EN PORTADA 6 de diciembre de 2000 Euro-Manifestación sindical en Niza En Europa, se habla demasiado de mercados y capital. En Europa, se habla poco de la dimensión social y del empleo. Tras el Mercado Único, y ante el euro y la ampliación, la Unión Europea tiene que dar una señal clara de que quiere acercar la construcción europea a los trabajadores y los ciudadanos. El desempleo afecta todavía a millones de europeos, sobre todo a los jóvenes y las mujeres. Un 9% de los trabajadores europeos están desempleados; en España, casi el 14%. Un 18% de los ciudadanos europeos vive en la pobreza. El paro está acompañado de precariedad en el empleo, desigualdad salarial y de condiciones de trabajo entre hombres y mujeres, debilitamiento de la protección social y un incremento de la exclusión social. La Confederación Europea de Sindicatos (CES) cree firmemente que en Europa se dan todas las condiciones previas para avanzar hacia una política de pleno empleo. El pleno empleo (basado en un crecimiento duradero y sostenible, apoyado por una política europea coordinada en materia de inversión pública, impuestos, innovación, aprendizaje a lo largo de toda la vida, igualdad de oportunidades) debería convertirse en la principal prioridad en Europa. Es fundamental acercar la Unión Europea a los trabajadores y ciudadanos. La Unión Europea debe convertirse en una Europa social y de los ciudadanos Esto requiere derechos políticos y sociales. Los derechos de los trabajadores, y especialmente los de sus sindicatos, deben ser plenamente reconocidos. Los derechos políticos, civiles, sociales y sindicales forman un conjunto indivisible. El derecho de los sindicatos a actuar más allá de las fronteras nacionales es tan natural como la libertad de circulación de mercancías y capitales. Tenemos un mercado único, integración económica y moneda única. En consecuencia, es necesario que se garanticen los derechos de negociación colectiva, acción sindical y huelga de ámbito europeo. La Cumbre europea de Niza va a decidir sobre la Carta de Derechos Fundamentales. El texto de la Carta es un paso adelante en la dirección correcta. Pero no es más que un paso y es demasiado pequeño. Los trabajadores españoles y europeos queremos que la Carta de Derechos se incluya en el Tratado, y obligue a todos los países a su cumplimiento, y que no sea sólo una solemne proclamación política. La CES pide a la Cumbre de Niza que adopte un calendario y un procedimiento claros que indiquen cómo y cuándo se incorporará una carta mejorada al Tratado de la Unión. Para acercar la Unión Europea a los trabajadores y ciudadanos, las decisiones tienen que ser eficaces y transparentes. Es fundamental para la Unión reformar sus procedimientos de toma de decisiones. El derecho de veto se ha convertido en un factor de bloqueo que evita que la Unión avance hacia el progreso social. Las decisiones por mayoría deberían convertirse en la norma general de la política social europea. La CES pide a la Cumbre que adopte un programa de acción social de largo alcance, que promueva el desarrollo de la política social en la Unión Europea en los próximos cinco años, que dé vida a los principios y derechos incluidos en la Carta, que cree más y mejores puestos de trabajo, que luche contra la discriminación, las desigualdades y la exclusión social. Para garantizar que los Jefes de Estado y Gobierno entienden el mensaje, para garantizar que pasan de las palabras a la acción, la Confederación Europea de Sindicatos convoca la Euro-Manifestación, en Niza, el 6 de diciembre. POR LOS DERECHOS SOCIALES EN UNA EUROPA SOCIAL POR LA EUROPA DEL PLENO EMPLEO POR LA IGUALDAD EN EL TRABAJO 8 unión Nº 197