El Teletrabajo como nueva forma organizacional en la era de la “Evolución Digital” Por María Gimena Guido Como consecuencia de los avances de las nuevas tecnologías en el Siglo XXI, denominada comúnmente “La revolución digital”, se modifican las formas de organización del trabajo hasta ahora utilizadas, no solamente en lo que se refiere a la mecánica en la que éste se realizará, el objeto del trabajo y donde se va a desarrollar. Como consecuencia de ello surge esta nueva manera de organización laboral denominada “Teletrabajo” Esas tecnologías no estaban plenamente desarrolladas en la década del 70 y por lo tanto la Ley de Contrato de Trabajo no lo contempló expresamente, por lo que es necesaria una labor de interpretación armonizante de sus disposiciones con esta nueva forma de trabajar. El teletrabajo se aplica a las diferentes modalidades contractuales reguladas por la ley de contrato de trabajo N° 20.744 en el título III. El Teletrabajo consiste en la realización de todo trabajo por parte de personal vinculado con la entidad destinataria del mismo, sin la presencia física del trabajador en esta última, utilizando a tales efectos métodos de procesamiento electrónico de información – tecnologías de la información y la comunicación (TIC) -. Manteniéndose contacto entre las partes a través de la utilización regular de medios de comunicación idóneos y que genera un valor agregado. i El Teletrabajo, se presenta entonces como una respuesta a las nuevas necesidades de la empresa u organización, como así también un modo de conciliación entre la vida familiar y la vida laboral del trabajador, buscando el equilibrio entre ambos aspectos. Las modalidades de Teletrabajo pueden clasificarse en tres tipos básicos: 1) El trabajo en el domicilio del trabajador, 2) El trabajo móvil y 3) El trabajo en telecentros. El Trabajo en el domicilio del trabajador es una modalidad de trabajo en donde el empleador establece la realización de tareas específicas desde el domicilio del trabajador, durante algunos días de la semana, siendo el resto una modalidad presencial, en la empresa; o trabajar siempre desde su domicilio y concurrir a la empresa cuando se lo requiera. El Trabajo Móvil, se refiere a aquellos trabajadores cuya actividad requiere frecuentes desplazamientos, por los que desarrollan la mayor parte de su actividad en diferentes lugares. Finalmente el trabajo en telecentros, permite el trabajo a distancia desde una oficina armada telemáticamente, que se encuentran cerca de la casa del trabajador, con lo que tiene la ventaja de reducir el tiempo de viaje en traslado, gastos de comidas, entre otros. Esta modalidad se utiliza cuando el trabajador no puede o no le resulta conveniente desarrollar el teletrabajo en su propio domicilio. Atento la necesidad de una regulación específica, el 10 de Febrero de 2012, el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social sanciona la resolución Nº 147, que crea la Coordinación de Teletrabajo, cuyo objeto es el desarrollo de acciones específicas y la generación de condiciones de trabajo decente para teletrabajadores. En este marco, con fecha 01 de Julio de 2013 el MTEySS dictó la Resolución Nº 595/2013, creando el Programa de Promoción del Empleo en Teletrabajo (PROPET). El mencionado Programa fue diseñado para promover, facilitar y monitorear la aplicación del teletrabajo en las empresas del sector privado que decidieran implementar esta forma de organización y adherir al programa, permitiendo evaluar el impacto del teletrabajo en las relaciones laborales. Las empresas que decidieran adherir a este Programa deberán presentar ante la Coordinación de Teletrabajo del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, el formulario de solicitud de incorporación, en donde se deberá describir las características principales de la empresa y sus puestos de trabajo y se deberá fundamentar el interés en implementar esta modalidad. La Coordinación de Teletrabajo evaluará esta solicitud, y en caso de resolver favorablemente la misma, se suscribirá un convenio de adhesión al mencionado programa. Las empresas elaborarán, junto con la coordinación de Teletrabajo un plan de trabajo, el cual será monitoreado, diagnosticado y evaluado por a la propia Coordinación de Teletrabajo. Este Convenio tendrá un plazo de vigencia de nueve meses y podrá ser renovado por plazos iguales, a solicitud expresa de la empresa y siempre que la Coordinación de Teletrabajo lo apruebe en función de los resultados obtenidos. Cabe resaltar que la participación de los teletrabajadores en el Programa siempre será voluntaria y deberá quedar asentado en forma expresa en el contrato individual que regule su relación laboral con la empresa adherente. Por su parte, el 8 de Noviembre de 2012, la Superintendencia de Riesgos del Trabajo dictó la Resolución Nº 1552/2012, que dispone un conjunto de condiciones mínimas en materia de Seguridad e Higiene para teletrabajadores. Conforme esta resolución los empleadores deben notificar a la Aseguradora de Riesgos del Trabajo la localización del teletrabajador; La mencionada resolución su artículo 3 también dispone los elementos que el empleador debe proveer a los teletrabajadores ii; y por último en su artículo 4 se faculta al empleador, que puede ir acompañado por un técnico de la ART o representante gremial a verificar las condiciones de trabajo, previa notificación de fecha y hora de visita y mediante la intervención de un profesional de higiene y seguridad laboral. i DE VIRGILIIS, Miguel A., y DE VIRGILIIS, Martin I., “El teletrabajo. De la Chimenea a la sociedad de la información”, DT, 2001 –B-1369. ii Art. 3 Resolución 1552/2012: “Establecese que el empleador deberá proveer a los trabajadores de los siguientes elementos: 1 silla ergonómica; 1 extintor portátil contra incendio; 1 botiquin de primeros auxilios; 1 almohadilla para ratón (“Pad mousse”); 1 manual de buenas prácticas de Salud y Seguridad en el Teletrabajo, cuyos contenidos mínimos se encuentran disponibles en el link http://www.trabajo.gob.ar/difusion/teletrabajo/100924_manuel-buenas-practicas.pdf.