Instituto Nacional de Propiedad Industrial 1 Economista jefe de OMPI inauguró ciclo de conferencias 2010 de INAPI Destacado economista habló sobre los efectos económicos de implementar la propiedad intelectual en una política para la innovación y el desarrollo. El economista Jefe de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), Carsten Fink. El economista Jefe de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), Carsten Fink, inauguró el ciclo de conferencias del Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI) del año 2010 con la charla: "Implementando la propiedad intelectual, una perspectiva económica" en la cuál analizó los principales criterios económicos para proteger los diferentes tipos de propiedad intelectual; los efectos económicos que produce la falsificación y la piratería; y las ventajas de incorporar la P.I. en las estrategias de crecimiento, desarrollo e innovación tanto para el sector público como el privado. Ante la presencia de un número importante de agentes de propiedad industrial y profesionales especializados en éstas materias, Fink se refirió al contexto mundial en que se encuentran las iniciativas sobre las mejores formas de implementar la propiedad intelectual y la real incidencia que posee la falsificación y piratería en éstos esfuerzos. Si bien manifestó que los derechos de propiedad intelectual resuelven las asimetrías de información en un determinado mercado y también estimulan las actividades inventivas y creativas, "la incidencia de la falsificación y piratería, especialmente en países emergentes, debe ser un aspecto que debe estudiarse con mayor profundidad sobretodo considerando que la evidencia empírica es difícil de conseguir", aseveró. La dificultad plateada por Fink radica en que los datos existentes respecto a la producción y venta de productos falsificados escapa de los sistemas oficiales de registros estadísticos de los países. "La OCDE (2007) estima que el valor del comercio internacional de mercancías infractoras de DPI alcanzó los US $200 billones en el 2005, pero éstas cifras corresponden más a una conjetura que a una verdadera afirmación, ya que analizando los datos de la OCDE, éstos se basan sólo en un grupo de productos falsificados relativamente pequeño", indicó Fink. El destacado economista de la OMPI explicó que la piratería "puede reducirse a través de incentivos negativos como positivos. Los niveles de desarrollo económico de cada uno de los países, invariablemente, afectará el nivel de equilibrio de los delitos de derechos de propiedad intelectual. Con mejores oportunidades de empleo legítimo, los consumidores están con un presupuesto menos limitado y los Gobiernos pueden tener más recursos para ser destinados en la lucha contra este tipo de infracciones". Fink además sostuvo una reunión con el Ministro de Economía Sr. Juan Andrés Fontaine y con Instituto Nacional de Propiedad Industrial 2 el Subsecretario de la misma cartera, Sr. Tomás Flores, con quienes tratará también éstos temas de gran importancia en los permanentes esfuerzos que el Gobierno realiza para mejorar sus estándares en materia de propiedad intelectual. La actividad, que en esta oportunidad el INAPI organizó en conjunto con la Pontificia Universidad Católica de Chile, se realizó en Salón de Honor Portaluppi de la Facultad de Derecho UC y correspondió a las acciones concretas del INAPI en promover el uso de la propiedad industrial como herramienta estratégica, para lograr resultados positivos en cada acción innovativa que desarrolle cualquier tipo de organización o empresa de nuestro país. Comunicaciones INAPI