I Oportunidad para el reconocimiento del ingreso y el gasto Área Tributaria Ficha Técnica Autora: Dra. Lourdes Gutiérrez Quintana Título : Oportunidad para el reconocimiento del ingreso y el gasto Fuente: Actualidad Empresarial Nº 272 - Primera Quincena de Febrero 2013 El artículo 57º del Texto Único Ordenado de la Ley del Impuesto a la Renta - Decreto Supremo 179-2004-EF (en adelante, LIR) dispone que las rentas se imputarán al ejercicio grabable en que se devengan. Conforme se observa, del solo texto de la norma no podemos determinar la naturaleza del devengo y en tanto la LIR no cuente con una definición, se hace necesario acudir a otras fuentes (de conformidad con lo establecido por la Norma IX del Título Preliminar del Texto Único Ordenado del Código Tributario, aprobado por el Decreto Supremo Nº 135-99-EF), en este caso las contables, a efectos de establecer con mayor precisión la naturaleza de este, permitiéndonos así determinar de forma correcta la oportunidad en la que deben imputarse los gastos e ingresos a un ejercicio. Aspectos generales 1.Reconocimiento de ingresos o gastos Las rentas de tercera categoría se considerarán producidas en el ejercicio en que se devenguen, en virtud de lo señalado en el inciso a) del artículo 57º de la LIR. Entendido así la misma regla de la imputación de ingreso se aplica para la imputación de gasto, salvo en casos especificos que establece la norma, como aquellos que debido a razones ajenas al contribuyente no hubiera sido posible conocer un gasto de la tercera categoría oportunamente y siempre que cumpla con las condiciones establecidas por las normas tributarias. 2. Ejercicio gravable Para efectos tributarios, el ejercicio gravable empieza el 1 de enero de cada año y finaliza el 31 de diciembre, debiendo coincidir en todos los casos el ejercicio comercial con el ejercicio gravable, sin excepción. 3.Devengo 3.1.Según lo dispuesto en la Ley del Impuesto a la Renta La Ley del Impuesto a la Renta en su artículo 57º dispone que los criterios de imputación de renta a un ejercicio N° 272 Primera Quincena - Febrero 2013 determinado, se rige por el criterio de lo devengado y de lo percibido. Ahora bien, en tanto es de nuestro interés determinar el momento de imputación del ingreso y del gasto, para el perceptor de renta de tercera categoría, será prioritario determinar la naturaleza del devengo y el ejercicio en que se devengan estos. Y en tanto la norma no precisa el momento del devengo, coincidiendo con la Administración Tributaria, es necesario recurrir a lo dispuesto por las normas contables, en aplicación de la Norma IX del TUO del Código Tributario, aprobado por D.S. Nº 135-99-EF. Sobre el particular, la Administración Tributaria, en el Informe N° 048-2010/ SUNAT, ha manifestado que “(…) debe tenerse en cuenta que las normas que regulan el Impuesto a la Renta no definen cuándo se considera de vengado un Ingreso y un gasto, por lo que resulta necesario recurrir a la doctrina jurídica y a los Principios contables”. En ese sentido, tenemos como referencia el párrafo 26 de la NIC 1 el cual señala que “(…) las transacciones y demás sucesos económicos se reconocen cuando ocurren (y no cuando se recibe el pago efectivo u otro medio efectivo equivalente) registrándose en los libros contables incluyéndose en los estados financieros de los ejercicios con los cuales están relacionados (…)”. Al respecto, la Administración Tributaria, en el Informe Nº 021-2006/SUNAT, también ha tenido la oportunidad de pronunciarse sobre el devengo, señalando que “para efecto del Impuesto a la Renta, los ingresos obtenidos por la prestación de servicios efectuada por personas jurídicas se imputan al ejercicio gravable en que se devenguen; vale decir, al momento en que se adquiere el derecho a recibirlos (sean percibidos o no), siendo irrelevante la fecha en que los ingresos sean percibidos o el momento en que se emita el comprobante de pago que sustente la operación”. Así también, el Tribunal Fiscal en la RTF Nº 9518-2-2004 expresa lo siguiente: “(…) principio contable (devengado) que si bien la LIR menciona, no es definido expresamente por ella, por lo que corresponde analizar los alcances de lo que se entiende por ‘devengado’ recurriendo al concepto que le otorga la doctrina contable, ya que ello permitirá determinar el periodo en el que deben reconocerse los ingresos (rentas) e imputarse a los gastos (…)”. 