6. FECUNDACIÓN. La fecundación es el proceso a través del cual un ovocito y un espermatozoide se fusionan, dando origen al cigoto. Para que ocurra la fecundación, es necesario que durante el coito o acto sexual, el varón deposite los espermatozoides en el interior de la vagina, a través de la eyaculación. Además, la mujer debe haber ovulado, es decir, el ovocito debe haber sido liberado del ovario. Una vez en la vagina, los gametos masculinos ascienden hacia el útero y llegan a las trompas de Falopio, donde normalmente ocurre la fecundación. Para la mayoría de los espermatozoides no es fácil llegar al encuentro con el ovocito pues deben sortear diversos obstáculos en su recorrido. Por ejemplo, muchos de ellos mueren debido a la acidez de las secreciones vaginales o porque son eliminados por las células defensivas de los genitales femeninos. De todos los espermatozoides que llegan al ovocito, sólo uno consigue fecundarlo. Así, se da inicio a la fecundación, crecimiento y desarrollo de un nuevo ser humano. El espermatozoide atraviesa la envoltura que rodea al ovocito. Luego, se fusiona la pared de ambos gametos y la cabeza del espermatozoide ingresa en el ovocito, tras lo cual pierde su flagelo. Tras unas horas, los núcleos de ambos gametos se fusionan formando el cigoto. 7. COMIENZO DEL EMBARAZO Cuando el ovocito es fecundado, el cuerpo lúteo continúa secretando progesterona, lo que posibilita que el endometrio continúe engrosándose. De esta manera, no se produce la menstruación, que suele ser el primer síntoma del embarazo. Al mismo tiempo, el cigoto comienza a dividirse formando dos células idénticas que duplican su número en pocas horas. Así, al cuarto día después de la fecundación está formado por 16 células y alrededor del sétimo día llegan a ser cientos de células que forman una esfera hueca de poco más de medio centímetro de diámetro. Estas células darán origen al embrión. El embrión en formación se traslada hacia la cavidad uterina y aproximadamente siete días después de la fecundación ocurre la implantación, es decir, se adhiere y entra en estrecho contacto con el endometrio que le otorga los nutrientes y el oxígeno necesarios para el desarrollo. A partir de la implantación, se desarrollas las siguientes estructuras o anexos embrionarios, que participan en la nutrición y protección del embrión.