Lección 5 De la identificación de problemas a la reglamentación De la identificación de problemas a la reglamentación • 5-1 Preguntas centrales o o o o ¿De qué manera ha usado la EPA reglamentos basados en riesgos para la salud? ¿Por qué los reglamentos basados en riesgos para la salud son difíciles de aplicar a los contaminantes peligrosos del aire? ¿Qué reglamentos basados en tecnologías de control ha usado la EPA? ¿Cómo se han venido usando los análisis de riesgos en la fijación de normas de emisión? Palabras clave o o o o o Contaminantes criterio Contaminantes peligrosos del aire Normas Nacionales de Calidad del Aire Ambiental (NAAQS, por sus siglas en inglés) Máximo de Tecnología de Control Disponible (MACT, por sus siglas en inglés) Martillo del MACT 5-2 • Introducción a la toxicología de la contaminación del aire De la identificación de problemas a la reglamentación El gobierno de los Estados Unidos se vio en la obligación de reglamentar los niveles seguros de los contaminantes del aire, luego de que diversos estudios indicaran que algunas de estas sustancias eran peligrosas para la salud. La EPA, que tiene la misión y la facultad de fijar normas de emisión, se propuso determinar los niveles críticos de dichas sustancias sobre la base de los riesgos que estos niveles presentaban para la salud. Sin embargo, rápidamente se descubrió que era una tarea casi imposible y los reglamentos para los contaminantes peligrosos del aire se retrasaron. Las Enmiendas de la Ley del Aire Limpio (1990) fueron, en parte, diseñadas para remediar esa situación. Ellas solucionaron el problema al desplazar la base de los reglamentos para dichos contaminantes de los riesgos para la salud a la tecnología de control disponible. Antes de analizar el sistema regulador basado en las tecnologías de control, veamos de cerca los reglamentos basados en los efectos para la salud de la Ley del Aire Limpio de 1970 (Clean Air Act). Diversos estudios revelaron que algunos contaminantes del aire son peligrosos para la salud, de manera que el gobierno norteamericano tuvo que reglamentarlos. De la identificación de problemas a la reglamentación • 5-3 Reglamentos basados en los efectos para la salud La Ley del Aire Limpio de 1970 proporcionó un mecanismo de reglamentación para reducir los contaminantes nocivos del aire. El propósito fundamental de la Ley del Aire Limpio de 1970 fue proporcionar el mecanismo de reglamentación necesario para reducir las concentraciones de contaminantes nocivos del aire a niveles que originen efectos adversos no significativos para la salud. Este esfuerzo ha sido sumamente exitoso para un grupo de sustancias frecuentes en el aire ambiental. Normas Nacionales de Calidad del Aire Ambiental (NAAQS, por sus siglas en inglés) A fines de los años cuarenta y principios de los cincuenta, muchas personas observaron un cambio en la calidad del aire alrededor de áreas densamente pobladas, especialmente en zonas metropolitanas importantes como las ciudades de Nueva York y Los Ángeles. Las investigaciones sobre las causas de este smog proporcionaron algunos resultados increíbles: • Los productos químicos responsables de este cambio provenían principalmente del uso de combustibles fósiles para el funcionamiento de los vehículos de transporte. • Aunque el smog era más perceptible en las áreas densamente pobladas, los productos químicos involucrados se encontraban en casi todo el aire ambiental. Los contaminantes criterio originan efectos adversos para la salud y se pueden encontrar en el aire ambiental. Se realizaron diversos estudios para determinar si esos productos químicos de amplia cobertura eran nocivos para quienes los respiraban. Numerosos estudios indicaron que, efectivamente, esas sustancias tenían consecuencias adversas para la salud humana, desde irritación de ojos y dolor de garganta hasta bronquitis y efectos más graves. Estos hallazgos hicieron noticia y se solicitaron más estudios. A finales de los años sesenta, los datos sobre los niveles nocivos y los efectos de esas sustancias ya eran suficientes como para que el Congreso norteamericano pudiera establecer reglamentos