5 de julio del 2005 Núm. 12 Vicepresidencia de Desarrollo y Capacitación Profesional Comisión Fiscal “PÉRDIDAS FISCALES DE PERSONAS FÍSICAS” Directorio C.P.C. Manuel C. Gutiérrez García Presidente C.P.C. José Besil Bardawil Vicepresidente de Desarrollo y Capacitación Profesional C.P. Juan Francisco Fernández Andrea Director Ejecutivo Comisión Fiscal C.P.C. Francisco Javier Moguel Gloria Presidente C.P.C. Agustín Durán Escamilla Vicepresidente Lic. Gabriela Pellón Martínez Secretaria Integrantes: C.P.C. Filio Alcaraz Mendoza C.P. Raúl Alonso de la Torre C.P. Roberto Álvarez López C.P.C. Fernando Becerril López C.P.C. Pedro Carreón Sierra C.P. Jesús Chan Chi C.P.C. Leopoldo Escobar Latapí C.P.C. Juan Manuel Franco Gallardo C.P.C. Eladio Antonio García Prada C.P.C. Guillermo Gómez-Aguado Suárez L.C.C. Arturo Halgraves Cerda C.P.C. Noé Hernández Ortiz C.P.C. Joel Hernández Salazar C.P.C. Leticia Miriam Islas Benítez Lic. Juan de la Cruz Higuera Arias C.P.C. Francisco Javier Hoyos Hernández C.P. José Antonio Lara del Olmo C.P.C. Luis Liñero Colorado C.P.C. Pablo Octavio Mendoza García C.P. Jesús Navarro Martínez C.P.C. Jorge Javier Ordoñez Rengel C.P.C. Joel Ortega Jonguitud Lic. Arturo Pérez Robles C.P.C. Gerardo Plascencia Chavarín Lic. Pablo Puga Vertiz Lic. Enrique Ramírez Figueroa C.P.C. Feliciano Ramírez Mijangos C.P. José Manuel Ramírez Ontiveros C.P.C. José Carlos Silva Sánchez Gavito C.P.C. Pedro Solís Cámara Jiménez Canet C.P.C. Alfredo Solloa García C.P.C. Ignacio Sosa López C.P.C. Manuel Toledo Espinosa C.P.C. Guillermo Leopoldo Uribe Garay C.P. Agustín Vargas Meneses COLEGIO DE CONTADORES PÚBLICOS DE MÉXICO. Presidente: CPC Manuel C. Gutiérrez García. El Material aquí reproducido es propiedad del CCPM, queda estrictamente prohibida su reproducción total o parcial sin previa autorización por escrito. © DERECHOS RESERVADOS Prohibida su reproducción total o parcial. 2 Haz clic en el tema que deseas consultar, para regresar a esta página haz clic en el logo que aparece al final de cada sección. ÍNDICE 1. Definición de pérdida fiscal 4 2. Capítulos en los que pueden generar pérdida fiscal las personas físicas. 4 1 De los ingresos por salarios y en general por la presentación de un servicio subordinado. 6 I. De los ingresos por actividades empresariales y profesionales. 6 II. De los ingresos por arrendamiento y en general por otorgar el uso o goce temporal de bienes inmuebles. 7 III. De los ingresos por enajenación de bienes. 8 IV. De los ingresos por adquisición de bienes. 8 V. De los ingresos por intereses 9 VI. De los ingresos por la obtención de premios. 9 VII. De los ingresos por dividendos y en general por las ganancias distribuidas por personas físicas. 9 VIII. De los demás ingresos que obtengan las personas físicas. 10 3. Reglas para su amortización 10 Actividades empresariales y profesionales. 10 Arrendamiento, enajenación y adquisición de bienes. 12 Intereses. 13 De los demás ingresos. 13 4. Análisis de las garantías constitucionales relacionadas. 13 5. Ejemplos. 15 3 1. Definición de pérdida fiscal Pérdida fiscal es la diferencia entre los ingresos acumulables del ejercicio y las deducciones autorizadas por la Ley del Impuesto sobre la Renta (LISR) correspondientes al mismo ejercicio; siempre que el monto de las deducciones sea superior a los ingresos. El tema que abordaremos es el tratamiento que las personas físicas deben dar a las pérdidas fiscales que generen; situación que depende de los capítulos de la LISR por los cuales perciba ingresos y tribute específicamente cada contribuyente; es decir, que no por todo tipo de ingresos contemplados en la ley susceptibles de ser percibidos por una persona física, se permite la generación de pérdida fiscal, además de que dichas pérdidas tienen un particular y diferente tratamiento, dependiendo del tipo de ingreso que las haya generado. En este sentido, es importante mencionar que las personas físicas son aquellas que cuentan con capacidad natural y jurídica para llevar a cabo de manera individual las actividades lícitas que les permitan obtener un ingreso, y esto puede ser a través de la prestación de sus servicios de manera dependiente o independiente, desarrollando una actividad empresarial o de algún otro tipo y dentro de la LISR se encuentran reguladas por el Título IV. 2. Capítulos en los que pueden generar pérdida fiscal las personas físicas. A efecto de ilustrar claramente lo que se mencionó en el punto anterior, respecto a que la LISR no permite la generación de pérdidas por cualquier