ACTUACIONES DE PRIMEROS AUXILIOS EN EL SISTEMA EDUCATIVO. Autor- Docente: Nicolás M. Montoya Rguez. INTRODUCCION. Ser agentes educadores y a la vez formadores es una labor que a veces, conlleva tener que actuar de manera global ante situaciones que se nos plantean. Más aún en un medio, el educativo, donde tantos factores de riesgo hay. Es conveniente tener en cuenta algunas recomendaciones para quienes deseen actuar con jóvenes o niños lesionados. Éstas ayudarán a la realización de las maniobras, transmitirán seguridad y disminuirán las complicaciones. Trate siempre de explicar que va a hacer. La persona lesionada se encuentra asustada, por lo que trate de actuar con serenidad y seguridad. Hable pausadamente, señale que ya se lo esta atendiendo y recalque que se aliviara pronto (trate que coincida la expresión de su cara con lo que dice). Uno de los aspectos mas importantes para disminuir el dolor y la ansiedad es el contacto físico y la compañía. No tenga miedo en acariciar, abrazar y tocar afectuosamente al lesionado. En niños o adolescentes un amigo acompañándolo mientras se atiende o traslada, es muy importante. Si usted esta asustado por la lesión o el estado del niño, no dude en pedir ayuda. ORGANIZACION DE LA ESCUELA PARA REALIZAR PRIMEROS AUXILIOS. Recibido el aprendizaje de nociones de primeros auxilios por parte del personal que trabaja en la escuela, debe encararse la organización de algunos aspectos importantes: - La atención de lesiones leves debería poder ser resuelta por cualquier personal de la escuela. - Aunque las lesiones graves no son frecuentes en la escuela, es conveniente que algunas personas del establecimiento se familiaricen con los primeros auxilios de situaciones más serias. Estas maniobras de primeros auxilios, en su mayoría deberán ser completadas por un examen médico posterior. Pero tenga en cuenta: 1- Es conveniente que alguna persona sea la encargada de dirigir y coordinar los pasos a seguir (líder) y que otras personas actúen según indicaciones del mismo, 2- Sobre el niño lesionado no debe haber más de dos o tres personas auxiliándolo. 3- Trate que el auxilio lo realicen las personas más capacitadas o las que mejor se desempeñan. 4- Debe haber alguien disponible para realizar llamadas telefónicas o alcanzar diversos elementos. 5- Las personas que no actúen directamente deben ser retiradas. 6- Si debe llamar a emergencias o a un médico, deben comunicarse también con la familia del niño. 7- Mantenga el botiquín equipado, accesible siempre y asegúrese que todos sepan donde está. 8- Reponga siempre lo que se use. CONCEPTO DE PRIMEROS AUXILIOS. Los primeros auxilios son todas aquellas medidas o actuaciones que realiza el auxiliador, en el mismo lugar donde ha ocurrido el accidente y con material prácticamente improvisado, hasta la llegada de personal especializado. Los primeros auxilios no son tratamientos médicos. Son acciones de emergencia para reducir los efectos de las lesiones y estabilizar el estado del accidentado. Y esto último es lo que le concede la importancia a los primeros auxilios, de esta primera actuación va a depender en gran medida el estado general y posterior evolución del herido. Así mismo, son una obligación moral. PRINCIPIOS INICIALES EN LA ACTUACIÓN DE PRIMEROS AUXILIOS. Todo socorrista en sus actuaciones debe conocer y aplicar siempre en este orden los siguientes principios básicos: 1º. PROTEGER, en primer lugar, a él mismo y después a la víctima. Podemos evitar nuevos accidentes, si señalizamos el lugar del accidente. SÓLO si hay peligro para el accidentado se le desplazará, manteniendo recto el eje cabezacuello-tronco. 2º. AVISAR, es decir dar el SOS, indicando: el número y estado aparente de los heridos, si existen factores que pueden agravar el accidente (caídas de postes eléctricos) y el lugar exacto dónde se ha producido el accidente. Saber que de la información que nosotros demos, va a depender tanto la cantidad como la calidad de medios humanos y materiales, que allí nos lleguen. 3º. SOCORRER. Esta es la finalidad principal de los primeros auxilios, pero para hacerlo correctamente previamente hace falta realizar la evaluación del herido. PRINCIPIOS GENERALES. Primero: Estar tranquilo, pero actuar rápidamente.