Agua y salud: balnearios y parques acuáticos de aguas termales Si utilizas este material por favor cita al boletín electrónico Brújula de compra de Profeco (www.profeco.gob.mx) Si las palabras balneario y termal te refieren únicamente a Ixtapan de la Sal y a que todas los manantiales son azufrosos te falta mucho por conocer sobre este tema. Según datos de la Asociación Mexicana de Parques Acuáticos y Balnearios (AMPABA) en México hay aproximadamente 1,200 establecimientos de este tipo y la UNAM tiene una clasificación del agua de por lo menos 8 grupos. Los manantiales termales contienen diferentes componentes químicos, según su origen; en el siguiente artículo nos sumergiremos en el mundo de las aguas termales para descubrir sus cualidades, en dónde las podemos encontrar y cuánto cuestan algunos balnearios del país. Un chapuzón de agua termal Desde 1989 la Organización Mundial de la Salud estableció que el uso de agua termal puede ayudar al tratamiento de diversas afecciones, pero definitivamente está lejos de ser la fuente de la eterna juventud o de brindar la cura total de alguna enfermedad. El hecho de que las aguas termales o mineromedicinales, como también se conocen, nos ayuden a mejorar problemas depresivos, reumáticos, estomacales, renales, entre otros muchos padecimientos, se debe básicamente a los componentes minerales que ellas contienen. Es por eso que a continuación te explicamos su origen, clasificación química y beneficios médicos. Los manantiales termales tienen una gran diversidad tanto en temperatura como en composición química. Cada país define termal de acuerdo con sus propias características. Es decir, en México un manantial con agua de 20°C podría considerarse frío, sin embargo, en Siberia se considera termal. Ante esta disyuntiva se ha definido agua termal como aquella que se encuentra a una temperatura por lo menos 5°C más alta a la temperatura media anual del lugar. En nuestro país existen manantiales que alcanza hasta 80°C. Las aguas termales por su temperatura se clasifican en: Hipertermales Más de 45°C Mesotermales De 35°C a 45°C Hipotermales De 21°C a 35°C Aguas frías Menos de 20°C Este tipo de aguas se clasifican en dos: magmáticas y telúricas. Las primeras son aquellas que nacen en zonas volcánicas, mientras que las segundas se forman cuando las corrientes subterráneas de agua pasan junto a rocas calientes que se encuentran a gran profundidad, por lo que puede encontrarse en cualquier lado. Los análisis químicos de las aguas de manantiales termales revelan que poseen una gran cantidad de compuestos (boro, bromo, arsénico, nitrógeno, cloruros, magnesio etc.), los cuales se disuelven en el agua en su paso por las capas de las rocas; al aumentar su temperatura, el agua aumenta su capacidad para disolver algunos minerales. La clasificación química de las aguas termales se determina por su contenido de iones predominantes. Los iones son moléculas de substancias minerales que se cargan de electricidad positiva (cationes) o negativa (aniones). El anión o catión debe representar más de 20% de mineralización global para clasificar un agua como tal. De acuerdo con un estudio realizado por la Secretaría de Turismo (Sector) en colaboración con la UNAM, la clasificación química de las aguas es como se muestra en la siguiente tabla: Clasificación química de las aguas termales y sus beneficios médicos Clasificación aguas Características Administración Cloruradas Predomina el Inmersión anión cloruro Inhalación Catión: Sodio, Vía oral calcio o magnesio Las de alta mineralización suelen ser frías y las de baja son termales Sulfatadas Predomina el anión de sulfato Mineralización y temperatura variables Sulfuradas Contienen más de Inmersión 1mg/L de azufre Inhalación bivalente Vía oral Tienen olor a huevo podrido Suele tener material orgánico adicional como Vía oral Inmersión Beneficios que ayuda a tratar… Reumatismo Contractura muscular Dermatología Estados de agotamiento crónico Afecciones en vías respiratorias crónicas Afecciones del aparato digestivo Dispepsias gastrointestinales Estreñimiento Enterocolitis Gastritis Intoxicación alimenticia o por medicamentos Afecciones hepatobiliares Afecciones vías biliares Afecciones en vías respiratorias crónicas Afecciones hepáticas Dermatosis Reumatismo Procesos algas y bacterias Bicarbonatadas Predomina el Inmersión anión bicarbonato Inhalación Vía oral Carbogaseosas Concentración mayor de 250 mg/L de carbón libre Radioactivas Contienen radón Inmersión (gas radiactivo de origen natural). Las dosis de radiactividad aplicadas a las curas termales nunca suponen un riesgo y por el contrario ha demostrado beneficios sobre el sistema neurovegetativo y endócrino Contienen hierro Inmersión bivalente en más Vía oral de 1 mg/L Suelen ser bicarbonatadas o sulfadas Ferruginosas Vía oral Inmersión