Nuestra vida es un provecto incortrplet<>. que se debe seguir realizando cada clía \- qlre nos obliga a formular la gran pregunta cle toclo hor.nltre:¿cual es el camino qLre lleva a la feliciclacliDelt<; cle compartir la pegunta y en tal ca.sono pueclct silenciar donde he encontrado la respuesta:.Jesús dijo al inicio de su vida pública: he veniclo para evangelizar a los pobres (cf. Lc 4, Iü. y<¡ os muestro el camino de la vida, el camino que lleva a Ia felicidad; y aún más yo soy ese camino. En ocasiones somos personas con incapacidad para \a alegría, y que deriva en incapacidad parta amar. de pasar la barrera barrerasque nos separa Llnosa otro.sprocluciclaspor la enviclia.la avaricia... v vicios que arrtrinanla r.iclacle las personas.Ante esto. hace tulte evengelizar.per<tpxrx estu n.risitjr.t her. c¡uc cler le vicle.r'id:r qr.recncierre el F_r'enst:li(). F , s c i c r t o q u c e s t e e v a n g c l i z a c i < i nc l c l o r n l r r pcrnrencntc la rcaliza la Iglesia. c()nt() cr.¡crp() visible dc _lesucrist<¡ resucirad<1. r- nunca la ha internrmpido. T<>dosl<lsdías celebra el nrisrerio cle la Eucaristía.administr¿l<>s sacr¿r.nent<>s. anuncia la palabra de r-ida. su fnrto: Da luz r- alegría:<la a conocer el camino de la r.ida a nulrerosas personas. Pero no es menos cierto, y así ocurre que muchas personas viven, a veces sin saberlo, en Llna progresiva descristianización y añadida pérdida de los valores humanos esenciales,lo cual nos debe de preocupar. Hay que llevar el Evangelio a todos lo que no supone llevar a cabo nn programa partidista, pues es r¡na misión que ya vefitos reflejada en la parábola del grano de mostaza (Mc 4,31.32) y por ende a todos nos compete ; taÍrpocc) significa attaer masasya que al evangehzarhacemos visibles una verdad presente precisamente en la acción de Dios, en la historia: ',No por ser grancle te elegí; al contrario, eres el más pequeño cle los pueblos; te elegí porque te at-no...,,. dice Dios al pueblo de Israel en el Antiguo Testal.nento expresando la paradoja fundamental de la historia de la salvación.Y es que si tener fé es aclentrarnos en la Historia de Salvación esta resulta ser la dinámica de la promesa cumplida. Evangelizar no es, por tanto una, forrna de hablarl es r.lllislticr-rur-rrrtitlnlr cle r.ivir-.r'ivlr cscuchlrrrcl<r "\o \' scr p()rtl\1)zclcl Irucll-c. hlrlrllrr.li l)()rsu curntil. s i n o c ¡ u ch e l t l e r r il o t ¡ r r co i s : r r . J r i. (. r . l j ) . r l i c c e l Señr¡rs<tltrecl [-.píritrr \rrr-rto.l-_r ru-rgclizlrr lto cs ganar adeptos sitto t¡lrtcncrlr¡.tlc I)ior ¡trrrlrI)ios. El mét<xktdeb('cst:lr tilncLrtlot¡l i:r orut.irir-r irtrcr-rsu [Drque L:r palaltr:rclcl entrncio sienrltrr ltrr clc cslrrr i m p r e g n a d a c l e e s e i n l e n s r r r . i c l r rc l c o r : r c i t l r . r . Dios no cllenta con granclesnúnrer<tsi.e que el poder exterior no es el signo de su presencia.Sen Pablo, al final de su vida, tr¡vo la intpresión cle qr-rehabía llevado el Evangelio hasta los confines de la tierra, pero los cristianos eran peqr.reñ:rs comunidades dispersaspor el mundo, insignificantes según los criterios seculares.En realidad fueron la levadura qlle penetra en la masa y llevaron en su interior el futuro del mundo (cf. Mt 13, 3r. San Agustín dice lo uisrno de rnodo muy hermoso. y comenta así: "Apacienta mis ovejas, es decir, sufre por nris ovejas" (Sermón 32: pL 2, 640). tJn:.t madre no puede dar a luz un niño sin sufrir. Tockt parto implica sufrimiento, es sufrimiento, y lleglLr. a ser cristiano es Ltn paffo. Digámoslo una vez rnírs con palabras del Señor: ,'El reino de Dios exigc violencia" (M 11, 12;Lc 10, 16), pero la violencre de Dios es el sufrimiento, la ct'uz. No pciclent<ts dar-vida a otros sin dar nuestra vicla. El pl-()ccs() la renr¡ncia al propio yo, es la firrnre cor.rcr-etrl (lc dar la propia vida. DAR LA VII)A I-.SHI-.R\IOSO.