad pro- dad. les, adoran a los tiburones, que baile extraño sobre, las arenas de fesional. Segundo. Que en el plazo de Nuestros amigos son los homson para ellas los verdaderos y la playa. un mes el Colegio Médico deberá bresr del cartel. Malvy — repitá- EL DICTAMEN MEDICO DEúnicos dioses. Estos tiburones son Creen los indígenas en cuestión tener local independiente. da un género especial, llamado moslo de nuevo—considera a Es- CLARA QUE EL ENVENENATercero. Que, a partir del día paña s-u segunda patria. Defen- MIENTO PARECE QUE SE HA "maselay", y abundan extraordi- que las almas de los muertos, una vez que los tiburones las libertan 1 de abril, la revista "Boletín del PRODUCIDO CON ACIDO ARnariamente entre los bancos de de los cuerpos que las encerraban, Colegio", deberá editarse c o m o der a Poincaré y a sus amigos, SENIOSO corales ya citados. que no ocultan su manosprecio hapublicación especial, s i n formar van a una caverna sagi-ada que se Todos los muertos son arroja- abre entre los corales. cia nosotros, es francanwmte abBARCELONA 24 (3,3C t.).-parte, como hasta ahora, del "Bodos al mar, y los tiburones se los L o s médicos. forensen doctores surdo. Sin la simpatía do Briand, letín del SindiAito", y con arreY cuando cambia la luna invollevan a las grutas submarinas. Bravo y Espadaler, después del glo a las disposiciones vigentes. nos sería muy difícil sostener en Estos entierros sumarios son pre- can a esas almas y les suplican En cumplimiento, pues, do esta la Sociedad de Naciones nuestra reconocimiñntt» que hicieron do cedidos de interesantísimas cere- se esfuercen por concederles pes- disposición, el Colegio de Médicos actual actitud. Pero las derechos D, Hugo Breisback, han emitido cas abundantes y buenas cosemonias. gozará de la representación oficial de nuestro país se producen como dictanKMi afirmando que el enferCuando muere alguien de la tri- chas. mo continúa en el mismo estado que le reconoce el reglamento orEl doctor Jackson intentó con- gánico, con las facultados que el las de Francia y como las de to- y que los síntomas que presenta bu, cuatro ancianos lo envuelven en sus ropas y lo colocan en unas vencer a los indígenas de que su mismo le atribuye y le ratifica la do el mundo, en un total monos- la enfermedad son idénticos a los andas hechas con ramas y hojas religión es absurda; pero ellos Real orden de 13 de marzo de procio de los intereses patrióticos. que observaron en la esposa de Para las derechas no hay más que D, Hugo, doña Dolor-cs Pigarola. montaron on cólera y le amena- 1B24. de cocotero. Agregan en el informe que d Toda la tribu maixba detrás del zaron con matarlo y arrojarlo a El Sindicato de Médicos puede política, en la más vil interpretnagente causante de la dolencia cadáver. Una vez que la comitiva los tiburones. En vi.sta de ello, el continuar subsistiendo como Aso- ción de la palabra. puede ser, y parece serlo, ácido llega a la orilla dol mar, uno de doctor Jackson decidió callarie. ciación puramente particular, y * * * arsenioso. los ancianos llama a grandes voEl gobernador inglés de Nueva en razón a este carácter carecerá El Sr, Ibarnegaray, diputado El dictrin^en médico termina <líces al tiburón que por clasiñea- Guinea va a enviar una expedición en absoluto de atribuciones, comción corresponde al muerto, y le para que estudie las costumbres petencia y fuerza alguna para que el bloque nacional dedica or- cicndo que, aun, cuando el estado ruega que se lo lleve al fondo del de estos salvajes adoradores de adoptar acuerdos ni circular ór- dinariamente a promover violen- de I), Hugo c-s grave,' puede ser océano. Como el tiburón no acude, los tiburones y procure civilizar- denes que afecten a la clase mé- cias y sinrazones, fué el encarga- trasladatlo el enfermo a la casa dica, cuidando de no dificultar lo do en esta sesión mpmorable de del parieiite que le ha reclamado las andas, con el cadáver, son los. más mínimo el libre ejercicio de para atenderle. los señores médicos, pertenezcan pedir cuentas a Briartd por