I.E.S. Valle del Ambroz Historia del Arte 2º Bach. Manuel Torres Zapata 1 Helenismo No es posible entender el Arte del periodo helenístico sin comprender los cambios que se produjeron el mundo entonces conocido como consecuencia de la conquista del Imperio Persa por Alejandro. Alejandro Magno, hijo de Filipo de Macedonia, al norte de lo que consideramos la Grecia central, consiguio en un periodo de tiempo muy breve construir un enorme imperio que comprendía territorios desde Grecia continental a las orillas del Indo en la India; evidentemente no se trataba de un imperio unificado, con una administración centralizada. Dentro de este Imperio se incluyen las principales civilizaciones y culturas que hasta entonces se habían desarrollado, Egipto, Persia, la propia Grecia o las diferentes culturas del Mediterráneo Oriental. Alejandro murió mucho antes de que su imperio se consolidara, y tras sus muerte el imperio alejandrino fue dividido entre sus generales, que fundaron en sus respectivas zonas de control dinastías que se hace con el poder durante mucho tiempo. Pero a pesar de no concretarse en una realidad política perdurable, las consecuencias de este imperio fueron tremendas ya que se dio una gran unidad cultural a toda la zona. Culturas con una gran tradición y una personalidad propia se vieron modificadas por la supuesta superioridad griega, produciéndose un auténtico proceso de colonización o de imperialismo cultural. Es el ambiente de estas corte helenísticas en las que se va a desarrollar el arte helenístico, se trata de corte que tratan de competir entre si, no sólo en los político o militar, sino también en lo cultural y artístico, empleado en esta ocasión como un elemento de prestigio frente a sus vecinos. El arte se pone al servicio de la magnificencia privada, los soberanos helenísticos se rodean de un grupo de literatos, artísticas iniciándose un proceso de secularización del arte, que pierdo poco a poco los elementos religiosos que dominaron en los siglos anteriores La cronología dada para este periodo helenístico suele ir desde la muerte de Alejandro a la formación del Imperio Romano (323 a. C. - 31 a. C.) Aunque muchos autores consideran al helenismo como un periodo completamente independiente del arte clásico, es innegable su fuerte vinculación a este, aunque las formas y los planteamientos estéticos hayan cambiado en cierta forma. La cultura de este momento se va a desenvolver por horizontes mucho más amplios y con elementos más heterogéneos. Van a llegar influencias de Egipto o de Asia, que transforman el panorama clásico. No es exclusivamente una cultura de griegos, sino también de extranjeros helenizados. No podemos olvidar en este sentido como se forma el mundo helenismo, a partir de monarquías de origen oriental. No podemos olvidarnos de que se trata de un momento de crisis, de cambio, en el que los valores tradicionales de la cultura griega se ven alterados, como consecuencia de la crisis definitiva de la polis, de la aparición de nuevas formas de organización I.E.S. Valle del Ambroz Historia del Arte 2º Bach. Manuel Torres Zapata 2 política, de los cambios económicos y sociales. Esto provoca que el hombre del helenismo se encuentre sin sus referentes habituales, los dioses son otros, el ámbito casi familiar de la polis ha desaparecido, y se extiende cierto malestar existencial. Las soluciones vendrán de la aparición de nuevas corrientes filosóficas (epicureismo, estoicismo, cgnosticismo, escepticismo...) de la difusión de religiones de carácter mistérico En la escultura van a florecer talleres en lugares fuera de Grecia; va a ver un mayor desarrollo en las regiones más apartadas del continente. Desaparecen las grandes individualidades que habían florecido en épocas anteriores, y nos encontramos con obras de talleres que no suelen ir firmadas. A pesar de la que se ha dicho muchas veces no es una escultura meramente decorativa, se trata de unas obras fruto del descreimiento religioso y de la perdida de valores anteriores. La naturaleza va a ser la principal fuente de inspiración. De la vida se va a tomar todo aquello que incita al placer. Se ha perdido la seriedad y nos hallamos ante la plasmación de todo tipo de emociones sin medida ni contención. El tema en ocasiones se va a convertir en algo anecdótico y lo que importa es solamente el aspecto sorprendente de la figura.. Los temas orgiasticos y dionisiacos van a tener gran extensión. Sátiros y faunos van a desplazar a los dioses tradicionales. Se multiplican las alegorías (representación en forma humana de virtudes, o conceptos abstractos). En una situación de gran inestabilidad como está los referentes ideales del clasicismo desaparecen y no se tiene inconveniente en representar lo feo o lo desagradable. Será muy frecuente encontrarnos con la vejez, lo caduco, o lo grotesco como en el caso de las representaciones de los hermafroditas. Hay un gran desarrollo del retrato, sorprendiéndose al modelo en actitudes con gran vitalidad, transluciendo su estado de animo, los defectos físicos y hasta las enfermedades. Evidentemente este desarrollo del retrato tiene que ver con los cambios producidos en la sociedad y el política, ahora lo importante ya no es la colectividad, el grupo de ciudadanos que formaba la polis, sino que cada vez es más importante la personalidad de un solo individuo, que emplea el retrato como elemento de propaganda y de difusión de su imagen y de un serie de valores que pretende asociar a ella, como la virtud, el heroísmo, la fuerza o la sabiduría. Técnicamente se nota un tratamiento muy sensible de la superficie de las esculturas, aumentando los elementos táctiles. Aparece