SIETE MARAVILLAS DEL MUNDO DE HOY Si en el mundo antiguo Herodoto estableció una lista de siete maravillas levantadas gracias al ingenio humano, de los cuales solo la pirámide de Giza continúa en pie, por qué no crear una lista similar de acuerdo a lo que hoy existe y de acuerdo a los criterios contemporáneos. Con esta premisa, la Empresa New Open World Corporation, de Suiza, lanzó un concurso para elegir las siete nuevas maravillas del mundo. Según los organizadores, en total se recibieron más de 100 millones de votos por Internet y mensajes de celular, y quedaron como ganadoras el Templo de Kukulcán, en Chichón Itzá, México, el Coliseo, en Roma; La Gran Muralla China; Machu Picchu, en Perú; Petra, en Jordania; el Taj Mahal, en India; y el Cristo del Corcovado, en Brazil. Claro que la elección no estuvo libre de polémica: muchos de los que quedaron fuera de la lista reclamaron, y la UNESCO públicamente aclaró que el listado es una iniciativa privada que no puede reemplazar al listado de los patrimonios de la humanidad, pues solo representa la preferencia de los votantes en el concurso. Muralla China Cristo del Corcovado Coliseo Romano Machu Picchu Taj Mahal Chichón Itzá Petra MURALLA CHINA UN MONUMENTO A LA PACIENCIA Serpenteando colinas y montañas por 6.350 kilómetros se levanta la Muralla China, un monumento construido durante 1.900 para detener a los invasores. En el alfabeto chino la palabra paciencia se compone de dos símbolos. El símbolo superior es una combinación de la espada y el corazón; literalmente simboliza sobrellevar dolor con resistencia. El símbolo inferior se traduce como ley y ahora, lo que implica una situación inminente de la cual no se puede escapar. Unidos paciencia entiende como el sentido de sobrellevar las penas de la vida o aceptar el destino. La paciencia define el carácter nacional chino. Sólo así se puede comprender su historia de sacrificio y grandes hazañas épicas. Ninguna más visible que la Gran Muralla, levantada entre los siglos tercero antes de Cristo y el XVI de la era cristiana. Erigida para proteger a las diversas dinastías de las invasiones de mongoles, turcos, y tribus nómadas, la construcción recorre cerca de 6.350 kilómetros. Las partes más antiguas de la edificación tienen fragmentaciones, ocurridas por la erosión de los vientos del desierto de Gobi y porque están hechas de tierra. La muralla que visitan los turistas fue levantada durante la dinastía Ming entre 1368 y 1640. En un principio los Ming no estaban convencidos de su utilidad, pero cuando su ejército fue destruido en 1449 y Beijing cayó en manos de Altán Khan, enfrentados a la imposibilidad de derrotar por armas al ejército mongol prefirieron levantar la muralla. Esta fue construida con materiales más sólidos, como piedra y ladrillo, y se edificaron torres vigías, desde donde mediante señales de humo podía anunciarse la llegada de los invasores. Como obra de ingeniería la Gran Muralla es un desafío, pues su estructura de 9,5 metros va bordeando la cordillera, llena de riscos. La muralla tiene varios pasos, ubicados bajo una plataforma de piedra, con puertas en arcos, a través de los cuales pasaban hombres, caballos y carretas. En los arcos se han esculpido figuras de animales y estatuas de dioses. Desde Beijing se puede visitar la gran Muralla haciendo un viaje de unos 90 kilómetros hacia fuera de la ciudad. En Mutianyu, se puede ascender a un puesto vigía por teleférico y luego descender en pocos minutos, observando en todo su esplendor la culebra de piedra que va dibujando las colinas y las montañas a lo lejos. Si no se opta por el teleférico, se necesita buen estado físico para trepar el kilómetro y medio, a pie. La altura dificulta al andar. No obstante, con paciencia, como la que exige el país que se visita, el recorrido puede lograrse por etapas, con unos minutos de descanso para admirar el paisaje y el desafío del ser humano. La Gran Muralla China tiene 6.300 kilómetros de largo y alcanza una altura de 9,5 metros. Tiene puestos de vigía y varias puertas de arco. CRISTO DEL CORCOVADO DE BRAZOS ABIERTOS La postal símbolo de Brasil está en las alturas. La colosal estatua de estilo art decó está