haber Este dictamen ha sido emitido escogido a Malvy como ministro o no a su Asociación, y sufrirá, a petición del juez que instruyo el caso contrario, la sanción que co- dol Interior, En realidad, el as- sumario. (Fcbus.) rresponda." pecto del Sr. Ibarnegaray agrava mucho sus violencias y s u s intemperancias. Tiene una voz desagradabilísima. Emplea unas actitudes impertinentes. No razona. belleza cristiana con todos sus Ese Verlaine... Injuria, quQ le es más fácil. Cuanmisterios de amor y de sacrifiEse Verlaine parecía una cosa cio", se los traduce. Es decir, que do acumulaba viejas acusaciones y va a ser otra. Gracias a Dios, pasan al castellano por obra de sobre Malvy ftacíalo con un insoacabamos de descubrirlo. lian pa- quien tiene en su lira "frecuentes lento regocijo. ERA EL JEFE DE LA BANDA sado muchos años desdo quo se y armoniosas vibraciones, dignas QUE ASALTO LA SUCURSAL Malvy, a medio desmayar en su murió. Se ha hablado un poquito de un procer por cuyas venas coescaño, pasábase la mano d^estl^a DEL BANCO DE ESPAÑA EN de él, aunque no todos Iiayan oído rre la sangre de ki vieja aristoRIGA 23 (7 t.),—Ha comenzado por la frente y miraba al cielo. GIJON su nombre. Pero nosotros no le cracia castellana". con gran entusiasmo en Estonia La ensangrentada sombra de Maconocíamos. Por lo menos, anoche GIJON 23 ( U n,).—Llega noEse Verlaine... Ni castellano, ni se habla de él en un periódico, aristócrata;'ni nada. ¿Cómo escri- la campaña electoral. Nada mono.? ta-Hari cruzó otra vez el hemici- ticia de haber sido detenido en que 114 partidos, con sus corixisgracias a que un aristócrata se biría sus versos? Por equivocaclo, como si hubiese llegado el día Burdeos, por asalto a una fábrica ha lanzado a traducirle: "Las dos ción, por equivocación. Ahora van pondientes programas políticos y, de la resurrección de la carne. de muebles do dicha ciudad (delieconómicos, aspiran a ocupar puestraducciones de Verlaine, desco- adonde debían ir: a la verdadera Tan ci-ud, tan injusta y tan in- to por d cual fueron i'ecienterneiinocidas hasta ahora, nos revelan piedad, a la aristocracia, lejos de tos en d Parlamento, El número de candidatos es de 2,256 para sincera era la actitud del señor te guillotinados dos españoles), el verdadero fondo de aquel po- la bohemia y del vino. ¡Y pe-nsar Durruti, jefe de la bancieu puestos. Ibarnegaray, que en el fondo do Francisco bre poeta a quien llaman "padre" que podían haber seguido tan desda de pistoleros que en 1 de sepDado el gran número de los todos los corazones, con la sola tiembre de 1923 asaltó la sufiir-sal los adoradores de la bohemia y del conocidas como hasta ahora las pai-tidos que luchan, el Gobierno excepción de los de las derechas, del Banco de España cu Gijón y alcohol." poesías detVerlaine si el conde no de Estonia pretende que cada uno alzóse una ola . de simpatía quo mató a tiros al dirixtor, 1). Luis Verlaine, era un desconocido, un las traduce! rie olios deposito la cantidaíl de 30 sobre sus lomos llevaba a Malvy. Azcárate, amigo de la mala vida, un adverlibnas esterlinas, que d Estado sario de la ley seca. Pero resulta Rodeado de un, silencio impoLa lista errada El Durriti estuvo también en confiscará si el pai-tido no logra, que hizo versos religiosos, y que nente, subió el ministro a la tri- La HabaíMi, donde asaltó oti'o por lo menos, dos puestos csi. la Según las modernas teorías, en un conde, nada menos, poeta de braaa, S a W jBvijr poco. Dijo: Banco. ^ , los qu& "saben sentir, y ca/nta/K íá todos los errores (o en casi todos. Cámara, iliSnaÉr de Barcelona dispone el áesllDde del Colegio y e! Sindicato Médico M r e los salvajes É Nüm GEíoea apuros ctor La supuesta envenenadora de SUS padres La ^ceiía de las burlas 2.256 candidatos as piran a sentarse en Cámara estonia EL.—Y menos mal que esta maldita pierna me anuüjcia cuándo va a hacer buen o mal tiempo, que si no tendríamos que comprar un barómetro. Año VIL—Núm. 1.693 24 de marzo de 1926 Precio: 10 céntimos El pistolero Dnrriti, detenido en Burdeos