360 ANALES DE HISTORIA NATURAL. (5Í) también menos abundantes. En la base el sistema muscular adquiere un gran desarrollo. Respecto á las células nerviosas y sensitivas, los tentáculos son los que las poseen más desarrolladas y fácilmente perceptibles. Las células glandulares son mucho más abundantes en las paredes del cuerpo que en los tentáculos, y también se presentan en extrema abundancia en la base, por la cual se fija el animal. Una importante modificación de la estructura histológica de los tegumentos nos presentan los tubérculos ó bolsas m a r g i nales que forman un círculo de pequeñas verrugas ó tubérculos colocados alternativamente debajo de los tentáculos del ciclo externo. Su papel ha sido muy discutido y ha dado m o tivo á numerosas publicaciones. Descritos por Mime Edwards y Haime con alguna detención, vuelve á ocuparse de ellos Hollard, y tratando de averiguar cuál pueda ser su papel, cree poderles atribuir u n a misión, "cual es la de percibir las impresiones luminosas. Más tarde Gosse, en su Monografía, los describe y los cree destinados, por su abundancia en nematocistos, á servir de órganos de defensa y protección, al modo de las baterías urticantes de otros celenterados, como la Physalia por ejemplo. En 1871 Schneider y Rotteken publican su trabajó TJeber der Ban der Actinien wid Koralien, y creen poder comparar la estructura de las bolsas marginales á la'de la retina, siendo por tanto su función la de percibir las impresiones luminosas. Describen estas como formadas por las sig'uientes capas: 1.°, una capa delgada cuticular atravesada por numerosos poros; 2.°, un estrato formado por esferitas fuertemente refringentes; 3.°, numerosos cilindros huecos también sumamente refringentes; 4.°, u n a porción de fibras que rellenan los espacios que quedan entre estos cilindros; 5.°, otra capa que se colorea fuertemente por el carmín, muy rica en filamentos y células fusiformes; 6.°, u n a capa muscular; y 7.°, el endotelio; estructura sumamente complicada. Duncan y Dana siguen describiendo estos órganos como t a les ojos, y el primero da de ellos una descripción imposible de interpretar. Más tarde Ludwig' los estudia también, y con mejor acierto opina que su estructura es parecida á la de los demás tegumentos, viendo en estas bolsas únicamente tentáculos rudimentarios; y poco después Korotneff las examina deteni-