MAGIA, CIENCIA, RELIGIÓN Bronislaw Malinowski EL RAZONAMIENTO DEPENDE DEL CONTEXTO: la ciencia familiariza al hombre con su entorno, la religión fija las actitudes mentales dotadas de valor y la magia confiere al hombre valor ante la dificultad. La tradición juega un papel muy importante en la mutua relación de los componentes de una “comunidad”. Uno de los factores que más contribuye a este fin, dentro de la religión, es el rito, ya que favorece la cohesión social. Según Malinowski la religión confiere al hombre el don de la integridad mental, neutralizar emociones, tales como el miedo o la desmoralización, y proporciona medios de reincorporación a la estructura del “grupo” como unidad. Si retrocedemos a la época del “hombre primitivo” sabemos que llega a la religión a través de una crisis. Dicha crisis sobreviene cuando falla la magia. “Magia, ciencia, religión”, se intentan determinar las diferencias funcionales y estructurales que existen entre esas tres formas culturales, lo cual conduce a analizar otros problemas que encuentra en torno a la diferenciación y mutua interacción entre lo sagrado y lo profano en la cultura (la cultura de las islas Tobriand, es den donde generaliza sus propuestas). Dentro del mundo de lo sagrado, la magia esta basada en la confianza del hombre en su poder de dominar la naturaleza, de modo directo, mientras que la religión comporta la confesión de la impotencia humana ante ciertas cuestiones, y leva al hombre por encima del nivel de la naturaleza y de lo mágico. Esta distinción acerca de modo asombroso a la ciencia y la magia en las sociedades primitivas. En el análisis de la ciencia, se trata de demostrar que los integrantes de las sociedades primitivas tienen un tipo de conducta separada de la magia y basada en el conocimiento científico y en el uso de la lógica, con unas leyes tradicionales conocidas por la comunidad y puestas a menudo a prueba, en contra de aquellos que consideran a la mente primitiva como incapaces de distinguir causa de efecto. Así, el éxito de la agricultura, la pesca, la ganadería o el comercio se debe a la combinación del conocimiento de las condiciones naturales necesarias para llevar a buen fin un trabajo adecuado, serio y apoyado en unos métodos. En las culturas primitivas existía el conocimiento algo rudimentario pero se podría decir que conocimiento científico. Estas acciones, en la mente del individuo, no son la causa directa del buen estado de las cosas, el conocimiento racional es para ello fundamental, pero por otro lado, su experiencia le indica que existen circunstancias y fuerzas que pueden traer mala suerte a pesar de toda precisión lógica y técnica. En este punto entra la magia, que coexistirá con la ciencia sin que existan interferencias entre ellas. No existe el deseo de un conocimiento desinteresado y teórico de la realidad: la ciencia no se hace de un modo consciente. La religión nos encontramos con un problema, es algo presente en toda cultura, pero alcanza tal diversidad que es difícil de explicar. Lo que sí es cierto e y no se puede negar de las sociedades primitivas, es que en las crisis de la vida humana, incluso en los más lejano de esta, esta ligado extrañamente y confusamente a una mezcla de ritos que están conectados con cada acontecimiento importante y que se toman en cuenta y se viven para estas. A pesar de esto, todas las experiencias religiosas sirven para la conservación de la tradición y la supervivencia de la cultura y el bienestar de sus miembros. También se hace una interpretación rigurosa de aquellos ritos que se viven en torno a funciones tan fundamentales como son la reproducción o la nutrición. La sacralización de estos aspectos biológicos de la persona también está encaminada a la supervivencia de la cultura y de los individuos que la forman. La religión que un tema muy importante y en el cual Malinowski se enfoca mucho y mas en el tema de la muerte, a la cual se le considera la fuente de mayor importancia en el aspecto religioso porque son la mayor y última crisis de la vida. La muerte y su negación, la inmortalidad, son la mayor interrogativa del hombre. Toda la experiencia de vida se convierte en un solo problema que produce una violenta y compleja manifestación religiosa. Todo lo que pasa alrededor de la muerte, que en un pueblo (Morelos) rompe el curso normal del día a día y cambia las ideas y los fundamentos de la sociedad. En este momento aparece la religión, la creencia en una vida después de la muerte, cuya función es la de neutralizar el miedo y proporcionar medios para la unión social, que es, asegurar la victoria de la tradición y la cultura frente al peligro que los amenaza como sociedad. Como puedo ver en las culturas primitivas y actuales los ritos son la presencia de la religión. En esto existe una interacción fundamental que supone que la religión necesita de la comunidad como de un todo para que sus miembros puedan adorar las divinidades, y la sociedad necesita de la religión para mantener el orden moral. Algunos teóricos creen en esta teoría “teoría sociológica de Dios” en la que exponen que la sustancia de Dios y todo su referente es la realidad misma. Pero Malinowski se opone a esto diciendo que la religión también es individual, que la sociedad no se aleja