PROTOCOLO DE CARBUNCO INTRODUCCIÓN: Zoonosis producida por el Bacillus anthracis, bacilo inmóvil, gram-positivo, aerobio o anaerobio facultativo de 3 a 8 micras de largo por 1 a 1,2 de ancho. Se presenta en forma de filamentos característicos (forma de caña de pescar). En el organismo se encuentra en forma vegetativa y esporula al entrar en contacto con el aire. Las esporas son muy resistentes a agentes físicos (temperatura, humedad) y químicos (desinfectantes). Las esporas inoculadas por vía subcutánea se multiplican rápidamente liberando las toxinas que producen el pronunciado edema, septicemia y necrosis tisular. El hábitat telúrico de la forma esporulada del bacilo productor del carbunco determina su distribución. El carbunco es una enfermedad de herbívoros. Los animales se infectan principalmente por consumo de pastos o aguas contaminadas con esporas procedentes de zonas donde hay cadáveres carbuncosos. También la infección puede ser transmitida por productos de alimentación animal como harinas de carne, harinas de sangre y de huesos. El animal que muere de carbunco presenta una gran cantidad de Bacillus anthracis en sus tejidos que esporulan cuando el cadáver es abierto contaminando el suelo, pasto y agua. Las esporas sobreviven años, incluso en condiciones climáticas adversas. La lluvia arrastra las esporas hacia lugares bajos, concentrándolas. Si estos lugares de pasto son poco permeables ( origen glacial-calcáreo), ricos en materia orgánica y húmedos determinan que en la zona se concentre gran cantidad de esporas dando lugar a lo que se conoce como "campos malditos". Para el hombre las fuentes de infección son siempre los animales infectados, sus productos contaminados o el medio ambiente contaminado con esporas procedentes de animales muertos. El modo de transmisión es a través del contacto (inoculación) con animales muertos o con sus productos, o por inhalación en ambientes contaminados con esporas procedentes de sangre, pelo o lana, o por consumo de animales muertos de carbunco. Se ha descrito transmisión mecánica por medio de insectos. La infección puede aparecer en zonas muy distantes por ser trasladada por animales o aves carroñeras. No hay pruebas de transmisión interhumana. El período de incubación oscila entre 2-5 días. Susceptibilidad y resistencia: En general se piensa que se desarrolla cierto grado de inmunidad después de la infección cutánea y existen datos de infección no manifiesta en personas con relación estrecha y frecuente con el agente. No se han descrito segundos ataques. En áreas enzoóticas la enfermedad se presenta en forma endemo-esporádica con brotes epidémicos. Es posible la presentación de casos esporádicos en zonas declaradas libres de enfermedad debido a la resistencia ambiental de las esporas. Es una enfermedad ocasional en nuestro país donde se presenta en forma de casos esporádicos y brotes por manipulación de subproductos animales muchas veces importados de países con áreas enzoóticas. Afecta a grupos de riesgo, principalmente: a) Agrícolas: personas que trabajan con ganado ovino y caprino; veterinarios y b) Industriales: trabajadores de subproductos animales (en especial piel y pelo). El tratamiento antibiótico no detiene el progreso de las lesiones hasta que no llegan a escarificarse, pero disminuye las manifestaciones sistémicas y el edema. Está contraindicada la cirugía local. En el carbunco por inhalación y gastrointestinal se requiere un tratamiento con dosis elevadas de antibiótico (penicilina). En grupos de alto riesgo se recomienda la vacunación. Existe una vacuna eficaz para el hombre y herbívoros. La protección frente al carbunco depende enteramente de la respuesta inmune del hospedador a un antígeno simple; el antígeno de protección es una proteína de un peso molecular de 83 KDa componente de la toxina. Los otros dos componentes de la toxina (factores letal y de edema) contribuyen en una menor proporción a la inmunidad. Los datos de incidencia de carbunco en nuestro país indican una disminución importante en el número de casos situándose en la década 1985-95 alrededor de 100 casos anuales, así como una concentración de éstos en unas pocas regiones (Meseta central). 