PROFESORA LILLIAN A. FELICIANO CINTRÓN PROFESOR JUAN O. CINTRON CINTRÓN ¿Sabes cuánto hace que se formó nuestro planeta? El tiempo geológico es el tiempo que ha transcurrido desde la formación de la Tierra, hace 4.600 millones de años, hasta la actualidad. El tiempo geológico se mide en millones de años. Los científicos han sido capaces de descubrirlo, mediante el estudio de las rocas (su edad y disposición) y de los fósiles. ¿Crees que la Tierra siempre ha estado tal como ahora la conocemos? En los diferentes momentos de su historia, nuestro planeta no ha tenido el mismo aspecto, ni el mismo tipo de rocas, y tampoco ha contado con las mismas formas de vida. Las rocas terrestres se disponen en capas. Generalmente, las capas más profundas son las más antiguas. Las más superficiales, por el contrario, son las más modernas. Algunas rocas tienen fósiles. Los fósiles son restos de animales o plantas que vivieron hace mucho tiempo, y proporcionan información de la edad de la roca y de los seres vivos que han existido en nuestro planeta. Además, los científicos tienen distintos métodos que les permiten averiguar la edad de una roca. Utilizando estos métodos y estudiando los fósiles, hemos podido conocer la historia de nuestro planeta. Fósil de un escorpión marino La fotografía muestra el fósil de un escorpión marino, perteneciente al periodo silúrico, dentro de la era paleozoica. Estos invertebrados podían alcanzar los tres metros de longitud. Tenían un exoesqueleto duro y cuatro o cinco pares de patas. Aunque se han descubierto menos fósiles vegetales que animales, los que se conocen proporcionan información muy valiosa sobre la evolución y las relaciones entre las plantas. Homólogo – tienen estructuras iguales con funciones distintas. La pata del perro La aleta del tiburón La ala del pájaro La pata del lagarto En la tercera etapa embrionaria Todos tienen cola y branquias Tiburón, pez, salamandra, lagartijo, pollo, mono, humano Comparación del ADN en la hemoglobina. Secuencia de aminoácidos que componen una proteína. Los geólogos (científicos que estudian la Tierra) dividen el tiempo que ha transcurrido desde que se formó nuestro planeta hasta nuestros días en diferentes periodos. De la misma manera que en la vida de una persona se distinguen varias etapas, la historia de la Tierra también se puede dividir en varios periodos de tiempo. La historia de nuestro planeta, desde que se originó hasta nuestros días, se puede dividir en tres inmensos periodos de tiempo, que reciben el nombre de eones: El eón arcaico comenzó hace 3.800 millones de años y terminó hace 2.500 millones de años. El eón proterozoico comenzó hace 2.500 millones de años y terminó hace 570 millones de años. El eón fanerozoico comenzó hace 570 millones de años y llega hasta la actualidad. Nosotros vivimos en el eón fanerozoico. Las eras, a su vez, se componen de periodos, y cada uno de estos periodos se divide en varias épocas. Nosotros vivimos en una época llamada holoceno, en el periodo cuaternario, dentro de la era cenozoica, que se incluye en el eón fanerozoico. Las grandes divisiones del tiempo geológico Eón ¿Cuándo comenzó? ¿Cuándo terminó? ¿Qué pasó? Arcaico Hace 3.800 millones de años Hace 2.500 millones de años Apareció la vida. Surgieron organismos unicelulares. Proterozoico Hace 2.500 millones de años Hace 570 millones de años Aparecieron células eucarióticas y algas verdeazuladas, con capacidad fotosintética. Empezaron a surgir organismos diversos. El contenido en oxígeno de la atmósfera aumentó. Fanerozoico Hace 570 millones de años Continúa en nuestros días La vida evolucionó. Aparecieron las plantas y animales terrestres hasta alcanzar la enorme diversidad actual. Visualiza la escala del TIEMPO GEOLÓGICO Cenozoico Mesozoico Paleozoico Precámbrico Intercalar otros eventos en la Escala del Tiempo Geológico. Película del Tiempo Geológico Ejercicio de las eras geológicas Fósiles de un Archeopterix Todo el periodo de tiempo que ha transcurrido antes del eón fanerozoico, es decir, desde que se formó la Tierra hasta hace 570 millones de años, recibe el nombre de precámbrico. La atmósfera y los océanos se formaron durante ese periodo. También aparecieron pequeños organismos que cambiaron la atmósfera terrestre. Al final del periodo precámbrico, el aire era similar al que respiramos hoy día. Los primeros fósiles de seres vivos son de hace 3.800 millones de años. Pero los primeros animales y plantas que han dejado fósiles de mayor tamaño son de hace 570 millones de años, unos 3.000 millones de años después de la aparición de la vida sobre la Tierra. El nombre fanerozoico proviene, precisamente, de la presencia de esos fósiles de gran tamaño: está formado por las palabras griegas phaneros, que significa „visible‟, y zêon, que significa „animal‟ o „ser vivo‟. Estudiando los diferentes