ACTIVIDAD 1 UNIDAD 7 1. Un joven que acaba de finalizar sus estudios de gestión administrativa ha sido contratado por una consultoría a través de una empresa de trabajo temporal y desea saber: a) ¿Qué retribución tendrá derecho a percibir? b) ¿Qué período de prueba que podrá realizar? c) ¿A quién corresponde el poder sancionador en caso de incumplimiento? d) ¿A quién corresponde el poder dirección? 2. Comenta un artículo sobre la sentencia de un tribunal europeo a propósito del despido de una embarazada con un contrato temporal. En este artículo deberás analizar lo estudiado hasta ahora. Despedir a una embarazada con un contrato temporal es «discriminatorio» El Tribunal de la Unión Europea apoya a una trabajadora de Los Barrios, en Cádiz JUAN CARLOS GONZÁLEZ Corresponsal BRUSELAS.– El Tribunal de Justicia de Luxemburgo pronunció ayer una sentencia que considera discriminatorio el despido de una trabajadora con un contrato a tiempo parcial o duración determinada por embarazo. La sentencia, que precisa el alcance de decisiones anteriores sobre la prohibición de despido de las mujeres embarazadas, se basa en varias normas europeas que consagran el principio de igualdad de trato entre los sexos. La sentencia pronunciada ayer se refiere a una trabajadora española, María Luisa Jiménez Melgar, contratada por el ayuntamiento de Los Barrios (Cádiz). La demandante firmó un contrato con la citada localidad por un periodo de tres meses en junio de 1998. El contrato fue renovado en dos ocasiones, hasta el dos de mayo de 1999. El 3 de mayo María Luisa volvió a firmar un cuarto contrato a tiempo parcial y de duración determinada, que como los anteriores no preveía fecha de expiración. Sin embargo, el 12 de mayo, el ayuntamiento le comunicó que su contrato expiraba el 2 de junio de 1999. En el intervalo había comunicado su embarazo (el niño nació el 16 de septiembre de 1999). McGraw-Hill/Interamericana Actividades Unidad 7 • Gestión Administrativa de Personal • 1 de 2 Para María Luisa Jiménez Melgar, la decisión del ayuntamiento es un «despido de forma discriminatoria» al estar motivado por su embarazo. El juzgado de lo social único de Algeciras, ante quien la demandante interpuso un recurso contra el despido, pidió entonces al Tribunal de Luxemburgo que se pronunciara sobre el caso. Los jueces de la Corte de Luxemburgo, cuyas sentencias no se pueden recurrir ante ninguna instancia superior, precisaron la interpretación de varias normativas europeas que prevén medidas para prohibir el despido de las trabajadoras durante el inicio del embarazo y el final del permiso de maternidad. Para Luxemburgo, las normas de la UE que impiden la discriminación en las relaciones laborales imponen a los Estados miembros una serie de obligaciones que no contienen «margen de apreciación». Además, recuerdan los jueces, los particulares pueden invocar ante un Tribunal nacional las directivas europeas incluso si el Estado miembro no las incorporó en su derecho interno. La sentencia precisa que el principio de prohibición de despido de mujeres embarazadas no prevé una distinción según la duración del contrato. Los jueces no precisan sin embargo que el hecho de no renovar un contrato de trabajo de duración determinada cuando ha vencido no puede asimilarse a un despido. Pero la sentencia señala que si la no renovación del contrato se debe al embarazo de la trabajadora, entonces el despido se puede calificar de «discriminación directa por razón de sexo». Una situación que las normas prohíben tajantemente. Un caso parecido Este fallo se vio reforzado por una segunda decisión, también pronunciada ayer por Luxemburgo, sobre un caso parecido que afecta a una trabajadora danesa, Brandt Nielsen, despedida por Tele Danmark. La demandante fue contratada en junio de 1995 por un periodo de seis meses a partir del 1 de julio. En agosto comunicó a Tele Danmark que estaba embarazada y que daría a luz a principios de noviembre. La empresa despidió el 23 de agosto con efecto a partir de finales de septiembre al considerar que no había informado de su embarazo a Tele Danmark en el momento de su contratación. Para el Tribunal de Luxemburgo, la negativa a contratar una mujer embarazada no se puede justificar por el prejuicio económico que puede eventualmente sufrir el empresario. En este caso, el hecho de que el contrato sea de duración determinada tampoco puede justificar el despido, concluyen los jueces. McGraw-Hill/Interamericana Actividades Unidad 7 • Gestión Administrativa de Personal • 2 de 2