18-20 AMNISTIA+benitez_14-16 ETA+AGUILAR.qxd 17/12/14 19:30 Página 18 POLITICA María Serrano, responsable adjunta de Política Interior de Amnistía Internacional España “LA ‘LEY MORDAZA’ PUEDE SIGNIFICAR MÁS IMPUNIDAD POLICIAL” La nueva Ley de Seguridad Ciudadana, conocida como ley Mordaza, “puede poner en riesgo el derecho a la libertad de expresión, a la libertad de reunión pacífica y el derecho a la información”. Así lo subraya María Serrano, portavoz de Amnistía Internacional España en materia de Política Interior, que destaca además que la ley “crea un régimen especial para Ceuta y Melilla que permite las expulsiones de facto por parte de la Guardia Civil”, las conocidas como devoluciones en caliente. Serrano explica que “hemos contabilizado once normas de Derecho nacional, comunitario e internacional que vulnerarían las expulsiones en caliente”. Por Manuel Capilla te el Congreso, el Senado o asambleas legislativas de las comunidades autónomas, l ministro del Interior retaba el en la memoria está lo que sucedió en el Parotro día a los críticos con la ley, lament o con Rodea el Congreso. Amnistía afirmando que “alguien me diga defiende la protesta pacífica y en la ley hay un derecho o una libertad que es- términos muy ambiguos. No se sabe qué se ta ley restringe respecto a la ley vigente”. va a entender como perturbación grave de ¿Cuáles son esos derechos que socava la ley la seguridad ciudadana, lo van a estimar las Mordaza? fuerzas de seguridad. De acuerdo con el de—Puede poner en riesgo el derecho a la recho internacional, es difícilmente justifilibertad de expresión, a la libertad de reunión pacífica y el derecho a la información. Hay otra parte, que se ha añadido durante la tramitación de la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana, que es todo lo relacionado con las devoluciones en caliente, mal llamadas así porque en realidad son expulsiones sumarias y colectivas, prohibidas por el derecho internacional y que socavan el derecho de asilo, a la tutela judicial efectiva a la asistencia jurídica y de intérprete. cable una limitación general de dónde se —¿Es una ley ‘antimanifestaciones’, dise- puede ejercer el derecho a la libertad de reuñada ad hoc para movimientos como Rodea nión pacífica. Las reuniones y manifestacioel Congreso o la Plataforma de Afectados por nes tienen que celebrarse allí donde puedan la Hipoteca? ser vistas y oídas por sus representantes. Ade—Cuando se van a sancionar perturba- más, hay otras infracciones que nos preociones graves de la seguridad ciudadana an- cupan especialmente como todo lo que tie- E “Vamos a intentar que la Comisión Europea abra un procedimiento de sanción a España” 18 22 de diciembre de 2014–11 de enero de 2015. nº 1091 ne que ver con la limitación de las grabaciones a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. —Eso limita muchísimo la tarea de los medios de comunicación. —Efectivamente, porque quién decide cuál es el uso no autorizado de imágenes. Han añadido una cláusula final en relación al derecho de información, pero puede ser inviable defender ese derecho tal y como está redactada la infracción. Y además, es la propia policía la que va a estimar una infracción que les afecta directamente a ellos. En los últimos tiempos la labor de ciudadanos y periodistas ha sido fundamental para sacar a la luz abusos policiales en reuniones y manifestaciones. Hemos visto cómo los periodistas encontraban cada vez más dificultades en gravar a las fuerzas de seguridad. Si ya está siendo difícil documentar esos abusos, imaginemos que puede pasar con una nueva ley que faculta a la policía para limitar esto. Esto ataca al derecho a la libertad de información y puede significar más impunidad policial. —¿Cómo valora la actitud del Gobierno durante el proceso de tramitación de la ley? ¿Se ha reunido con los grupos críticos como vosotros? —Del primer borrador de anteproyecto, cuando todavía la estaba elaborando el Ministerio del Interior, ha habido bastantes cambios. Al principio, la lay sancionaba los escraches -que para Amnistía es un ejercicio de la libertad de expresión-, acampadas -una sanción pensada para una forma de protesta que se había identificado con el 15-M- o cuestiones como las injurias a España o a los símbolos –cuando la