tipo de ingreso que obtengan las personas físicas, a continuación se muestra un cuadro comparativo entre las disposiciones que al respecto establecía la LISR vigente hasta el 31 de diciembre de 2001 y las que se encuentran vigentes al día de hoy. Al final del cuadro, se presenta una breve explicación de cuáles capítulos sí permiten la generación de pérdidas fiscales actualmente. LEY DEL IMPUESTO SOBRE LA RENTA TÍTULO IV. PERSONAS FÍSICAS (PÉRDIDAS FISCALES) 2001 2005 CAP SALARIOS ACTIVIDADES PROFESIONALES I II CAP No consideraba el concepto SALARIOS de pérdida fiscal. I No considera el concepto de pérdida fiscal. No consideraba el concepto ACTIVIDADES de pérdida a nivel anual. EMPRESARIALES II Ambas actividades están contempladas en el 4 ACTIVIDADES VI EMPRESARIALES SECCIÓN I SECCIÓN II Y SECCIÓN III El impuesto sobre la renta Y PROFESIONALES por estas actividades tenía SECCIÓN I el carácter de definitivo, por lo tanto éstos ingresos no se acumulaban a los demás ingresos y en caso de que existiera pérdida fiscal por estas actividades se podía deducir de los demás ingresos que el contribuyente debía acumular en la declaración anual correspondiente a ese mismo año después de efectuar, en su caso, las deducciones del Capítulo III, la parte de la pérdida que corresponda por enajenación de bienes y las correspondientes a adquisición de bienes. La parte no deducida de la pérdida fiscal, podía ser disminuida de la utilidad fiscal por las actividades empresariales en los términos del artículo 108-A de la LISR. (Art. 131 RLISR) mismo capítulo, y la Ley sí considera la posibilidad de generar pérdida fiscal para ambas actividades. La sección II era “Del SECCIÓN II Y Régimen Simplificado a las SECCIÓN III actividades empresariales y no consideraba el concepto de pérdida fiscal. La sección II actualmente es “Del Régimen Intermedio de las personas físicas con actividades empresariales” y sí considera el concepto de pérdida fiscal. La sección III era la misma que actualmente; es decir, el régimen de pequeños contribuyentes y no consideraba el concepto de pérdida fiscal. ARRENDAMIENTO III ENAJENACIÓN DE BIENES IV Sí estaba contemplada la ARRENDAMIENTO obtención de pérdida fiscal. Si consideraba el concepto ENAJENACIÓN de pérdida fiscal DE BIENES La sección III sigue siendo el Régimen de pequeños contribuyentes y no contempla el concepto de pérdida fiscal. III Sí se puede obtener pérdida fiscal al obtener ingresos por este capítulo. IV Sí considera el concepto de pérdida fiscal, pero con ciertas limitantes en cuanto a su amortización. 5 ADQUISICIÓN DE BIENES V INTERESES VII El concepto de pérdida fiscal ADQUISICIÓN para este capítulo estaba DE BIENES contemplado en el artículo 129 del RISR y no contemplaba excepciones para su amortización. V El concepto de pérdida fiscal para este capítulo está contemplado en el artículo 207 del RISR y contempla ciertas excepciones para su amortización. El impuesto sobre la renta INTERESES retenido por este concepto, tenía carácter de definitivo y por consiguiente, no consideraba el concepto de pérdida VI Considera que se tiene pérdida cuando el ajuste anual por inflación es mayor que los intereses. (Art. 159 LISR) y contempla ciertas excepciones para su amortización. VII PREMIOS IX No considera el concepto de PREMIOS pérdida. No considera concepto de pérdida. el DIVIDENDOS Y GANACIAS DISTRIBUIDAS POR PERSONAS MORALES VII No considera el concepto de DIVIDENDOS Y considera VIII No pérdida. concepto de pérdida. GANACIAS DISTRIBUIDAS POR PERSONAS MORALES el DEMÁS INGRESOS X Este capítulo reconoce el DEMÁS INGRESOS concepto de pérdida cambiaria o inflacionaria, que se determina de acuerdo a la fluctuación de la moneda y de acuerdo al procedimiento que maneja el Art. 7-B LISR, respectivamente. IX El capítulo contempla dos tipos de pérdida: la pérdida cambiaria y la que se obtiene cuando el ajuste por inflación es mayor que los intereses obtenidos. 