26C BOLETÍN DE LA KEAL SOCIEDAD ESPAÑOLA ñas acostumbradas á esta clase de observaciones. Presenta también ligeras variantes, según la planta sobre que vive, y esto contribuye á que se le confunda con más facilidad. Prácticamente, para quienes están apartados del estudio de la Entomología ó que sólo circunstancialmente se dedican á trabajos entomológicos, el piojo rojo del naranjo y el piojo de la hiedra son una misma cosa. En efecto; los Aspidiotus sólo se diferencian de los Chrysomphalus por carecer de las paráfisis que' es-' tos presentan sobre el borde posterior del pigidio. Las dos figuras que acompañan á la presente nota representan el extremo del segmento anal en el Aspidiotus hederae y en el Chrysomphalus dictyospermi. Fig. 2>—Aspidiotus heSeraeV&Wot.— Borde pisterior del pigidio de hembra adulta. El ácido prúsico como insecticida. Como se ha ponderado excesivamente en algunos periódicos la eficacia de las fumigaciones con el ácido cianhídrico, voy á tratar de este asunto brevemente aquí. No puede dudarse de que las fumigaciones con el ácido prúsico, verificadas oportunamente, constituyen un arma poderosa con que exterminar las cochinillas; pero tampoco debe admitirse que con su empleo exclusivo contra el poll-roig, pueda librarse definitivamente & los naranjos de la plaga que actualmente los infesta. - El piojo rojo, ó sea el Chrysomphalus dictyospermi var. pinnuli/era, tantas veces citado por mí en las presentes notas, es una cochinilla enormemente difundida por el Mediodía y el Levante de España, donde ataca no sólo al naranjo común y á otras especies de Citrus, incluso el Citrus decumana, sino á los evónimos, las palmeras,' el laurel, el aligustre, la adelfa, la