libertad de expresión no protege entidades etéreas, sino derechos individuales. Además, se le otorgaba tantos poderes a la policía que ésta podía identificarte y sancionarte en prevención de una infracción y trasladarte a comisaría por una falta. Imaginemos que una persona, por una multa de tráfico, es trasladada a comisaría. Hubo un informe del CGPJ muy crítico que señalaba que había graves problemas constitucionalidad y entre la presión de estos órganos consultivos y la presión social, rebajaron el contenido de la ley. Durante todo este proceso, Amnistía tuvo reuniones con las autoridades y aceptaron algunas de nuestras recomendaciones. La más importante, y 18-20 AMNISTIA+benitez_14-16 ETA+AGUILAR.qxd 17/12/14 19:30 Página 19 prácticamente la única, fue que la disolución de reuniones era una medida de último recurso, que la policía no podía disolver una reunión simplemente porque haya un peligro potencial, sino que lo que debe hacer es aislar a los violentos y permitir que la reunión siga su curso. En la fase parlamentaria, con el Grupo Popular nos hemos reunidos dos veces, pero no ha aceptado ninguna de nuestras recomendaciones, ni una. Ni nuestras ni del resto de organizaciones. La tramitación se ha hecho muy rápidamente. Esta ley se justificó para eliminar las faltas del Código Penal, pero el nuevo Código Penal va a ser aprobado mucho después. Lo cual es empezar la casa por el tejado. —¿Este ley entra en contradicción con la normativa europea, especialmente en relación a las devoluciones en caliente? —En general, la ley, no sigue las directrices de la OSCE (Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa) sobre libertad de reunión pacífica, eso está claro. Y no síguela jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que ha consagrado que el derecho a la libertad de reunión pacífica y a la libertad de expresión son derechos tan importantes en una democracia que no pueden ser limitados de manera “El PP no ha aceptado ninguna de nuestras recomendaciones ni del resto de organizaciones” general. En relación a las devoluciones en caliente, lo que se crea es un régimen especial para Ceuta y Melilla que permite las expulsiones de facto por parte de la Guardia Civil. Son expulsiones sin garantías que entran en contradicción con el derecho a la tutela judicial efectiva, con el derecho a solicitar asilo y otros reconocidos en la Ley de Extranjería. Pero además entran en contradicción con el derecho comunitario, con la Directiva de Retorno y la Directiva de Asilo. El Gobierno se ha escudado en el código de fronteras Schengen, afirmando que España está obligada también a proteger las fronteras de la UE. Pero el código de fronteras Schengen dice dos cosas. Una es que ninguna medida de protección de fronteras puede socavar las obligaciones en materia de silo y que el control de fronteras debe hacer- F. MORENO nº 1091. 22 de diciembre de 2014–11 de enero de 2015 19 18-20 AMNISTIA+benitez_14-16 ETA+AGUILAR.qxd 17/12/14 19:30 Página 20 LA QUINCENA JUDICIAL Por José M. Benítez de Lugo* La nueva Ley de Seguridad Ciudadana L a infamia se ha consumado; la mayoría que tiene el Partido Popular en el Congreso de los Diputados ha aprobado la llamada Ley de Seguridad Ciudadana, parangonable en muchos aspectos a la Ley de Orden Público franquista, tema al que ya nos referíamos en nuestra colaboración del núm. 1042 de esta revista. No nos detendremos aquí a poner de manifiesto la brutalidad de las sanciones económicas que la ley contiene y su falta de proporcionalidad con las eventuales infracciones que suponen auténticos factores disuasorios para el ejercicio de los derechos ciudadanos, pues ello ya se ha tratado en diversos medios de comunicación. Pero sí queremos poner de manifiesto, por un lado, el trasvase de competencias sancionadoras (de los jueces a la Administración) que supone la ley en cuestión y consecuentemente al derecho a un proceso judicial con plenitud de garantías para el ciudadano y, por otro lado, que, de conformidad con lo dispuesto en el art. 53 de la nueva ley, se otorga la presunción de validez a los atestados policiales, siguiendo la nefasta estela de lo establecido en el art. 137.3 de la Ley 30/92 de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas, con lo que se coloca al