3.2.Imputación de ingresos Ingreso Según las definiciones del inciso a) párrafo 70 del Marco Conceptual para la prepa- ración y presentación de información financiera (en adelante, Marco Conceptual), los ingresos son los incrementos en los beneficios económicos, producidos a lo largo del periodo contable, en forma de entradas o incrementos de valor de los activos o bien como decremento de las obligaciones, que dan como resultado aumentos del patrimonio neto, y no están relacionados con las aportaciones de los propietarios a este patrimonio. Reconocimiento de ingresos Para establecer el momento en que se genera el ingreso, es necesario remitirnos no solo a lo dispuesto en el Marco Conceptual sino también a lo dispuesto en las NIC, criterios jurisprudenciales del Tribunal Fiscal y a lo expresado por la Administración Tributaria en algunos informes, entre ellos, tenemos el Informe N° 048-2010/SUNAT que citamos a continuación: “El ingreso por concepto de ‘garantía extendida’ debe considerarse devengado durante el periodo cubierto por dicha garantía, sin importar que el monto correspondiente a dicho servicio haya sido facturado o pagado en una oportunidad anterior”. Así mismo para determinar el momento del devengo de los ingresos, tomaremos como referencia lo dispuesto en el párrafo 70 del Marco Conceptual, en el que se señala que los ingresos son los incrementos en los beneficios económicos, producidos a lo largo del periodo contable, en forma de entradas o incrementos de valor de los activos, o bien como decrementos de las obligaciones, que dan como resultado aumentos del patrimonio neto, y no están relacionados con las aportaciones de los propietarios a este patrimonio. Por otra parte, en el caso del reconocimiento de las transacciones en los estados financieros, el párrafo 92 del Marco Conceptual señala que se reconoce un ingreso en el estado de resultados cuando ha surgido un incremento en los beneficios económicos futuros, relacionado con un incremento en los activos o un decremento en los pasivos, y además el importe del ingreso puede medirse con fiabilidad. En definitiva, esto significa que tal reconocimiento del ingreso ocurre simultáneamente con el reconocimiento de incremento de activos o decremento de pasivos. Finalmente, como ya lo señalamos líneas arriba, es claro que para determinar el momento en que se considere devengado un ingreso, además de observar lo Actualidad Empresarial I-15 I Actualidad y Aplicación Práctica dispuesto en el Marco Conceptual, es necesario recurrir a lo dispuesto en la NIC 18. Al respecto, la NIC 18 establece que el concepto de ingresos comprende tanto los ingresos de actividades ordinarias como las ganancias. Asimismo, señala que los ingresos de actividades ordinarias propiamente dichos surgen en el curso de las actividades ordinarias de la entidad y adoptan una gran variedad de nombres, tales como: ventas, comisiones, intereses, dividendos y regalías. Como se observa, el objetivo de esta norma es establecer el tratamiento contable de los ingresos de actividades ordinarias que surgen de ciertos tipos de transacciones y otros eventos. Ahora bien, la principal preocupación de la contabilización de ingresos de actividades ordinarias es determinar cuándo deben ser reconocidos. El ingreso de actividades ordinarias es reconocido cuando es probable que los beneficios económicos futuros fluyan a la entidad y estos beneficios puedan ser medidos con fiabilidad. Como vemos la norma contable busca identificar las circunstancias en las cuales se cumplen estos criterios para que los ingresos de actividades ordinarias sean reconocidos. Asimismo, suministra una guía práctica sobre la aplicación de tales criterios. Clasificación de ingresos (NIC 18). Los ingresos provienen de: • Venta de bienes • Prestación de servicios • Uso de terceros de los activos de la empresa Devengo en la venta de bienes Sobre el particular, la NIC 18 dispone que los ingresos de actividades ordinarias procedentes de la venta de bienes deban ser reconocidos y registrados en los estados financieros cuando se cumplen