COMPETENCIAS EN LA ETAPA PRIMARIA Y EVALUACIÓN Teresa

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COMPETENCIAS EN LA ETAPA PRIMARIA Y EVALUACIÓN
Teresa Lleixà Arribas
Universidad de Barcelona
Resumen
La presente ponencia profundiza en el debate de cómo debe ser la evaluación en un currículum
competencial, estableciendo características y descriptores para la evaluación de competencias en
educación física en la etapa de primaria. A título de marco teórico, se reflexiona sobre la evolución que
está siguiendo el currículo para definirse como competencial y sobre las necesidades que justifican tal
evolución. A partir de aquí, se intenta dar pautas para comprender el alcance de las competencias en
Educación Física en la enseñanza primaria. Finalmente, a partir de un estudio realizado en el
Departamento de DEMC de la Universidad de Barcelona se definen las características, contextos y
descriptores para la evaluación de competencias en Educación Física. Así aparecerán como condiciones
necesarias para una buena evaluación de competencias aspectos como que permitan la integración y
transferencia de aprendizajes. Así mismo, los contextos que permitan establecer una única situación para
evaluar competencias y no situaciones sucesivas serán los más adecuados. Finalmente, indicar que en la
evaluación de competencias es imprescindible tener en cuenta la estabilidad de la respuesta y la
oportunidad de aplicarla a contextos diferentes.
Palabras clave: Competencias, evaluación, educación física, enseñanza primaria.
I.- El currículum competencial una necesidad sentida
Los términos competencia y competencia motriz han sido utilizados, en el mundo educativo, en diversas
épocas y con connotaciones distintas. Por ejemplo, la competencia era un término al que se referían,
habitualmente, los conductistas en los años setenta. En la última década, ha reaparecido con fuerza en el
contexto europeo con un significado diferente. (Pérez Gómez, A, 2008, 59). Si en otras época se hacía
énfasis en el comportamiento observable de la competencia, en los nuevos modelos curriculares se hace
hincapié en que responda a una movilización de habilidades prácticas, conocimientos, motivación, valores
éticos, actitudes, emociones y otros componentes sociales y de comportamiento para lograr una acción
eficaz (Comisión Europea, 2004; OCDE, 2005; Rychen, D. Y Hersh, L., 2006, Marco, B. 2007,
Escamilla, A. , 2008).
Es coherente que sea así ya que, en el momento presente, somos cada vez más conscientes de la
complejidad del mundo actual versátil, globalizado, tecnológico y, sobre todo imprevisible, que requiere
el manejo de todas las capacidades para dar respuesta a situaciones que se dan en contextos cambiantes.
En las últimas décadas, el diseño del currículo ha fluctuado entre el predominio de los contenidos, es
decir, la selección de saberes propios de cada materia, y la primacía de los objetivos, es decir, las
capacidades que el alumnado debe desarrollar. Lo que marca la diferencia en el nuevo currículum
competencial es una cuestión de perspectiva, puesto que al determinar una competencia debemos tener
una visión más amplia que tenga en cuenta el manejo de estos saberes y de estas capacidades, para actuar
sobre diferentes contextos.
II.- La educación física en un currículum competencial
El diseño del currículum por competencias tiene como base ideológica diferentes estudios encargados en
el contexto europeo como es el caso del informe Delors (1996) o los trabajos de Morin (2001). Para
entender en profundidad, el papel de la Educación Física en el nuevo currículum competencial debemos
recurrir a la identificación de competencias educativas de la OCDE y de la Unión Europea. La OCDE
promueve un programa de Definición y Selección de Competencias en cuyo Resumen Ejecutivo (2005),
establece las siguientes tres competencias:

Usar herramientas de forma interactiva (lenguaje, conocimiento, tecnología)