- Con tranquilidad se da confianza a la víctima y a aquellos que se encuentren cerca. Los testigos suelen tener miedo, con frecuencia pánico o están sobreexcitados. El auxiliador ha de dar ejemplo mostrando su tranquilidad. Segundo: Hacer una composición de lugar.- Cuando se llega al lugar del accidente no se debe comenzar a actuar curando al primer herido que se encuentre. Pueden haber otros heridos más graves y que, por tanto, necesiten atenderse en primer lugar. Hacer, pues, un rápido examen del lugar. Debe intentarse saber si existen heridos ocultos. Hay que darse cuenta también de las posibles fuentes de peligros que aún existan: amenaza de derrumbamiento, ruptura de canalizaciones de gas o de agua, fuego, etc. Tercero: Mover al herido con gran precaución.- Jamás se cambiará de sitio al accidentado antes de cerciorarse de su estado y haberle proporcionado los primeros cuidados. Además, un herido grave, no debe ser movilizado excepto por estas tres razones: 1) para poderle aplicar los primeros auxilios; 2) evitar el agravamiento de sus heridas; y 3) protegerle de un nuevo accidente. Cuarto: Examinar bien al herido.- Investigar si respira, si tiene pulso, si está consciente, si sangra, si tiene una fractura, si presenta quemaduras, si ha perdido el conocimiento. Estar bien seguros de no haber dejado escapar nada. Quinto: No hacer más que lo indispensable.- Si se intentan hacer demasiadas cosas, se retrasará el traslado de la víctima. El papel del auxiliador no es el de reemplazar a los servicios sanitarios, sino que se ha de limitar a proporcionar aquellas medidas estrictamente necesarias para un correcto transporte del herido. Sexto: Mantener al herido caliente.- Evitar, no obstante, un calor excesivo, manteniéndole a una agradable temperatura. Si hace frío, todo el cuerpo debe ser calentado; para ello lo mejor será envolverlo en una manta. Séptimo: No dar jamás de beber a una persona inconsciente.- En este estado no podrá tragar y existirá peligro de ahogarla al penetrar el líquido en las vías aéreas. Si la víctima conserva la consciencia y no presenta una herida profunda en el vientre, se le puede dar de beber, lentamente, y solo a pequeños sorbos. No darle alcohol, es preferible café o té caliente, sobre todo si hace frío. Octavo: Tranquilizar a la victima.- El accidentado tiene miedo. Hay que hablarle ya que está angustiado; el curso de su vida se ha visto truncado bruscamente y padece por los que le acompañan o por su familia. Hay que tranquilizarle, calmar sus temores y levantarle el ánimo. Hay que decirle que hay gente cerca que se ocupa de él, que los servicios de urgencias han sido avisados y que vendrán pronto. No se le debe dejar ver su herida. Noveno: No dejar nunca solo al accidentado.- El estado del mismo puede gravarse en un corto espacio de tiempo. VALORACIÓN PRIMARIA El proceso de valoración consiste en la recogida de datos sobre el paciente que pueden ser de utilidad para facilitar la correcta actuación del auxiliador. Esta valoración ha de ser sistemática y precisa. Entendemos dos formas complementarias y consecutivas de valoración: la primaria y la secundaria. VALORACIÓN SECUNDARIA Sólo después de realizar la valoración primaria y las debidas actuaciones (reanimación cardio-pulmonar, apertura de vías, etc..), si las hubo, se realiza la valoración secundaria. Ésta consiste en la valoración del estado del accidentado de pies a cabeza, tanto por delante, por detrás y por ambos laterales. Se han de buscar: fracturas de miembros o de la columna vertebral, golpes recibidos en la cabeza, tórax, abdomen y/o espalda que puedan producir hemorragias internas, lesiones, contusiones, quemaduras, dolor, etc. Durante este proceso se interrogará al enfermo, si está consciente, intentando obtener la mayor cantidad de información posible por si dejara de estarlo. Se anotaran, y posteriormente se trasmitirán a los servicios sanitarios, los siguientes datos: nombre y apellidos edad constantes vitales (pulso y respiración) enfermedades que padezca o halla padecido medicación que toma habitualmente (anticoagulantes, insulina,..) alergias a algún medicamento si lleva algún informe médico encima localización del dolor hormigueos, "descargas eléctricas", entorpecimiento de las piernas. actuaciones de primeros auxilios realizadas y respuesta del paciente a ellas, Si existe hemorragia la cantidad aproximada y el origen. Si se está realizando la Reanimación Cardio-Pulmonar, tiempo desde la parada y tiempo que se está realizando la maniobra. Si existe intoxicación por fármacos o productos tóxicos, cuándo y qué cantidad, y si hubo vómitos. 