en la cima del Morro del Corcovado, uno de los montes que vigilan la Costa de Río de Janeiro. Si su belleza clama al cielo desde cualquier lugar de la ciudad carioca. La vista al llegar arriba es incomparable. No es la figura de Cristo más alta, pues el de la Concordia (Cochabamba, Bolivia) le saca una cabeza. Aún así las cifras son vertiginosas: situada a mas de 700 metros sobre el nivel del mar, su estatura es de 38 metros, 8 de los cuales pertenecen al pedestal. Curiosamente durante los trabajos no hubo ninguna muerte, a pesar de la complejidad existente. El boceto inicial planteaba una figura que cargaba la cruz y sujetaba el globo terráqueo. Pero el resultado fina mostraría dos de las caras de la ciudad: la religiosidad del brasileño y su hospitalidad característica representada por los brazos abiertos. Ésta y otras anécdotas no se les escapan a los cariocas, acostumbrados a subir hasta allí cada vez que reciben a familiares y amigos. Muchos de ellos repiten, pues la belleza reside en el conjunto, o sea, en la propia ciudad a vista de pájaro. Y, si bien existen otros miradores de excepción, ninguno es comparable a esta mole de mil toneladas. COLISEO ROMANO INGENIERÍA QUE IMPRESIONA El coliseo Romano es una obra de la Ingeniería que maravilla. Construido en el siglo I después de Cristo, esta edificación podría albergar hasta 50.000 personas, en 80 filas de escalinatas. Durante cerca de 500 años, fue uno de los principales sitios públicos de Roma, donde se celebraron actos y espectáculos variados, desde luchas de gladiadores y ejecuciones, hasta obras de teatro y recreación de batallas navales- especialmente en un primer momento- lo que requería inundar de agua el lugar con un sofisticado sistema de canalización. El terreno de juego, de forma ovoide, tuvo piso de madera tapado con arena. Debajo de esta cubierta había un sistema de corredores y habitaciones para los animales y los gladiadores; incluso existía un sistema de montacargas, para elevar plataformas sobre el campo. Hoy no existe el piso de madera pero pueden observarse los corredores y habitaciones, así como vestigios de toda la demás infraestructura, que por cierto ha inspirado a constructores modernos de coliseos y teatros en todo el mundo. A lo largo de su historia, el Coliseo Romano sufrió daños por incendios y terremotos, y sucesivamente se fueron haciendo reparaciones y mejoras, hasta el siglo VI, unas décadas después de la caída del imperio romano de Occidente, en que se realizó el último espectáculo de cacería de animales. Luego la edificación tuvo otros usos como cementerio, fábrica e incluso iglesia. Sufrió un deterioro importante y dos terremotos produjeron derrumbamiento de diferentes secciones. Incluso se usó el material del coliseo para la construcción de otros edificios, en las edades media y moderna. Hoy este es un Patrimonio de la Humanidad según la UNESCO, y se ha convertido en uno de los mayores atractivos turísticos de Roma, pues se considera que es uno de los mayores testimonios de los adelantos que alcanzó el imperio romano, así como de su barbarie y decadencia, reflejada en los espectáculos de gladiadores, lo que finalmente terminó propiciando la caída de esta potencia. El terreno de juego estaba hecho de madera cubierta con arena. Abajo había celdas, jaulas, corredores y hasta plataformas montacargas. MACHU PICCHU VALLE SAGRADO DE LOS INCAS Machu Picchu en quechua significa Cima vieja, a 2.400 metros sobre el nivel del mar; por sus características únicas de su paisaje y arquitectura, atrae durante todo el año a visitantes que buscan conocer más sobre la antigua civilización inca y sus enormes adelantos. Las ciudades, cuyos verdaderos fines todavía no pueden determinarse con exactitud (primero se creyó una fortaleza o un centro religioso, y hasta se ha hablado que fue una universidad), fue descubierta en 1911 en medio de la espesura de la selva por Hiram Bingham, explorador y político estadounidense, Bingham llegó al lugar atraído por las historias de campesinos que daban fe de las ruinas incas cercanas a sus chacras. La construcción asentada a lo largo de más de 500 metros, al parecer fue abandonada cuando todavía no