de las creencias, que la cultura junta en el campo de lo sagrado y lo profano y que la unión de la sociedad en una idea como “alma colectiva” es imposible y con falta de fundamentos. El mito trata de diferenciar los principales tipos de relatos que se encuentran al compartir la vida con una comunidad. Que se cuenta en una época determinada del que se tiene la vaga creencia de que influirán en la buena marcha de las cosechas. Son los “cuentos maravillosos”. Y también se encuentran las leyendas y que divide en su carácter fiable por relatos históricos, leyendas y cuentos, no tienen nada especial, ni forma especial narrarse, ni te asen creer en algo mágico, pero se les da importancia por se cree es la verdad. Cuentan hazañas en peleas, expediciones, magias famosas o logros económicos. Su función es la de estimular intensamente a la sociedad y dar fama a los descendientes de los que realizaron estos logros y de su comunidad donde fue echo el logro. Los cuentos sacros, que están situados en un plano muy diferente a los otros dos, no solo por considerarse verdaderos, sino también venerables y sagrados, y desempeñan un papel cultural muy importante. El mito entra en escena cuando el rito, la ceremonia, o una regla moral o social demandan garantía de antigüedad, seriedad y santidad. El mito supone para el hombre primitivo una resurrección, en el relato, de lo que fue una realización primordial que se narra para satisfacer profundas necesidades religiosas, anhelos morales, sumisiones sociales e incluso reivindicaciones en requerimientos prácticos: Su función es la de expresar, codificar el credo, salvaguardar y reforzar la creencia, responder de la eficiencia del ritual y contener reglas prácticas para la vida del hombre. Este tipo de cuento es vital en la sociedad, no es un cuento para perder el tiempo sino una laboriosa y activa fuerza, no es una explicación intelectual ni una niñería del arte, sino una forma real y creíble de la fe y de la creencia moral. En el presente nos presenta mitos de origen de origen legal que se comporta, expresa y fortalece el hecho fundamental de la sociedad, y en ocasiones justifica monopolios económicos y puntos de vista en la sociedad. También presenta los mitos de muerte y los del ciclo periódico de la vida (sobretodo mitos relacionados con las crisis de la vida: nacimiento, matrimonio, pubertad...) que cubren el total de las reaccione reales del hombre hacia la enfermedad y la muerte, expresa sus emociones y sus presentimientos, afecta su conducta y en sus creencias. En esto podemos incluir toda la mitología o creencia relacionada con la magia. Está claro que la ciencia no existe en ninguna sociedad incivilizada en cuanto poder conductor que critica, renueva y construye. La ciencia nunca se hace, allí, de manera consciente. Pero según tal criterio tampoco tendrían los salvajes ley, gobierno o religión. La cuestión, sin embargo, de si hemos de llamar a tal cosa ciencia o solamente conocimiento empírico y racional no es de importancia primaria. A mi entender, Malinowski trata de juntarlo todo lo estudiado en las islas Tobriand, las cuales son ajenas a su entorno y cuya cultura es lejana ala nuestra. No me parece lógico que se tomen conclusiones a partir de un solo trabajo. Creo que Malinowski mira esta cultura “desde arriba”, desde nuestra cultura occidental, que tenemos como “superior”, o al menos “más evolucionada”. Esto al menos puede hacernos pensar... ¿es nuestra cultura realmente es “superior” o “más evolucionada”?, ¿que nos hace pensar que lo es? ¿No será quizá que es simplemente distinta e igual de primitiva (o evolucionada) que las demás?, creo que cada cultura tiene sus pros y sus contras, que deben ser, entendidas, respetadas y tenidas en cuenta. Nuestra cultura es en muchos casos es mucho más subdesarrollada que otras. Sí creo que es muy compleja, posiblemente “la más compleja”, pero esa complejidad deshumaniza, la cultura es tan inmensa... cada cual tiene que cumplir su rol, sin posibilidad de tregua alguna, para tener la posibilidad de estar integrado en ella, o lo que es lo mismo, para no ser marginado por ella. Nos impide ser nosotros mismos para convertirnos en “nosotros como debemos ser en nuestra sociedad, en nuestra cultura”, y estos dos pueden ser personajes muy distintos. Esto posiblemente ocurrirá en la mayoría de las culturas, pero yo digo que una cultura mayor es mas deshumanizada. Aun así viajáramos en el tiempo y decidiéramos cambiar esto: tarde o temprano aparecerían tanto la religión como la magia. Y, claro la ciencia, aun que no les guste a los defensores de esta, las 2 primeras son conocimiento también. Para los filósofos y antropólogos la ciencia es "la magia abortada”, y para muchos científicos la religión es como “un freno de mano” para la evolución. La diferencia estriba en que los chamanes o brujos tienen pequeñas masa de gente --no por pequeños menos dañinos-- mientras que la religión reúne a masas “fervorosas o que detonan” dispuestas a clavar “cruces invertidas” en la tumba de todos aquellos científicos que pusieron en duda su fe. GRASIAS. Bibliografía Marquez, L. I. (2013). MAGIA,CIENCIA Y RELIGION. En B. Malinowski, MAGIA,CIENCIA Y RELIGION. (págs. 1-208). Jose Maria Morelos: Editorial Ariel. ISBN 978-84-3441117-3.