concernientes a los niveles aceptables en el aire ambiental. En un documento sobre criterios de la cali- 5-4 • Introducción a la toxicología de la contaminación del aire dad del aire, se compiló la información sobre cada uno de estos productos químicos, que terminaron llamándose contaminantes criterio. Actualmente, las Normas Nacionales de Calidad del Aire Ambiental reglamentan los siguientes contaminantes criterio: • • • • • monóxido de carbono (CO); plomo (Pb); dióxido de nitrógeno (NO2); ozono (O 3); material particulado menor de 10 micrómetros de diámetro (PM10) y material particulado menor de 2,5 micrómetros de diámetro (PM2,5) • dióxido de azufre (SO2). Normas Nacionales de Emisión para los Contaminantes Peligrosos del Aire (NESHAP, por sus siglas en inglés) Desde luego, en 1970 el aire ambiental ya contenía otras sustancias tóxicas además de los contaminantes criterio, lo cual fue especialmente cierto dentro y alrededor de las instalaciones industriales. Todos los contaminantes no criterio se agruparon bajo el término contaminantes peligrosos del aire. Para estos contaminantes, la Ley del Aire Limpio de 1970 sancionó normas basadas en los riesgos que ellos suponían para la salud, establecidas en un nivel que protegía la salud pública con un amplio margen de seguridad. La Ley del Aire Limpio de 1970 ordenó normas basadas en los riesgos para la salud. Contaminantes tóxicos del aire (cientos) Contaminantes criterio (6) Contaminantes peligrosos del aire (8) Mediante normas basadas en los riesgos para la salud, solo se identificaron seis contaminantes criterio y ocho contaminantes peligrosos del aire. De la identificación de problemas a la reglamentación • 5-5 La EPA, en particular, quería especificar el nivel crítico en el cual un contaminante peligroso del aire aumenta la incidencia de un efecto adverso por uno en un millón sobre la incidencia general en la población. Lamentablemente, muchas de las sustancias que generaban preocupación no eran las que habían capturado los titulares de los periódicos durante los años cincuenta y sesenta. Por otro lado, los estudios fueron completamente inadecuados para producir datos tan precisos como los que habían llamado la atención de la opinión pública en las décadas anteriores. Desde 1990, la EPA ha venido regulando las emisiones de 188 contaminantes peligrosos a través de la promulgación de Normas Nacionales de Emisión para los Contaminantes Peligrosos del Aire (NESHAP). Actualmente, la gran mayoría de las normas de emisión ya ha sido promulgada. ¿Por qué son difíciles de aplicar los reglamentos basados en los efectos para la salud? Generalmente, los contaminantes peligrosos del aire son productos químicos provenientes de fuentes específicas que afectan a áreas aisladas. Por diversas razones, el mecanismo de reglamentación implantado por la Ley del Aire Limpio de 1970 falló en la implementación de normas para los contaminantes peligrosos del aire. En primer lugar, las sustancias de interés no se parecían en nada a los contaminantes criterio, que se encontraban básicamente en todas partes. Generalmente, los contaminantes peligrosos del aire son productos químicos provenientes de fuentes específicas que afectan solo a áreas aisladas. Tales productos no generaron preocupación pública porque se supuso que si las personas lo deseaban, podían evitar la exposición. Las descargas químicas accidentales que afectaron a la población en general —especialmente la de Bhopal, India, en 1984— ayudaron a captar el apoyo público necesario para la reglamentación de dichos contaminantes. El movimiento de salud ocupacional también presionó para que el gobierno norteamericano los controlara mejor. Otro problema con la reglamentación de los contaminantes peligrosos a través de la legislación de 1970 fue que muchos son carcinogénicos. En la lección 4, vimos que los carcinógenos no tienen dosis mínima; incluso la cantidad 5-6 • Introducción a la toxicología de la contaminación del aire más pequeña puede producir cáncer. La Ley de 1970 fue explícita al requerir una norma segura de emisión que proporcionara un amplio margen de seguridad. Obviamente, esto