Platón (427-347 a.c.) Filósofo griego nacido en Atenas. Pertenecía a una familia aristocrática donde habían varios gobernantes. En su juventud se interesó por la política, pero una vez conoció a Sócrates decide dedicarse a la Filosofía. Fue discípulo de Sócrates y escribió numerosos Diálogos, donde el personaje principal era su maestro. Crea una escuela de Filosofía, llamada la Academia. Allí tendrá como uno de sus discípulos más ilustres a Aristóteles. Su mayor interés filosófico era dar con el conocimiento verdadero, con aquel conocimiento más elevado y no cambiante. Platón Sus preocupaciones filosóficas eran: - Platón de distancia de los seguidores extremistas de Heráclito, quién proponía el «Panta rei» o la perspectiva de que «todo fluye, nada permanece igual» - Heráclito sostenía que «no nos bañamos dos veces en el mismo río», puesto que el río siempre está cambiando y nunca es el mismo. Así, la realidad es un constante cambio en las cosas. Sin embargo, sus seguidores extreman esta propuesta y defienden una teoría sensualista. Platón Sus preocupaciones filosóficas eran: - Sensualismo: Es un teoría que sostiene que toda afirmación que compromete una realidad más allá del instante inmediato en que se presenta es una afirmación sobre algo que ya NO conozco, puesto que tanto el que conoce (cognoscente) como lo conocido han cambiado, se han vuelto otra cosa. Así, sólo el juicio o afirmación que se refiera a nuestras sensaciones del instante reflejaría el estado actual de las cosas y su verdad. Ahora, esta postura supone una problema ¿cuál sería? Platón Sus preocupaciones filosóficas eran: - El problema: - Debemos aceptar que las sensaciones que experimenta Juan son distintas (incluso opuestas) a las de Pedro, pero dado que lo verdadero solo proviene de nuestros juicios acerca de las sensaciones, tanto Juan como Pedro han de estar en lo correcto respecto a sus respectivas sensaciones, incluso siendo sus juicios contradictorios entre sí. De manera que tendríamos que aceptar que las cosas pudieran ser a la vez justas e injustas, tristes y alegres, etc. Platón considera entonces: - El cambio no es absoluto, es decir, en todas las alteraciones hay algo que permanece. - La unidad es anterior a la multiplicidad, es decir, «la justicia, por ejemplo, es anterior por necesidad racional a la multiplicidad de los actos justos». - Se pregunta por el ser, «lo que es». El ser debe ser aquello que no cambia y, por tanto, lo perfecto y único. - Todo cambio ocurre en una cosa que a pesar de dichos cambios permanece siendo lo que era antes de los cambios. Las cosas poseen un «ser» permanente. - Ese «ser permanente» no es sensible, es algo que nos permite reconocer y denominar como tal, más allá de los cambios que lo afectan. Platón a ese «ser permanente» le llama esencia (ousía). - Los seres verdaderos para Platón son las Ideas. Las cosas del mundo que vemos participan de las Ideas, así por ejemplo, las cosas bellas lo son porque participan de la Idea de Belleza. Ellas no pertenecen al mundo sensible, sino que pertenecen al mundo inteligible (que se conoce por el intelecto y la razón y no por los sentidos). Platón Características de las Ideas: Unicidad: existe sólo una Idea de cada especie o concepto. Una sola Idea de vaca, una sola Idea de igualdad, blancura, etc. Eternidad: siempre han sido y permanecerán siendo. No cambian ni mueren. Perfección: Son plenamente, no cabe más características, pues las contiene todas características del concepto que refieren. Independencia: La existencia de las Ideas no depende de la existencia de las cosas en el mundo sensible. Si no hubiera cosas bellas, seguiría existiendo la Idea de Belleza. Las Ideas trascienden a las cosas e, incluso, a una mente que las conciba. Inmutabilidad: Las ideas no cambian, no sufren alteración. Platón: mundo inteligible vs Mundo sensible Mundo Inteligible Conocimiento cierto, verdadero (episteme), guiado por la razón, Donde habitan las Ideas, Idea de Bien. No cambiante. v/s Mundo Sensible creencias, opinión (doxa), sentidos, conocimiento aparente cambiante, no permanente. No hay verdades ni certezas absolutas. Mundo de las sombras (donde habitan los prisioneros en la alegoría de la caverna)