1. De los ingresos por salarios y en general por la prestación de un servicio personal subordinado. Las personas que obtienen ingresos de los contemplados en este capítulo no pueden generar pérdida fiscal; puesto que la base para el cálculo del ISR es el total de ingresos obtenidos sin que la ley les permita deducción alguna. I. De los ingresos por actividades empresariales y profesionales. Tal como su nombre lo indica, en este capítulo tributan tanto las personas físicas que obtienen ingresos por prestar un servicio profesional independiente, como las que obtienen ingresos por realizar alguna actividad empresarial, entendiéndose por éstas 6 últimas las siguientes: actividades comerciales, industriales, agrícolas, ganaderas, pesqueras y silvícolas. Este capítulo se divide en las siguientes tres secciones: a) De las personas físicas con actividades empresariales y profesionales. Las personas que tributan en esta sección, sí pueden obtener pérdida fiscal, tanto quienes obtienen ingresos por actividades empresariales como quienes prestan servicios profesionales, y es el artículo 130 de la LISR el que establece los lineamientos a seguir para quienes las obtengan. b) Del régimen intermedio empresariales. de las personas físicas con actividades En términos generales, la forma de determinar el impuesto para las personas que tributan bajo este régimen es muy similar a las de la sección anterior, salvo por la siguiente diferencia: Las personas del régimen intermedio, tienen la obligación de efectuar pagos mensuales a la Entidad Federativa en la que obtengan sus ingresos; dichos pagos se determinarán aplicando la tasa del 5% al resultado fiscal obtenido; es decir, a los ingresos acumulables disminuidos con las deducciones autorizadas, la PTU pagada, la exclusión general de $6,333.33 por cada uno de los meses a que corresponda el pago, y en su caso, disminuidos también con las pérdidas fiscales de ejercicios anteriores pendientes de aplicar. El impuesto determinado conforme al párrafo anterior, se comparará con el pago que se determina para la Federación y si éste último es menor, se pagará sólo ese importe pero a la Entidad Federativa. De acuerdo con lo anterior, podemos observar que las personas de esta sección sí pueden generar pérdida fiscal. c) Del régimen de pequeños contribuyentes. Las personas que tributen bajo este régimen, no podrán generar pérdida fiscal debido a que los pagos que efectúan de manera bimestral tienen el carácter de definitivos de acuerdo a lo establecido en el artículo 139 fracción VI de la LISR y la base para calcular dichos pagos es la diferencia que resulte de disminuir al total de ingresos percibidos en dicho periodo, la cantidad de $42,222.22 (por cada mes) en caso de aquellos contribuyentes que enajenen bienes o $12,666.66 (por cada mes) en el caso de aquellos que presten servicios. II. De los ingresos por arrendamiento y en general por otorgar el uso o goce temporal de bienes inmuebles. Las personas que obtengan ingresos por otorgar el uso o goce temporal de bienes inmuebles, entendiéndose por este concepto: el arrendamiento o 7 subarrendamiento de los mismos; o bien, la obtención de ingresos por los rendimientos de certificados de participación inmobiliaria no amortizables, sí podrán generar pérdida fiscal. Lo anterior, debido a que la Ley les permite disminuir de sus ingresos una serie de deducciones, y el propio Reglamento de la Ley del Impuesto sobre la Renta (RISR) en su artículo 184 les permite que éstas sean superiores a sus ingresos. III. De los ingresos por enajenación de bienes. Según el artículo 14 del Código Fiscal de la Federación (CFF), se entiende por enajenación de bienes, entre otras: toda transmisión de propiedad, aun en la que el enajenante se reserve el dominio del bien enajenado, las adjudicaciones, la aportación a una sociedad o asociación, la cesión de derechos sobre bienes afectos a un fideicomiso, la transmisión de dominio de un bien tangible o del derecho para adquirirlo, la transmisión de derechos de crédito, etc. Las personas que tributan bajo este régimen calculan el impuesto correspondiente sobre su utilidad fiscal, en caso de tenerla. Para estos efectos, considerarán como ingreso, el monto de la contraprestación obtenida, inclusive si fuera a crédito, o en su defecto, en el caso de que no hubiera contraprestación, se considerará el valor del avalúo practicado por persona autorizada por las autoridades fiscales. Dichos ingresos se disminuirán con las siguientes deducciones actualizadas: el costo comprobado de adquisición, el importe de las inversiones hechas en construcciones, mejoras y ampliaciones, los gastos notariales, impuestos y derechos por escrituras de adquisición y enajenación, y las comisiones y mediaciones pagadas por el enajenante. En consecuencia, si dichas deducciones son superiores a los ingresos obtenidos, el contribuyente obtendrá una pérdida fiscal por enajenación de bienes. IV. De los ingresos por adquisición de bienes. Las personas que perciban ingresos por adquisición de bienes, calcularán el impuesto anual disminuyendo del total de los ingresos percibidos por este