Interactuar en grupos heterogéneos

Actuar de forma autónoma
La Unión Europea con una mirada más dirigida a la realidad escolar del momento, las transforma en ocho
competencias de carácter más disciplinar, posiblemente como indica Pérez Gómez, A. (2009) por temor a
una gran ruptura con la estructura escolar actual. En este proceso de ―disciplinarización‖ de las
competencias, la Educación Física ha sido obviada y la competencia motriz no se ha considerado como
una de las competencias básicas, quizá por sus pocas posibilidades —o la poca tradición — de ser
desarrollada interdisciplinariamente. Aun así diferentes autores reclaman su presencia como competencia
básica, apoyándose en las inteligencias definidas por Gardner (Hernández Alvarez, J.L. y Martínez de
Aro, V., 2008) En este conexto ha sido realzado el papel de la educación física en la contribución a la
adquisición de las competencias básicas (Lleixà, 2007).
La competencia motriz queda pues como competencia específica del área de educación física. Resulta
difícil, sobre todo en la enseñanza obligatoria, separar las competencias específicas de un área, es decir
las que se desprenden directamente de su propia identidad como área educativa, de las competencias
básicas. Aun así, es posible identificar una serie de aprendizajes que deben darse en el marco de la
Educación Física, que deben poder ser utilizados por la totalidad del alumnado, en diferentes contextos y
que deben ser funcionales para la vida y la convivencia. En concreto, podríamos hablar de:

