Toledo, Victor M., Julia Carabias, Carlos Toledo y Cuauhremoc Gon­ zalez Pachec9. La producci6n rural en M~xico. A1temativas ecol6gicas. Mexico, Editorial Fundaci6n Univer­ so Veintiuno, 1989,402 pp. El presente libro aborda una intere­ sante tematica de significacion ac­ tual. Es novedoso por la forma en que se realize el proceso de inves­ tigacion, producto del esfuerzo co­ lectivo de sus autores en el diseiio, metodologia, analisis y elaboracion final. En el ancHisis se tocan de conjunto las actividades primarias de la pro­ duccion agricola, ganadera y silvicola. Relacionandose al mismo tiempo las actividades primarias con la demanda, dada por el consumo humano. Se comparan sus tendencias en funcion de los factores que inciden en elIas, como el crecimiento de la poblacion yel modele de desarrollo economico adoptado por Mexico. Para tener una base de estudio de la cual partir, efectuaron una nueva propuesta de regionalildci6n del pais par zonas ecologicas. Uevando a una tJbicaci6n geografica las cinco zonas ecol6gicas identificadas en el pais, y representadas a nivel de cada uno de los 2 400 municipios que existen en Mexico. Se evaluaron a nivel munici­ pal, el uso actual del suelo y la alter­ nativa de uso potencial de acuerdo a la zona ecologica en que esre ubi­ cado el municipio respectivo. Partiendo de Wla nueva ronrepcioo del proceso productivo, proporcionan interesantes aportaciones, al abor­ dar de manera integrada en el exa­ men los procesos economicos junto con los procesos ecologicos. Implica el aruilisis, Ja manera como bs hombres se asocian y articulan para producir, y ya organizados, como se vinculan con la naturaleza a traves del conoci­ miento, la tecnologia, las formas de propiedad, yel esmdio de las unidades naturales que operan en la base mate­ rial natural de la producci6n. Rela­ cion que se expresa en la produccion agricola, ganadera y forestal. A traves de las anteriores aproxi­ maciones, logran los autores evaluar las moddos eoon6miros y Jas teo1010­ gfas empleadas en la produccion primaria y como estos modelos lIe­ gan a repercutir negativamente, so­ bre la'base material de los procesos productiva;, que son los recursos natu­ rales existentes, amenazando su ca­ pacidad de renovabilidad. Aclaran que es un error designar de manera abstracta al conjunto de' elementos: agua, aire, suelo, flora, fauna y energia (los recursos natu­ rales), como entidades neutras yes­ titicas. Sin dinamica intema y sin estructura. Concebidas como fuen­ tes inagotables de bienes materiales. Cuando manifiestan una tendencia al deterioro y agotamiento. Ponien­ do en entredicho los criterios unicos y parciales que da la economia. La que a traves de modelos y poIlti­ cas productivistas, traza el curso y la intensidad de la produccion y el desarrollo social, pero sin tomar en cuenta la dinamica y las tendencias de la base material de la propia pro­ duccion. De ahi que planteen la necesidad de elaborar un nuevo marco concep­ tual, que permita el analisis de la produccion en cuanto su caracter y tendencias en el uso de las bases materiales naturales y JX8ibilite marcar nuevas rumbas, para garantizar la supervivencia yequilibrio de la so­ ciedad can la naturaleza, mediante formas de produccion equilibradas de largo plazo. Permitiendo al mismo tiempo, obtener el maximo de pro­ ductos can el minimo de esfuerzos invertidas. Estas nuevas pau~ y marco conceptual 10 da la ecologia, que pa­ ra el analisis, llega a constituir los fundamentos ecologicos de la pro­ ducci6n. La produccion rural la analizan tomando tres conceptos basicos que fUDcionan como ejes de una nueva poIltica de producci6n rural: a) La autosuficiencia de las comunidades rurales en t.erminos productivos, ali­ mentarios yenergeticos. La que sig­ nifica, que en carla realidad ecol6­ gica debe aprovecharse la vocacion y potencialidad de los recursos natu­ rales para cubrir en forma particular los requerimientos de la poblaci6n, valiendose cada entidad social de sus propios medios, para llegar a consti­ tuir una forma de canasta basica por carla