fósiles encontrados en las rocas, los paleontólogos (los científicos que estudian los fósiles) han dividido el eón fanerozoico en eras y periodos. El eón fanerozoico se divide en tres eras, denominadas paleozoico, mesozoico y cenozoico. La era paleozoica empezó hace 570 millones de años y terminó hace unos 240 millones de años. Durante ese periodo de tiempo muchos seres vivos habitaron nuestro planeta. Numerosos tipos de invertebrados y algas marinas llenaban los océanos. Las plantas invadieron el medio terrestre hace unos 475 millones de años. Mientras en el medio terrestre aparecían nuevas especies de vegetales, en los mares nadaban numerosos peces. Los animales también salieron del mar y se instalaron en la tierra. Los primeros animales que conquistaron el medio terrestre eran parecidos a los actuales escorpiones. Aparecieron también los insectos terrestres. Los anfibios, los primeros vertebrados de respiración aérea, evolucionaron a partir de los peces. Más tarde, surgieron los reptiles. Hace unos 320 millones de años, la tierra estaba cubierta de una vegetación exuberante compuesta por helechos y árboles; unas libélulas gigantes volaban en el cielo, y criaturas parecidas a lagartos corrían por el suelo La era mesozoica empezó hace unos 240 millones de años y terminó hace 65 millones de años. Los dinosaurios vivieron durante esta era, que se divide en tres periodos, llamados triásico, jurásico y cretácico. La película Parque Jurásico se llama así por ese periodo. Los dinosaurios de mayor tamaño, como el Apatosaurus, vivieron en los periodos jurásico y cretácico. Los primeros mamíferos y aves, así como las primeras plantas con flor, aparecieron también durante el mesozoico. Sin embargo, a finales de la era mesozoica también se produjeron numerosas extinciones. Todos los dinosaurios desaparecieron. Los científicos piensan que el impacto de una gran roca espacial sobre la Tierra provocó cambios en nuestro planeta, que originaron la desaparición de estos reptiles. Los mamíferos, en cambio, sobrevivieron. Los científicos creen que los cambios geológicos masivos que caracterizan la era Mesozoica modelaron el curso de la evolución en la era cenozoica. Aunque parezca que los continentes son inmóviles, en realidad se mueven desde su formación. El científico alemán Alfred Wegener presentó la primera prueba de la deriva continental en el siglo XX. La teoría de la tectónica de placas describe el movimiento de varias placas grandes que componen la superficie terrestre. La era cenozoica comenzó hace unos 65 millones de años y llega hasta nuestros días. Numerosos tipos de mamíferos aparecieron durante esta era. Cenozoica significa – “Vida reciente” Con el paso del tiempo, fueron surgiendo especies de mayor tamaño. Sin embargo, algunos de los mamíferos y aves que vivían hace unos 55 millones de años eran muy distintos de los actuales. Había una especie de loros gigantescos incapaces de volar, ¡tan altos como tú! Los geólogos dividen la era cenozoica en dos periodos, llamados terciario y cuaternario. Los caballos, los rinocerontes, los gatos, los perros y los gigantescos mamuts aparecieron durante el periodo terciario. Aparecieron muy recientemente, cerca del final de la escala del tiempo geológico en el actual periodo Neógeno. Los humanos sobrevivieron la última glaciación ,pero no así muchas especies de mamíferos. Los primeros antecesores de los seres humanos aparecieron hace unos 6 millones de años, durante el periodo terciario. Eran más pequeños, más peludos y menos inteligentes que los seres humanos actuales. El siguiente periodo, el cuaternario, se divide, a su vez, en dos épocas, que reciben el nombre de pleistoceno y holoceno. Los seres humanos actuales no aparecieron hasta hace unos 120.000 años, en el pleistoceno. Eso no es mucho tiempo, si lo comparamos con la vida de la Tierra. Si imagináramos que toda la vida de nuestro planeta ha transcurrido en 24 horas, los seres humanos ¡solo estarían presentes en los últimos tres segundos! Durante el pleistoceno, enormes láminas de hielo cubrían la Tierra. Estos periodos de tiempo se denominan periodos glaciales. El último periodo glacial acabó hace unos 10.000 años, cuando se inició el holoceno. Nosotros vivimos en el holoceno; todavía no ha terminado. CHIMPANCÉ Cráneo se fija posteriormente Espina dorsal ligeramente arqueada Brazos mas largos que piernas y se usan para caminar Pelvis larga y estrecha Fémur con ángulo hacia afuera PRIMEROS HOMININOS Cráneo se fija inferiormente Espina dorsal en forma de S Brazos mas cortos que piernas y no se usan para caminar Pelvis en forma de tazón Fémur con ángulo hacia adentro Hace entre 6 y 2 millones de años, aparecieron en el este de África unos homínidos, los australopitecos, de estatura y cerebro pequeños, pero con dos rasgos novedosos: caminaban sobre dos