concepto, las contribuciones federales y locales, con excepción del impuesto sobre la renta, así como los gastos notariales efectuados con motivo de la adquisición; los demás gastos efectuados con motivo de juicios en los que se reconozca el derecho a adquirir; los pagos efectuados con motivo del avalúo y las comisiones y mediaciones pagadas por el adquirente. En virtud de lo anterior, y aunque la ley no lo contempla explícitamente, es posible que dichas deducciones resulten ser superiores a los ingresos percibidos y es por eso, que el RISR en su artículo 207 contempla dicha posibilidad, dejando así a 8 quienes perciban ingresos por este concepto en posibilidades de generar pérdida fiscal. V. De los ingresos por intereses. De acuerdo con las disposiciones de este capítulo, las personas que perciban ingresos por este concepto, deberán acumular a sus demás ingresos los intereses reales percibidos en el ejercicio; es decir, el monto en que los intereses excedan al ajuste anual por inflación. Conforme a lo anterior, la propia ley establece que en caso de que el ajuste anual por inflación sea mayor que los intereses obtenidos, el resultado será considerado como pérdida. VI. De los ingresos por obtención de premios. En el caso de las personas que obtengan ingresos por premios; es decir, por la celebración de loterías, rifas, sorteos, juegos con apuestas y concursos de toda clase, autorizados legalmente, el impuesto les será retenido por las personas que hagan los pagos y se considerará como pago definitivo. Si dichos premios solos, o en conjunto con préstamos y donativos obtenidos en el mismo ejercicio, exceden de $1,000,000.00 y la persona que los obtenga, estando obligada a informar dicha situación en su declaración anual, no lo hace, el impuesto retenido por premios no podrá considerarse como pago definitivo y las personas que los perciban estarán obligados a acumularlos a sus demás ingresos, sin deducción alguna. Situación que nos lleva a concluir que no podrán generar pérdida fiscal por este concepto. VII. De los ingresos por dividendos y en general por las ganancias distribuidas por personas morales. Los dividendos son la parte proporcional que corresponde a los socios sobre las utilidades que genera la empresa, y cuando una persona percibe ingresos por este concepto, la ley lo obliga a acumular tanto el ingreso percibido como el impuesto proporcional a dichos dividendos, pagado por la persona moral que los distribuya, siendo ésta la base para determinar el impuesto que corresponda a dichos dividendos percibidos; por lo tanto, en virtud de que no se permite deducción alguna, no se podrá generar pérdida fiscal por los ingresos por dividendos. 9 VIII. De los demás ingresos que obtengan las personas físicas. La única deducción que la LISR contempla para quienes perciban ingresos de este capítulo, es la exclusión general de $6,333.33 por cada mes del periodo al que corresponda el pago. Pero la ley es muy clara al especificar que en ningún caso la exclusión general podrá ser mayor a los ingresos acumulables, por lo que las personas que obtengan ingresos de los contemplados en este capítulo, no podrán generar pérdida fiscal, salvo la pérdida cambiaria que obtengan cuando realicen operaciones en moneda extranjera o la pérdida por ajuste anual por inflación cuando obtengan intereses de los no contemplados en el capítulo VI. 3. Reglas para su amortización Retomando el análisis al cuadro anterior, podemos comentar que con la entrada en vigor de la Nueva LISR en 2002, se realizaron importantes modificaciones a las disposiciones que regulan el régimen de las persona físicas. En algunos casos esto representó un cambio favorable y en algunos otros, aunque poco comentadas en su momento, sin duda fueron un cambio desfavorable ya que significaron una limitante que hasta 2001 no se tenía. Actividades empresariales y profesionales A diferencia de lo que disponía la LISR en 2001, a partir del ejercicio 2002 las pérdidas fiscales que se determinen en el régimen de Actividad Empresarial a que se refieren las Secciones I y II del Capítulo II, no podrán ser disminuidas de los demás ingresos que se obtengan en un ejercicio, ya que como señala el artículo 130 sólo podrán ser diminuidas de la utilidad fiscal derivada de las propias actividades que la generaron. Con respecto a estas mismas secciones, podemos mencionar como diferencia favorable el hecho de que la ley actual sí permite a las personas que perciben ingresos por servicios profesionales, la obtención y amortización de pérdida fiscal. La pérdida fiscal de cualquiera de estas dos secciones del Capítulo II, ocurrida en un ejercicio, podrá disminuirse de las utilidades fiscales que se generen en los diez ejercicios siguientes, hasta agotarla, de acuerdo al artículo 130 segundo párrafo. Si el contribuyente no disminuye la pérdida fiscal en un ejercicio, pudiéndolo hacer, perderá el derecho a hacerlo en los ejercicios posteriores hasta por el importe que pudo haber disminuido. 