MINISTERIO DE TRABAJO > INSTITUTO NACIONAL DE PREVISIÓN SEUVICIO NACIONAL DE.. iiiiiiiiiiiiiiii iiiiimiii SEGUROS UBRES iiiiiiiiiiiii ALMAGRÓ, 40 iiiiiiiiiuiiiiiHiiiiiiiiiiiiiiiiiiiitiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiimiiiiiiimimiNiiHiuii DERECHOS PASIVOS DEL EMPLEADO PARTICULAR SJIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIlillllHHWJWNfHIIIIHVIlillllllllllil fitJIlMltlHUHHIIHlillItliílllllüIHItíItfiltfilIlillIltlltlIHMI La Mutualidad de la Previsión El consejo que me pide un amigo, dispensándome a la vez un honor, sobre la forma en que mejor podría organizar para sus empleados un régimen de derechos pasivos, pensiones de jubilación o vejez y de invalidez, y pensiones de supervivencia, viudedad y orfandad, me ha sugerido la idea de hacer para su divulgación por la prensa una sucinta exposición de algunas de las consideraciones a que obedece el dictamen con que correspondo a la amable consulta que bien demuestra, en el que ¡a hace, no sólo un deseo laudabilísimo de asegurar el porvenir de sus empleados sino? el no menos plausible de hacerlo en forma racional y con las máximas apetecibles garantías. i Sin titubear le he recomendado que se ponga en relación con la Mutualidad de ¡a Previsión, que es la organización creada por el instituto Nacional de Previsión para asegurar todas esas pensiones a sus propios funcionarios, procurando celebrar él oportuno concierto con esa Mutualidad que cuenta ya veintidós años de vida y experiencias, como creada en 1926, teniendo aprobado el nuevo texto de su Régimen, después de contrastar sus normas en la realidad, por Real Orden de 10 de septiembre de 1929, que es el que rige con las modificaciones aprobadas por órdenes del Ministerio de Trabajo de 20 de abril de 1932, 9 de mayo de 1936 y 7 de octubre de 1942. El reglamento de esa Mutualidad, elaborado, así como sus bases y tarifas, con el esmero que el Instituto Nacional de Previsión hace las cosas y el interés especial que tanto él como sus propios funcionarios, sus técnicos en primer lugar, habían de poner en hacer una obra lo más perfecta posible, ya qué para ellos se creaba el nuevo servicio, actualmente enmarcado en el Servicio Nacional de Seguros Libres de! mismo Instituto, se halla impregnado de rigorismo científico, prudencia y comprensión de las necesidades y preocupaciones de los funcionarios o empleados; y de ese esmero puedo yo dar fe, porque me cupo la satisfacción y el honor de participar, bien que muy modestamente, en los trabajos de preparación de! proyecto, y, más tarde, como miembro del Consejo especial de la Mutualidad, en su funcionamiento, durante algunos de los primeros años de su vida. I.-Adhesión de oirás'entidades mediante conciertos. El Instituto, que fundamentalmente se propuso hacer obra de Previsión para su propio personal, quiso que la Mutualidad, en que éste había de ingresar obligatoriamente, pudiese acoger a los funcionarios de otras entidades u organismos que tuvieren análogas necesidades de previsión, y así ¡o establece el artículo primero del Reglamento de la Mutualidad que tiene esta especifica denominación oficial: Mutualidad de la Previsión. • Cada entidad, que con esta Mutualidad se concierte para asegurar derechos pasivos a su personal, determinará libremente la prima a pagar o la cuantía de la pensión que quiera constituir para sus empleados o socios, y la aportación con que hayan de contribuir, ella y sus socios o empleados, siendo preciso que éstos tengan análogos riesgos, y la misma necesidad de defenderse contra ellos que los funcionarios y subalternos del Instituto, y que la entidad asegure, para todos sus empleados o socios, el mismo género de prestaciones que el Instituto asegure a su personal. Bien pronto formalizaron conciertos, con sujeción a éstas bases fundamentales, diversos organismos particulares y algunos de cierto carácter oficia!, y así tienen ya a sus empleados en la expresada Mutualidad varias instituciones de ahorro, cual la Confederación Española de Cajas de Ahorros Benéficas, las Cajas Provinciales de Ahorros de Álava y de Barcelona, las Cajas de Ahorros y Monte de Piedad de Cáceres (que fué de las primeras entidades que incorporaron su personal a la Mutualidad de la Previsión, contándose las viudas de dos de sus empleados entre las que cobran pensión de viudedad de dicha Mutualidad desde el año 1937) y las de Madrid, Oviedo, Plasencia, Santander, Soria, Tenerife y Vitoria, que yo sepa, y, entre los organismos de otra ciase, las Cámaras de la Propiedad Urbana de Elche y de Guipúzcoa, le Patronato Municipal de Casas Baratas.de*Sevilla, los Institutos Nacionales de Previsión, de Colonización y de la Vivienda, la Mutualidad de Accidentes de Mar y de Trabajo, el Servicio Nacional del Crédito Agrícola, el de Reaseguros de Accidentes del Trabajo, la Junta de Protección de Menores de Guipúzcoa, Instituto de Fomento de la producción de fibras textiles, Escuelas Labaca, de Coruña, la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación y las empresas de Aguas Potables de Santiago, Real Club de Puerta de Hierro, Compañía Anónima Mengemor, Sociedad de Transportes de Vagones Cubas de Irún, etcétera. 2.