Ética para Amador. Neiby Paulina Rocha Carrillo. LNA0C Reporte de Lectura “ No le preguntes a nadie que debes de hacer con tu vida: pregúntatelo a ti mismo.” – Fernando Savater Este libro no es un manual de ética para las personas, no contiene información sobre los más destacados autores y más importantes movimientos de la teoría moral a lo largo de la historia. Este libro no es más que eso, solo un libro, personal y subjetivo como la relación que une a un padre con su hijo; pero por eso mismo es universal como la relación de padre e hijo la más común de todas. Difícil decir que Ética para amador es un libro donde nos habla de cómo a veces tenemos la respuesta para muchas preguntas pero por el momento o la situación no las decimos para no confundir mas a la otra persona y no porque este equivoca nuestra respuesta si no porque simple y sencillamente no es el lugar. De la relación que se tiene entre un padre un hijo que en si es una relación con mucha confianza pero que aun con eso nos cuesta decir cosas que a otra persona se las pudiéramos decir mas fácilmente y sin complicarnos tanto. Únicamente pretende transmitirle el a r t e d e v i v i r l a b u e n a v i d a , e l s e c r e t o d e s a b e r e l e g i r e l b i e n y e l mal, eso que el llama ética y libertad. Planteando muchas preguntas intenta llegar al fondo de ellas sin que eso implique dar una respuesta concreta o un recetario exacto de como es que se debe vivir, pues su intenció n e s s olo la de dar las herramientas necesarias para que cada individuo, con su propio criterio e inteligencia, logre decidir el camino por el cual conducir a su vida. I.- Ética De entre todas las cosas que pueden formar nuestro saber, existen unas básicas como lo es el saber que cosas son convenientes (llamadas mas común como buenas) y cuales inconvenientes (llamadas mas común como malas) Cuando se presentan ambigüedades, es cuando comienzan las dificultades del saber vivir y entra en juego la libertad. Los animales por ejemplo, por estar programados por la naturaleza, conocen una sola forma de comportamiento para cada situación. Los seres humanos, aunque en cierta medida estamos también programados por fidelidades que nos son inculcadas desde la cuna, somos seres imprevisibles, pues tenemos una serie de alternativas para resolver situación que se nos presentan día con día en nuestro proceder que aunque en ocasiones resulten raras, muy pocas veces son imposibles. La libertad nos permite elegir, inventar e incluso equivocarnos. Dos importantes aclaraciones al respecto es que No s o m o s l i b r e s d e e l e g i r l o q u e n o s pasa, sino de responder a ello d e u n m o d o u o t r o ; y q u e e l s e r l i b r e s p a r a i n t e n t a r a l g o n o t i e n e relación alguna con lograrlo, pues en ocasiones mezclamos libertad con omnipotencia y es entonces que intentamos elegir dentro de lo imposible. Lo importante es encontrar nuestro propio arte de vivir que nos permita acertar, y eso es la ética. II. OR D E N E S C O S T U M B R E S Y C A P R I C H O S Un motivo es la explicació n p r o p i a m ás aceptable acerca de tu conducta. Dentro de los motivos existen las órdenes, las costumbres y los caprichos, que no hacen mas que inclinar la conduct a y preferencias. Las ordenes y las costumbres, cuya fuerza es el miedo y la comodidad respectivamente, son impuestas por factores externos, mientras que los caprichos surgen del interior de cada quien. Respecto a las primeras es recomendable establecer hasta que punto pueden ser obedecidas y de las segundas, saber que sirven exclusivamente para aspectos de rutina. I I I . H AZ LO QUE QUIERAS L a l i b e r t a d n o e s s olo decidir sino darse cuenta que s e e s t á d e cidiendo. Por ello so l o e s v alida cuando se ha pensado dos veces: con la primera se descubre el motivo y con la segunda se cuestión a el mismo. Nunca una acció n e s b u e n a s o l o p o r s e r u n a o r d e n , u n a costumbre o un capricho A