1. VALORACION SIGNOS VITALES. Se denominan signos vitales, las señales o reacciones que presenta un ser humano con vida que revelan las funciones básicas del organismo. · Consciencia. Reflejo pupilar. · Respiración. · Pulso. · Prensión Arterial + Temperatura. 2. POSICIONES DE COLOCACION Y/O ESPERA Posición Lateral de Seguridad. Posiciones en función de la patología. 3. POSICIONES DE TRASLADO. Rautek. 4. APARATO RESPIRATORIO. El sistema respiratorio está capacitado única y exclusivamente para aceptar elementos gaseosos. La introducción de cualquier cuerpo sólido o líquido implica la puesta en funcionamiento de los mecanismos de defensa, siendo la tos el más importante. La obstrucción de las vías respiratorias (atragantamiento) impide que la sangre de nuestro organismo reciba el oxígeno necesario para alimentar los tejidos, lo que implicará la muerte de los mismos. OBSTRUCCIÓN DE LA VÍA AÉREA POR UN OBJETO. Cuando un objeto compromete la permeabilidad de la vía aérea compromete la vida. En la reanimación cardiopulmonar veremos la forma de abrir las vías en el caso de una víctima supuestamente inconsciente, donde será la propia lengua del accidentado la que impedirá el paso del aire. En este caso, va a ser un objeto el que va a entorpecer el paso del aire hacia los pulmones, pudiendo la víctima estar consciente o no. MANIOBRA DE HEIMLICH PROTOCOLO RESPIRATORIO: VALORACION, SOPORTE y ESTABILIZACION. SACAR DEL MEDIO ACUÁTICO PERMEABILIZAR VÍA AÉREA. LIMPIAR LA VIA AEREA INICIAR VENTILACIÓN/OXIGENACIÓN SI P.C.R., INICIAR R.C.P. BOCA A BOCA O… MONITORIZACIÓN E.C.G. CONTROL SEGMENTO CERVICAL CUIDAR LA HIPOTERMIA 5. SISTEMA CARDIOCIRCULATORIO La importancia radica en una buena valoración, con el objetivo de evitar el shock hipovolémico, y parar la hemorragia. Lavarnos las manos si podemos. O usar guantes estériles. Limpiar la herida, desde el centro hacia periferia, con agua a chorro. Si es posible usando también gasas estériles. Quitar los cuerpos extraños visibles (pinzas, gasas,...) Presionar o hacer torniquete para cortar hemorragia. Aplicar gasas o similares para tapar la herida. Si es posible asegurar con esparadrapos. Inmovilizar la región de la herida. No usar algodón pues deja filamentos adheridos. Cuidado con los antisépticos, por el peligro de alergias. Advertir la vacunación antitetánica. 6. APARATO LOCOMOTOR. Tras una correcta valoración, la evitación de movimientos, el saber inmovilizar con los medios que se tengan, y evitar riesgos de tracciones o movimientos innecesarios. El resultado de una buena acción urgente debe evitar más lesiones de fracturas, esguinces y/o politraumatizados, siendo la más grave la afectación por traumatismo craneoencefálico. Las actuaciones en casos de cuerpos extraños, quemaduras, y otras situaciones susceptibles de primeros auxilios se deben centrar en evitar riesgos para el socorrista, y saber actuar con cuidado de no dañar más. Todas las situaciones en que haya duda, es mejor no actuar. Realizar una valoración y esperar ayuda. En cuanto a intoxicaciones, ahogamientos, etc… es necesario conocer las técnicas básicas para poder ganar tiempo mientras actúa algún personal sanitario. Por último, una buena praxis en la Resucitación Cardio- Pulmonar es la base de poder conseguir salvar una vida en buenas condiciones. Sin duda son cada vez más importantes los casos de alumnado con patologías crónicas que pueden sufrir situaciones en las que la actuación diligente les pueda evitar secuelas. Saber actuar, en qué condiciones y con qué respaldo legal debe servir para disminuir ansiedades y situarnos de forma responsable ante situaciones de riesgo para la salud. RESUMEN DE INTENCIONES. En el sistema educativo, cada vez se nos está solicitando actuaciones más específicas, tanto por la escolarización de alumnado con multitud de patologías como por poder conseguir que los centros educativos también formen en prevención de riesgos y todos los agentes implicados en el sistema educativo sepan actuar ante una situación de emergencia.