EL PÚBLICO EN EL FENÓMENO ARTÍSTICO COMO VÍA HACIA LA EXTERNACIÓN. TRES TALLERES DE ARTE EN UN HOSPITAL DE DÍA. AUTORES: Chantal P. Rosengurt; Nazarena Mazzarini. INSTITUCIÓN: Proyecto de Extensión Universitaria “Identidades en movimiento”. Cátedra Estética I / Teoría de la Práctica Artística. Facultad de Bellas Artes. Universidad Nacional de La Plata. Dirección: Mónica Caballero. Co-dirección: Daniela Bersi DIRECCIÓN: Calle 54 nº 691, La Plata, Pcia. de Buenos Aires. Argentina TELÉFONO: (0221) 422- 6466 / (0221) 15567- 2419 MAIL: chantalprosengurt@gmail.com 1 Introducción El presente trabajo explora el diseño de talleres de arte destinados a pacientes externados y en vías de externación de hospitales neuropsiquiátricos, a partir de la conceptualización y abordaje filosófico / estético, de uno de sus fundamentos: la noción de público, la cual es entendida como instancia necesaria del fenómeno artístico, y como representante del carácter social de la creación artística. Debido a lo cual, propuesta de este trabajo, podría considerarse al público interviniente una vía hacia la externación. El marco teórico referido abarca la noción de Fenómeno Artístico; partiendo de los conceptos de Manuel López Blanco, Luigi Pareyson y Umberto Eco, quienes van a definir los elementos que conforman la actividad creadora. Entre tales aportes se consignan conceptos claves como: artista, obra, goce estético, gusto, lector modelo y lector empírico. Las prácticas concretas que dan cuenta e ilustran la implementación práctico /clínica de tales fundamentos remiten a tres experiencias de talleres artísticos realizados durante tres ciclos consecutivos (años 2008, 2009 y 2010) en el Hospital de día Casa de Pre-alta, dispositivo de externación del Htal. Neuropsiquiátrico A. Korn, realizados dentro del marco del proyecto de Extensión Universitaria “Identidades en Movimiento”1, perteneciente a la Facultad de Bellas Artes, cátedra Teoría de la Práctica Artística, junto a la Facultad de Periodismo, Cátedra Derecho de la Comunicación, ambas de la Universidad Nacional de La Plata. De cada uno de estos talleres de disciplinas diversas (Escenografía y Apropiación espacial; Grabado y experiencias gráficas; y Canto desde el movimiento y el ritmo) se consignan algunas de las propuestas llevadas a cabo. La finalidad de este escrito consiste, por lo tanto, en aproximar algunos fundamentos estéticos de la teoría del arte al campo de la salud mental. Desarrollo Desde el año 2008 hasta el corriente se han realizado tres talleres de arte en el mencionado hospital de día. Si bien tales dispositivos han sido gestados en el marco del proyecto de Extensión Universitaria “Identidades en movimiento”, a partir de lineamientos artísticos /estéticos, su delimitación y planeamiento ha dependido de las consideraciones sobre la institución en la cual aquellos serían implementados. De este modo, el diseño de los talleres ha incluido como premisas la condición biopsicosocial de los destinatarios o pacientes, 1 y los objetivos terapéuticos que Coordinadora del Proyecto: Nazarena Mazzarini. Investigadora. Docente. 2 constituyen a la institución misma: la externación y resocialización de los usuarios, con un horizonte comunitario. En pos de estos objetivos, desde la teoría del arte, se halló que la dimensión del público podía resultar un punto firme desde el cual, mediante una práctica artística, apuntalar la externación, o más específicamente, el establecimiento de lazos sociales. M. López Blanco. El público como necesario, dentro del fenómeno artístico. El profesor de Filosofía y Estética FBA (-UNLP) Manuel López Blanco, aborda el arte desde lo que denomina: fenómeno artístico. Dentro del cual, y en esto radica su pertinencia, el público interviniente es una pieza necesaria e intrínseca del mismo. Por lo tanto contribuye a que una práctica determinada sea considerada, o legitimada, o no, bajo el estatuto de “arte”, que es una forma de conocimiento, proceso dado en contextos históricos y sociales específicos y concretos. Por fenómeno artístico se entiende a una operación unitaria y sintética integrada por tres momentos / componentes: ARTISTA – OBRA – PÚBLICO que se implican mutuamente, se manifiestan unos en los otros, y no se pueden pensar, si quiera, por separado. El artista construye su obra a través de un hacer consciente; en ella se figura el artista como productor de su tiempo y de la cultura en la que se encuentra inmerso. Afirma el autor: “Para que haya arte, cualquier arte, es necesario que alguien haya organizado, producido, hecho, ejecutado o creado algo; a ese