todas y cada una de las siguientes condiciones: • Cuando el transferente ha transferido al comprador los riesgos y ventajas, de tipo significativo, derivado de las propiedades de los bienes. • A raíz de la venta, ya no podrá vender, usarlos ni arrendarlos, puesto que ya no tiene el control afectivo sobre los mismos. • El importe de ingresos de actividades ordinarias puede ser medido de manera confiable, vale decir, que está determinado su valor razonable. • Sea probable que la entidad reciba los beneficios económicos asociados con la transacción, es decir, que en el momento de la transacción no hay duda de que se cobrará el importe de la venta. I-16 Instituto Pacífico • Los costos incurridos o por incurrir pueden medirse confiablemente. Ahora bien, el reconocimiento de los ingresos por la venta de bienes requiere una evaluación de los acontecimientos que se originaron en la transacción de cada caso concreto, en algunos casos puede suceder que la trasferencia de la titularidad se efectúe con anterioridad a la transferencia legal. Sobre el particular, la Administración se pronunció en el Informe Nº 097-2010-SUNAT, donde señala que “(…) el ingreso para la empresa emisora de los vales se devengará cuando se realice la venta de los bienes o, cuando caduque el plazo para el canje de los vales, siempre que no exista obligación por parte de la empresa emisora de devolver el dinero en caso que dichos vales sean canjeados”. Devengo en la prestación de servicios A efectos de la prestación del servicio, los ingresos serán reconocidos cuando el resultado de la transacción que suponga la prestación del servicio pueda ser estimado con fiabilidad. Vale decir, que los ingresos serán reconocidos conforme al grado de avance del servicio materia de la transacción. Al respecto, el párrafo 20 de la NIC 18 establece que cuando el resultado de una transacción, que suponga la prestación de servicios, pueda ser estimado con fiabilidad, los ingresos de actividades ordinarias asociados con la operación deben reconocerse, considerando el grado de terminación de la prestación final del periodo sobre el que se informa. Ahora bien, el resultado de una transacción puede ser estimado con fiabilidad cuando cumpla todas y cada una de las siguientes condiciones: • El importe de los ingresos de actividades ordinarias pueda medirse con fiabilidad. Vale decir, que está determinado su valor razonable, tales como: precio, valor de la contraprestación, etc. • Sea probable que la entidad reciba los beneficios económicos asociados con la transacción, ello implica que no existe duda de que dicha entidad recibirá los beneficios económicos vinculados relacionados con la transacción. • El grado de realización de la transacción, al final del periodo sobre el que se informa, puede ser medido con fiabilidad. Es decir, que a la fecha del balance puede ser medida con fiabilidad el grado de terminación de la transacción. Cabe resaltar que el grado de realización de una transacción puede determinarse mediante varios métodos. Cada entidad usará el método que mida con más fiabilidad los servi- cios ejecutados. Entre los métodos a emplear se encuentran (según la naturaleza de la operación): - Inspección de los trabajos efectuados. - Proporción de los servicios prestados a la fecha en relación con el total del servicio a prestar. - Proporción de los costos incurridos en relación con el costo total estimado de la operación. • Los costos ya incurridos en la prestación, así como los que quedan por incurrir hasta completarla, puedan ser medidos con fiabilidad. Lo anteriormente señalado, es expresado por el Tribunal Fiscal en su RTF Nº 18412-2002, quien se ha pronunciado en el sentido siguiente: “(…) para el reconocimiento de los ingresos que se obtengan producto de la prestación del servicio debe verificarse, entre otras condiciones, que el momento del ingreso proveniente de las operaciones sea medido confiablemente para que dicho reconocimiento sea válido, de modo que los ingresos solo se reconocerán cuando exista certeza razonable en cuanto a la suma que efectivamente se va a obtener; Que por otro lado, debe tenerse en cuenta que no obstante en la mayoría de los casos la suma de los ingresos resulta ser conocida con