10 Asimismo, el derecho de disminuir las pérdidas fiscales es personal, sólo le corresponde al contribuyente que las sufre y no podrá ser transmitido. Sin embargo, existe la excepción de los contribuyentes que realicen actividades empresariales, ya que ellos por causa de muerte podrán transmitir el derecho a los herederos o legatarios que continúen desempeñando dichas actividades de las que derivó la pérdida. Para efectos de poder amortizar las pérdidas obtenidas por el contribuyente por ingresos de las secciones I o II del Capítulo II del Título IV de la LISR, éstas se deberán actualizar considerando los siguientes factores: a) Factor para actualizar por primera vez la Pérdida Fiscal por el ejercicio en que ocurrió: INPC del último mes del ejercicio en que ocurrió la pérdida Factor de = Actualización INPC del primer mes de la segunda mitad del ejercicio en que ocurrió la pérdida El monto de la pérdida ocurrida en un ejercicio, se actualizará multiplicándola por el factor que resulte del periodo comprendido desde el primer mes de la segunda mitad del ejercicio en que ocurrió y hasta el último mes del mismo ejercicio. b) Factor para actualizar la Pérdida Fiscal de ejercicios anteriores ya actualizada, pendiente de aplicar: INPC del último mes de la primera mitad del ejercicio en el Factor de = que se aplicará Actualización INPC del mes en que se actualizó por última vez La parte de las pérdidas de ejercicios anteriores ya actualizada, pendiente de aplicar contra utilidades fiscales se actualizará considerando el factor de actualización comprendido desde el mes en que se actualizó por última vez y hasta el último mes de la primera mitad del ejercicio en el que se aplicará. En este mismo tenor, cuando el número de meses del ejercicio en que ocurrió la pérdida sea impar, se considerará como primer mes de la segunda mitad, el mes inmediato posterior al que corresponda la mitad del ejercicio. c) Para obtener la pérdida actualizada se sigue el siguiente procedimiento: Monto de la Pérdida x Factor de actualización = Monto de la Pérdida actualizada 11 1ra. Actualización. Desde el primer mes de la segunda mitad del ejercicio en que ocurrió y hasta el último mes del ejercicio. 2da. Actualización. La parte de la pérdida ya actualizada, se actualizará desde el mes en que se actualizó por última vez y hasta el último mes de la primera mitad del ejercicio en que se aplicará. Arrendamiento, enajenación y adquisición de bienes. Por otra parte, podemos comentar que una diferencia importante que se desprende del comparativo anterior, es que para el caso de la pérdida fiscal que se obtenga por otorgar el uso o goce temporal de bienes inmuebles, por la enajenación de bienes e igualmente en el caso de adquisición de bienes, su disminución se limitó sólo a algunos ingresos, ya que tal como lo señalan tanto el artículo 149 de la LISR actual como el 184 y 207 del RISR, dichas pérdidas podrán disminuirse de los demás ingresos excepto los correspondientes al Capítulo I y Capítulo II. La pérdida fiscal obtenida por enajenación de bienes tiene un tratamiento especial, regulado por el artículo 149 de la LISR, mismo que a continuación explicamos: a) La pérdida obtenida se dividirá entre el número de años transcurridos entre la fecha de adquisición y la de enajenación del bien de que se trate, sin que dicho número exceda de diez. El resultado obtenido será la parte de la pérdida que podrá disminuirse de los demás ingresos, con la salvedad expuesta anteriormente, que el contribuyente de acumular en la declaración anual de ese mismo año o en los tres años de calendario siguientes. b) La parte de la pérdida no disminuida conforme al inciso anterior, se multiplicará por la tasa de impuesto que corresponda al contribuyente en el año en que sufra la pérdida. Si en ese año no resulta impuesto, se considerará la tasa correspondiente al año de calendario siguiente, sin exceder de tres. El resultado que se obtenga, podrá acreditarse en el año de que se trate o en los tres siguientes, contra la cantidad que resulte de aplicar la tasa