resultó imposible para los carcinógenos, salvo que se pensara en la eliminación total de las sustancias de la atmósfera, lo que era igualmente imposible. Como si fuera poco, existía, además, el problema de la falta de datos sobre este tipo de productos químicos. Aun cuando existiera información disponible, siempre surgía el tema constante de la validez de los datos toxicológicos. ¿Se puede aplicar a los seres humanos resultados de estudios realizados en animales? ¿Es posible que estudios de uno a dos años de duración indiquen con exactitud las consecuencias de la exposición durante periodos más largos, incluso toda una vida? Es más: los seres humanos rara vez están expuestos a un contaminante peligroso del aire de manera aislada. Las exposiciones a sustancias químicas diversas, que son propias de la vida real, generan todos los complejos factores relativos a las interacciones químicas: sinergia, antagonismo, potenciación, etcétera. En términos sencillos, demasiadas variables influyen en la aparición de efectos adversos en la salud de los seres humanos. A menudo, los investigadores no están seguros de realizar las extrapolaciones y suposiciones necesarias para extraer conclusiones cuando entran en escena la legislación y las eventuales responsabilidades legales. Surgieron con frecuencia nuevos problemas sobre las pocas sustancias para las cuales se habían implantado normas. A veces, las normas de emisión reguladas eran imposibles de cumplir con la tecnología existente en ese momento. Por lo tanto, no se alcanzó la mayoría de objetivos de reducción de emisiones. Los representantes del gobierno de los Estados Unidos sabían que se necesitaba una base nueva y viable para reglamentar los contaminantes peligrosos del aire y comenzaron por revisar la legislación de 1970. La Ley de 1990 enmendó muchas deficiencias de la versión de 1970. Los representantes del gobierno de los Estados Unidos se dieron cuenta de que se necesitaba un nuevo método para reglamentar los contaminantes peligrosos del aire. De la identificación de problemas a la reglamentación • 5-7 Reglamentos basados en tecnologías de control Los primeros esfuerzos para establecer normas de emisión basadas en tecnologías de control aparecieron, en realidad, con la Ley del Aire Limpio de 1970. Según la legislación, algunos emisores de contaminantes tóxicos del aire, a fin de controlar sus emisiones, debían aplicar o bien una tecnología de control disponible suficientemente razonable (RACT, por sus siglas en inglés) o bien la mejor tecnología de control disponible (BACT, por sus siglas en inglés). Sin embargo, el proceso de implementación fue sumamente complejo y rara vez se usaron dichos reglamentos. La Enmienda de 1990 proporcionó una lista de 189 contaminantes peligrosos del aire. La Enmiendas de 1990 eludieron el problema que suponía el identificar los niveles críticos de contaminantes peligrosos del aire al proporcionar una lista extensa de 188 de estas sustancias con sus nombres químicos y categorías y mediante la implementación de reglamentos viables de aplicar, basados en tecnologías de control. Esencialmente, la EPA pasó de decir:“Paciencia, estamos tratando de identificar algunos contaminantes peligrosos del aire y sus niveles críticos”, a afirmar: “Estos son los contaminantes peligrosos del aire; aquí están sus fuentes características y la tecnología de control disponible.¡Reduzcamos en algo las emisiones!” Las tecnologías de control de la contaminación requeridas se dividen en diversas clasificaciones, según los contaminantes y las fuentes. ¿Cuáles son los contaminantes peligrosos? Antes 5-8 • Introducción a la toxicología de la contaminación del aire • Estos son los contaminantes peligrosos • Estas son sus fuentes • Esta es la tecnología de control disponible • ¡Reduzcamos las emisiones! Ahora La creación de la lista de categorías de fuentes constituyó un paso importante en el establecimiento de normas basadas en tecnologías de control y no en riesgos para la salud asociados a ciertas concentraciones tóxicas. El cambiar el foco de atención de los contaminantes mismos a las fuentes de los contaminantes