25 DEFINICIÓN CLÍNICA DE CASO: Existen varias formas clínicas diferentes: Carbunco cutáneo: aparición de escara necrótica negra (lesión típica) en zonas no protegidas y a veces con dolor en la zona, linfangitis, adenopatía regional y septicemia. Carbunco pulmonar: hipoxia, disnea, fiebre, hipotensión, shock, muerte. Son frecuentes signos meníngeos (50%). Carbunco gastrointestinal y orofaríngeo: violenta gastroenteritis con vómitos y deposiciones hemorrágicas y rápido desarrollo de ascitis. El orofaríngeo se caracteriza por tumefacción local adenopatía, edema y fiebre. CRITERIO DIAGNÓSTICO DE LABORATORIO: – Aislamiento del Bacillus anthracis (cultivo +) de muestra clínica, o – Seroconversión, o – Demostración del agente en muestra clínica por inmunofluorescencia directa. CLASIFICACIÓN DE CASOS: Caso Sospechoso/Probable: Caso compatible clínicamente con cualquiera de las formas clínicas de carbunco y exposición a un animal o producto animal sospechoso. Caso Confirmado: Enfermedad clínicamente compatible y confirmada por laboratorio. MODO DE VIGILANCIA: Toda sospecha de caso de carbunco deberá ser notificada semanalmente de forma numérica e individualizada. Una vez identificado el caso se recogerá toda la información referente al mismo en la encuesta epidemiológica que figura en el protocolo de esta enfermedad. MÉTODOS DE CONTROL: El control del carbunco en el hombre depende del control de la enfermedad en los animales; por ello, las medidas de control deben tomarse en los dos grupos: MEDIDAS DE PREVENCIÓN Y CONTROL EN EL HOMBRE Y EN EL MEDIO: – Precaución con los líquidos, drenajes y secreciones animales. Desinfección. – Evitar contacto con animales y sus productos contaminados. Ante la sospecha de un animal muerto por carbunco nunca hay que realizar necropsia. – Higiene ambiental en zonas donde se manejan productos animales (ventilación, ropa adecuada, etc.). – Atención médica de lesiones cutáneas en grupos de riesgo. – Desinfección de pelos, lana, etc., antes de su procesamiento industrial, con formaldehido caliente. – Control de líquidos y desechos industriales en plantas donde se elaboren productos procedentes de animales sospechosos. – La situación epidemiológica de esta enfermedad en nuestro país no hace aconsejable la vacunación de personas a riesgo. – Si en una cadena de matanza se sospecha la presencia de un animal carbuncoso se debe paralizar hasta la confirmación del diagnóstico y si éste fuera positivo se deben destruir todas las canales expuestas y hacer una desinfección de los locales. 26 MEDIDAS DE CONTROL EN ANIMALES: Tratamiento y posterior vacunación del rebaño afectado (en áreas de presentación esporádica), o de todos los animales (en áreas enzoóticas), y revacunación anual. Diagnóstico rápido, aislamiento, tratamiento antibiótico y cuarentena (al menos 15 días después del último caso) de los animales enfermos. Incineración de cadáveres. No se debe en ningún caso hacer necropsia. Un animal muerto entra rápidamente en putrefacción y la forma vegetativa es destruida en poco tiempo, mientras que si se abre el animal las esporas se diseminan. BIBLIOGRAFÍA RECOMENDADA: Bacterial Infections Humans: Epidemiology and Control. Ed. A.S.Evans and P.S.Brachman. Plenum Publishing Corporation. 1991. Acha PN, Szyfres B. Zoonosis y Enfermedades Transmisibles comunes al hombre y a los animales. Organización Panamericana de la Salud. 1986. 47-72. Mandell GL, Douglas RG, Bennett JE. Principles and practice of infectious diseases. 3ª Ed. New York: Jhon Whiley & Son, 1991; 1885-1889. 2774-2784. WHO. Veterinary Public Health.. Wkly Epidemiol Rec 1993; 68(39):287. CDC. Case definitions for Public Health Surveillance. MMWR 1990;39 (No.RR-13). Ley de Epizootías. 20 de diciembre de 1952. Decreto 1106/1945. Reglamento de lucha contra las enfermedades infecciosas. 26 de julio de 1945. Real Decreto 2050/1982, complementa el Reglamento de lucha contra las enfermedades infecciosas. 27