ginecológicos Secuelas de intervenciones quirúrgicas y traumatismos Afecciones gástricas Diarreas Estreñimiento Úlceras duodenales Intoxicaciones hepáticas Reumatismo Cálculos Arteritis obliterante Enfermedades vasculares periféricas Enfermedades cardiacas crónicas Enfermedades de la sangre Reumatismo Procesos digestivos Reumatismo Afecciones circulatorias del aparato respiratorio y digestivo Procesos alérgicos Estrés Depresión Alteraciones del sistema nervioso Transtornos hepato-biliares Reumatismo Anemias Trastornos de desarrollo en la infancia Fuente: Estudio "Clasificación química y microbiológica de aguas termales y sus fangos" realizado por la SECTUR y UNAM, 2005/ Elaborado por la Dirección General de Estudios sobre Consumo de la Profeco Los manantiales pueden compartir varias características de la clasificación anterior, por lo que podemos encontrar aguas bicarbonatadas sulfatadas, clorurada sulfatada sódica, entre otras. De acuerdo con la Cámara Argentina de Termalismo y Turismo de Salud las aguas termales no son un remedio infalible para todas las dolencias, pero son un excelente calmante para la mayoría de ellas, toda vez que: 1. Estimulan las defensas del organismo 2. Depuran la sangre, al eliminar toxinas por sudoración 3. Reactivan el metabolismo 4. Reeducan el sistema termorregulador 5. Tienen efectos revitalizadores sobre células y tejidos 6. Se obtienen resultados analgésicos y antiespasmódicos 7. Son sedantes del sistema nervioso Todo esto puede resultar benéfico para la mayoría de las personas aunque para aquellos que tengan afecciones específicas pueden verse dañados, así que considera las siguientes contraindicaciones. No siempre es recomendable su uso en fases agudas o brotes de reagudización de algunas enfermedades como: ulceras gástricas, cardiopatías, nefritis (inflamación del riñón), hipertensión severa, procesos asmáticos en crisis, tuberculosis, distintos tipos de tumores y cáncer. En busca de manantiales Nuestro país es rico en este recurso natural. Según la Comisión Federal de Electricidad en su documento "Prospectiva del sector eléctrico 2002-2011" hay más de mil manifestaciones termales que han sido utilizados, desde tiempos precolombinos, como balnearios. Este tesoro se lo debemos principalmente a nuestros volcanes. En la parte central del país se localizan varios volcanes como Ceboruco, Popocatépetl, Volcán de Colima, Pico de Orizaba, Paricutín, Jorullo, entre otros y es por eso que en esta parte se concentra la mayor parte de manantiales termales, aunque aún hay manantiales relacionados con zonas de volcanismo más antiguo (más de 30 millones años), que aún tienen el calor suficiente para provocar este tipo de manifestaciones. En el siguiente mapa se ubican los estados según su concentración de manantiales termales y la zona volcánica activa. Balnearios y parques acuáticos De acuerdo con el Mtro. Leandro Olguín, Vicepresidente de la Región Sureste de la AMPABA, "Un balneario es un lugar dedicado al reposo y la terapia a través de la utilización del agua. También se puede llamar así al lugar de ocio donde se puede practicar el campismo y la natación", mientras que en un parque acuático además de los elementos anteriores, "comúnmente se encuentran toboganes, áreas acuáticas infantiles, lagos artificiales para remo, albercas con olas artificiales y ríos de diferentes corrientes generadas también de manera artificial". Los manantiales naturales han evolucionado y han pasado de pequeños balnearios rústicos a parques acuáticos, inclusive son el origen de lo que hoy en día conocemos como SPA'S o Salus per Aquam (salud por medio del agua). Es importante aclarar que no todos los balnearios ni todos los parques acuáticos tienen aguas termales, sino que en zonas en donde no se encuentran favorecidos por algún manantial termal se utilizan albercas con agua calentada en calderas, por lo que no tienen las propiedades minerales que nombramos anteriormente. A dónde ir Con el fin de conocer las características del agua y algunos servicios en balnearios y parques acuáticos del país, Profeco realizó una investigación telefónica del 5 al 23 de junio del 2006 en 40 establecimientos ubicados en Coahuila, Durango, México, Guanajuato, Hidalgo, Morelos y Puebla. En ella se observó que 60% de los empleados encuestados no tiene información sobre la clasificación o los elementos químicos del agua, por lo que la información se presenta sólo para 25 establecimientos. La investigación mostró que en México hay manantiales termales con todas las clasificaciones mencionadas anteriormente. Los manantiales de aguas ferruginosas los encontramos sin infraestructura turística en Tlaxcala, algunos son: Agua Santa, Santa Cruz, El Porvenir y Atotonilco. En el caso del Estado de Coahuila los balnearios analizados son pequeños y rústicos, con albercas de fondo