Viaje al azul marino L as puertas corredizas podrían conducir a un submar ino: paredes en azul marino, luz de color cobalt o. En el suelo, un cír culo en azul metálico marca el radio de acción del eq uipo del quirófano. El anestesista Steven Koh acaba de dormir a una paciente dejándola en un sueño profundo, el otorrinolaringólogo Mark Courtney habla con las enfermeras sobre el siguiente paso. Los ayudantes preparan el instrumental, colocan los monitores y las luces azuladas. El ambiente marítimo del quirófano EndoAlpha del hospital John Flynn en la Cost a Dorada de Queensland tiene poco q ue ver con el cercano Pacífico. El color favorece la con- 44 centración y crea un ambiente de trabajo relajado. Y representa un modelo de q uirófano totalmente nuevo: desde aquí, con una cámara e Internet, se pueden retransmitir, en tiempo real, las intervenciones a especialistas de todo el mundo. Durante la intervención se admiten debates y preguntas. «Este quirófano es uno de los primeros de su clase, y no será el último», dice Dr . Ray Randle, cuyas ideas y obstinación han contribuido a hacer realidad este videoquirófano conectado en red a todo el mundo. Ver cómo trabajan los demás Del techo del salón azul cuelga una cámara que toma las imágenes de los pr epa- rativos. En el centr o de la Dräger P olaris 760, una lámpara de diodos, una segunda cámara enfoca el oído de la paciente que se va a operar. La cámara de alt a definición (HD) permite grabar los detalles de cada maniobra del cirujano y envía las imágenes de alta resolución a las pant allas del quirófano. Los vasos sanguíneos, los órganos, los cortes y todos los pasos se pueden reconocer con gran nitidez. Todo se puede ver también en el sitio web del hospital. Los estudiantes de Europa e India, así como los médicos especialistas de EE. UU., pueden seguir en directo todos los pasos y hacer preguntas sobre metodología y tecnología quirúrgica. Por supuesto, lo que REVISTA DRÄGER 9 | 1 / 2014 FOTOS: MICHAEL AMENDOLIA Olympus, el hospital John Flynn y Dräger han inaugurado uno de los VIDEOQUIRÓFANOS más modernos del mundo en Australia. Q U I RÓ FA N O M E D I C I N A D E A LTA T EC NO LO G ÍA Quirófano en Queensland: médicos de todo el mundo se benefician de las retransmisiones por vídeo sucede en el quirófano no está destinado al público en general: el médico especialista puede ver desde Alemania al cirujano australiano durante una complicada reconstrucción de una articulación, un estudiante chino puede perfeccionar sus conocimientos sobre una intervención urológica. Pero, para las personas no autorizadas, no deben ver cómo trabajan los médicos. Para garantizar la pr ivacidad de los pacientes, hay complejas barreras de seguridad que solo permiten a los usuarios registrados acceder a las retransmisiones en línea. El traumatólogo Randle viaja de 12 a 15 veces al año por el mundo —sobre todo a EE. UU., Alemania y Asia— para com partir su trabajo con otros colegas y estudiantes. Hay un gran interés por la rodilla de Randle. La especial técnica quirúrgica del australiano para las prótesis de rodilla es tan difícil como eficaz, el proceso de curación es muy rápido. No es de sorprender que otros quieran aprender de él. «Pero, por supuesto, mis REVISTA DRÄGER 9 | 1 / 2014 viajes permanentes cuestan tiempo y energía, y también suponen pérdidas», cuenta Randle mientras a sus espaldas se prepara el quirófano para un nuevo paciente. Por motivos de organización, él y su equipo trabajan hoy en el quirófano de al lado. El programa de hoy: diez nuevas rodillas. Un viernes corriente, como otros muchos. ¿Una tercera cámara en la frente? Entretanto, en el quirófano azul situado enfrente, el Dr. Courtney se familiariza con la nueva técnología. «Siempre lleva un tiempo hasta que el equipo se hace a un nuevo entorno», dice y, luego, bromea: «Los otorrinos podríamos llevar una tercera cámara en la fr ente, ya que, durante el trabajo, tenemos que mover menos la cabeza que los traumatólogos, pero, de vez en cuando, nos tenemos que inclinar sobre el paciente. De f orma que impedimos fácilmente la visibilidad de la o tra cámara». Con el siguiente paciente, dos monitores especiales muestran a Cour tney y a su asistente Stephanie Gant el avance exacto de la intervención endoscópica en los tabiques nasales. Para esta intervención, las luces del q uirófano se atenúan con luz azul, las pantallas se convierten en el segundo par de ojos del médico. Para los traumatólogos y los internistas, la cámara de alta definición integrada en la lámpara quirúrgica es una gran ventaja. Un revestimiento estéril e intercambiable protege el objetivo que permite enfocar automáticamente el área del cuerpo que se va a tratar. «Solemos invitar a médicos para su entrenamiento: australianos, claro, pero también compañeros de otros continentes», comenta Randle explicando cómo eran, hasta ahora, los pr ogramas de formación. «Estos viajes de estudios son caros; además, suele haber problemas de visado y de fechas. Con la nueva tecnología podemos alcanzar a mucha más gente por Internet», dice y continúa explicando > 45 M ED ICIN A D E ALTA T EC NOLOG ÍA Q U I RÓ FA N O En la pantalla, los órganos y los vasos sanguíneos se muestran con gran precisión 46 Dr. Ray Randle es el creador del videoquirófano y un talento en la enseñanza FOTOS: MICHAEL AMENDOLIA > una ventaja más: «Hasta ahora, un médico podía ver una o dos inter venciones durante su visita. Pero a día de hoy, hay un horario que se puede consultar en línea. De esta