Por Walter A. Iriarte Director de Logística Mercado Eléctrico Dahujori S.A. andres.iriarte@dahujori.com realizar cada tarea y que las mismas estén en consonancia con las políticas de la empresa. Disponer en la empresa de una política clara de abastecimiento, que contemple la definición de una paleta de productos, categorización de productos (A - B - C), stock máximo a incorporar, stock de seguridad, punto de re-orden del inventario, periodicidad de compra y manejo de sobrestocks logrará que la compra de mercadería sea eficaz y eficiente, lo que aportará a la rentabilidad de la empresa. La realización de inventarios anuales y de muestreos cíclicos nos servirá de termómetro para medir la confiabilidad de nuestro stock, confianza que será trasladada a nuestros clientes y al resto de la empresa en la realización de sus tareas diarias de compra y venta. No cabe duda que la incorporación de todos estos conceptos a la distribución de materiales eléctricos puede no ser algo fácil de implementar, pero mas difícil será hacerlo si las direcciones de las empresas no plantean objetivos de avance globales que involucren a todos los departamentos mediante metas complementarias entre sí, que permitan la obtención del objetivo general de la empresa, en vez de estar realizando tareas que se relacionan con la parte mecánica de la misma. Una vez lograda la alineación de los diferentes departamentos de la empresa con un objetivo común resulta fundamental que la dirección realice un monitoreo del avance de los objetivos a cumplir mediante un tablero de control realizado a la medida de cada empresa, en el cual se puedan visualizar de forma sencilla los parámetros de avance mas relevantes que llevarán a efectivizar los objetivos propuestos. Contar con un tablero de control permitirá a la dirección tomar decisiones basadas en hechos concretos y no tanto en la intuición de la experiencia adquirida. Como herramienta de control este tablero puede ser replicado a otros niveles de supervisión, lo que obviamente permitirá el control de tareas más específicas de los procesos de compra, venta, administración y finanzas pudiendo tener un nivel de detalle distinto al que se refleja en el tablero de control de la dirección de la empresa. No cabe duda que en materia logística, la mayoría de nosotros tenemos aun mucho que aprender, y por la tanto una muy interesante oportunidad de mejorar la rentabilidad de nuestras empresas.