piernas y tenían colmillos pequeños. En 1926, el antropólogo Raymond Dart descubrió el primer fósil australopitecino, el “bebe Taung”, en África. Llamó a esta especie Australopithecus africanus,que significa “simio del sur de África. Era bípedo con encéfalo pequeño. En 1974, en Kenya, el antropólogo Donald Jahason descubrió el esqueleto de australopitecinos más complejo. Vivió entre hace 4 y 2.9 millones de años. Lucy - es uno de los más completos jamás encontrados. Tamaño de un chimpancé, cráneo y encéfalo típico de australopitecino y sus brazos más largos en proporción a las piernas. Los huesos de los dedos más curvos que el de los humanos modernos. Las articulaciones de sus rodillas y caderas parecían humanas y resultaba claro que caminaba erguida. Los australopitecos Los australopitecos pasaban mucho tiempo en los árboles, que les proporcionaban alimentos y refugio frente a animales peligrosos. Aparecieron en África hace entre 6 y 2 millones de años. Hace 2,5 millones de años apareció otro grupo, el Homo habilis, así denominado porque sus miembros fueron los primeros capaces de fabricar instrumentos de piedra, con los que podían despellejar a los grandes animales muertos (carroñeando) o cazar animales pequeños. Con cerebro algo más grande y mayor estatura que el grupo anterior, este fue el primer representante del género Homo. Tenía el cerebro aún más grande. El H. ergaster aparece sólo en el registro fósil aproximadamente entre 1.8 y 1.3 millones de años. Era más alto y ligero Con piernas más largas y brazos más cortos. Su encéfalo promediaba 1000 cm^3 Tenía cráneo redondo Dientes reducidos La primera nariz humana con las fosas nasales hacia abajo. Alrededor de hace 1,8 millones de años, y como evolución del Homo habilis, surgió el Homo erectus. Con un cerebro mayor (1.000 cm3) y con la habilidad para construir nuevas herramientas de piedra, llamadas bifaces (hachas de mano). Fue el primero que aprendió a encender y a usar el fuego. Los grupos de Homo erectus, siguiendo migraciones de animales, salieron por vez primera de África y se dispersaron por Asia y Europa. Los establecidos en Europa, con algunos rasgos propios, se conocen como Homo heidelbergensis. Hace entre 200.000 y 150.00 años, apareció en Europa y en Oriente Los neandertales eran bajos, muy robustos y con cerebros grandes (1.500 cm3), incluso más grandes que los nuestros. Mejoraron las herramientas de piedra ; vivieron en cuevas y campamentos al aire libre, y fueron los primeros en enterrar a sus muertos. Hace unos 120.000 años, aparecieron, otra vez en África. Eran altos; de piel oscura, adaptada a los trópicos, y prácticamente iguales a nosotros; ¡de hecho, somos la misma especie! Fabricaron instrumentos de piedra y hueso más complejos; inventaron los primeros elementos de adorno (collares y colgantes), y crearon las primeras manifestaciones artísticas (grabados y pinturas). Los humanos modernos, nuestros directos antepasados, salieron de África („segunda salida de África‟) y se extendieron por Asia reemplazando a las poblaciones de Homo erectus. Fueron los primeros pobladores de Australia y los primeros navegantes, alrededor de hace 60.000 años. Llegaron a América desde el extremo de Siberia, cruzando el paso de hielo que unía Asia y América, hace entre 30.000 y 15.000 años, y en pocos milenios ocuparon todo el continente. Hace unos 40.000 años, los primeros humanos modernos (también llamados hombres de CroMagnon) entraron en Europa y „chocaron‟ con los neandertales, que, por diversas razones, se extinguieron, tras unos milenios de „contacto‟, hace poco más de 30.000 años. De esta forma, solo quedó una única especie humana sobre la Tierra: ¡nosotros! Los humanos modernos desarrollaron el gran arte parietal (el que se plasma en paredes y techos) en muchas cuevas europeas y algunas de Asia. Los seres humanos han experimentado cambios importantes en el transcurso de su evolución. Esta ilustración se muestra al Australopithecus afarensis (en el centro de la imagen), la especie humana más antigua de las tres que aparecen; al Homo erectus (a la izquierda), una especie intermedia; y al Homo sapiens sapiens (a la derecha), el ser humano actual. El Homo erectus y los seres humanos actuales son más altos y tienen cerebros más grandes que el Australopithecus afarensis. Los seres humanos actuales tienen cerebros más grandes que el Homo erectus. Comparación de cráneo y mandíbula El cráneo humano ha cambiado enormemente durante los últimos 3 millones de años. La evolución de El cráneo humano ha cambiado enormemente durante los últimos 3 millones de años. La evolución desde el Australopithecus hasta el Homo sapiens, significó el aumento del cráneo (para ajustarse al crecimiento del cerebro), el achatamiento del rostro, el retroceso de la barbilla y la disminución del tamaño de los dientes.