veces con eso basta, pero casi siempre se necesita del razonamiento para determinar si es o no conveniente algo. Todo esto forma parte de inventar nuestra propia vida y no vivir de a acuerdo a lo que los otros inventan por nosotros. Moral son aquellas reglas o normas que consideramos validas, mientras que la ética se encarga de cuestionar por que lo son. Hay cosas buenas y malas que nada tiene que ver con la moral y de las cuales conocemos concretamente su utilidad; tratándose de seres humanos, sin embargo, resulta difícil esta clasificación, pues ignoramos para que sirvan. Lo ú n i c o q u e s e s a b e e s q u e l a é t i c a s e b a s a e n u n a f r a s e : H a z l o q u e quieras. I V . D ATE LA BUENA VIDA Haz lo que quieras es abandonar lo que nos rige desde el exterior y enfocarse a lo que la propia voluntad reclama desde el fuero interno. La misma contradicción que hay en Haz lo que quieras (que así como abre una infinita gama de posibilidades puede reducirla a una elección e n t r e d o s ) , s e p r e s e n t a en la libertad, pues no somos libres de elegirla o n o , s i n o q u e e s t a m o s c o n d e n a d o s a l a l i b e r t a d , c o m o afirmo Jean Paul Sartre. Para no reducir la frase a un simple capricho, es importante establecer prioridades entre los deseos repentinos ya aquellos a largo plazo. La ética es alcanzar la buena vida humana, q u e es la que incluye relaciones con otros seres humanos, no acosta de ellos. Todos tenemos una realidad biológ i c a p e r o , p a r a llegar a ser hombres, se necesita de otros que fundamenten nuestra realidad cultural mediante enseñanzas. La base de nuestra cultura es el lenguaje, por lo que hablar y escuchar a alguien, es tratarlo como persona. Es un proceso reciproco igual que la humanización, pues darse la buena vida es al final igual que dar la buena vida. V . D ESPIERTA BABY ! No tener perspectiva de conjunto es simplificar, el dinero e incluso la muerte es simplificar. La vida en cambio es complejidad y complicacione. Lo que poseemos nos posee y pasamos la vida creyendo que atesorar cosas es vivir, y no reparamos en pensar q u e d e l a s c o s a s s olo salen cosas. Como humanos necesitamos una complicidad fundamental que solo se da entre iguales. Las traiciones y los abusos se dan, pero convertir a los demás en cosas es la forma incorrecta de defender el derecho propio a no ser tratado como tal. Ya que ninguna buena vida puede ser sin cosas, es básica la atención, es decir, la reflexio n a c e r c a d e l s e n t i d o d e e s a b u e n a v i d a . C o m o condición ética principal esta no tomar la certeza de la muerte como un pretexto para vivir de cualquier modo, sino intentar comprender a cada momento de que esta tratando la vida y como se la hace buena para uno, no para los demás, pues nadie puede ser libre por ti. VI. APARECE PEPITO GRILLITO Imbé c i l e s a q u e l c u y o c a r á c t e r e s d ébil, y nuestra obligació n e s evitar serlo. Hay quienes creen que no quieren nada y todo les da igual, otros que lo quieren todo a la vez y caen en prop ias contradicciones, otros que no saben lo que quieren ni intentan averiguarlo, algunos tienen una voluntad muy dé b i l o , e n e l c a s o contrario, muy fuerte y no distinguen la irrealidad. Si se es imbécil, se necesita de fuerzas exteriores en que apoyarse y con dificultad se llega a la buena vida. Lo contrario de ser imbécil es tener conciencia, para lo cual se requiere de cualidades innatas. Después del mínimo d e condiciones sociales y económicas adecuadas, la conciencia depende d e la atención y esfuerzo de cada individuo. Debe haber interés por vivir humanamente bien, concordancia entre actos y deseos, desarrollar el gusto moral y enfrentar la responsabilidad. Un autentico egoísta es quien quiere y busca lo mejor para sí mismo. Aquel que se rodea de lo que le sienta mal es un imbécil que deseaba ser egoísta. La culpa y la responsabilidad también se relacionan con la conciencia