del bestiario El arte de la guerra animal Ya que nada puede parecer engañoso para aquel que gana. SHAKESPEARE, E NRIQUE IV Toda actividad de guerra está Wall Street, de Oliver Stone, basada en el engaño, escribió cita El arte de la guerra como Sun Tzu en el año 481 antes uno de sus libros de cabece- de Cristo. Para poder coman- ra. Sin embargo, para poner dar un ejército, el general de- en contexto la verdadera sabi- be saber cómo burlar la vigi- duría que contienen los pen- lancia del enemigo. Al estar samientos de Sun Tzu, hay listos para atacar, razonaba el que recordar que, en sus pro- sabio chino, debemos parecer pias palabras, “la excelencia incapaces de hacerlo. Si es- suprema consiste en romper tamos cerca, debemos hacer la resistencia del enemigo sin creer al contrario que esta- tener que librar batalla alguna”. mos lejos; si estamos lejos, Las máximas de Sun Tzu debemos parecer estar cerca. sobre el engaño tienen su pa- Actúa como si fueras débil, ralelo también en otro tipo de aconsejaba el filósofo de la guerras: la cotidiana batalla guerra, y a tu enemigo lo con- de las plantas y los animales sumirá la arrogancia. por sobrevivir y reproducirse. Tales son algunos de los 16 HÉCTOR T. ARITA CI E NCIAS 67 JULIO SEPTIEMBRE 2002 Desde que se empezó a ana- pensamientos que plasmó lizar el comportamiento de los Sun Tzu en El arte de la gue- animales como un fenómeno rra, una colección de trece de transmisión de informa- pequeños ensayos pletóricos ción, se llegó a la inescapable con sabios consejos que han conclusión de que en la natu- sobrevivido veinticinco siglos raleza debería haber casos de de historia. Más maquiavélico falsa información transmitida que el propio Maquiavelo, Sun “intencionalmente”. El engaño, Tzu supo granjearse la con- tal como dedujo Sun Tzu, es fianza de Ho Lu, rey de Wu, componente fundamental de y comandó sus ejércitos du- la actividad bélica, incluso rante más de veinte años, cuando se trata de las gue- logrando impresionantes vic- rras naturales. torias en la China de enton- En los bosques neotropica- ces. Las enseñanzas de Sun les, la tángara de alas blancas Tzu han cobrado recientemen- suele colgarse de una rama te popularidad entre una nue- esperando capturar insectos va generación de guerreros: que saltan de la vegetación los “tiburones” del mundo finan- por la actividad de otras aves. ciero, que encuentran en los Además, desde su posición escritos del filósofo chino una ventajosa, la tángara puede justificación para sus “guerras detectar la cercanía de depre- comerciales”. Mr. Gekko, el si- dadores, como los halcones, y niestro magnate de la película entonces emite una llamada de alarma que hace que todas hasta que otro desdichado las aves, incluso las de otras pez se acerca atraído por el especies, se escondan o se señuelo. Entonces, el pez an- mantengan inmóviles. Sin em- zuelo abre su enorme boca y bargo, en ocasiones, especial- devora a la engañada presa. mente cuando se encuentra Un ejemplo más elaborado disputando una presa con del mismo concepto de atraer otro pájaro, la tángara emite las presas mediante el enga- también el llamado de alarma ño involucra otra poderosa ar- aunque no haya depredado- ma del juego de la guerra: el res a la vista. De esta manera, sexo. Las hembras de algu- engaña a su competidor, que nas luciérnagas del género se prepara para un posible Photuris producen secuencias ataque y se olvida de la presa de destellos de luz que seme- en disputa. Tal como lo acon- jan a las producidas por las seja Sun Tzu, la tángara ha hembras de otras especies. desarrollado un mecanismo Cuando los machos de estas sus depredadores. Las hem- para engañar al enemigo, otras especies se acercan bras de algunos pájaros, co- haciéndole creer que es vul- deslumbrados por los seduc- mo los pinzones cebra, tienen nerable cuando no lo es. tores despliegues luminosos plumajes que reflejan la luz de las Photuris, éstas aprove- ultravioleta en vistosos patro- no esté preparado, aparece chan la confusión para devo- nes para atraer a los machos. cuando nadie lo espera. Colo- rar a los machos atarantados Sin embargo, dado que los ca señuelos para seducirlo”, por el amor. Tan cercana es la depredadores de este pájaro, sugería Sun Tzu a los genera- analogía de la estrategia de que son en su mayoría mamí- les que debían librar cruentas estos insectos con la de algu- feros, no pueden percibir la batallas. Tal consejo parecería nos humanos y humanas, que luz ultravioleta, los “vistosos” haber sido escuchado por una James Loyd, el científico despliegues de las ardien- serie de animales que utilizan que describió este comporta- tes hembras resultan invisi- el engaño para hacerse de miento en las páginas de bles para ellos. De esta ma- sus presas. Un ejemplo bien Science, llamó a las hembras nera, las coquetas hembras conocido, pero no por ello de Photuris las femmes fata- pueden al mismo tiempo re- menos estrambótico, es el del les de la naturaleza. sultar atractivas para los ma- “Ataca al enemigo cuando pez anzuelo. Este extraño ha- “Si el enemigo es más po- chos y pasar inadvertidas bitante de los mares de Euro- deroso, evádelo”, escribió Sun pa y América del Norte posee Tzu con sabiduría, sugiriendo un curioso apéndice que pa- una serie de estratagemas trales de la estrategia de Sun rece una delgada antena re- para pasar inadvertido. Según Tzu es engañar al contrario matada con una figura seme- una hipótesis reciente, varias respecto a nuestra propia jante a un pequeño pez. El especies de aves utilizan las fuerza. Parecería que este pez anzuelo se mantiene in- propiedades de la luz para principio lo conocen muy bien móvil en el fondo, agitando elaborar complejos camufla- las especies animales que continuamente su apéndice jes que les permiten evadir a utilizan el engaño a través para los depredadores. Una de las premisas cen- SEPTIEMBRE 2002 17 CIENCIAS 67 JULIO éstas no representan peligro alguno. pulchra, por ejemplo, posee año pasado en Nature, David flores que son asombrosa- Pfenning, de la Universidad mente similares a las de otra de Carolina del Norte, y sus planta, un iris nativo (Watso- colaboradores presentaron nia lepida), y ambas especies datos cuantitativos de otro son polinizadas por la misma ejemplo bien conocido de mi- especie de tábanos. Lo inte- metismo batesiano. Algunas resante es que mientras Wat- serpientes del género Lam- sonia produce néctar que es propeltis, que no son veneno- utilizado como alimento por sas, presentan patrones de los tábanos, la orquídea no coloración muy parecidos a produce ningún tipo de re- los de las serpientes coralillo compensa para el insecto, pe- siano. En este tipo de interac- (género Micrurus). Pfenning y ro éste de todas maneras se ción —llamado así en honor a sus colegas, usando un inge- acerca a la flor de la orquídea su descubridor, el explorador nioso diseño experimental, en busca de néctar. En otras y naturalista inglés Henry demostraron que, efectiva- palabras, la orquídea se dis- Walter Bates— una especie mente, los depredadores evi- fraza de iris para aprovechar- animal inofensiva puede ad- tan atacar a las Lampropeltis, se del comportamiento del tá- quirir el aspecto de otra espe- a pesar de ser serpientes ino- bano, que ha aprendido que cie que puede representar fensivas. Asimismo, el estudio puede encontrar alimento en algún peligro. Un ejemplo clá- mostró que el efecto es más las flores del iris sudafricano. sico es el de la mariposa vi- marcado en los lugares donde rrey, que, siendo inofensiva, las auténticas coralillo son los ejemplos, y tal como brillan- presenta un patrón de colora- más abundantes. Los depre- temente lo dedujo Sun Tzu ha- ción muy parecido al de la dadores que han aprendido a ce veinticinco siglos, el engaño mariposa monarca, la cual no atacar a las auténticas co- es parte natural de la guerra, acumula en su cuerpo ciertos ralillo, evitan también acercar- sea ésta entre los hombres compuestos químicos que la se a las “falsas”. o entre los animales, e incluso Como se puede ver en todos En un giro más rebuscado entre las plantas. Los ejemplos venenosa para algunas aves. del mimetismo batesiano, al- de la naturaleza no hacen sino Los pájaros, acostumbrados gunas plantas han desarrolla- corroborar las palabras del filó- a evitar el ataque a las mari- do mecanismos para engañar sofo chino: el arte de la guerra posas monarca, evaden tam- a los animales, manipulándo- es de vital importancia... es una bién a las virrey, aun cuando los para usarlos como meca- cuestión de vida o muerte. Héctor T. Arita Instituto de Ecología, Universidad Nacional Autonoma de México. 18 quídea sudafricana Disa En un estudio publicado el del llamado mimetismo bate- hacen incomestible y hasta CI E NCIAS 67 JULIO nismos de polinización. La or- SEPTIEMBRE 2002 I MÁGENES M. C. Escher (fragmentos), p. 16: Mosaico II, litografía, 1957; p. 17: Mariposas, grabado sobre madera, 1950; p. 18: Evolución I, talla sobre madera, 1937.