CURSO DE REFORZAMIENTO “DERECHO ROMANO” TERCERA UNIDAD: “EL PROCEDIMIENTO DE LAS ACCIONES” La acción La acción. Acto jurídico del demandante o actor dirigido a conseguir en juicio una sentencia favorable. La venganza privada, la justicia privada y la pública. En la etapa prehistórica se recurre a la violencia indiscriminada y en las luchas y reyentas el vencedor más fuerte o más hábil impone su voluntad a los demás. En la segunda etapa, las creencias mágico-religiosas imponen una violencia sometida a ciertos ritos y ceremonias en los duelos u ordalías. En la prehistoria romana existió en una primera fase, la venganza privada. La víctima de un delito se tomaba la justicia por su mano, defendida por su familia o tribu. La reacción se limitó después por la llamada ley del Talión que autorizaba a imponer al ofensor la misma lesión o daño causado a la víctima. Ésta podía renunciar al ejercicio de la venganza mediante el pago de una composición, que primero fue voluntario y después fue impuesta por la ley. La ley de las XII tablas contiene preceptos que reflejan la venganza privada y la composición. Iurisdictio, cognitio y iudicatio. Iurisdictio deriva de ius dicere, pronunciar o decir lo que es derecho en un litigio concreto. El contenido de la iurisdictio está comprendida en los llamados tria verba solemnia.En derecho clásico, la iurisdictio la ejercía el pretor urbano. La iurisdictio podía ser expresamente delegada por el pretor en un magistrado inferior sine imperio como eran los magistrados municipales, y también podía ser atribuida una jurisdicción específica por ley. El pretor actúa con cognitio, o con conocimiento de la causa. Esta cognitio la realiza para dar o denegar una acción, examinar su propia competencia, dar o denegar la posesión de los bienes o decidir sobre cualquier otro recurso que se le solicite. Distinta de la iurisdictio del pretor es la iudicatio del juez. Iudex es la persona que decide, mediante opinio, cuál de las partes litigantes tiene o no derecho y emite la sentencia. Las partes. Son partes en un proceso las personas que litigan con el fin de conseguir una sentencia favorable. Se denomina demandante al que ejercita la actio, y demandado, aquél contra el que se dirige. También se llaman actor y reus, respectivamente. Puede suceder que en un proceso ambas partes sean a la vez demandantes y demandados: Acción de división de cosa común, acción de división de herencia y acción de deslinde de fincas. En Roma para poder ejercitar una acción, es preciso ser ciudadano romano y pater familias; las mujeres, mientras existió la tutela, podían litigar con la auctoritas de su tutor. Pero además de esta capacidad de carácter general, debían estar “legitimados” los litigantes para poder entablar un determinado proceso. Las partes podían actuar en el proceso representadas por otras personas: el cognitor o el procurator. Generalización de las acciones de la ley. Caracteres generales del proceso romano. El procedimiento se entiende como una sucesión de actos jurídicos, que se inicia con el ejercicio de la acción y conduce a la sentencia. La persona que ejercitaba una acción debía recorrer una serie de trámites sucesivos, hasta conseguir la sentencia. En este sentido se habla de procedimiento romano. Nuestro estudio son los civiles que sirven para la defensa de los derechos privados, a través del ejercicio de una acción civil o penal. Los procedimientos civiles romanos son tres: Procedimiento de las acciones de ley (legis actiones), cuya vigencia se remonta a los orígenes del proceso arcaico, anterior a las XII Tablas, y se utiliza hasta la mitad del siglo II a.C. Procedimiento formulario (per formulas) coexistió en parte con el procedimiento de las legis ationes. Corresponde a la época del derecho romano clásico. Estos dos procedimientos, el de las acciones de ley y el procedimiento formulario, constituyen el ordenamiento de los juicios privados. El procedimiento extraordinario (extraordinaria cognito), existió a partir de Augusto, y especialmente desde Adriano. El procedimiento formulario fue suprimido por una constitución de emperadores Constancio y Clemente que considera las fórmulas alambicadas y sutiles; el procedimiento cognitorio fue el único existente. El procedimiento de las acciones de ley (legis actiones) y el formulario conservan las características esencial de la división del proceso en dos fases: una, in iure, ante el magistrado, y otra posterior, apud iudicem, que tiene lugar ante el juez. Las actuaciones procesales se celebran en lugar público, el foro, donde el magistrado actuaba sentado en una silla curul sobre un estrado, mientras las partes litigantes