Autor: Paola Lorena Bartolomé Alemán – Osvaldo E. Pisani.INSTITUTO: Derecho Comercial del Colegio de Abogados de Moreno – Gral Rodriguez/ Derecho Comercial del Colegio de Abogados de San Isidro (respectivamente).Comisión: Derecho Societario.Tema: Asentimiento Conyugal en la Transferencia de Acciones.Sumario: La calificación de "buena fe" que surge del art. 1824 del Código Civil y Comercial aplicable al adquirente de acciones en el régimen de oferta pública -concordante con el lineamiento indicado en el art. 470 del mismo código-, no resulta taxativa sólo al supuesto descripto por dicho artículo, pues de haberse querido limitar a tal circunstancia, no tendría sentido la remisión efectuada por el inciso b) del art. 470 al artículo 1824. Asimismo, de haberse querido a limitar la buena fe sólo a dicho supuesto, se tendría que haber consagrado en forma expresa. DESARROLLO Entendemos que la calificación de "buena fe" que surge del art. 1824 del Código Civil y Comercial aplicable al adquirente de acciones en el régimen de oferta pública -concordante con el lineamiento indicado en el art. 470 del mismo código-, no resulta taxativa sólo al supuesto descripto por dicho artículo, pues de haberse querido limitar a tal circunstancia, no tendría sentido la remisión efectuada por el inciso b) del art. 470 al artículo 1824. Asimismo, de haberse querido a limitar la buena fe sólo a dicho supuesto, se tendría que haber consagrado en forma expresa. En tal sentido, consideramos que en la adquisición de acciones nominativas no endosables y las no cartulares (escriturales) que no se encuentren autorizadas bajo el régimen de oferta pública, la buena fe de los adquirentes también puede invocarse y probarse por cualquier medio de prueba, de modo tal que la ausencia de asentimiento conyugal no le sea tampoco oponible en la adquisición de acciones. ANTECEDENTES Y FUNDAMENTOS : La ley 26.994 que promulgó el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación, incluyó como novedad una parte general de "Títulos Valores", bajo el Capítulo 6 del Título V (Otras fuentes de las Obligaciones). En lo que se refiere al tema de la presente ponencia, conviene analizar en forma conjunta los siguientes artículos, a saber: 1) El art. 470, inc. b) del Código Civil y Comercial, incorporó puntualmente la necesidad del asentimiento conyugal en las transferencias de "acciones nominativas no endosables y no cartulares", en obvia referencia a las acciones "escriturales" reguladas por el art. 208 "in fine" de la Ley General de Sociedades. Aclara el artículo bajo análisis, que dicho asentimiento conyugal no es necesario, cuando las acciones que se transfieren son de las autorizadas a la "oferta pública", en referencia a las que cotizan en los "mercados de capitales" regulados por la Ley 26.831 y que para ello necesitan la autorización de la Comisión Nacional de Valores. De esa manera, la redacción del mencionado artículo finaliza con el extenso debate generado durante la vigencia del "consentimiento conyugal" del art. 1277 del Código Civil -derogado- en tanto se discutía si aquel era necesario para las transferencias de acciones de las sociedades anónimas cotizantes. Actualmente, el art. 470 inc. b) dispone que tal asentimiento conyugal es necesario para la transferencia de acciones nominativas no endosables y escriturales. 2) Por su parte, el art. 1.824 del Código Civil y Comercial – de aplicación a los "títulos valores" nominativos no endosables y no cartulares-, pareciera seguir con el lineamiento indicado por el art. 470 del mismo plexo normativo, en el sentido de que si bien, corresponde exigir el cumplimiento del asentimiento conyugal para la transmisión de aquellos, su omisión no es oponible a los terceros portadores de "buena fe", calificando como tales a los que los adquirieron bajo el régimen de la “oferta pública”. Entendemos que la calificación de buena fe aludida, no resulta de aplicación taxativa únicamente solo al supuesto descripto por el artículo, pues de haberse querido limitarlo solo a dicha circunstancia, se tendría que haber consagrado expresamente, quedando prohibido para otros supuestos. Sostenemos asimismo que el asentimiento conyugal, solo es aplicable a los títulos valores nominativos no endosables o no cartulares (acciones escriturales) que los son desde su origen y por estar así establecido en sus condiciones de emisión, pero de ninguna manera resultaría aplicable a los títulos que por su ley de creación, pueda optarse al crearse como nominativo endosable y que posteriormente en su circulación pudiere transformarse en "nominativo no endosable". Finalmente, cabe recordar que: "Se considera oferta pública a la invitación que se hace a personas en general o a sectores o a grupos determinados para realizar cualquiera acto jurídico con valores negociables, efectuada por los emisores o por organizaciones unipersonales o sociedades dedicadas en forma exclusiva o parcial al comercio de aquellos, por medio de ofrecimientos personales, publicaciones periodísticas, transmisiones radiotelefónicas, telefónicas o de televisión, proyecciones cinematográficas, colocación de afiches, letreros o carteles, programas, medios electrónicos, circulares y comunicaciones impresas o cualquier otro procedimiento de de difusión". (Conf. Art. 2, Ley 26831). Los mismos deben contar con la autorización de la Comisión Nacional de Valores.