de impuesto correspondiente al año de que se trate al total de la ganancia por la enajenación de bienes que se obtenga en el mismo año. Esta tasa, se calculará dividiendo el impuesto que hubiera correspondido al contribuyente en la declaración anual de que se trate, entre la cantidad a la cual se le aplicó la tarifa del artículo 177 de la LISR para obtener dicho impuesto; el cociente se multiplicará por cien y el producto se expresa en por ciento. Si el contribuyente no deduce la parte de la parte de la pérdida a que se refiere el inciso a), o no efectúe el acreditamiento a que se refiere el inciso b), pudiéndolo haber hecho, perderá el derecho a hacerlo en años posteriores hasta por la cantidad en al que pudo haberlo hecho. La parte de la pérdida por enajenación de bienes que no se deduzca en un ejercicio, excepto la que se sufra por enajenación de bienes inmuebles, se 12 actualizará por el periodo comprendido desde el mes del cierre del ejercicio en el que se sufrió la pérdida o se actualizó por última vez y hasta el último mes del ejercicio inmediato anterior al ejercicio en que se deduzca. Intereses Una pérdida que no se había reconocido hasta 2001 y que se establece en el artículo 159 correspondiente al Capítulo de intereses en la ley actual, es la pérdida que se genera al momento de determinar el interés real si el ajuste por inflación es mayor a los intereses nominales obtenidos. Sin embargo, también se estableció que dicha pérdida se podrá disminuir de los demás ingresos que se obtengan en el ejercicio excepto de los ingresos obtenidos en los Capítulos I y II. La parte de la pérdida por intereses que no se hubiese podido disminuir en el ejercicio, se podrá aplicar en los cinco ejercicios siguientes hasta agotarla, actualizada desde el último mes del ejercicio en que ocurrió y hasta el último mes del ejercicio en el que se aplique o desde que se actualizó por última vez y hasta el último mes del ejercicio en que se aplique, según corresponda. De los demás ingresos Con respecto al Capítulo IX de los demás ingresos, la pérdida por intereses, así como la pérdida cambiaria, podrán disminuirse de los intereses acumulables que perciba el contribuyente en el ejercicio en que ocurra o en los cuatro ejercicios posteriores a aquél en el que se hubiera sufrido la pérdida. De igual manera que con las pérdidas explicadas anteriormente, si el contribuyente no disminuye en un ejercicio estas pérdidas, pudiendo haberlo hecho, perderá el derecho a hacerlo en ejercicios posteriores hasta por la cantidad en la que pudo haberlo efectuado. El monto de la pérdida cambiaria o la pérdida por intereses de los no mencionados en el capítulo VI, que no se disminuya en un ejercicio, se actualizará multiplicándolo por el factor de actualización correspondiente al periodo comprendido desde el primer mes de la segunda mitad del ejercicio en que se obtuvo y hasta el último mes del mismo ejercicio. La parte de estas pérdidas de ejercicios anteriores ya actualizada pendiente de disminuir contra los intereses o contra la ganancia cambiaria, se actualizará multiplicándola por el factor de actualización correspondiente al periodo comprendido desde el mes de diciembre del ejercicio en que se actualizó por última vez y hasta el mes de diciembre del ejercicio inmediato anterior a aquel en que se aplicará. 4 Análisis de las garantías constitucionales relacionadas. Es importante observar que a diferencia de las disposiciones vigentes hasta 2001, sin explicación o justificación alguna por parte del Poder Legislativo, se están estableciendo en las diversas disposiciones de la Ley, limitantes para poder deducir la pérdida fiscal que se obtenga en algún Capítulo, de los demás ingresos que se tengan 13 que acumular en un ejercicio, lo cual evidentemente transgrede los principios constitucionales que a continuación se mencionan. Garantía de proporcionalidad El artículo 31 fracción IV de la Constitución, establece la garantía de proporcionalidad tributaria, que consiste en que los contribuyentes deben tributar en función de su riqueza generada y su real capacidad contributiva. En materia de Impuesto sobre la Renta, la capacidad contributiva se cumple cuando al determinar la base de impuesto, se disminuyen de los ingresos las deducciones que se realizan para obtener dicho ingreso y disminuyendo también las pérdidas fiscales que se tengan, por lo que al momento de aplicar el procedimiento establecido en Ley para determinar el impuesto anual y no poder disminuir en su totalidad una pérdida generada en alguno de los Capítulos de los demás ingresos que se deban acumular en un ejercicio, no se está considerando de manera real la capacidad contributiva del contribuyente, así que se estaría determinando una base de impuesto mayor, ficticia e irreal. Lo anterior se soporta con la Jurisprudencia número P./J.109/99, dictada por el H. Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, publicada en el Semanario Judicial de la Federación, Novena Época, Tomo X, del mes de noviembre de 1999, que dice a la letra: CAPACIDAD CONTRIBUTIVA. CONSISTE EN LA POTENCIALIDAD REAL DE CONTRIBUIR A LOS GASTOS PUBLICOS. Esta Suprema Corte de Justicia de la Nación, ha sostenido que el principio de proporcionalidad tributaria exigido por el artículo 31, fracción IV, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, consiste en que los sujetos pasivos de un tributo deben contribuir a los gastos públicos en función de su respectiva capacidad contributiva. Lo anterior significa que para que un gravamen sea proporcional, se requiere que el hecho imponible del tributo establecido por el Estado, refleje una auténtica manifestación de capacidad económica del sujeto pasivo, entendida ésta como la potencialidad real de contribuir a los gastos públicos. Ahora bien, tomando en consideración que todos los presupuestos de hecho de los impuestos deben tener una naturaleza económica en forma de una situación o de un movimiento de riqueza y que las consecuencias tributarias son medidas en función de esta riqueza, debe concluirse que es necesaria una estrecha relación entre el hecho imponible y la base gravable a la que se aplica la tasa o tarifa del impuesto. Garantía de equidad tributaria El artículo 31 fracción IV de la Constitución, también establece la garantía de equidad tributaria, que consiste en que el supuesto normativo establezca un trato similar para 14 todos los efectos legales, a quienes se ubiquen en la misma situación jurídica. De esta manera, se puede señalar que varios de los artículos aplicables a personas físicas de la LISR no cumplen con el mandato constitucional ya que conforme al artículo 175 de la misma Ley se obliga a los contribuyentes a acumular la totalidad de sus ingresos independientemente de donde provengan. Sin embargo, por disposición expresa de algunos artículos no se permite disminuir a los contribuyentes con ciertos ingresos la pérdida que sí pueden disminuir otros contribuyentes con ingresos de otros Capítulos, lo cual ocasiona de igual forma que no se determine de manera real la base gravable. Se puede citar la siguiente Jurisprudencia dictada por el H. Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, publicada en el Semanario Judicial de la Federación, Novena Época, Tomo V, del mes de junio de 1997, que dice: EQUIDAD TRIBUTARIA. SUS ELEMENTOS El principio de equidad no implica la necesidad de que los sujetos se encuentren, en todo momento y ante cualquier circunstancia, en condiciones de absoluta igualdad, sino que, sin perjuicio del deber de los Poderes públicos de procurar la igualdad real, dicho principio se refiere a la igualdad jurídica, es decir, al derecho de todos los gobernados de recibir el mismo trato que quienes se ubican en similar situación de hecho porque la igualdad a que se refiere el artículo 31, fracción IV, constitucional, lo es ante la ley y ante la aplicación de la ley. De lo anterior derivan los siguientes elementos objetivos, que permiten delimitar al principio de equidad tributaria: a) no toda desigualdad de trato por la ley supone una violación al artículo 31, fracción IV, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, sino que dicha violación se configura únicamente si aquella desigualdad produce distinción entre situaciones tributarias que pueden considerarse iguales sin que exista para ello una justificación objetiva y razonable; b) a iguales supuestos de hecho deben corresponder idénticas consecuencias jurídicas; c) no se prohíbe al legislador contemplar la desigualdad de trato, sino sólo en los casos en que resulta artificiosa o injustificada la distinción; y d) para que la diferenciación tributaria resulte acorde con las garantías de igualdad, las consecuencias jurídicas que resultan de la ley, deben ser adecuadas y proporcionadas, para conseguir el trato equitativo, de manera que la relación entre la medida adoptada, el resultado que produce y el fin pretendido por el legislador, superen un juicio de equilibrio en sede constitucional. Para efectos de ver de manera clara la afectación que tienen los contribuyentes al no poder deducir las pérdidas fiscales que obtengan en un Capítulo de sus demás ingresos, se muestran los siguientes ejemplos. 