permanecían de pie. En la última época imperial los procesos tenían lugar en secretarias en las cuales solamente eran admitidas las partes litigantes y sus abogados. El idioma procesal era el latín ya en el siglo IV comenzó a usarse el griego. Las acciones de la ley Las acciones de la ley Es el procedimiento característico de la época arcaica (muy primitivo). El procedimiento de las legis actiones presenta los siguientes caracteres: -Destaca la actividad del magistrado ordenadora del proceso. -De la exposición de las legis actiones se deducen los marcados caracteres de: - Solemnidad verbal - Utilización exclusiva del procedimiento por ciudadanos romanos. - Las legis actiones solamente sirven para ejercitar acciones del antiguo ius civile. - Rigor y formalismo en el procedimiento. El procedimiento de las acciones de la ley Hubo cinco clases de legis actiones, de las cuales las tres primeras eran contenciosas, porque daban lugar a una contienda procesal entre el actor y el demandado, mientras que las dos últimas son ejecutivas, sirven para dar efectividad a una sentencia o a un derecho reconocido. -Acción de apuesta sacramental (legis actio sacramento) Era la general, de manera que cuando la ley no disponía que se reclamase de otra forma, se acudía a esta acción. Consistía en una apuesta sacramental, y el que resultase vencido en el pleito perdía, a título de pena, el dinero de dicha apuesta en favor del pueblo, para lo que se presentaban fiadores al pretor. La legis actio sacramento tenía dos modalidades: Actio legis sacramento in rem, que servía para reivindicar una cosa propia. Seguía una tramitación ritual ante el magistrado que se presenta como un acuerdo de la antigua lucha o duelo entre las partes. Legis actio sacramento in personam, utilizada para afirmar un derecho de obligación. Esta también utilizaba un ritual, muy parecido al que se sigue en la actio sacramento in rem. -Acción de ley por petición de juez o árbitro (legis actio per iudicitis arbitrive postulationem) Aparece mencionada en las XII Tablas para reclamar deudas nacidas de una sponsio y estipulación, y para pedir la división de la herencia. -Acción de ley por condición (legis actio per condicionem) Es la menos antigua de las legis actiones. Servia para reclamar deudas pecuniarias y de cualquier otro objeto. El demandante no tenía la obligación de expresar la causa de su reclamación y se limitaba simplemente a solicitar la comparecencia del demandado a los treinta días con objeto de elegir el juez. Fase ante el magistrado (in iure) La ius vocatio es la citación del demandado para que acuda ante el pretor debe hacerla el demandante. Había un vindex o fiador que garantiza la comparecencia del demandado. También había otro fiador llamado vas para que garantizase la comparecencia en el nuevo día señalado. El magistrado podía conceder o denegar la acción. El magistrado podía reconocer el derecho alegado por el demandado por el demandante, mediante la confesio in iure. La litis contestatio se producia si el proceso continuaba por no haberse producido la confesio in iure, los litigantes actuaba por no haberse producido de conformidad con las declaraciones solemnes que correspondiesen según la legis actio ejercitada. Se acreditaban ante testigos, y este acto formal constituía la litis contestatio. Por último se procedía a la designación del juez o árbitro, de común acuerdo por las partes o mediante sortitio. (citación o ius vocatio / alegaciones ante el magistrado / litis contestatio / designación del juez o árbitro) Fase ante el juez El litigio ante el juez se reanudaba con una breve recapitulación de los hechos que habían dado lugar a la reclamación. Después tenia lugar la prueba de los hechos alegados. El procedimiento de las legis actiones regían, en materia de prueba, las siguientes reglas: Los hechos deben ser probados. Los litigantes tienen el deber de aportar las pruebas necesarias de los hechos que alegan Los medios de prueba en las legis actiones son: las declaraciones de las partes bajo juramento; los testigos, a los que siempre se les exige prestar partes bajo juramento. El juez debe someterse en ciertos casos a reglas determinadas. ( Breve recapitulación / prueba de los hechos) -La ejecución de la sentencia: aprehensión corporal (legis actio per manus iniectionem) Consiste en un procedimiento ejecutivo, que procedía cuando un deudor no cumplía la sentencia dictada por el juez, o en el caso del confessus, ya que su confesión equivalía a una sentencia; y también en algunos casos era concedida por leyes especiales. Sólo podía ser ejercitada pasados treinta días, a partir del pronunciamiento de la sentencia. -Acción