La gestión del propio cuerpo y el movimiento

La expresión y comunicación corporal

La práctica de la actividad física saludable

La interacción social a través de la actividad física
Estas son las competencias que hemos identificado, en nuestro grupo de trabajo Arie 20081, para intentar
establecer unos estándares de evaluación para la enseñanza primaria.
1 2008ARIE00049- Estudi i anàlisis de la competència motriu en els escolars de primària i la
seva relació amb la condició física -salut, comportaments saludables iparticipació en l'esport.
III.- Características, contextos y descriptores para la evaluación de competencias. El caso de la
Educación Física en primaria.
Una consecuencia lógica del nuevo planteamiento curricular competencial será, sin duda, la modificación
de las formas, momentos y estrategias evaluadoras en coherencia con el planteamiento de desarrollo de
competencias. Si tenemos en cuenta, por tanto, que las estrategias de evaluación deben estar en
consonancia con los propósitos de la enseñanza y con el proceso de aprendizaje, el sistema de evaluación
de competencias requerirá establecer criterios claros que tengan en consideración conocimientos,
habilidades y actitudes. Además, los aprendizajes deberán evaluarse aplicados a un determinado contexto,
sin que ello signifique restringir el conocimiento sino mostrar la capacidad del estudiante de aplicar el
conocimiento a una situación concreta. Las principales características que debe presentar la evaluación
por competencias hacen referencia al diseño, a los instrumentos y contextos y a los criterios.
Diseño
El diseño de la evaluación debe ser consensuado entre los equipos de profesores y también con los
alumnos. Esto es evidente por el carácter interdisicplinar de las competencias.
Instrumentos
Los instrumentos comportan situaciones que permiten la integración y transferencia de aprendizajes.
Deben, por tanto, ir más allá de la evaluación de habilidades. Deben permitir valorar como el alumnado
maneja sus capacidades. La evaluación de competencias debería poder mostrar en qué medida el
estudiante es capaz de resolver de forma eficiente una situación problemática en un contexto determinado.
Lo verdaderamente interesante es la capacidad de aprender a aprender y los procesos de autorregulación
para la mejora continua de las competencias a lo largo de toda la vida.
Los instrumentos para la evaluación de competencias deben permitir a los estudiantes que tomen
conciencia del proceso y que sientan satisfacción. En este sentido toman especial importancia los
mecanismos de feed-back y de autorregulación de los procesos de aprendizaje. Las experiencias que
aseguren que los estudiantes tomen buena conciencia de sus puntos fuertes y débiles y emprendan
acciones para potenciar los primeros y mejorar los segundos serán exponentes de una buena práctica
evaluativa. Con ello la autoevaluación se convierte en un requerimiento imprescindible.
Potenciar el aprendizaje entre iguales abre también la puerta a la coevaluación.
Contextos
No podemos utilizar en la enseñanza-aprendizaje actividades complejas que implique el uso de múltiples
capacidades, incluso multidisciplinares y que resuelvan situaciones problemáticas y después evaluarlos
solicitando que reproduzcan habilidades que han estado automatizando (Mateo, 2004). Por tanto, hemos
de reflexionar sobre el uso que hacemos de las pruebas tradicionales y seleccionar aquellas que más se
acerquen a la idea competencial. También debemos ser capaces de introducir nuevos tipos de pruebas
acordes con que esta idea, es decir, pruebas en que el alumnado coloque sus aprendizajes en un contexto
cercano a la realidad y que no aplique este aprendizaje de forma aislada sino que sea capaz de combinar
diferentes aprendizajes para dar respuesta a la situación problemática.
En la evaluación de competencias es imprescindible tener en cuenta la estabilidad de la respuesta y la
oportunidad de aplicarla a contextos diferentes
Contextos que permitan establecer una única situación para evaluar competencias y no situaciones
sucesivas serán los más adecuados.
IV.- ¿Cómo evaluamos competencias en Educación Física?
La misma complejidad de la competencia, dada por sus numerosas dimensiones y la interrelación entre
ellas, hace que la competencia no pueda ser observada directamente. La competencia se infiere del
desempeño del alumnado ante determinadas situaciones. Es por ello que se nos hace necesario establecer
unos descriptores. Los descriptores son partes de la competencia, pero la competencia no es una suma de
descriptores, sino la capacidad de manejo de estos descriptores.
Esta forma de evaluar está poco resuelta en Educación Física. Como ya he indicado anteriormente,
nuestro grupo de trabajo, Arie 2008, identificó cuatro competencias propias de la Educación Física,
basándose en el Currículum de Enseñanza Primaria de Cataluña. A partir de aquí establecimos unas
situaciones de evaluación que tuvieran sentido por si mismas y que permitieran manejar una serie de
capacidades para su resolución. Aunque cada una de estas situaciones evalúa prioritariamente una de las
competencias, se dan también relaciones con otras competencias, tal como queda de manifiesto en el
siguiente cuadro.
Cuadro 1. Relación competencias con actividades de evaluación
COMPETENCIAS
ACTIVIDADES DE EVALUACIÓN
Gestionar
el
propio
cuerpo
y
movimiento en situaciones de actividad
física y en la vida cotidiana.
Circuito de habilidades, resolviendo
problemas motores, generados por
materiales
y
objetos.
Estación
cooperativa de salto.
Poner en práctica hábitos de actividad
física saludable.
Realización de una carrera continua,
valorando los resultados en función de
sus posibilidades sentidas y de su
proyecto personal.
Interactuar proactiva y positivamente en
las actividades físicas
Realización de un juego colectivo – ―los
diez pases‖.
Expresarse y comunicarse a través del
cuerpo y el movimiento.
Expresión de ideas, objetos y acciones a
partir de un listado de términos.
Para cada una de las actividades de evaluación se han establecido una serie de descriptores
que pueden ser valorados de forma cuantitativa y/o cualitativa.
Con la aplicación de estas actividades de evaluación en las escuelas se ha pretendido:
 Verificar la viabilidad de la propuesta
Los maestros han dado respuesta a un cuestionario sobre la adecuación de la prueba, sobre
sus posibilidades, sus inconvenientes y nuevas sugerencias.
 Establecer unos estándares de respuesta en el conjunto de la población escolar de
primaria.
Las actividades de evaluación han sido aplicadas en cuatro escuelas a modo de pilotaje. La
verificación de la viabilidad ha permitido modificar los protocolos de alguna de las
actividades. La aplicación de las actividades en una muestra significativa permitirá
establecer los estándares.
Conclusiones
La reflexión y el debate en torno a la evaluación de la Educación Física en un currículum
competencial ha conducido a la determinación de las características que deberían tener las
actividades evaluativas. Así aparecen como condiciones necesarias para una buena
evaluación de competencias aspectos tales como que permitan la integración y transferencia
de aprendizajes. Así mismo, los contextos que permitan establecer una única situación para
evaluar competencias y no situaciones sucesivas serán los más adecuados. Finalmente,
indicar que en la evaluación de competencias es imprescindible tener en cuenta la
estabilidad de la respuesta y la oportunidad de aplicarla a contextos diferentes. Las pruebas
de evaluación diseñadas y pilotadas en el contexto de la investigación Arie 2008 ha
supuesto un primer paso en la adecuación de la evaluación en Educación Física a las nuevas
exigencias del currículum competencial. Nuevas investigaciones en esta línea permitirán
seguir avanzando en este cometido.
BIBLIOGRAFÍA
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UNESCO/Santillana.
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11. Rychen, D. Y Hersh, L.(comp.) (2006): Las competencias clave para el bienestar
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12. Zabala, A. (2007). Como aprender y enseñar competencias: 11 ideas clave.
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