el relieve de carácter pictórico, buscando la perspectiva donde tiene asiento el paisaje. El tratamiento de las telas va a ser también muy expresivo, apareciendo sacudidas con violencia o agitadas por el viento. A pesar de la fuerte influencia oriental, la cuna de la escultura helenística en sus momentos iniciales es Atenas, a partir de las innovaciones introducidas por Lisipo y Scopas. I.E.S. Valle del Ambroz Historia del Arte 2º Bach. Manuel Torres Zapata 3 Lógicamente el número de obras y sus temas se multiplica en estos siglos, encontrándonos con una cantidad ingente, conservada en ocasiones gracias a los expolios realizados por los romanos en sus conquistas en el Mediterráneo Oriental. Para hacer más fácil el análisis de la escultura helenística, podemos distinguir diversas escuelas, en unas predominan los elementos más teatrales y dramáticos, como en Pérgamo, mientras que en otras, se mantiene un cierto clasicismo, Alejandría, mientras que en algunas como Rodas intentan mantener un cierto equilibrio entre serenidad y teatralidad. La escuela de Pérgamo es la más teatral de todas, siendo la obra más destacada de esta escuela el Altar de Pérgamo, su construcción debió comenzar en el 190 a. C. actualmente se conserva en el Museo de Berlín; ya su estructura arquitectónica nos habla de las características del helenismo. No se trata de la estructura habitual de un templo griego, se trata de un monumental altar al aire libre, levantado sobre una gran escalita a la que la rodea un elevado podium. El altar propiamente dicho está situado en la parte superior rodeado por una columna de orden jónico. En el friso inferior es donde se sitúa el gran conjunto escultórico, grandes relieve representando una gigantomaquia, es decir, el combate entre los dioses y los titanes. Se trata de un tema que nunca se había representado con tanta monumentalidad, las figuras adquieren un tamaño colosal, junto a los dioses habituales del Olimpo los Titanes aparecen representados como seres con piernas serpentiformes, como auténticos hijos de Gea, la diosa tierra. Toda la composición está dominada por el dinamismo y caos propio de un momento de lucha, domina la confusión de cuerpos con musculaturas colosales, las telas se agitan por una viento huracanado, se mezclan formas animales y musculaturas humanas, en un torbellino provocado por la violencia de la lucha siendo el ritmo frenético, las características de los rostros están en la misma línea, con muestras de dolor, rabia, violencia... También de la Escuela de Pérgamo es el grupo escultórico de los Galatas, de las cuatro que lo formaban la más importante es el “Galo I.E.S. Valle del Ambroz Historia del Arte 2º Bach. Manuel Torres Zapata 4 Capitolino” del Museo del Capitolio de Roma, con una gran carga dramático al representar la muerte de un guerrero herido. El Alejandría, ciudad fundada por Alejandro, la monarquía Ptolemaica emprendió toda una serie de obras faraónicas para potenciar el prestigio de la ciudad , aquí la escultura se va a caracterizar por una mayor influencia de las formas clásicas atenienses, aunque se funden en alguna ocasión elementos egipcios, los temas preferidos son los de la vida vulgar y callejera y las alegorías de ríos, fuerzas de la naturaleza... (como por ejemplo la del río Nilo) Además en Alejandría también fueron muy frecuente los retratos de un profundo realismo. Rodas se convirtió en un importante centro productor, perteneciendo a esta escuela alguna de las obras más conocidas del helenismo. Al igual que en Pergamo nos encontramos un fuerte barroquismo en la escultura, aunque aquí es más conceptual, y huye un poco del excesivo dramatismo de la otra escuela. La Victoria de Samotracia, hacia 190 a. C. actualmente en el Museo del Louvre, es posiblemente el mejor ejemplo de los logros de esta época, se trata de un representación de una Victoria alada, colocada en la proa de un barco sobre la que se yergue orgullosa y victoriosa, el viento del mar agita sus ropajes por fuerza, el viento y la humedad del mar hacen que esos ropajes se le peguen al cuerpo y dejen translucir todos sus volúmenes. Las representaciones de Nikes o victorias fueron muy frecuentes en todo el arte griego, pero ninguno de ella alcanza el gesto heroico, impetuoso y vital de la Victoria de Samotracia. Características muy semejantes encontramos en el “Laoconte y sus hijos”, narra un pasaje recogido por Virgilio en la Eneida, en el cual uno de los sacerdotes de la ciudad de Troya y sus hijos son atacados por serpientes; se representa el momento culminante de la acción, cuando los cuerpos de los personajes se retuercen de dolor e intentan liberarse de las serpientes, representación del dolor, pero también de la fuerza, en una composición piramidal en la que dominan las líneas curvas y el dinamismo. Plinio menciona que la obra estuve durante mucho tiempo en el palacio del emperador Tito. La escultura se redescubrió en pleno Renacimiento Italiano, influyendo poderosamente en la escultura italiana y europea del siglo XVI, especialmente en la obra de Miguel Ángel y sus seguidores. También de la escuela de Rodas es la Venus de Milo, modelo de sensualidad, con marcadas I.E.S. Valle del Ambroz Historia del Arte 2º Bach. Manuel Torres Zapata 5 curvas y un sugerente ropaje a medio caer. Finalmente dentro de esta escuela tenemos como último ejemplo el “Toro Farnesio” uno de los grupos escultóricos con más figuras que se han conservado, datado en el 130 a. C. Podemos mencionar algunas otras obras que no pertenecen a ninguna escuela en particular pero que si son lo suficientemente significativas: “El niño de la Oca” “Torso Belvedere” “Fauno Barberini”.