exactitud cuando el prestador del servicio y usuario han convenido acerca de la retribución y condiciones de ejecución del servicio, existen operaciones en las que, por su propia naturaleza económica, a pesar de producirse las indicadas situaciones no es posible determinar la ganancia (resultados) debido a que para su cálculo se requiere de la verificación de distintas circunstancias a las antes descritas, por lo que el reconocimiento del ingreso en el ejercicio en que sea prestado no puede ser una regla que se aplique sin excepciones”. Asimismo, el Tribunal Fiscal expresó en otras resoluciones: RTF Nº 4432-5-2005, que “(…) los ingresos que la recurrente obtenía por sus operaciones se devengan cuando el paciente culmina con el tratamiento establecido en la solicitud de beneficios, conforme lo consideró la Administración, y no la fecha en que la recurrente emitía sus facturas para su aprobación por la EPS, por lo que este reparo resulta correcto”. RTF Nº 2198-5-2005, que “(…) para el reconocimiento de los ingresos en un ejercicio determinado, debe observarse en primer lugar que se haya realizado la operación que originó los ingresos, y que además de estos se haya ganado, es decir, que la empresa haya satisfecho todas las condiciones necesarias para tener derecho a los beneficios que los ingresos representan”. N° 272 Primera Quincena - Febrero 2013 Área Tributaria 3.3. Reconocimiento del gasto Como se ha señalado a lo largo del presente informe, el artículo 57º de la LIR establece que la renta se imputará al ejercicio en el cual se devenga. Para estos efectos, el ejercicio gravable empieza el 1 de enero de cada año y finaliza el 31 de diciembre, debiendo coincidir en todos los casos el ejercicio comercial con el ejercicio gravable, sin excepción. Entendido así, la misma regla de la imputación de ingreso se aplicará al gasto, salvo aquellos casos expresamente señalados en la norma. Ahora bien, como las normas tributarias no contienen una definición del devengo, ni el momento en que se debe reconocer el gasto, recurrimos al Marco Conceptual y a las NIC, en tanto el devengo es un concepto contable. Respecto de la definición del gasto, el párrafo 78 del Marco Conceptual señala que la definición de gasto incluye tanto las pérdidas como los gastos que surgen en las actividades ordinarias de la empresa. Entre los gastos de la actividad ordinaria se encuentran, por ejemplo, el costo de ventas, los salarios y la depreciación. Usualmente, los gastos toman la forma de una salida o depreciación de activos, tales como efectivo, inventarios, o propiedades, plantas y equipo. En relación con el reconocimiento del gasto, el párrafo 94 del Marco Conceptual, establece que se reconoce un gasto en el estado de resultados cuando ha surgido un decremento en los beneficios económicos futuros, relacionado con un decremento en los activos o un incremento en los pasivos, y además el gasto puede medirse con fiabilidad. En definitiva, esto significa que tal reconocimiento del gasto ocurre simultáneamente con el reconocimiento de incrementos en las obligaciones o decrementos en los activos (por ejemplo la depreciación del equipo). De lo indicado, podríamos señalar que para determinar el momento del devengo es importante efectuar un análisis detallado según la naturaleza de la operación, ello en tanto podríamos estar frente: • A un servicio que se encuentra supeditado a un resultado o a la prestación en forma continuada (gasto de servicio), o • Frente a una venta de bienes, en el sentido de que podría no haberse configurado la trasferencia de la propiedad, aun cuando se haya entregado el bien (como es el caso de la trasferencia de bienes inmuebles). Sin perjuicio de lo señalado, lo que sí queda claro, para estos casos, es que resulta irrelevante la fecha en que se efectúe el pago. Por su parte la Administración ha expresado en su Informe N° 048-2010/SUNAT que para el caso de imputación de gastos, N° 272 Primera Quincena - Febrero 2013 los gastos relacionados con la garantía extendida se devengarán en el ejercicio o periodo en que se realiza o se presta el servicio a fin de atender las obligaciones que cubre dicha garantía. Asimismo, el mismo Tribunal Fiscal, en su Resolución, RTF Nº 0207-1-2004, manifiesta