manera, un médico puede estudiar una intervención tantas veces como quiera y a la hora que más le convenga. El estudio reiterado permite un aprendizaje más profundo, lo cual es un gran avance». Y si la intervención es en directo, se pueden comentar también situaciones difíciles. Además de las cámaras, hay micrófonos conectados. «Estoy acostumbrado a explicar durante la inter vención cómo procedo y por qué lo hago», dice Ray Randle. «No me molesta que me hagan pr eguntas mientras estoy ocupado». Cuando hace dos años operó al primer paciente en el quirófano 1, para el traumatólogo se cumplió un sueño que llevaba cinco años esperando: «En primer lugar, fue decisiva la excelente calidad de las imágenes de alta definición. Nadie utiliza grabaciones mediocres para estos fines». En segundo lugar, había q ue asegurar las finanzas. Luego, quedaba todo un esfuerzo logístico para equiparar la realidad del hospital, la arquitectura, la nueva tecnología y el diseño moder no. Dos años trabajó la filial australiana de Dräger con los expertos de Olympus en la integ ración de los sistemas, y Ramsay Health, la operadora del hospital privado John Flynn, en dar con las soluciones ideales para el proyecto. «El resultado cumplió nuestras expectativas y llegó a superarlas », comenta John Cotroneo, responsable de la infraestr uctura de Dräger en Australia. Señala hacia una foto de la sala antes de las reformas: una especie de cuarto trastero con luces de neón y El otorrinilaringólogo Dr. Mark Courtney se centra al máximo en la intervención techo conflictivo, apenas se puede reconocer en comparación con el quirófano azul equipado con alt a tecnología. Cotroneo está satisfecho con el desarrollo del proyecto piloto: «Hemos instalado más sistemas Polaris en el hospit al John Flynn, contamos con varios quirófanos nuevos de gastroenterología y endoscopia, y hemos equipado más quirófanos en otros hospitales». Un ambiente relajado permite ver mejor Cuatro meses después de la primera intervención en el nue vo quirófano del hospital John Flynn, los equipos médicos se han hecho a las peculiaridades de la sala azul. «Tuvimos que dejar de abrir las puertas con el pie», dice r iendo la enfermera anestesista Joanne Death. Por motivos de higiene, las puer tas de los hospit ales, a veces, solo se pueden abrir con el pie, lo que no es posible con las puertas corredizas modernas. Estas puertas se abren a un lado sin hacer ruido pulsando un botón, y se cierran después automáticamente con efecto retardado. Para poder seguir aplicando la probada técnica de apertura con el pie se fijaron, junto a las puertas corredizas, tacos de goma con un sensor debajo. El azul crea un contraste ideal para las cámaras y, al mismo tiempo, tiene un efecto tranquilizante y relaja la vista, lo que es muy útil en el ambiente concentrado de un quirófano. Con todo, los anestesistas tienen que prestar más atención, ya que las venas y el color de piel del paciente se reconocen peor en un ambiente azul. «Por supuesto, los monitores nos dan la información exacta sobre los latidos del corazón, la tensión arterial y el estado del paciente. Pero mi observación proporciona información adicional», dice la enfermera anestesista Joanne Death. «Por eso, no tenemos la luz azul per manentemente encendida», dice Ray Randle. Pero aunque cambie a las lám paras Polaris de luz más clara, las par edes de cristal azul del quirófano reflejan un brillo frío. Las pantallas resaltan en el entorno azul oscuro. Los espectadores del resto del mundo pueden estudiar con la cámara la disposición del q uirófano tanto en un ambiente azul como en uno claro. Gracias a la cámara, pueden seguir fascinados como ésta muestra las par tes del cuerpo REVISTA DRÄGER 9 | 1 / 2014 O P- SA A L que se han de tratar y las manos del cirujano. Además, la cámara ayuda también al equipo en el quirófano. «La semana pasada, la cámara permitía ver en la pantalla una complicada intervención de aorta», cuenta Priscilla Vanwyk, que justo ha pasado de trabajar como enfermera de planta a enfermera de quirófano. «En la pantalla no me perdí ni un detalle; los órganos y los vasos sanguíneos se podían ver como nunca. También pude ver cómo y dónde ponía las grapas la enfermera asistente». En un quirófano tradicional, los hombros del cirujano impiden a menudo la vista. H IG H T EC H-MEDI Z IN Casi como en un estudio de televisión: sin embargo, esta sala es, sobre todo, un quirófano equipado con alta tecnología Trabajo pionero Que uno de los quirófanos en directo más modernos del mundo se hay a inaugurado en el hospit al John Flynn en Queensland hace honor al patrón a quien le debe su nombre. Flynn fue pionero en tecnología innovadora y desempeñó un papel importante en la atención médica de Australia: en 1911, inauguró el primer hospital en la selva; 15 años después, el australiano hizo realidad su idea visionar ia de los médicos volador es que son llamados por telégrafo al outback. Los flying doctors de Flynn (veáse también pág. 5) recorren hoy hasta 27 millones de kilómetros aéreos al año para tratar hasta a 750 pacientes en regiones apartadas del continente. El quirófano EndoAlpha intenta reducir las millas de vuelo, pero también manda los conocimientos médicos a todo el mundo. Julica Jungehülsing Informaciones de producto: Y la luz se hizo: lámparas quirúrgicas Dräger www.draeger.com/9/polaris REVISTA DRÄGER 9 | 1 / 2014 Prácticamente sin sombras y con una luz clara: así es como Polaris, la lámpara quirúrgica de Dräger, enfoca al paciente 47