5. Ejemplos Ejemplo 1 Contribuyente con ingresos del Capítulo I, II y IV 15 Capítulo I. Ingresos por retiro de socios de $600,000.00 Capítulo II. Actividad empresarial Ingresos y deducciones por $500,000.00 y $780,000.00 respectivamente Capítulo IV. Ganancia fiscal en venta de acciones por $400,000.00, y se tiene 5 años transcurridos entre la fecha de adquisición y la de enajenación Cabe señalar que para efectos de observar la comparación con más claridad, se utilizará para determinar el impuesto que corresponda tanto en la mecánica de 2001 como en la de 2005, la tarifa vigente en 2005. Mecánica 2005 Actividad empresarial Ingresos Deducciones Utilidad ó (Pérdida) Fiscal Enajenación de bienes Ganancia total Años de tenencia Ganancia acumulable Ganancia no acumulable Cálculo anual Ingresos acumulables: (+) Retiro de socios (+) Utilidad en Actividad empresarial (+) Enajenación de bienes (=) Base gravable (-) Pérdida fiscal de actividad empresarial (=) Base de impuesto ISR Art. 177 (-) Subsidio (Art. 178) (=) ISR sobre Ing. Acumulables Mecánica 2001 500,000 780,000 -280,000 500,000 780,000 -280,000 400,000 5 80,000 320,000 400,000 5 80,000 320,000 600,000 0 80,000 680,000 600,000 0 80,000 680,000 0 680,000 187,782 38,432 149,350 280,000 400,000 103,782 38,432 65,350 Total Ing. No acumulables (x) Tas de impuesto (=) ISR sobre Ing. No Acumulables 320,000 27.61% 88,352 320,000 25.95% 83,040 Total de Impuesto (ISR Ing. Acumulables + Ing. No Acumulables) 237,702 148,390 Diferencia de impuesto por no poder aplicar la pérdida en su totalidad 89,312 Ejemplo 2 Contribuyente con ingresos del Capítulo II, IV y VIII 16 Capítulo II. Honorarios. Ingresos y deducciones por $1,000,000.00 y $500,000.00 respectivamente Capítulo IV. Pérdida en venta de acciones por $800,000.00, y se tiene 3 años transcurridos entre la fecha de adquisición y la de enajenación Capítulo VIII. Dividendos recibidos por un total de $200,000.00 Para efectos de comparar los resultados, el impuesto que se determine tanto en la mecánica de 2001 como en la de 2005, se hará utilizando la tarifa vigente en 2005. Mecánica 2005 Actividad de Honorarios Ingresos Deducciones Utilidad o (Pérdida) Fiscal Enajenación de bienes Pérdida total Años de tenencia Pérdida a deducir en el ejercicio Pérdida a disminuir en los 3 ejercicios siguientes mediante acreditamiento Dividendos Dividendo recibido efectivamente Factor de Piramidación Dividendo acumulable Cálculo anual Ingresos acumulables: (+) Utilidad fiscal en Honorarios (+) Ganancia en enajenación de bienes (+) Dividendos (=) Base gravable (-) Pérdida fiscal en enajenación de bienes (=) Base de impuesto ISR (-) Subsidio (=) ISR a pagar Diferencia de impuesto por no poder aplicar la pérdida en su totalidad Mecánica 2001 1,000,000 500,000 500,000 1,000,000 500,000 500,000 1,800,000 3 600,000 1,200,000 1,800,000 3 600,000 1,200,000 200,000 1.4286 285,720 200,000 1.4286 285,720 500,000 0 285,720 785,720 500,000 0 285,720 785,720 285,720 500,000 133,782 38,432 95,350 600,000 185,720 39,498 17,885 21,613 73,737 Como se puede observar en los ejemplos anteriores, si existe una afectación en la determinación de los impuestos al utilizar la mecánica vigente en 2005 y la que se tenía hasta el año de 2001, es evidente que no existe justificación legal alguna para que haya distinción para las personas que perciben cierto tipo de ingresos, ya que el hecho de que una persona física obtenga ingresos del Capítulo I no la hace diferente a la que percibe ingresos de otros Capítulos, y más aún cuando ambas deben acumular la totalidad de sus ingresos independientemente de su origen. 17 Por lo anterior, aquellas persona físicas que se encuentren en la situación de afectación por no poder disminuir una pérdida que obtengan por la realización de una actividad, de los demás ingresos que tengan que acumular en su declaración anual, tendrán los elementos necesarios para evaluar la conveniencia de promover los recursos necesarios y de esta manera tributar conforme su riqueza generada y de manera proporcional a su real capacidad contributiva. COLEGIO DE CONTADORES PÚBLICOS DE MÉXICO. Presidente: CPC Manuel C. Gutiérrez García. El Material aquí reproducido es propiedad del CCPM, queda estrictamente prohibida su reproducción total o parcial sin previa autorización por escrito. © DERECHOS RESERVADOS Prohibida su reproducción total o parcial. 18