descargó a la EPA de la responsabilidad de presentar pruebas, y la asignó a las industrias que realmente estaban emitiendo sustancias nocivas a la atmósfera. El Congreso de los Estados Unidos pidió a la EPA que enumerara las categorías de fuentes (por industria) que emitían uno o más de los 188 contaminantes peligrosos del aire y que publicara un programa para reglamentar las categorías enumeradas. Se asignó la responsabilidad del cambio a las fuentes de los contaminantes. Otro componente de las Enmiendas de 1990 que fue decisivo para que las normas basadas en tecnologías de control se hicieran más viables que las establecidas en la Ley de 1970 fue la consideración de otras variables además de la concentración de contaminantes y los riesgos para la salud. La Ley del Aire Limpio de 1970 tuvo éxito en lograr que casi todos los contaminantes criterio quedaran bajo control, lo cual solo se logró a un costo muy alto para algunos negocios e industrias: algunas empresas tuvieron que cerrar. Por el contrario, la legislación de 1990 establece abiertamente que se debe tomar en cuenta el costo que supone el logro de la reducción de emisiones, los efectos ambientales asociados y los requerimientos energéticos. Máximo de tecnología de control disponible (MACT, por sus siglas en inglés) Las Enmiendas de 1990 introdujeron una nueva clasificación de tecnología de control, máximo de tecnología de control disponible (MACT, por sus siglas en inglés). Las medidas para implementar las normas basadas en tecnologías de control pueden incluir una o todas las siguientes: • • • • • • • cambios de procesos; sustitución de materiales; modificación de diseño y equipos; aislamiento de instalaciones y equipos; modificación de las prácticas laborales; instalación de equipos de control, y otros. De la identificación de problemas a la reglamentación • 5-9 La determinación del máximo de tecnología de control disponible que resulta apropiado para una fuente específica supone considerar la categoría de la fuente y tomar en cuenta si esta es nueva o ya existente en relación con la aprobación de una norma. Para las fuentes ya existentes al momento de la promulgación, se determina por el 12 por ciento mejor controlado de fuentes similares. Estas fuentes deben cumplir la norma lo antes que puedan, pero, a más tardar, tres años después de su promulgación. En cambio, el máximo de tecnología de control disponible de las fuentes nuevas se determina por la fuente semejante mejor controlada (según lo determine la EPA). Estas fuentes deben acatar la norma inmediatamente después de la promulgación. • 12% mejor controlado de fuentes similares • Plazo de tres años • • Fuente similar mejor controlada Cumplimiento inmediato El Programa de Reducción Temprana dio a las fuentes principales la posibilidad de extender el cumplimiento de una norma MACT. Existentes Nuevas Con el Programa de Reducción Temprana, una fuente principal puede obtener una prórroga de seis años para cumplir una futura norma MACT si, antes de que la norma sea implementada, reduce voluntariamente sus emisiones de contaminantes peligrosos del aire entre 90 y 95 por ciento. Otro programa que presenta importantes incentivos es la comercialización de créditos de emisión, en virtud de lo cual las empresas que superan las normas adquieren certificados de emisión que pueden usar posteriormente o vender a las empresas que aún no cumplan con las normas. Reglamentos basados en los riesgos En el marco de la reglamentación de los contaminantes peligrosos del aire basada en tecnologías de control, la EPA se encuentra reformulando la evaluación de riesgos en el proceso de control. Está estableciendo una lista de prioridades 5-10 • Introducción a la toxicología de la contaminación del aire para la reglamentación por cada categoría de fuente y cada contaminante peligroso del aire emitido por ellas, según la magnitud del peligro involucrado. Los factores que se están considerando comprenden no solo la toxicidad y volumen de los productos químicos y el tipo de instalación sino también la distancia a la población, las condiciones hidrogeológicas y el destino de los