Santa Cruz Xoxocotlán, Oaxaca. 24 de enero de 2015 BACHILLERATO Una suma de esfuerzos hacia la Olimpiada Nacional de Matemáticas. R egresamos a nuestra Comunidad con la alegría de iniciar un ciclo más en nuestra preparación. Los amigos que no vimos en las vacaciones, nuestros profesores, las nuevas materias, todo como una nueva oportunidad para resolver y solucionar aquello que en el semestre pasado nos causó diferentes dolores de cabeza. ¿Cuántos rostros reconocemos en la Universidad? Si bien no los conocemos a todos, sí sabemos que forman parte de nuestra casa de estudios, que son “de los nuestros”, pues bien, resulta que en nuestra Universidad, cada uno de esos rostros tiene una historia que contar. Este espacio, será dedicado para que conozcamos los talentos que tenemos en nuestra comunidad y que muchas veces desconocemos por el ajetreo cotidiano de nuestra vida estudiantil. En esta ocasión dedicamos el espacio a un alumno de Bachillerato que es, sin duda, motivo de orgullo para todos. Alan es un estudiante de bachillerato que al igual que sus compañeros tiene las mismas inquietudes de un joven de 17 años, sin embargo, Alan tiene un talento muy especial que desde pequeño ha fomentado y que para muchos de nosotros representa un dolor de cabeza: El gusto por las matemáticas. Alan ha participado en diversas competencias a nivel estatal y nacional, representando al estado, en donde compite con chicos de toda la república, resolviendo problemas matemáticos en diversas categorías. En noviembre pasado, Alan participó la 28ª Olimpiada Nacional de Matemáticas; la competencia más importante a nivel nacional organizada por el CONACYT y la SEP, que promueve la sana competencia de habilidades matemáticas, realizada en Toluca, Estado de México. Prepararse para una olimpiada de matemáticas no es tarea sencilla, los alumnos que forman parte de los grupos representativos trabajan de cuatro a cinco horas preparando sus habilidades lógicas, de razonamiento, comprensión y síntesis a través de diferentes problemas que aprenden a resolver día con día. Desde pequeño Alan ha estado involucrado en muchas competencias que el día de hoy lo han ayudado a formar parte del grupo representativo estatal y que algún día aspira a formar parte de una competencia internacional a través del trabajo constante y de continuar con sus participaciones. Sin embargo, Alan no ha estado solo en este camino, sus compañeros, maestros y sobre todo su papá han sido parte fundamental de sus logros. Alan cuenta que desde muy pequeño su papá lo ha motivado para que él se integrara a estos concursos, además también lo motivó para que aprendiera a tocar el piano y lo acompaña siempre a los estados en donde se realizan los concursos. Es por ello que extendemos nuestra felicitación a Alan por su esfuerzo, su dedicación y sobre todo por su calidad humana que lo hacen un digno representante de la filosofía lasallista. Sabemos que el camino del trabajo y la preparación le darán herramientas para que siga creciendo y cumpliendo sus metas.