Hospitales de Bogotá habrían cerrado servicios para sanear finanzas Usuarios hablan de menor atención en áreas como ginecología, mientras centros de salud desmienten. La Veeduría Distrital y usuarios terminaron enfrentados con la Secretaría de Salud y los hospitales distritales por cuenta del cierre de servicios que habrían hecho algunas instituciones, como efecto del saneamiento fiscal que realizan para evitar el cierre del establecimiento o la intervención de la Superintendencia Nacional de Salud. Por un lado, el organismo de control retomó denuncias del Comité Distrital de Asociaciones de Usuarios en Salud sobre el efecto negativo que ha tenido la aplicación de la medida de saneamiento y los anuncios de suspensiones de servicios. Plantearon varios casos. En el Hospital La Victoria, dijeron, se informó de la reducción de la atención en salud mental, infectología, en consulta externa, y el Citocentro pasaría a la Secretaría de Salud. El Hospital de Fontibón no continuaría atendiendo partos y San Blas suprimiría servicios de ginecología y pediatría. Además, el Hospital Centro Oriente reorganizaría las sedes Ricaurte, Santa Rosa y Lourdes. Representantes de los usuarios como Marta Orozco, se ratificaron en que el Distrito “cerró dos centros en Santa Rosa de Lima y Lourdes que atendían a adultos y embarazadas. Están desmejorando el servicio”, afirmó. Otro representante del comité de los usuarios manifestó que en Fontibón “fueron cerrados dos UPA y nadie responde por la gente que atendían”. Pero la mayoría de hospitales negaron la suspensión de servicios y las atribuyeron a “reorganización de centros para mejorar la atención”. En La Victoria empleados negaron cierre de camas y recortes en servicios y que seguirían con el Citocentro. Argumentaron que las únicas reducciones aplicadas fueron las horas de trabajo del infectólogo y de las terapias. En Centro Oriente se afirmó que todo se debe a la “reorganización” de puntos de atención. En las demás instituciones no hubo repuesta ni de la Secretaría de Salud. Crisis no se ha superado De los 22 hospitales que integran la red distrital, 14 se encuentran en mediano y alto riesgo de iliquidez y en siete de ellos la crítica situación podría llevar a la intervención, si no hacen el saneamiento fiscal exigido por el Ministerio de Salud. Estos son los casos de los hospitales Simón Bolívar, Engativá, San Blas, Meissen, Suba y Chapinero. La crisis financiera de la red es menos aguda que hace un año, cuando el déficit de los hospitales superaba los 300.000 millones de pesos y la cartera ascendía a 750.000 millones de pesos. De estos últimos, 350.000 millones correspondían a deudas causadas por las Empresas Promotoras de Salud (EPS). Las angustias financieras de los centros se aliviaron con el giro que hizo el Ministerio de 150.000 millones de pesos proveniente de las cuentas maestras. Sirvieron para cubrir algunos pasivos. A su vez, hospitales como el Simón Bolívar y La Victoria han trabajado para reducir la cartera, pero, como sucede con todas las instituciones, tienen dineros irrecuperables. Esto debido a que son deudas contraídas por EPS liquidadas como Saludcoop o Solsalud, según han dicho funcionarios. A lo anterior se suma que los hospitales no niegan la atención a nadie y después no tienen a quién cobrarle. BOGOTÁ http://www.eltiempo.com/bogota/hospitales-de-bogotareducen-atencion-por-fallas-en-finanzas/14830723