Isaías_-_islam_mezquita - Comunidad Israelita de Santiago

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REVISADO POR EVA
TEMA DE ACTUALIDAD:
Por Isaías Wassermann S.
GRUPO DE SALAFITAS SE OPONE A SU CONSTRUCCIÓN:
Mezquita de Coquimbo revela discrepancias entre corrientes islámicas
A través de una campaña por Internet (http://www.geocities.com/defensoresdelislam/), un
grupo denominado “Defensores del Islam” asegura que la llegada a Chile de ciertos
clérigos podría ser un nuevo foco para difundir la herejía y división entre musulmanes. El
alcalde porteño y la oficialidad musulmana en Chile están desconcertados y preocupados
por estas imputaciones.
“Nuestros maestros lo dicen muy claramente: el mejor musulmán es aquel cuya lengua y
mano están a salvo de otros musulmanes” (Abdallah Fajreldin).
“No entiendo las críticas al municipio, porque nosotros no seremos responsables de la
dirección religiosa de la mezquita” (Pedro Velásquez).
No salió nada en El Mercurio, así que muy probablemente la mayoría de los lectores de La
Palabra Israelita ni siquiera se han enterado. Sin embargo, la noticia es verdadera: en
Coquimbo se desató una especie de guerra santa por la construcción de una mezquita.
En efecto, la iniciativa del alcalde Pedro Velásquez de construir una mezquita cerca de la
Cruz del Tercer Milenio tuvo un inesperado tropiezo hace algunos días, cuando un grupo
denominado “Defensores del Islam” irradió por Internet una campaña contra el proyecto
edilicio, argumentando que existe el peligro de que se instale un nuevo foco para difundir la
herejía y división entre musulmanes. Los cybermusulmanes también criticaron el hecho de
que la mezquita se haya puesto al nivel de una atracción turística, como la ruta del vino o
de la aceituna.
“Una vez más los promotores de la herejía y la división entre musulmanes están tratando de
tomar posiciones de poder en nuestra comunidad, sembrando discordia y desnaturalizando
el recto mensaje del Sagrado Corán, el libro de D’s revelado a Su Profeta Muhammad (la
paz y las bendiciones de D’s sean con él)”, señala la declaración de Internet.
La nota critica la aparición de dirigentes de las mezquitas argentinas de la “secta shia” en
algunas actividades en Coquimbo, con la supuesta intención de sorprender al alcalde
Velásquez para estar en posición de tomar el control de la mezquita.
Los “Defensores del Islam” arremetieron también contra el Rey de Marruecos, quien aportó
US$350 mil para el proyecto, por su actitud “rastrera y servil con Estados Unidos, además
de la dura persecución que sufren nuestros hermanos salafitas en ese país”. Y también
criticaron a la facción shiíta, quienes en Irak “confunden ser musulmán con servir a Irán y
sus diplomáticos, confundidos atacan al Islam verdadero, los excluyen, los persiguen, los
denuncian a la policía”.
En todo caso, pese a la polémica, los coquimbanos siguen con su porteña cotidianeidad y
no dan a la mezquita la relevancia que tuvo en su momento la Cruz del Tercer Milenio. “La
polémica no ha tenido mucho eco en la gente, porque en realidad no saben casi nada del
Islam. La mezquita es vista más que nada como un aporte turístico”, indicó a este reportero
Rubén Aguilera, periodista del diario El Día, de La Serena.
De plaza a mezquita
Sin ocultar su desconcierto por lo sucedido, el alcalde Velásquez aseguró a La Palabra
Israelita que tras lo sucedido en Estados Unidos con las Torres Gemelas, no se puede dejar
de prestarle atención a este tipo de discursos. “Uno no sabe lo que esta gente puede hacer”.
En efecto, las aprensiones del edil tienen que ver con lo expresado por el presidente del
Centro de Cultura Islámica de Chile, Fuad Musa (de orientación shiíta) quien, luego de ser
aludido por la declaración de Internet, contraatacó a través del diario Las Últimas Noticias,
insinuando que quienes se oponen a la mezquita pertenecen a una corriente islámica
llamada wahabismo, “que es reciente y que le da la base a grupos como Al Qaeda”. Musa
fue contactado por este semanario para requerir su opinión; sin embargo, declinó hacerlo,
argumentando su desconfianza sobre lo que finalmente sería publicado.