por toma de prenda (legis actio per pignoris capionem) Consiste en el apoderamiento de algunos bienes del deudor sin necesidad de una previa condena, y constituye un procedimiento ejecutivo. (se podía tomar la ley por su cuenta). El procedimiento formulario Origen y caracteres. El procedimiento formulario se regula en dos leyes: Una ley Ebucia, del año 130 a.C., introdujo el procedimiento formulario, aunque circunscrito exclusivamente a las reclamaciones que podían tramitarse por condictio. Para las restantes del ius civile entre ciudadanos romanos, seguía vigente el procedimiento de las legis actiones; al menos, en la forma de ficción de que había tenido lugar una legis actio. Dos leyes Julias de juicios públicos y privados, promulgadas por Augusto el año 17 a.C., llevan a cabo trascendentales reformas. La ley Julia de juicios privados reconoció la legalidad del procedimiento formulario para toda clase de reclamaciones, y las legis actiones quedaron abolidas. También confiere al juicio formulario el carácter de iudicium legitimum. Características del procedimiento formulario son: Una mayor actividad del magistrado en la ordenación del proceso, que se manifiesta desde la citación del demandado. La tipicidad de la fórmula escrita para cada supuesto: <<tal es la fórmula, tal es el derecho>> La creación de la exceptio: medio procesal que tiene el demandado para alegar un hecho que destruye la alegación del demandante. La condena en el procedimiento formulario es pecuniaria: consiste en una suma en dinero. El procedimiento formulario forma parte de la ordenación de los juicios privados y su tramitación está dividida en dos fases: in iure, ante el magistrado, y apud iudicem, ante el juez o jueces. Fase ante el magistrado I. Editio actionis extraprocesal El demandante debía poner en conocimiento de su futuro adversario la acción que contra él tenía pensado ejercitar antes de iniciar el litigio. Esta notificación debía ser amplia: notificar la acción, dejarle sacar una copia, redactar un libelo o remitirlo o dictarlo, o conducir al adversario ante el tablón del edicto señalándole la acción. El demandado debía quedar totalmente enterado y poder preparar su defensa, o avenirse y ceder. Exigía que el demandante mostrara todos los documentos y pruebas que iba a hacer valer en el juicio. Las personas que contravinieran estas disposiciones de la edictio actionis extraprocesal eran sancionadas por el pretor. II. Citación ante el magistrado El acto formal por el cual el demandante debe citar a juicio al demandado. El demandado debe comparecer ante el magistrado, con independencia de que el actor haya cumplimentado o no la editio actionis extraprocesal, y solamente algunas personas, en razón del cargo o de la inoportunidad del momento, pueden no ser citados a juicio, como son: el cónsul, el prefecto, el pretor, el procónsul y los demás magistrados del imperio. Sin embargo, podía suceder que el llamado se ocultase, con objeto de eludir la citación. La jurisprudencia arbitran medios contra esa ocultación del que va a ser citado a juicio. Estos medios son: La puesta en posesión de sus bienes (mission in possessionem) La posterior venta de esos bienes (venditio bonorum) III. La comparecencia ante el pretor El magistrado verifica la causae cognitio, o breve examen de la capacidad de los litigantes y de su legitimación activa y pasiva, así como de su propia competencia. Pero antes puede interrogar al demandado acerca de alguna circunstancia que podría modificar la petición de su acción e incluso excluirla, interrogationes in iure. A continuación el pretor concede o deniega la acción y si el demandado pone una excepción el pretor concede o deniega. El pretor también puede exigir promesas de ambas partes, con la finalidad de asegurar el proceso. El procedimiento formulario también podía terminar en la fase in iure, por algunas de las causas que ya vimos en las legis actiones y por otras que sólo pudieron darse en el mismo, como son: La transacción y el pacto entre los litigantes. Confessio in iure El juramento necesario lo puede solicitar el demandante del demandado en algunos casos. Partes de la fórmula Se diferencian las partes ordinarias, que son aquéllas, que normalmente se encuentran en las fórmulas, y las extraordinarias o accesorias, que son las que pueden agregarse a cualquier clase de fórmula. Partes ordinarias Nombramiento del juez elegido o de los jueces recuperadores Intentio. Es aquella parte de la fórmula en la que se expresa el derecho que pretende el demandante. Es la hipótesis afirmada por el actor (demandante) que, si se aprueba, dará lugar a la condena del reo. No puede