Manuel María Gutiérrez Flores Nace en 1829 en Heredia, Costa Rica Muere en 1887 el 25 de diciembre en San José. Es el autor de la música del Himno Nacional de Costa Rica, cuya primera ejecución se dio a las doce del día del 11 de junio de 1852, cuando el Presidente Juan Rafael Mora Porras recibía a las delegaciones de Los Estados Unidos y Gran Bretaña. Manuel María Gutiérrez además de músico y compositor era militar, veterano de la Campaña de 1856, habiendo llegado al ostentar el grado de Capitán del Ejército de la República. Inicios de su carrera Desde muy pequeño llamaba la atención por su habilidad para ejecutar el violín. Cuando su tío político Damián Dávila abrió una escuela en 1836, Manuel María fue su alumno. El 13 de mayo de 1842 entra como flautín en el Cuartel Principal de San José y después de la caída de Morazán, se le nombró como tambor en Heredia. En la Semana Santa de 1843 desobedeció la orden de tocar y por ello fue arrestado ocho días, con lo que se perfilaba desde entonces su carácter rebelde y un tanto violento. El 1 de enero de 1846 fue designado como Director General de Bandas el maestro José Martínez, de quien habría de ser discípulo. El 1 de setiembre de ese mismo año, se le designa como Sargento primero de la Banda del Regimiento de Heredia y Tambor Mayor veterano. Este último título equivalía a ser el Director de la Banda, cuando tiene solamente diecisiete años de edad. En sus funciones militares, participó activamente para suprimir los levantamientos contra el Gobierno 1847 y 1848, encabezados por los hermanos José María y Florentino Alfaro el primero, y por Juan Alfaro Ruiz, el segundo. De previo a su fallecimiento, el maestro José Martínez lo recomendó para el cargo de Director General de Bandas, en el cual fue nombrado el 22 de marzo de 1852, a unos pocos días del fallecimiento de su maestro. Entorno que rodeaba la confección del Himno Nacional. En estos años, se planeaba construir un canal de navegación interoceánico a través de Nicaragua. Existía un claro interés de Estados Unidos y de Gran Bretaña, que podía desembocar en un conflicto, sumado al interés por los británicos sobre los territorios de la Costa de Mosquitos y finalmente que no estaban bien definidos los límites entre Costa Rica y Nicaragua. En una primera instancia, Estados Unidos y Gran Bretaña se reunieron en Washington el 30 de abril de 1852 y redactaron las proposiciones Webster-Crampton, que definían aspectos limítrofes entre Costa Rica y Nicaragua. Se designó como encargados de comunicar esos acuerdos a los países afectados, a los señores Charles L. Wyke, Cónsul General de Gran Bretaña y Robert M. Walsh, representante de Estados Unidos, quienes llegaron a San José el 6 de junio y el presidente Juan Rafael Mora Porras designó para recibirlos el día 11 siguiente. Dentro de los preparativos para la presentación de las credenciales, se determinó que no había Himno Nacional que interpretar y el presidente encargó a Manuel María Gutiérrez su composición, la que se habría dado en apenas una noche. Finalmente, el Himno Nacional de Costa Rica se ejecutó por primera vez el 11 de junio de 1852. La Campaña de 1856 El 27 de junio de 1853, el presidente Mora Porras le concedió el grado de «Teniente de las Milicias Nacionales», en consideración a los grandes servicios prestados a la Patria. Para esa misma fecha se le recarga el puesto de Director de la Banda militar de San José. Con ocasión de la inauguración de la nueva sede de la Casa Presidencial, en 1855, compuso el vals «El Palacio» que fue de gran popularidad en la época, de un estilo romanticista y del cual no ha quedado actualmente ninguna partitura para conocerlo. Al finalizar el año de 1855 se inicia una gran movilización nacional para contrarrestar el avance de William Walker en Nicaragua y a principios de 1856 forma parte de la movilización militar que parte de Liberia hacia la Hacienda Santa Rosa, de donde se expulsa a los filibusteros. Esa primera victoria lo motiva a escribir su también famosa «Marcha Santa Rosa», alrededor de la cual se ha generado una leyenda donde se cuenta que Manuel María Gutiérrez estaba escribiendo la marcha sobre una piedra, a la sombra de un árbol y de repente escuchó pasos de caballería, por lo que se subió al árbol y allí permaneció oculto hasta que pasaron de lado los jinetes. MELENDEZ CHAVEERI (ver bibliografia), discrepa de la veracidad de esta historia y por el contrario, señala que se ha establecido una cierta similitud entre esta marcha y la «Marcha de Cádiz», compuesta en 1820 en España, con ocasión de la marcha de Rafael de Riego para obligar a Fernando VII a restablecer la vigencia de la constitución. Tras la jornada de Santa Rosa, las tropas costarricenses se posicionaron en la ciudad de Rivas el 8 de abril. El 11 de abril los filibusteros hicieron una avanzada dentro de la ciudad para apoderarse de puestos claves y poco a poco se atrincheraron en un mesón al oeste de la plaza. El presidente Mora ordenó que los desalojaran de ese lugar, para lo cual hubo incluso intentos de incendiarlo, en los cuales fue protagonista el héroe nacional de Costa Rica, Juan Santamaría. Considerando la resistencia del enemigo, el Estado Mayor de Costa Rica decidió pedir los refuerzos del Teniente Coronel Juan Alfaro Ruiz, que estaba en La Virgen, pero las principales vías de escape estaban bloqueadas por las fuerzas de Walker. La misión se encomendó al Teniente Manuel María Gutiérrez, quien montó el caballo de lado para protegerse de las balas y concluyó con éxito la misión para pedir refuerzos, los cuales inclinaron las fuerzas a favor de Costa Rica y se consiguió el éxito en la batalla. Se le otorgó una medalla de reconocimiento por esos hechos. Literatura consultada S.a. (2008). Manuel María Gutiérrez Flores. [en línea] : http://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Mar%C3%ADa_Guti%C3%A9rrez_Fl ores Meléndez Chaverri, Carlos (1994). Manuel María Gutiérrez, 2a. ed., San José, Costa Rica: Ed. UNED, 132 p. Fotografía tomada de: http://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:Manuel_Mar%C3%ADa_Guti%C3%A 9rrez_Flores_(1829-1887).jpg