había sido concluida, pero se desconoce la verdadera razón por la que los ocupantes salieron del lugar y la vegetación ayudó a preservar el secreto por miles de años. El recorrido para los visitantes se inicia a las 6h30, cuando parte el tren que conduce hasta Aguas Calientes, adonde llega antes de mediodía. A la ciudadela se accede caminando por un sendero durante 20 a 30 minutos. Para los amantes de la aventura también se ofrece un recorrido por el denominado Camino del Inca que toma entre tres y cuatro días. Machu Picchu , es parte de un complejo arqueológico aledaño a Cusco, conformado por una serie de construcciones incásicas donde a cada paso se observa el adelanto de esta civilización, no solo en arquitectura, caracterizada por edificaciones que no utilizan argamasa alguna para la unión de los inmensos bloques y cuyas formas precisas y disposición las convierte en antisísmicas. Los Incas fueron expertos astrólogos, agrónomos e ingenieros hidráulicos virtuosos. En agricultura por ejemplo lograron recrear microclimas a través de sus famosas terrazas o andenes dispuestas a modo de escaleras; así podían determinar el desarrollo de una especie botánica, tanto en climas fríos como calientes; de igual forma crearon su propio sistema de refrigeración colocando sus graneros en sitios altos y por supuesto más fríos. Los Incas fueron expertos astrólogos, agrónomos e ingenieros hidráulicos virtuosos. En agricultura por ejemplo lograron recrear microclimas a través de sus famosas terrazas o andenes dispuestas a modo de escaleras TAJ MAHAL UNA HISTORIA DE AMOR Taj Mahal es un conjunto de edificios integrados, cuyo sublime mausoleo de cúpula de mármol graba por siglos en sus paredes una historia de amor. Mumtaz Mahal, esposa favorita del emperador Sha Vahan de la dinastía mogol, murío al dar a luz a su décimo cuarto hijo. Invadió de tristeza, el emperador decidió rndir homenaje a su amada con la construcción de este espléndido complejo arquitectónico, compuesto de portal de acceso, mezquita, patios, tumbas secundarias, minaretes, asentados a su vez en amplios jardines con canales. Con influencia islámica, persa, hindú y de antigua arquitectura mogol el Taj Mahal requirió cerca de veinte mil hombres para su diseño, construcción y decoración. Entre 1631 y 1654, importados desde Asia Central y Europa llegaron a Agra, al Norte de India, los mejores materiales y más expertos artesanos, canteros, escultores, calígrafos y demás artistas, quiénes cuidarían los refinados detalles de este extravagante monumento a orillas del río Yamuna. El material más visible, el mármol blanco, fue llevado en carreteras tiradas por elefantes o búfalos desde las canteras de Marrana, a 300 kilómetros de distancia. Se llevó jade y cristal de China, turquesas desde el Tíbet, lapislázuli desde Afganistán; zafiros de Ceilán y carnelia de Arabia. En el exterior del mausoleo llama la atención la cúpula blanca del tipo cebolla con un diámetro de 20metros y una altura de 25 metros, que está decorada en la parte superior con un anillo de flores de loto en relieve. Se extiende este “armud”- término usado por los árabes para este tipo de cúpula- hasta una aguja unida a una luna creciente con los extremos en dirección al cielo-motivo islámico- al mismo tiempo que la aguja y la luna forman un tridente, símbolo tradicional hindú para la deidad Shiva. En el interior, la orfebrería y la joyería se explayan. Más de 25 tipos de piedras preciosas y semipreciosas fueron incrustadas formando figuras geométricas abstractas, motivos vegetales, flores, frutos en paredes, tumbados y pisos que se combinan con pasajes del Corán. En el Centro de esta sala octogonal se encuentra la tumba de Mumtaz. Junto a ella, su más fiel admirador, emperador de Sha Vahan. CHICHÉN ITZÁ EL OBSERVATORIO MAYA La ciudad de Chichén Itzá, al sureste de Mérida en México fue el centro arqueológico más importante de la avanzada cultura Maya, que conocía la escritura, las altas matemáticas y la astronomía. La gran pirámide remata en un templo para observar a Venus y a la Luna, ligados por los Mayas al dios Kukulcán, representado por una serpiente emplumada. En idioma maya, Chichén Itzá significa “la ciudad de los brujos de agua”, porque en los alrededores abundan ríos subterráneos conocidos como cenotes, en los cuáles hay grandes piedras calizas, que los mayas utilizaban en la arquitectura. Entre los historiadores hay varias hipótesis sobre las causas para el final de la cultura maya, sin embargo todos coinciden que fue violento, porque muchos edificios tienen huellas de incendio. Cancún, Conzumel, Playa del Carmen son las atracciones turísticas más conocidas de la Rivera Maya. Sin Embargo, hay que robarle un día por lo menos a las playas para realizar un viaje a Chichén Itzá, el más importante yacimiento arqueológico de la cultura Maya, que queda a pocas horas, de camino, al suroeste de la ciudad de Mérida en una excelente autopista. Declarada Patrimonio mundial de la Humanidad en 1988 por la UNESCO y ahora considerada una de las siete maravillas del mundo moderno, tras la votación de 100 millones de internautas, Chichén Itzá fue construida aproximadamente en el año 800 después de Cristo y seguramente fue el centro político y económico de la civilización, que habría sido incendiada a finales del siglo XII, cuando se dio el declive Maya. Entre los atractivos de esta ciudad se encuentra la Gran pirámide de Kukulcán que remata en un templo. Al Norte de la pirámide se encuentra el Cenote sagrado, sitio donde se desarrollaban las ceremonias mayas. Otro elemento importante es el Observatorio o Caracol, que era utilizado para observar al planeta Venus, que los mayas identificaban como el dios Kukulcán, la serpiente emplumada. Otro edificio de gran valor está constituido por el grupo de las mil columnas, que demuestran cuán avanzada era esta civilización que conoció las escrituras, las altas matemáticas y la astronomía, y pudo elaborar un calendario preciso mucho antes que los europeos. Antes de caer el sol, en el templo principal se ofrecen espectáculos de luces que remontan a los asistentes a las épocas pre-hispánicas, donde la llegada del dios Kukulcán, en los equinoccios de primavera y otoño, reafirmaba su señorial presencia sobre los antiguos mayas. PETRA TALLADA SOBRE LA ROCA Petra (“piedra” en griego) es la capital del antiguo reino de los nabateos. Está a 80 kilómetros al sureste del Mar muerto, en lo que hoy es Jordania, y sirvió como punto de almacenamiento y distribución de mercaderías transportadas por caravanas, lo que dio enorme prosperidad y poder al reino. Desde el siglo XIV hasta principios del sigo XIX, permaneció “perdida” para Occidente, hasta que el arqueólogo suizo Johann Ludwig Burckhardt la “redescubrió”. Hoy es Patrimonio de la humanidad según la UNESCO y cautiva por su curiosa fisonomía. Lo que más llama la atención de la ciudad de Petra es que está construida sobre la roca, en una garganta con paredes de 200 metros de altura en medio del desierto. Hay cientos de edificios, tumbas, baños, salas funerarias y templos tallados, construidos sobre las paredes, así como un gran anfiteatro y un monasterio. Entre las edificaciones principales de Petra está la Tumba Obelisco, de influencia egipcia, con un nicho de estilo grecorromano y salones para la celebración de fiestas sagradas. Asimismo está As-Siq, la antigua entrada de Petra, de más de un kilómetro de largo, rodeada de terrazas para la agricultura, canales de agua y formaciones geológicas curiosas. El tesoro de Al-Khazeneh es el monumento más bello de Petra, con inspiración helenística y local. Esta tumba de la realeza Nabatea, esculpida sobre la roca en el siglo I antes de Cristo, tiene una fachada de 30 metros de ancho por 43 de altura. Otros lugares interesantes de Petra son el Lugar Alto, sobre las montañas dedicado a las ceremonias religiosas, la calle de las Fachadas, con varias tumbas cavadas sobre la roca; el teatro de inspiración romana y que puede albergar hasta 7.000 personas; la majestuosa Tumba de Urn, con sus impresionantes arcos y escaleras; y el Ad-Deir, un inmenso monasterio al que se puede llegar después de subir alrededor de 800 escalones tallados sobre la montaña. Al-Khazeneh es el monumento más bello de Petra. El edificio, esculpido sobre la roca, tiene una fachada de 30 metros de ancho por 43 de altura.