ANATOMÍA DEL OÍDO INTERNO Se encuentra situado en el interior del peñasco del temporal, por dentro de la caja del tímpano. Por la complejidad de su forma y estructura se llama laberinto ; distinguiéndose un laberinto óseo, constituido por una serie de espacios excavados en el hueso y en comunicación unos con otros, y un laberinto membranoso, formado por unas estructuras membranosas alojadas dentro del laberinto óseo. -Laberinto membranoso. 1: Caracol membranoso. 2: Sáculo. 3: Utrículo. 4: Conductos semicirculares. 5: Saco endolinfático. El laberinto está ocupado por líquidos o linfas. Las estructuras del laberinto membranoso están llenas de endolinfa. El laberinto membranoso ocupa solo una parte de la cavidad del óseo, existiendo entre ambos un espacio que por estar repleto de perilinfa se llama espacio perilinfático. El oído interno es la parte esencial del órgano de la audición, en el laberinto anterior (coclea o caracol) y es donde se produce la transformación de la onda sonora (energía mecánica) en impulsos nerviosos (energía eléctrica), y en él se realiza el análisis de los sonidos. También en el oído interno, exactamente en el laberinto posterior (conductos semicirculares, utrículo uy sáculo), se aloja el órgano periférico del sentido del equilibrio. EL LABERINTO ÓSEO.Está formado por tres partes: 1. Vestíbulo 2. Conductos o canales semicirculares 3. Caracol óseo. Las dos primeras constituyen el llamado laberinto posterior, y la tercera constituye el laberinto anterior. 1.- El vestíbulo Es una cavidad ovoidea de unos 4 mm de diámetro con 6 paredes: Pared externa, se relaciona con la caja del tímpano y en ella se encuentran la ventana redonda y la ventana oval. Pared interna Paredes posterior y superior donde se encuentran los orificios de entrada a los conductos semicirculares Pared anterior donde se comunica la rampa vesicular de la cóclea Pared inferior. 2.- Los conductos semicirculares Son tres estructuras cilíndricas situadas en los tres planos del espacio. El conducto semicircular superior es vertical y perpendicular al eje del peñasco. El conducto semicircular posterior es vertical y paralelo al eje del peñasco. El conducto semicircular horizontal o externo forma un ángulo de 25º con la horizontal, por lo que si queremos que esté completamente horizontal deberemos inclinar la cabeza hacia delante. 3.-La cóclea o caracol Su nombre hace referencia a la forma que presenta. En la cóclea ósea distinguimos tres porciones: 1. Columela, modiolo o eje del caracol, está atravesada por unos conductillos de la base a la punta, mostrando un conjunto de perforaciones organizada en espiral, criba espiroidea. 2. Lámina de los contornos o tubo del caracol, que da dos vueltas y media al rededor de la columela. La primera espira da lugar al promontorio. 3. Lámina espiral, que divide al caracol en dos pisos o rampas, uno superior y otro inferior, vestíbulo y cavidad subvestibular respectivamente. Al final de la lámina espiral se encuentra el helicotrema, que une los dos pisos descritos. Estos pisos también llamados rampas desembocan respectivamente en la ventana oval y la ventana redonda. El conducto auditivo interno, tiene 1 cm de longitud y un calibre de 0,5 cm. Por su interior discurren los pares craneales VIII y VII y el nervio intermediario de Wrisberg. El fondo del conducto está dividido en cuatro cuadrantes, el antero-superior lleva al nervio facial y el intermediario de WRISBERG, el antero-inferior el nervio coclear, el posterior-superior el nervio utricular y los nervios ampulares de los canales semicirculares superior y horizontal, y el postero-inferior el nervio sacular.