faltar. Hay fórmulas que sólo llevan la intentio (como los prejuicios), en que no se pide condena, sino la declaración de la existencia de un hecho, tal como la calidad de libre o el monto de una dote. La intentio puede ser: Cierta: cantidad determinada de dinero o de cosas fungibles, o cosa determinada. Por ejemplo, si resulta que Numerio Negidio debe a Aulo Agerio 10.000 sestercios. Incierta: Cualquier otra cosa indeterminada. Por ejemplo "Todo lo que por esta causa Numerio Negidio deba dar o hacer a favor de Aulo Agerio". Demonstratio o designación. Es aquella parte de la fórmula que se inserta siempre al principio de la misma, para designar el asunto de la demanda. Se concreta en una fase que comienza con la expresión: puesto que (Quod). Es la parte en que se expresa la causa de la intentio; la causa por la cual se reclama, si la intentio es incierta. Por ejemplo "Supuesto que Aulo Agerio vendió una mesa de plata a Numerio Negidio", asunto por el cual se litiga. Condemnatio. Es aquella parte de la fórmula en la que se otorga al juez la facultad de condenar o de absolver. En el procedimiento formulario la condemnatio consiste siempre en una cantidad de dinero. Pero había casos de una condemnatio en cantidad incierta que el juez debe determinar según las pautas que le ordena el magistrado en la fórmula y mediante una estimación. Partes extraordinarias de la fórmula Excepción, exceptio, es una parte de la fórmula que permite al demandado oponer a la acción del demandante una alegación, de hecho o de derecho, que rechaza o la paraliza. Se clasifican en: Perentorias o perpetuas: Se pueden hacer valer en cualquier época, para evitar la condena. Por ejemplo "...si en este asunto nada fue hecho ni se hace por dolo malo de Aulo Agerio". Dilatorias o temporales: Permiten evitar temporalmente la condena. Por ejemplo "...si entre Numerio Negidio y Aulo Agerio no se hubiera pactado que no sería pedida tal cantidad antes de las calendas de Marzo". Praescriptio, ("escrito antes") destinada a limitar o concentrar el objeto del litigio. Se inserta al principio de la fórmula. Parte de la fórmula que se antepone a la misma para determinar o limitar su contenido o para evitar un juicio inconducente (que no conduzca a nada). Se clasifican en: 1. Pro parte actore o o o o Para determinar o delimitar el contenido de la acción. En obligaciones de tracto sucesivo (se renuevan periódicamente; por ejemplo, un contrato de arrendamiento). Para evitar la consunción de la acción (para que no se consuma). Cuando de un mismo acto emanan obligaciones exigibles en diversas épocas. 2. Pro parte reo: Excepciones que el demandado hace valer, pero que se ponen encabezando la fórmula, para que se discutan primero, porque si se aprueban, el resto del juicio carece de sentido. "por medio de esta se circunscribía el proceso a determinados límites de tiempo o se enunciaba una cuestión que debía ser examinada previamente a esto también se le llama PRAESCRIPTIO LONGI TEMPORIS" prescripción por el transcurso del proceso Clases de fórmulas: fórmulas civiles y pretorias Las fórmulas son civiles o pretorias. Las civiles pueden derivar de una antigua legis actio. Así sucede con la acción reivindicatporia, que proviene de la legis actio sacramento in rem; o la fórmula de la actio certae creditae pecuniae, que deriva de la legis actio per condictionem. La intención de la acción reivindicatoria ahora está concebida in ius y se refiere a un certum, lo mismo que la intención de la actio certae creditae pecuniae. La litis contestatio, efectos La litis contestatio es el momento procesal central, y a este momento es preciso referirse en relación con los efectos que produce en el litigio, puesto que las partes han fijado sus posiciones: el actor , a través de la acción ejercitada y concedida por el pretor, y el demandado, a través de las excepciones propuestas, que podían ser replicadas por el demandante, duplicadas por el demandado y triplicadas, etc.; los litigantes ya no pueden introducir variaciones en las posiciones adoptadas. Efectos de la litis contestatio A partir de la litis contestatio, la cuestión objeto del litigio se convierte en una cuestion pendiente de juicio. Las cosas que son objeto del litigio no pueden ser vendidas. El efecto más importantes de la litis contestatio es la consumición de la acción. La acción no puede volver a ejercitarse. La litis contestatio se produce una sola vez. En los casos en que alguna de las partes muere o se produce un cambio de juez, es preciso redactar una nueva formula, expresando el nombre de las partes o del juez. Fase ante el juez Las dos partes deben estar presentes ante el juez y seguir