alguien se lo conoce con el nombre de artista y a ese algo se lo llama obra artística. También es igualmente cierto que para que haya arte es preciso que existan otros seres humanos que sean impactados de alguna manera por la obra artística; estos pueden llamarse receptor, público, oyente, lector, televidente, sujeto estético (M. Bense), auditor, intérprete, consumidor (P. Valery).” Y no es posible concebir arte cualquiera si faltase uno solo de estos tres elementos. El enfoque que orienta la perspectiva de López Blanco, y por ende justifica la presencia del público, es el de la comunicación. Luigi Pareyson. El público y el carácter social del arte. Pareyson va a postular la dialéctica que se plantea entre la actividad del artista y la intencionalidad que surge a través de la obra, en donde, se relacionan y encuentran la voluntad independiente de la obra y su forma. En este proceso creativo el artista a medida que va realizando la obra activa la invención y la realización (forma formata-forma formans) de manera simultánea. 3 El público, asimismo, adquiere un lugar significativo, cuando el espectador a través de la contemplación, que no es una actividad pasiva sino absolutamente dinámica, conquista el objeto (la obra). En este momento dialéctico se van a activar todos los a prioris que constituyen al espectador otorgándole significancia al objeto reconocido y descubierto, produciendo goce estético y conocimiento para quien realiza esta actividad. El carácter social del arte, o en otras palabras, pensar al arte como “fundador de sociabilidad” se comprende en las mutuas relaciones e influencias entre el artista y su público. Sin embargo, para Pareyson, el más profundo y auténtico carácter social del arte se funda en el gusto del público que ha surgido, y depende de cuál sea la relación del artista con él. Es decir, depende de la posibilidad del artista en transformar sus condiciones sociales en sugerencias operativas. O, dicho de otro modo, que el artista se valga del relato social para hablar de su época, y pensar desde allí su obra. Entonces, en palabras del propio autor: “El gusto del público es una verdadera condición social del arte, porque es una especie de conciencia estética socialmente organizada, con sus expectativas y su juicios y con sus exigencias y sus veredictos.”. De este modo, para este autor, el público da cuenta y permite la convergencia entre personalidad y sociabilidad, entre artista (o destinatarios del taller de arte) y la sociedad, permitiendo, a los fines de los dispositivos artísticos /clínicos planeados, tomar al público como un factor de externación / rehabilitación. Umberto Eco. El público entre el lector modelo y el lector empírico. En su libro Lector in fábula, Eco habla sobre el texto escrito, y sobre el lector modelo en tanto independiente del lector empírico. Mientras que el último es el lector concreto de carne y hueso, el Lector Modelo es una estrategia textual, una hipótesis, un modelo de lector generado, previsto, y además instituido y construido por el autor con su texto, que existe con independencia de aquel otro. Es quien va a cooperar en la necesaria actualización del texto que en principio está plagado de espacios en blanco, de intersticios que hay que rellenar”. Teniendo en cuenta la dimensión semiótica/ estética del desarrollo del autor, se parte aquí de la siguiente sustitución: texto escrito por obra de arte; y lector modelo por público (modelo), de acuerdo a las categorías del fenómeno artístico, según López Blanco2. En otras palabras, se entiende que una obra necesita de un público que la actualice. Y este público puede ser pensado como una estrategia de la misma creación del artista. Por lo 2 Op cit 4 tanto, no sólo es previsto como instancia en el fenómeno, sino que cada artista, con cada obra instituye, construye, o según palabras de Pareyson: crea, su propio “público modelo”. El lugar del público en las experiencias de los talleres. Algunas propuestas llevadas a cabo. Los tres talleres implementados en el mencionado hospital de día fueron concebidos incluyendo el objetivo primordial de la institución de salud mental que los alojaba: la externación y resocialización. Para complementar esto desde el marco teórico práctico de la Estética y las Artes, disciplinas fundamentales de los dispositivos que se llevarían a cabo, se ha considerado que el rol de público o de lector modelo podría avenirse adecuadamente a tales propuestas. En cada uno de estos talleres, la puesta en acto de este diseño se llevó a cabo mediante diferentes propuestas, enumeradas a continuación. Taller