Enrique Valdearcos Guerrero Historia del Arte Planta y alzado de una catedral gótica: la catedral de Reims, Francia, S. XIII. Análisis: Llama la atención lo peculiar de su planta, especialmente el enorme tamaño de la cabecera, que alcanza aquí justo a la mitad de la longitud. Se ha explicado este fenómeno de la cabecera hipertrofiada como respuesta a la necesidad de disponer de una zona lo suficientemente amplia como para alojar al numeroso coro que participaba en las principales ceremonias religiosas de la catedral. En el resto de la construcción se siguen las pautas habituales. Tiene tres naves longitudinales hasta llegar al crucero y cinco a partir de él, la central más ancha. Tiene un transepto también de tres naves y también la central más ancha. En el cuadrado del crucero vemos cuatro enormes pilares fasciculados que soportan el peso de una gran bóveda de crucería al interior y de una torre cimborrio poco desarrollada al exterior. Vemos un ábside poligonal rodeado por cinco tramos de bóveda trapezoidal que cubren la girola. Alrededor de ella aparecen otras cinco capillas radiales muy desarrolladas, siendo la central la más grande. Aparecen también en planta tres grandes portadas, la principal en los pies y dos en los extremos del crucero. Toda la catedral se cubre con bóveda sencilla de crucería, soportada al interior por pilares fasciculados en el cuadrado del crucero y con gruesas columnas con baquetones adosados en el resto. Al exterior, soportando el peso tangencial, unos gruesos contrafuertes, que aparecen en planta, se unen a una hilera de arbotantes. En su alzado, el muro interior presenta los tres niveles canónicos: arco, triforio y ventanas-vitrales. estructura interna reducida a tres pisos: 3ª altura: grandes ventanales 2ª altura: Triforio, que queda reducido a una pequeña galería de servicios y que se presenta corrida a lo largo de toda la planta. 1ª altura: Desde el suelo hasta la clave de la arcada que forman los arcos formeros (los que separan la nave central de las laterales Esta estructura interna del alzado quedará como algo clásico para el resto de las catedrales de la Francia del siglo XIII y pasará al resto de países como las tres hermanas en España: Burgos, León y Toledo. Por Enrique Valdearcos Guerrero Historia del Arte fuera, esta estructura se corresponde con los estribos exteriores, adosados a la nave lateral hasta que ésta termina y luego exentos hasta que reciben el arbotante que baja de la nave central. Luego se rematan con pináculos puntiagudos. Comentario La Catedral de Reims pertenece al conjunto de las catedrales clásicas de Francia, junto con las Catedrales de Amiens y de Chartres. Está dedicado a la Virgen María. La catedral de Reims tenía, como Saint-Denis, un profundo significado para la monarquía francesa. Si esta segunda era la sede del panteón dinástico y el lugar donde se custodiaban los símbolos del poder, los "Regalia", en la primera se coronaban los reyes. Reims era el lugar en el que desde comienzos del siglo XI se llevaba a cabo la consagración de los reyes de Francia, desde que el rey franco Clodoveo fuera bautizado por San Remigio. Entre estos muros, asistió en 1429 Juana de Arco a la coronación de Carlos VII, a quien ella misma había ayudado decisivamente en su camino al trono. Se edificó sobre un antiguo santuario del siglo IV aproximadamente. Más tarde se construyó una basílica sobre columnas romanas hacia el año 400. Por el 862 se consagró el edificio carolingio que seguía el modelo de la iglesia monástica de la Alta Edad Media. En el año 1210 también un incendio, como en Chartres, en Amiens y otras muchas iglesias francesas, asoló el edificio y ello motivó la reconstrucción de la catedral. Tratándose de un templo de tal envergadura, podemos considerar que las obras no se demoraron demasiado. Iniciada sólo un año después (en 1211 se coloca la primera piedra), se materializó en cien años. En 1311 parece ser que la fábrica ya estaba concluida. A diferencia de otros edificios contemporáneos, en éste se conocen los nombres de los arquitectos que se sucedieron en la dirección de la obra. Los proporcionó el laberinto que ornó el pavimento de la nave central y que fue destruido al sustituirse el original por otro nuevo en el siglo XVIII. Gracias a un dibujo sabemos que trabajaron en Reims, y en este orden: Jean d'Orbais, Jean le Loup, Gaucher de Reims y Bernard de Soissons. En el laberinto venía especificada la labor ejecutada por cada uno de ellos. En este contenedor podemos admirar uno de los repertorios más amplios de la escultura y el relieve góticos, que se extiende por sus distintas fachadas externas, así como por esa otra fachada interior que cierra los pies del templo, hasta sumar un conjunto de más de 2200 piezas. En la mayor parte de ellas están ya presentes las novedades de la plástica escultórica gótica que, en algunos casos, ha producido verdaderas obras maestras, como ese ángel sonriente del grupo de la Visitación. Por lo demás, en un templo gótico el espacio reservado a las vidrieras ha de ser también considerable y entre las de Reims destacan sobremanera las del enorme rosetón central en el que se representa a la Virgen rodeada de apóstoles y ángeles.