actuando. En esta fase tienen lugar los debates, siempre orales, de los abogados. En el procedimiento formulario pueden ser aportados unos medios de prueba más eficaces que los que podían ser utilizadas en las legis actiones. Las pruebas pueden consistir en: Declaraciones de las partes o confesiones. Testigos. Documentos. La sentencia: la ejecución de la sentencia. Cuando el juez ha formado su opinión en relación con el asunto debatido, emite la sentencia. También en el procedimiento formulario puede abstenerse de juzgar, como sucedía ya en las legis actiones, si no ha llegado a formarse una idea clara acerca del asunto litigioso, mediante el juramento de non liquere. El juez debía guardar estricta fidelidad a la fórmula. La ejecución de la sentencia Los litigantes que se sometieron a la decisión del juez vienen obligados a cumplir la sentencia. Pero en caso de no hacerlo, debe ser cumplida aun en contra de la voluntad del demandado y condenado. Si el demandado se opone porque niega la deuda reconocida o por oponer alguna exceptio, se tramita un nuevo proceso cuya pérdida le condenaría al doble. La ejecución patrimonial se dirige contra todo el patrimonio del ejecutado; se trata de una forma de ejecución general. El procedimiento cognitorio Caracteres del procedimiento cognitorio Se da a partir de Augusto. No pertenece al orden de los juicios privados, se desarrolla íntegramente ante un juez funcionario público. A parecen funcionarios judiciales que desarrollan toda la actividad judicial. Procedimiento más libre de formas y más adaptado al nuevo derecho que surge del príncipe, Los juicios se hacen en salas cerradas. Las sentencias se pueden apelas. La tramitación es escrita, además se hace costosa porque antes el juez no cobraba. El juez puede acceder libremente a las pruebas que crea necesarias, destaca la prueba documental, la condena no es necesariamente pecuniaria. El embargo ejecutivo no hace falta que sea del patrimonio. CUARTA UNIDAD: “LA HERENCIA Y LA FAMILIA” Familia: En Derecho Civil, es sinónimo de familia agnaticia, y significa el conjunto de personas unidas por el mismo vínculo de patria potestad. Llámense, pues, “agnados“ todos los individuos que conviven bajo la misma patria potestad o, a lo menos, convivirían de perdurar su ascendiente común. El parentesco de sangre no basta para que exista agnación. La madre no es pariente agnaticia de sus hijos, a título de maternidad; lo es únicamente si el matrimonio la sujeta a la manus es decir, a la patria potestad de su marido, ya que la comunidad de poder paterno la une entonces, jurídicamente, a sus propios hijos, asignándole entre ellos lugar civil de “hermana”; Los hijos de una hija no son tampoco familiares agnados de su abuelo materno, porque se hallan bajo la patria potestad del padre o abuelo paterno, según los casos y este vínculo los sustrae a la familia civil de aquél. Y, viceversa, puede existir agnación sin parentesco de sangre. Hay actos jurídicos, como la adopción y la conventio in manum, que engendran artificialmente la patria potestad, y, por tanto, la agnación, no sólo respecto del adoptante o del marido, sino de toda la parentela civil del nuevo agnado; la comunidad de potestad patria es, según la ley civil, fundamento único y decisivo del parentesco. Familia Romana: era una institución de la antigua Roma, presente en el ámbito social y jurídico, que estaba compuesta por todos los que vivían bajo la autoridad del cabeza de familia o pater familias, incluidos naturalmente los esclavos. Familia es una palabra emparentada con famuli ("los criados") y por lo tanto, los comprende a ellos también. La familia romana era legalmente tan fuerte que ciertas cuestiones que hoy se tratan en los juzgados o en los templos, entonces se trataban en casa, bajo el mando del cabeza de familia. La familia era realmente la célula básica de la sociedad romana. El pater familias era el hombre romano que no dependía de nadie (sui iuris) y de quien dependían los demás (alieni iuris). No importaba que estuviese soltero o casado, ni su edad. La mujer nunca podía ser cabeza de familia. Patria Potestad: La ley confiere al marido la patria potestad sobre los hijos procreados dentro de legítimo matrimonio matrimonium justum. Facilita la prueba de la paternidad la presunción jurídica de que los hijos nacidos durante el matrimonio lo son del marido: “pater est, quem nuptia demostrant”. Tal presunción, sin embargo, hallarse sujeta, en Derecho Romano, a dos limitaciones: 1ª. Solo se considera procreado dentro de matrimonio al hijo que nazca después de los ciento ochenta y dos días de contraído aquél (séptimo mes ) y antes de los