arenoso y apenas con los elementos básicos para los visitantes (baños y vestidores). Aunque también se ubicaron parques acuáticos con gran infraestructura e inclusive con servicio de SPA como Ixtapan de la Sal (Estado de México) y las Aguas Termales de Chignahuapan (Puebla). De acuerdo con nuestra investigación, Hidalgo es el estado con mayor número de balnearios con aguas termales, por ejemplo en el periodo vacacional de verano 2005 (junio, julio y agosto) tuvo una afluencia de 570 mil visitantes a balnearios y parques acuáticos. Según datos de la Asociación de Balnearios de este estado, sus visitantes se conforman por familias integradas por 5 ó 7 personas, la mitad de ellos niños, con una estadía de 6 horas y un gasto de entre $700 y $1,200 por familia. Al tomar una familia con las características de los visitantes de Hidalgo (3 adultos y 2 niños) y con la información del levantamiento de Profeco en los 25 establecimientos del país, el gasto promedio por familia es de $235 únicamente de entradas. Debes considerar gastos adicionales como hospedaje, comidas y transportación (gasolina, casetas o boletos de autobús). Aunque los balnearios y parques acuáticos se encuentran básicamente en toda la República, antes de decidir a dónde quieres ir, debes considerar el motivo de tu viaje. Si quieres encontrar diversión para chicos y grandes, y hasta un poco de aventura definitivamente tu elección debe ser un parque acuático. Pero si tu deseo es descansar piensa en los balnearios, lugares donde además de convivir con tu familia, podrás relajar cuerpo y mente. Para ver precios, ubicación, clasificación y temperatura del agua de los 25 balnearios y parques acuáticos investigados haz clic aquí. Ya te decidiste… …Ahora es importante considerar las recomendaciones que la Cámara Argentina de Termalismo y Turismo de Salud hace al visitar balnearios o parques acuáticos de agua termal. 1. Permanece en las fosas o tinas termales sólo el tiempo recomendado. La presión del agua sobre la caja toráxica facilita la inhalación (ingreso de aire), pero obliga a hacer un esfuerzo muscular, dificultando la exhalación (salida de aire). Esto trae somnolencia y sensación de fatiga, en casos extremos se llega a la pérdida de conocimiento. Por lo general, los balnearios tienen indicaciones sobre la duración del baño. En caso contrario, evita permanecer más de 20 minutos seguidos sumergido en albercas o piletas con aguas mesotermales (35°C a 45°C). 2. No tomes demasiados baños por día. Si bien el agua relaja los músculos, el corazón también lo es y al relajarse pierde tonicidad, eso ya no resultaría positivo para tu salud. 3. Al salir de un baño caliente permite que tu cuerpo se aclimate lentamente, cubre con una toalla todo el cuerpo, incluyendo cabeza y cara. 4. No tomes un baño a primera hora. Durante el sueño la tensión arterial baja y con ello los reflejos. Al despertar la presión es la más baja del día, si te das un baño en ese momento la presión disminuirá aún más, lo cual puede provocar vértigo y mareo. 5. Toma los baños como mínimo dos horas después de comer. La digestión hace que la circulación de la sangre fluya a las vísceras, si tomas un baño de agua caliente producirá dilatación en las arterias y vasos que irrigan la piel, retirando la sangre del aparato digestivo, interrumpiendo así su funcionamiento, lo que puede producir pérdida del conocimiento, peligro de ahogamiento y hasta un colapso cardiaco. Estos consejos podrían desincentivarte, pero en realidad son fácilmente aplicables y los beneficios compensan ampliamente estas prevenciones. Observaciones finales 1. La inmersión en piletas o albercas llevan, según las propiedades del agua y la temperatura, a una estimulación o relajación, con lo cual se ocupan tanto del bienestar físico como psíquico. 2. La efectividad de los baños dependerá mucho del descanso y la despreocupación, por lo que no es recomendable buscar relajación por el día y diversión por la noche, reposar el mayor tiempo posible. 3. En estos lugares es común encontrar servicios adicionales como el baño de temazcal (baño de vapor), masajes y mascarillas de barro que pueden ayudar a tu relajación. El precio varía de acuerdo con el lugar, la infraestructura y la categoría del establecimiento, pero los puedes encontrar desde $200. 4. No vayas buscando la curación milagrosa de tus males. Es incorrecto pensar que se trata de medicina alternativa, más bien es un complemento a la medicina ortodoxa, por lo que no reemplaza a los tratamientos médicos sino que ayuda a obtener mejores resultados. 5. Considera que una estancia de un fin de semana en un balneario no recupera una vida de excesos y malos hábitos. 6. El valor de un establecimiento de este tipo está en las propiedades de sus aguas y no en la categoría de su hotel o en la calidad de sus instalaciones.