productos químicos. Este enfoque parece contener mayor potencial para reducir los riesgos tóxicos. Un inconveniente es que este tipo de evaluación de riesgos requiere ingresar abundante información. Sin embargo, esto no ha significado retornar al lento proceso reglamentario caracterizado por interminables estudios de laboratorio que constituyó uno de los puntos débiles principales de la Ley de 1970. La mayor parte de la información pertinente se cuantifica con facilidad. Además, resulta mucho más fácil y rápido establecer riesgos relativos de los productos químicos que identificar riesgos absolutos asociados con niveles críticos de productos químicos específicos. En caso de que la EPA falle en proporcionar normas MACT según el cronograma de reglamentación de categorías de fuente, las fuentes principales de contaminantes peligrosos del aire deberán solicitar licencias de emisión de organismos reguladores estatales o locales. De este modo, las licencias se expedirán caso por caso. Esta disposición se conoce como “martillo del MACT”. En caso de que la EPA falle en proporcionar normas MACT, el “martillo del MACT ” permitirá que las fuentes principales de contaminantes peligrosos del aire soliciten licencias de emisión. Aunque los reglamentos sobre los contaminantes peligrosos del aire de 1990 se basan en tecnologías de control disponibles, retienen parte del espíritu de la Ley de 1970 al reconocer que su preocupación máxima es la eliminación de los efectos adversos para la salud. Con el objetivo de hacer que el aire De la identificación de problemas a la reglamentación • 5-11 sea seguro de respirar para todos, la EPA se dedica a evaluar y eliminar cualquier riesgo residual después de que se hayan implementado las normas basadas en tecnologías de control. Específicamente, la Enmienda de 1990 requiere a la EPA para que informe al Congreso, dentro de los seis años posteriores a la promulgación de este instrumento legal, sobre los siguiente temas: • • • • métodos para calcular cualquier riesgo residual; importancia del riesgo residual; efectos reales de los riesgos residuales para la salud; incertidumbres en los métodos de evaluación de riesgos, y • posibles consecuencias negativas de los esfuerzos de reducción de riesgos. En caso de que se identificara un riesgo residual para cualquier categoría o subcategoría de fuente, la EPA debe promulgar normas basadas en los efectos para la salud en el plazo de los ocho años posteriores a la promulgación de las normas basadas en tecnologías de control. Como una preparación para cumplir este requisito, la EPA está en vías de crear un mecanismo eficaz para implementar normas basadas en los efectos para la salud. 1. ¿Cuál fue el objetivo principal de la Ley del Aire Limpio de 1970? 2. Los contaminantes del aire ambiental para los cuales se establecieron Normas Nacionales de Calidad del Aire Ambiental recibieron el nombre de __________. 3. ¿Cuántos contaminantes peligrosos del aire fueron identificados como causantes de riesgos para la salud? 4. ¿Por qué los reglamentos basados en efectos para la salud son difíciles de aplicar? 5. ¿Cómo puede una planta industrial obtener una prórroga para cumplir una futura norma MACT? 5-12 • Introducción a la toxicología de la contaminación del aire Respuestas a las preguntas de autoevaluación 1. Proporcionar un mecanismo de reglamentación para reducir las concentraciones de contaminantes nocivos del aire a niveles que supongan efectos adversos no significativos para la salud. 2. Contaminantes criterio. 3. 188. 4. Estos reglamentos son difíciles de aplicar a los contaminantes peligrosos del aire porque: • Los contaminantes peligrosos del aire son muy diferentes de los contaminantes criterio. • Muchos contaminantes peligrosos del aire son carcinogénicos. • La falta de datos. • A veces las normas de emisión fueron imposibles de cumplir. 5. Mediante la reducción voluntaria de las emisiones de contaminantes peligrosos del aire de 90 a 95 por ciento antes de que la norma sea implementada. De la identificación de problemas a la reglamentación • 5-13 5-14 • Introducción a la toxicología de la contaminación del aire