En fin, con antecedentes en la mano, el alcalde Velásquez informó a Carabineros e
Investigaciones, y de paso tomó un seguro contra daños en la edificación, que ya está en
etapa de terminaciones.
El edil es enfático en recordar que el proyecto original no consideraba una mezquita, sino
un área de plazas culturales, que serían un complemento ecuménico a la Cruz del Tercer
Milenio. “Decidimos entonces hacer un minarete, pero la embajada de Marruecos nos
sugirió considerar una sala de oraciones, con lo cual el proyecto se transformó en una
mezquita”.
Adicionalmente, el Rey de Maruecos aportó US$350 mil para la construcción y se llegó a
un acuerdo de administración, el cual contempla que el municipio se hará cargo de los
gastos operativos de la mezquita, mientras que Marruecos será responsable de la línea
religiosa del templo. “No entiendo las críticas al municipio, porque nosotros no seremos
responsables de la dirección religiosa de la mezquita”, asegura Velásquez.
En todo caso, el edil tiene ya el cuero bastante duro en estas lides, pues incluso con la
construcción de la Cruz del Tercer Milenio fue objeto de críticas, incluso de personeros de
la propia Concertación, quienes cuestionaron la cuantía de la inversión frente a otras
necesidades de la comuna.
Imán marroquí
La polémica tampoco dejó indiferente al embajador de Marruecos en Chile, Abdelhadi
Boucetta, quien a través de la prensa indicó que los argumentos contra la mezquita son una
locura que demuestra ignorancia. “Imagínese que ellos se oponen porque dicen que la
mezquita será shiíta y ocurre que el Rey de Marruecos es sunnita”.
El diplomático aseguró que el objetivo de la mezquita es recoger un espíritu de
convivencia, tolerancia y diálogo y que, por lo tanto, no será ni shiíta ni sunnita, sino que
estará abierta a todos. También desestimó la eventual llegada de clérigos desde Argentina.
“Las autoridades religiosas de mi país elegirán un imán para que la dirija y será aprobado
por el Rey. Será marroquí”, aseguró a un diario.
Sin embargo, la principal interrogante aún no ha sido aclarada. ¿Quienes son realmente los
“Defensores del Islam”?
Para dilucidar esta cuestión nos comunicamos con Abdallah Fajreldin, miembro del Centro
Islámico de Chile, del cual depende la Mezquita As Salam (de inspiración sunnita), quien
manifestó que es bastante improbable que un grupo de las características de los
“Defensores del Islam” exista efectivamente en Chile, aunque reconoció que, por el hecho
de no ser una religión centralizada, en el Islam se pueden formar diversos grupos en
cualquier lugar. “Pero, cuando se habla de wahabitas, yo creo que hay algo de ignorancia,
porque los wahabitas, que se hacen llamar salafitas, no son ni extremistas ni violentos”.
Fajreldin manifestó su sensación de que hay grupos formados por personas ajenas al Islam
que están haciendo actividades en nombre del Islam, en lo que podría interpretarse como
una alusión a la falta de autenticidad de los “Defensores del Islam” y su propuesta.
“Nuestros maestros lo dicen muy claramente: el mejor musulmán es aquel cuya lengua y
mano están a salvo de otros musulmanes. Esto es central en nuestra religión. Los
musulmanes no se pueden atacar entre sí, porque de lo contrario tendríamos permanentes
estallidos sociales”.
En fin, habrá que ver cómo se desencadenan los hechos y si al alcalde Velásquez le quedan
fuerzas para arremeter luego con su tercer proyecto: construir una sinagoga. Por de pronto,
ya inició las averiguaciones y algo le contaron sobre el minián. Todavía no sabe que
conseguir US$300 mil para una sinagoga es casi imposible y que poner de acuerdo a los
donantes para definir qué rabino quieren es a lo menos tema para un tratado talmúdico.
Lec de foto:
Algunos de los titulares aparecidos sobre el tema en los diarios Las Últimas Noticias y El
Día.
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