de “Escenografía y apropiación Espacial”3 Por una parte, la noción de público se ha hecho explícita en el último encuentro de taller, en el que tras haber construido una serie de trastos escenográficos, se realizaron diversas improvisaciones y representaciones dramáticas haciendo uso de aquellos. En aquel momento, el público se hizo presente de múltiples formas: a través de los mismos actores, a través de aquellos destinatarios y coordinadores que contemplaban las obras; a través de la presencia regulada de un residente de psicología; y a través de las cámaras filmadoras que registraron las producciones. Por otra parte, se decidió realizar algunos encuentros del taller fuera del hospital de día, en dependencias y aulas de la misma Facultad de Bellas Artes con el motivo de poder establecer lazos sociales con miembros de la nueva institución (alumnos, personal no docente, etc), la que por ser educativa permitía establecer el carácter social de la práctica ya no enmarcado en un circuito hospitalario, sino educativo / artístico. Si bien no se trata aquí de público en sentido estricto, se rescata el hecho de que se trata de personas con las cuales el paciente/ artista a partir de su incursión en el medio artístico se pone en relación. Taller de “Grabado y experiencias gráficas”4 Durante este taller se produjeron obras concretas (por ejemplo: grabados, estampas, etc). Esto significa que hay un público implicado desde la misma creación de aquellas obras. 3 Ciclo 2008. Docentes a cargo: Lucas Peralta, estudiante del Profesorado en Pintura, Facultad de Bellas Artes, UNLP; Rocío Pérez, Escenógrafa, FBA, UNLP; y Chantal P Rosengurt, estudiante de Licenciatura en Psicología, Facultad de Psicología, UNLP. Adscripta alumna a la cátedra de Psicopatología I; Auxiliar en investigación de la misma unidad académica; y artista plástica y baterista. 4 Ciclo 2009. Docentes a cargo: Rocío Pérez; Chantal P Rosengurt; y Romina Scoltore, estudiante del Profesorado en Grabado, FBA, UNLP. 5 Por otra parte, los objetos artísticos concretos producidos requieren de una contemplación al estilo tradicional. Tal condición permitió al taller participar de una muestra con producciones de los diversos talleres del proyecto de Extensión universitaria. Es decir, que mediante el dispositivo de la muestra surgió un público concreto, que accedió a la obra, o sea al artista, otorgándole una circulación, nuevamente por fuera del hospital, únicamente por el circuito del arte y sus categorías. Taller de “Canto desde el movimiento y el ritmo”5 La música posee ciertas características que la diferencian de otras ramas artísticas como el arte plástico. Una consecuencia de ello, es la diversa articulación lograda en el denominado fenómeno artístico, y por lo tanto en relación a un público. De las alternativas posibles para ser incluidas en el diseño del taller, hasta este momento pueden consignarse dos. La primera de ellas, consistió en la planificación del último encuentro de taller al modo de un “taller abierto”. Se trata de un encuentro de taller como los anteriores, pero llevado a cabo en un espacio público del hospital, en el que estaban invitados miembros del mismo, otro taller de arte, músicos, una persona encargada del registro audiovisual, y otra persona encargada de un registro de audio de buena calidad. En este dispositivo se puede hablar al mismo tiempo de: un fenómeno artístico en vivo, con el artista, obra, y público presentes en un mismo tiempo-lugar. Esto le da la posibilidad al artista de, en el mismo momento de la ejecución o interpretación de su obra, comprender su parte en el fenómeno, experimentando aquello como una unidad integrada, pesquisando incluso los efectos de su propia interpretación, en la interpretación que el público hace de la misma. Además, funcionó como una vinculación social con el otro taller de arte de la casa. La presencia de quienes realizaron tales registros se enlaza con la segunda alternativa ofrecida por el taller. Esta consiste en la grabación y edición de un DVD con las producciones de los diversos encuentros, incluyendo el material del taller abierto. Esta propuesta fue comentada desde el comienzo del taller, por lo que puede pensarse que cada interpretación de los artistas, incluye, al modo de lectores modelo, al público del mencionado formato. Además, así como en el taller de grabado, la producción del dvd permite que el taller, (sus obras y artistas) logren cierta difusión, y alcanzar a un público más numeroso, constituyendo a la práctica realizada en un hospital de día en un verdadero fenómeno artístico.6 5 Ciclo 2010. Docentes a cargo: Gisela Magri, cantante, y Licenciada en Antropología, Facultad de Humanidades, UNLP; y Chantal P Rosengurt. Si bien el taller finalizó con sus encuentros, están previstas ciertas actividades aún no puestas en práctica. 