que para la deducción de un gasto se debe acreditar su devengo y adicionalmente que esté sustentado en un comprobante de pago en caso de que exista la obligación a emitirlo. Criterios para imputar el gasto en un ejercicio Asociación directa (simultánea) con el ingreso que genera. Oportunidad En el caso de que los beneficios económicos surjan a lo largo de varios periodos contables, los gastos se reconocen utilizando una distribución sistemática y racional entre los periodos que comprende. En el caso de que no genere beneficios económicos futuros, cuando se genera la obligación de pago. Correlación de gastos con ingresos En virtud del párrafo 95 del Marco Conceptual, el gasto se reconoce en el estado de resultados sobre la base de una asociación directa entre los costos incurridos y la obtención de partidas específicas de ingresos. Este proceso, al que se le denomina comúnmente correlación de gastos con ingresos, implica el reconocimiento simultáneo o combinado de unos y otros, si surge directa y conjuntamente de las mismas transacciones u otros sucesos. En ese sentido, se espera que los beneficios económicos surjan a lo largo de varios periodos contables, y la asociación con los ingresos puede determinarse únicamente de forma genérica o indirecta, los gastos se reconocen en el estado de resultados utilizando procedimientos sistemáticos y racionales de distribución. Al respecto, el Tribunal señaló en su Resolución, RTF Nº 8534-5-2001, que en cuanto a los gastos por intereses devengados por pagarés, por alquileres, por servicios de energía eléctrica, etc., se establece que la causa eficiente o generadora de gasto es el transcurso del tiempo, por tratarse de servicios que se prestan en forma continua, según lo pactado contractualmente, sin que interese que se haya pagado la retribución o que se haya emitido el comprobante. Gastos del ejercicio anterior A efectos de rentas de tercera categoría, los ingresos se imputan al ejercicio grabable en el que se devengan, en virtud I de lo señalado en el inciso a) del artículo 57º de la LIR. Entendido así, la regla de la imputación de ingreso se aplica para la imputación de gasto, vale decir que los gastos se imputan al ejercicio grabable en que se devengan, salvo excepciones establecidas por la norma tributaria. Excepciones de la imputación del gasto en ejercicio que se devenga Los artículos 57º y 37º de la LIR establecen excepciones para la imputación del gasto o costo en el ejercicio que se devenga, entre ellos: • Aquellos casos en los que debido a razones ajenas al contribuyente no hubiera sido posible conocer un gasto de la tercera categoría oportunamente y siempre que la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria - Sunat compruebe que su imputación en el ejercicio que se conozca no implica la obtención de algún beneficio fiscal. En este supuesto, se podrá aceptar su deducción en el ejercicio que se conoce, en la medida que dichos gastos sean provisionados contablemente y pagados íntegramente antes de su cierre. Requisitos: De lo desarrollado a lo largo del presente informe, se observa que la norma tributaria establece como regla general, la aplicación del gasto en el periodo que se devenga, sin posibilidad de trasladarlo a otro ejercicio diferente. Sin embargo, excepcionalmente, la misma norma posibilita la aplicación de dicho gasto a otro periodo, siempre que se cumplan estrictamente los siguientes requisitos: - Por razones ajenas a la empresa, no habría podido ser conocido por la empresa. - La Administración Tributaria compruebe o corrobore que su imputación del gasto en el ejercicio en el que se conozca no implica la obtención de un beneficio fiscal. - De efectuarse la provisión contable y además que el gasto sea pagado de manera íntegra frente al cierre. • Supuesto del inciso v) del artículo 37º de la LIR. • Los señalados en inciso l) del artículo 37 de la LIR. Base legal • Texto Único Ordenado de la Ley del Impuesto a la Renta - Decreto Supremo 179-2004-EF (en adelante, LIR). • Reglamento de la Ley del Impuesto a la Renta, Decreto Supremo Nº 12294-EF • Marco Conceptual para la preparación y presentación de los estados financieros • Normas Internacionales de Contabilidad Actualidad Empresarial I-17