AMORTIZACIÓN DE INVERSIONES, GASTOS PRE-OPERATIVOS Y ARRASTRE DE PÉRDIDAS EN MATERIA PETROLERA Por: Roberto Casanova-Regis, Gerente Senior de Tax & Legal, KPMG en Perú Junio 2014 El artículo 53° de la Ley Orgánica de Hidrocarburos (LOH) establece que los gastos de exploración, desarrollo así como las inversiones realizadas hasta el inicio de la extracción comercial pueden, a opción del contratista, amortizarse de manera lineal en un plazo no menor de cinco ejercicios anuales. Si bien hay claridad en el sector respecto a lo que debe entenderse como gastos de exploración y desarrollo, no existe consenso sobre el concepto de inversión, respecto del cual existen dos posibles interpretaciones. De un lado, una interpretación amplia del concepto de inversión calificaría como tal a cualquier desembolso o erogación realizada por el contratista petrolero antes del inicio de la extracción comercial. Para entender lo indicado se debe tener presente que las actividades de explotación de hidrocarburos suponen una gran inversión inicial en donde el riesgo es asumido por el contratista-inversor. Por tanto, lo que el artículo 53° de la LOH busca es hacer coincidir o asociar (match) la totalidad de la inversión preoperativa realizada por el contratista con los ingresos que obtendrá en el futuro como consecuencia de la extracción comercial de los hidrocarburos. Por tanto, la interpretación amplia del concepto de inversión permitiría al contratista planificar, sobre la base de la estimación de su posición fiscal relativa en cada ejercicio, la tasa de recuperación de la inversión modulando el plazo de su amortización a efectos de que la limitación al arrastre de pérdidas no imposibilite dicha recuperación. Lo anterior garantizaría la plena vigencia del Principio de Neutralidad de las inversiones según el cual éstas no deben ser objeto de gravamen por el Impuesto a la Renta (IR). El siguiente ejemplo ilustra lo indicado: Artículo 53° LOH - Amortización en cinco años Etapa preEtapa operativa operativa FY1 FY2 FY3 FY4 Ingreso variable 0 50 70 80 100 Inversión 500 100 100 100 100 Renta Neta / Pérdida del ejercicio -50 -30 -20 0 -50 -50 -50 Arrastre de pérdidas sistema A -30 -30 -20 IR 32% 0 0 0 0 * Caducidad de la pérdida a los cuatro años FY5 120 100 20 *-50 -30 -20 0 Como puede apreciarse en el ejemplo anterior la limitación al arrastre de pérdidas generaría que en el FY5 una inversión de 30 (20-50) no sea recuperable por el contratista. Para contrarrestar dicho efecto la amortización de la inversión debería hacerse en un plazo más prolongado, situación que es factible sobre la base del artículo 53° de la LOH. En relación a lo anterior, David C.L. Nellor 1 precisa que: “Por analogía con lo que ocurre con la imposición de la renta de otros sectores, la imposición de la renta del sector de los recursos requiere la comparación del ingreso y del gasto. Lo que es más importante, el gasto que produce un beneficio a lo largo de más de un periodo contable debe capitalizarse y deducirse a lo largo de su “vida útil”. De ese modo se hace coincidir aproximadamente la renta con los recursos necesarios para producirla. (…)” Por otro lado, a partir de una interpretación restringida del concepto de inversión éste estaría ligado sólo con la adquisición de bienes de capital los cuales por su naturaleza y destino serán afectados a la realización de actividades empresariales que generarán ingresos más allá de un ejercicio. Así, el concepto de inversión regulado en el artículo 53º de la LOH comprendería sólo aquellos gastos que, al igual que los gastos de exploración y desarrollo, estén destinados a participar y/o a contribuir en la generación de ingresos por más de un ejercicio una vez iniciada la extracción comercial del depósito petrolífero, radicando en ese carácter la necesidad de su amortización a lo largo de la etapa productiva como una forma de recuperar el costo de la inversión y gravar la verdadera capacidad contributiva generada por el contrato de licencia. Adoptar esta segunda aproximación obliga a que los gastos realizados por el contratista antes del inicio de la extracción comercial que no califiquen como inversión se rijan por lo establecido en el artículo 37° literal g) de la Ley del IR referido al tratamiento fiscal de los gastos pre-operativos. El disímil tratamiento fiscal concedido por el artículo 53° de la LOH y la norma de la Ley del IR antes indicada ha generado importantes contingencias fiscales a los contratistas petroleros. 1 C.L. NELLOR, David. “Impuestos a los recursos minerales y petrolíferos” En: Manual de Política Tributaria preparado por Parthasarathi Shome, Fondo Monetario Internacional, 1995 p. 455. 2