6 La propuesta del DVD aún no ha terminado de llevarse a cabo. Por el momento se ha recopilado el material, y permanece pendiente su edición, prevista para fin de año. 6 Conclusiones / Reflexiones El presente trabajo ha procurado abordar la propuesta de considerar al público de un fenómeno artístico como una vía hacia la externación y resocialización de pacientes de hospitales psiquiátricos, a partir de su fundamentación en los desarrollos teóricos de autores del ámbito de la Estética como Manuel López Blanco, Luigi Pareyson, y Umberto Eco para luego ilustrar su aplicación en los basamentos de tres talleres de artes montados en un hospital de día. En función del camino trazado se pueden vislumbrar una serie de proposiciones, que más que conclusiones pretenden, y no hay más opciones, despertar nuevos interrogantes, alumbrar posibles modos de intervenir en el campo de la salud mental. Más específicamente, en la invención y diseño de dispositivos de atención terapéutica a través del arte, o, como en el caso de la experiencia relatada: en espacios de arte con potencial terapéutico. La externación de pacientes que han vivido largos años dentro un hospital no es fácil ni inmediata como espera nuestra posmoderna sociedad. La vida manicomial que atenta contra la actividad, la singularidad, la subjetividad deja profundas marcas que dificultan, aún cuando se considera a un paciente como externado, que logre éste una condición de autonomía. Los dispositivos de externación como la Casa de pre-alta, dependiente del Hospital Alejandro Korn de Melchor Romero permiten alojar, a su vez, microdispositivos como los talleres de arte. ¿Y qué tiene el arte para decir sobre la externación? Múltiples respuestas caben aquí. Una de ellas supone que el arte y sus categorías se corren de las correspondientes al ámbito de la salud mental, y por ende de los estigmas de la etiqueta de loco. Otra posible respuesta recae en la noción de público que acentúa el carácter social de la práctica artística. El público es un otro con el cual el artista se conecta, para quien el artista crea sus singulares obras, para quien se expresa, para quien habla y desde allí se posiciona, muy lejos del encierro y la pasividad original. De acuerdo a Pareyson: “La actividad del hombre alcanza su máxima intensidad y potencia precisamente cuando se inserta en la voluntad independiente de la forma: En la acción del hombre se crea algo que, en vez de disminuir o sustituir la actividad, la intensifica y la refuerza, la sostiene y la dirige”… 7 Bibliografía: Davis, Fernando, Manuel López Blanco. Notas para una introducción a la estética. Selección de textos. Ficha para la cátedras Teoría de la Práctica Artística y Estética I. Facultad de Bellas Artes, UNLP. Eco, Umberto, Lector in fabula. La cooperación interpretativa en el texto narrativo. Editorial Lumen. 2da edición, 1987. España. Cap. 3. “El lector modelo” Loprete, Natalia; Fernandez Tayeldin, Juliana; Salles, Alejandro; D'Elía, Andrea Gabriela; Duca, Vasa; Perez Cabalar, Mria del Carmen. “Recursos creativos en la psicosis.” En http://www.elsigma.com/site/detalle.asp?IdContenido=12074 Pareyson, Luigi, Conversaciones de estética. Capítulo 4: “La obra de arte y su público”. Editorial Antonio Machado, 1987. España. Proyecto de Extensión Universitaria “ARTE, IDENTIDAD Y PRODUCCIÓN COMUNITARIA. Artistas en los barrios. Hacia una función social del arte” Cátedra de Teoría de la Práctica Artística / Estética I, Facultad de Bellas Artes, UNLP; Cátedra Derecho del a Comunicación, Facultad de Periodismo Y Comunicación Social, UNLP. Dirección: Mónica Caballero. Codirección: Daniela Bersi. 2008 Proyecto de Extensión Universitaria “IDENTIDADES EN MOVIMIENTO. Prácticas pre-profesionales en cárceles, institutos de menores y centros de salud.” Cátedra de Teoría de la Práctica Artística / Estética I, Facultad de Bellas Artes, UNLP; Cátedra Derecho del a Comunicación, Facultad de Periodismo Y Comunicación Social, UNLP. Dirección: Mónica Caballero. Codirección: Daniela Bersi. 2009 Proyecto de Extensión Universitaria “IDENTIDADES EN MOVIMIENTO.” Cátedra de Teoría de la Práctica Artística / Estética I, Facultad de Bellas Artes, UNLP; Cátedra Derecho del a Comunicación, Facultad de Periodismo Y Comunicación Social, UNLP. Dirección: Mónica Caballero. Codirección: Daniela Bersi. 2010 8