desvalido ciudadano ante el otorgamiento de una extraordinaria fuerza del principio de autoridad ajeno totalmente a la esencia de un Estado de Derecho. Con ello se residencia en él la siempre difícil carga de la prueba contraria a la presunción de certeza otorgada a lo que haya sido dicho por la Autoridad; es una manifestación más (y van muchas) de la proximidad, del acercamiento de nuestro sistema político en muchos aspectos a un Estado policial. Ya la Sentencia del Tribunal Constitucional núm. 243 de 10 de diciembre de 20 2007 delimitó la viabilidad de la validez de tal presunción otorgada a las autoridades, a que ello se realizara en el procedimiento administrativo, sin que sirviese a tal efecto la eventual ratificación de la denuncia cuando se efectuase en el posterior proceso judicial, señalando además que el principio de presunción de inocencia regía también en el procedimiento administrativo sancionador del que era predicable la necesaria actividad probatoria y sin que fuera suficiente por tanto la sola denuncia de los agentes policiales. En esta Sentencia nuestro máximo intérprete constitucional no llegó a dar el paso a nuestro entender imprescindible: el que no bastase la ratificación de los agentes policiales en su denuncia, sino que la misma fuera corroborada por otras pruebas y de ello, desventuradamente, se aprovecha el denostado articulo 53 de la nueva ley. Mientras en nuestro país, en los procedimientos sancionatorios administrativos, no se coloque en igual posición al ciudadano y a la autoridad (principios de igualdad de armas y de contradicción), seguiremos estando en presencia de una exacerbada –e indebida– presencia y fuerza del principio de autoridad, que se compadece mal con un auténtico Estado de Derecho, resultando claramente falaces las afirmaciones que contiene la Exposición de Motivos de la ley sobre el binomio libertad-seguridad, sobre que la ley tiene por objetivo la protección de bienes y personas, y que, en definitiva, se pretende con ella mantener la tranquilidad de los ciudadanos. Son afirmaciones todas que contienen bellas palabras, pero que el nefasto texto de la ley pone en evidencia algo a lo que no nos acabamos –ni debemos– acostumbrar: al falso lenguaje de algunos políticos. ● Presidente Honorario de la Asociación de Abogados Demócratas por Europa. 22 de diciembre de 2014–11 de enero de 2015. nº 1091 se respetando la dignidad de las personas. Expulsar a una persona sin ningún tipo de procedimiento ni de evaluación de su situación individual puede poner en riesgo a esa persona, exponiéndola a graves violaciones de derechos humanos al país al que es devuelto, en este caso a Marruecos. Hemos contabilizado once normas de derecho nacional, comunitario e internacional que vulnerarían las expulsiones en caliente. —¿Qué le parecen las palabras del ministro ante las críticas procedentes del Consejo de Europa, afirmando que si le facilitan “una dirección” donde a “esa pobre gente” se les vaya a dar “manutención y trabajo, les enviamos para allá”? —Son declaraciones inaceptables, impropias de un ministro. El Gobierno hace caso omiso a Acnur (Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados) al Consejo de Europa, a las organizaciones… Y no “El ministro trata de deslegitimar a las organizaciones defensoras de los derechos humanos” sólo eso, sino porque encima trata de deslegitimarlas. Nosotros pedimos mayor respeto por el trabajo de las organizaciones que asisten y protegen a las personas cuando los Estados se están desentendiendo. Pedimos al Gobierno que se dedique a cumplir la ley y deje de mandar mensajes en otro sentido. —¿Tienen pensada alguna iniciativa legal contra la ley a nivel europeo? —Si se mantiene la disposición que permite las expulsiones sumarias y colectivas durante el trámite en el Senado, desde Amnistía Internacional vamos a intentar que la Comisión Europea abra un procedimiento de sanción a España por incumplimiento del derecho europeo. Más allá de eso, vamos a ver la estrategia jurídica que seguimos. Pero además de la vía europea existe la del Tribunal Constitucional, porque los grupos políticos y el Defensor del Pueblo pueden recurrir esta ley y tienen el deber de hacerlo. Y será el Tribunal Constitucional el que tenga que pronunciarse. ●