trescientos de su disolución. Se trata de unha simple presumtio juris, cuyo objeto es únicamente facilitar la prueba, y que, por ello, admite demostración cotnraria. Los hijos no nacidos fuera de matrimonio incluyendo entre ellos los de concubina no entran en la patria potestad de su progenitor. Jurídicamente sólo se hallan unidos en parentesco sólo se hallan unidos en parentesco a la madre, careciendo a padre. Sin embargo, pueden equipararse a los nacidos dentro de matrimonio, mediante legitimación, se por subsiguiente casamiento de sus padres Per subsequens matrimonium o por rescripto imperial per rescriptum principis, es decir, mediante declaración de legitimidad hecha por el poder público. La legitimación los sujeta a la patria potestad de su progenitor. Manus y Matrimonio. Es la plena y legítima unión y convivencia de hombre y mujer. El matrimonio del antiguo Derecho Romano implica, como factor esencial, poderes maritales absolutos sobre la persona de la mujer manus mariti, por virtud de los cuales ésta pasa a formar parte de la casa del marido, a cuyo imperio queda sometida. Así se explica la institución tradicional de la compra de la novia cöemptio, como forma primitiva de matrimonio, por la cual el pater familias da a sus hijas en casamiento. Otra forma ritual de celebración de matrimonio es la confarreatio, consistente en un sacrificio ofrendado a Júpiter, con determinadas ceremonias y palabras solemnes certa verba, por cuyo medio se consagra formalmente la comunidad de ritos y de vida entre los cónyuges haciendo entrar a la mujer, al mismo tiempo por ese exigencia inexcusable bajo la manus mariti. Extinción de la Patria Potestad. El poder paterno acaba ipso jure, en Derecho antiguo, cuando el hijo o la hija adquieran la dignidad sacerdotal de Falmen Dialis o virgo Vestalis Fundamento y concepto de la sucesión hereditaria. Los derechos y obligaciones que forman el patrimonio de una persona no se extinguen por la muerte de su titular. Diferénciense en esto los derechos y deberes patrimoniales de los personales, de los de familia, por ejemplo y de los de carácter público, los cuales desaparecen, por lo regular, con la persona del titular u obligado- Existen, sin embargo, ciertas relaciones, cuyo contenido, aun formando parte del patrimonio, las enlaza indisolublemente a una determinada persona, como es, por ejemplo, el usufructo o la obligación de pagar una pena nacida de delito. Mas lo que esencialmente caracteriza a los derechos y obligaciones patrimoniales es la posibilidad de sobrevivir a su sujeto en otro. El patrimonio podríamos decir que es inmortal: al desaparecer el antiguo titular perdura en su familia, en sus descendientes. Muere una persona, y la ley llama a heredar a sus familiares y en primer término a los hijos. Pero la idea de la propiedad privada es mas fuerte que los lazos de la familia. El derecho, mediante el testamento, autoriza al propietario para realizar plenamente su derecho de libre disposición, a la hora de la muerte, haciendo que su propiedad personal prevalezca sobre los derechos de los familiares. Sucesión Testamentaria. El testamento, según los rasgos definitivos que el Derecho Romano llega a imprimirle, es un negocio jurídico unilateral de última voluntad, cuyo fin conste en la institución de un heredero. Es unilateral, ya que descansa exclusivamente en la voluntad del testador, sin que sea necesario ni signifique nada para el concepto de testamento, que el heredero instituído declare aceptarlo. Y es de última voluntad, puesto que su autor puede revocarlo mientras viva. totalidad de la Su acción se extiende a la norma de “nemo pro parte testatus, pro parte intestatus decedere potest”. Todo heredero testamentario, aunque sólo se le instituya en parte de l herencia, se entiende instituido por principio en su totalidad y la adquiere por entero, cuando por el mismo testamento no herede nadie más, bien porque los otros nombrados repudien, en cuyo caso hace efectivo su derecho de acrecer o porque sólo sea el instituido. El heredero limitado por el testador a ciertos bienes concretos heres es re certa se omite así, por estimarse una contradicción lógico y obtiene toda la herencia, o una parte alícuota, si con él concurre otros herederos. La limitación a cosas concretas que el Derecho imponga sólo puede alcanzar eficacia indirecta y esto desde la época de los Severos, en que se reconoce validez a los fideicomiso tácitos cuando manifiestamente entrañe un fideicomiso a favor de persona determinada o una norma dada por el testador para la partición “fideicomiso preceptorio”, suponiendo que sean varios los herederos simultáneamente instituidos ex re certa.