region y zona eco16gica. b) La diversidad geografica y ecol6gica del pais reclaman nuevas alternativas estrategicas en la produccion, que se adect1en a cada realidad natural, para evitar un forzamiento ecologico con Jas actividades productivas mal orien­ tadas, y facilitar la produccion y el intercambio de excedentes entre las diversas zonas. ·c) La integracion de los sistemas productivos como medio para alcanzar la eficiencia eco16gica, sobre un plano globalizador donde se economicen los diversos procesos biologicos del .ecosistema, y su re­ laci6n con el cicio de los nutrientes, fertilidad de los suelos que intervie­ nen en la capacidad reproductiva de las especies, y tienden a favore­ cer el balance energetico de los sextores productives primaries y agro­ industtiales. Solamente asi se pcx:lra llegar a una eficiencia ecologica y economica·. Se llega por parte de los autores, a cuestionar la base de la alimentacion humana, que recae fundamental­ mente en las proteinas de origen animal, que han "sido" obtenidas a costa de la destrucci6n de grandes existir. Dentro de los puntos que se superficies de selv:as en nuestro pais, tocan de este subsector, cobran im­ para dedicarlas a la ganaderia exten­ portancia dos aspectos que gene­ siva. En terminos comparativos de ralmente se soslayan: los productos eficiencia produetiva para la obten­ no maderables y la lena. cion de alimentos, confrontan los sis­ Los pnxlucta; IX> maderables ccmo temas productivos de la manera la palma camedor, la jojoba, la da­ siguiente: Las plantas producen mas miana y la resina, aportan a la pro­ proteina cruda y mas energia por ducci6n bruta silvlcola a precios unidad de superficie 0 por unidad de constantes, mas del 50 por ciento del radiaci6n solar recibida en relacion a valor total. A pesar de su importancia los animales. Asimismo, existe una economica, la actividad carece de un menor eficiencia en el trayecto de control teenK:O y de estudios cientifi<DS convertir proteina vegetal en pro­ para su adecuado aprovechamiento. teina animal, y de aqui tomarla para 1..0 que permite una sobreexplotaci6n la alimentacion humana, en compara­ de los recursos no maderables y de la cion al consumo directo que de pro­ Olano de obra que 10 reco1ecta. Facili­ teina de origen vegetal 0 acucitico tando ademcis, el clandestinaje y el hace el ser humano. contrabando de los mismos. Apoyados en diversas fuentes, AI comparar la crta de las diversas especies de animales domesticos, bajo estiman que la extracci6n de madera sistemas productivos distintos, de­ para lena, llegara a un equivalente ducen que la especie menos eficien­ de 14 millones de metros cubicos al te para convertir proteina vegetal ano. Esta cifra sorprende, si conside­ en animal, y en la utilizaci6n de ki­ ramos que las estadisticas oficiales localorias para la conversion de nos presentan que, la prodticci6n proteina animal, y la mayor con­ total maderable es de nueve millones sumidora de energia fOsil, es la de bo­ de metros cubicos anuales. 1..0 ante­ vinos de carne, tanto en los sistemas rior nos hace pensar en que no exis­ extensivos de produccion, como en te ,un verdadero control ni calculo los sistemas intensivos. Los bovinos de la actividad forestal; y que el para carne, como las otras espeeies irnpacto que se ocasiona sabre las de animales, tanto en los siste­ superficies arboladas, es de graves mas de produccion extensivos e in­ consecuencias y de caracteristicas im­ tensivos, compiten contra el espacio predecibles. Para la formulacion de un nuevo agricola dedicadoa la producci6n de alimentos de consumo humane di­ modelo econ6mico para nuestro pais, recto. que esre sustentado en bases produc­ Otro aspecto importante que se tivas economicas yecol6gicas, que Ie aborda en el libro, es el de la ac­ darian un caracter de largo plazo, tividad forestal. Mencionan que esta sera necesario tomar en cuenta los se inicia, ahf donde la agricultura y criterios que se vierten en el libro. ganaderia termina, y donde estas ul­ ANTONIO CASTILLO VILORIA. timas actividades Ie han permitido