RESUMEN En la tesis se estudian restos embrionarios de dinosaurios hallados en huevos asignados al ootaxón Megaloolithidae (los únicos embriones de saurópodos registrados en el mundo). Los fósiles fueron recolectados de la Formación Anacleto (Cretácico Superior), en la localidad de Auca Mahuevo, en la provincia de Neuquén, Argentina. Los fósiles poseen un excelente estado de preservación, e incluyen cráneos completos y articulados, completos pero desarticulados, y numerosos elementos aislados, tanto craneanos como apendiculares. El cráneo de los saurópodos embrionarios es corto y alto, y presenta una serie de fenestras, la mayoría de las cuales se presenta también en formas adultas de titanosaurios. Los elementos más importantes en tamaño son el maxilar y el jugal; ambos huesos son muy diferentes con respecto a la morfología que exhiben esos mismos huesos en los cráneos de los titanosaurios adultos. Tanto el maxilar como el jugal exhiben una serie de procesos que radian de su cuerpo central, los cuales parecen reducirse o modificarse en la ontogenia. La fórmula dental de los embriones de Auca Mahuevo es Pm4 M7-8 /D10?, básicamente la misma que en los titanosaurios adultos conocidos. El examen osteológico detallado de los especímenes revela la existencia de caracteres de valor taxonómico, filogenético y evolutivo, algunos de los cuales permiten ajustar su asignación taxonómica dentro de Sauropodomorpha. Varios de estos caracteres, como por ejemplo, el margen rostral del hocico escalonado, la rama anterior del cuadradojugal elongada y distalmente expandida, y la ausencia de contacto escamoso – cuadradojugal, permiten asignarlos al clado Eusauropoda; otros, como la ausencia de dentículos en las coronas de los dientes, la presencia de fenestra preantorbital, y la rama palatina del pterigoides con el margen dorsal escalonado, los relacionan con los Neosauropoda; por último, el cráneo proporcionalmente ancho en su porción posterior, la mandíbula dorsoventralmente baja en su porción rostral, y la existencia de una pronunciada escotadura maxilar en el margen ventral del cráneo, son reconocidos como sinapomorfías del (o dentro del) clado Titanosauria. Otra serie de caracteres que incluye la órbita relativamente grande, la porción rostral del cráneo corta, las hileras alveolares largas, la ausencia de facetas de desgaste en los dientes, el esqueleto axial postcraneano no osificado, la existencia de una fenestra parietal, y la presencia de un diente de huevo, son rasgos propios de un estadio embrionario, y se encuentran presentes en una variedad de formas inmaduras. El estudio de la anatomía craneana de los embriones, y su comparación con la del cráneo de un titanosaurio adulto (estudiada en taxones afines, ya que se desconoce la forma adulta del titanosaurio de Auca Mahuevo), permite identificar numerosos cambios ontogenéticos que habrían modificado profundamente la fisonomía del adulto con respecto a la del embrión. Algunos de estos posibles cambios ontogenéticos son el alargamiento del rostro, el acortamiento de la región infraorbitaria, la reorientación del lacrimal, y la migración de las narinas externas. El estudio de la histología ósea de los embriones de saurópodo de Auca Mahuevo (el primero realizado en el mundo), ha revelado una osteohistología similar a la registrada en otros dinosaurios embrionarios. Los principales rasgos osteohistológicos que caracterizan a estos especímenes son la ausencia de hueso lamelar endosteal sobre los márgenes internos del hueso, la existencia de hueso entretejido altamente celular con un gran número de trabéculas, las cuales encierran amplios espacios vasculares, la presencia de canales vasculares principalmente de orientación longitudinal, y la ausencia de osteones primarios (no existe evidencia de depositación centrípeta de hueso endosteal dentro de los espacios vasculares). Las lagunas de osteocitos poseen un gran tamaño, son de estructura globular y se encuentran distribuidas al azar entre la matriz woven. Los patrones microestructurales presentes en los embriones de titanosaurio aquí descritos, revelan una clara correlación filogenética con embriones de aves y otros dinosaurios, más que con cocodrilos y tortugas. El estudio de los embriones de Auca Mahuevo permite inferir ciertas pautas conductuales de los dinosaurios. El hallazgo de una estructura de eclosión (un diente de huevo), hace suponer que, al menos los titanosaurios, habrían tenido algún tipo de comportamiento prenatal similar, aunque no idéntico, al que poseen numerosos reptiles y ciertas aves actuales. También, la evidencia osteohistológica permite inferir una probable estrategia altricial o semialtricial, una condición distinta a la previamente señalada para saurópdos.