-Pensiones constituidas sobre bases técnicas. Todas las aludidas entidades, por sus conciertos en la Mutualidad de la Previsión, aseguran, con sujeción a las mismas tarifas con que se consolidan sus derechos los funcionarios del Instituto, jubilaciones para sus empleados y pensiones de invalidez para los que prematuramente se inutilicen, y pensiones de viudedad y orfandad a las familias de los que tuvieran la desgracia de morir; siendo, en fin del año anterior, 115 los pensionistas y 231 las viudedades u orfandades, aumentándose de año en año los beneficiarios, por lo ; •que lo pagado por todos los expresados conceptos, que no llegaba al millón y medio hasta fin de 1939, pasó de los seis y medio en 1947, y, en el año actual, ascenderá lo que se pague dentro del año, por jubilaciones, viudedades, orfandades y capitales a beneficiarios, aproximadamente a un millón de pesetas. Las pensiones aseguradas en la Mutualidad de la Previsión están en relación, como es natural, con las primas que por cada funcionario se paguen, primas que son matemáticamente proporcionales, conjugado el factor edad del asegurado, según cálculo actuarial, a las pensiones que ise aseguren, porque, precisamente, uno de los caracteres de esta Mutualidad, por imperativo del artículo 2." de su Reglamento, es un carácter técnico riguroso como corresponde a una obra del Instituto que así ofrece^ como fundamental garantía de las pensiones que en su Mutualidad se han de constituir, la de una base técnica. La Mutualidad de la Previsión, porque así la creó el Instituto, que huye del empirismo y la íaumaturgia halagadora y engañosa, ha hecho que sus tarifas descansen, aunque pudieran parecer más caras, en la roca más firme del cálculo algebraico, pensando que lo que no se construye, en materia de seguros, sobre este firme cimiento, será la imprevisión en materia de previsión, según !á frase feliz de don José Maluquer. 3.-Oirás garantías y ventajas de la Mutualidad. .; Como, por otra parte, en la Mutualidad que nos ocupa no hay accionistas entre quienes se hayan de repartir dividendos, ni anima su vida el espíritu de lucro o especulación, se ha previsto sin dificultad, en beneficio de los mismos mutualistas y para su mayor garantía, que el 50 por 100 de Sos excedentes que puedan resultar se destine a nuevos servicios en favor de los mutualistas, principalmente a la protección de las familias numerosas, y ya fué acordado establecer, con cargo a la reserva- así constituida, a favor de los mutualistas, un socorro para caso de fallecimiento, cuya concesión queda sometida a las disponibilidades del aludido fondo, y que ahora es de 2.500 pesetas que se pagan, en el momento de fallecer el mutualista, a susderechohabientes. Otro 25 por 100 servirá para constituir una reserva especial que permita compensar las fluctuaciones en la mortalidad y en el interés de las inversiones; y el 25 por 100 restante, así como los incrementos que acusen en conjunto las evaluaciones periódicas de los fondos invertidos, se destinará a constituir una reserva para atender a la fluctuación de los valores y propiedades que sirvan de garantía a ¡as pensiones y rentas aseguradas en la Mutualidad. Así, al final del último pasado año, según mis noticias, estos fondos de garantía o reservas especiales rebasaron la cifra de los 2.700.000 pesetas, y las reservas técnicas importaban más de los 52 millones de pesetas. Bien a las claras evidencia ¡o expuesto cpmo se infundió a la Mutualidad la «obsesión de la solvencia» con que, según el espíritu de su genial Fundador, alumbró a la vida el instituto Nacional de Previsión. De otro lado, y para robustecer la garantía de una gestión inspirada en esa obsesión de solvencia financiera y en aquella escrupulosa observancia de las bases técnicas de seguro, el Instituto Nacional de Previsión, que es a quien está confiada la administración de la Mutualidad de la Previsión, con los deberes y exenciones que tenga en los otros seguros sociales a él encomendados con independencia absoluta de sus otras operaciones y llevando contabilidad aparte de todos sus fondos, habrá de formular anualmente un balance de la Mutualidad, que será sometido al examen e informe de la Comisión Técnica designada por el Ministerio de Trabajo, que examine todas las operaciones de dicho Instituto. 4.-Caracteres d e los derechos pasivos asegurados. Conviene tener en cuenta, entre otras cosas que de interés especial ofrece la Mutualidad a que nos referimos, que las pensiones y rentas en ella constituidas son inalienables, inembargables e irrevocables; que los asegurados que dejen de pertenecer a entidades concertadas con la Mutualidad, podrán continuar en ésta, ingresando mensualmente, y por su cuenta, las primas que por ellas satisfa: gan dichas entidades, o fijando una nueva prima, con la consiguiente repercusión en la cuantía de la pensión, y que, en defecto de viuda y de huérfanos con derecho a renta de orfandad, que lo son los hijos legítimos o naturales reconocidos del titular, menores de veintitrés años si son varones, y las huérfanas solteras y no profesas en religión, cualquiera que sea su edad, el titular podrá designar libremente uno o varios beneficiarios pensionistas. * * * • • Tal es, a grandes rasgos descrita, la Mutualidad que, para sus funcionarios y subalternos, desde los más altos a los más humildes, y pensando en los empleados de otras entidades o empresas expuestos a los mismos riesgos, con las máximas garantías técnicas de organización y de control, creó el Instituto Nacional de Previsión, y de la cual soy, muy a satisfacción mía, uno de los pensionistas, disfrutando, como jubilado, por haber cumplido la edad de sesenta y cinc© años, mi pensión personal y la suplementaria correspondiente convertible en renta de viudedad y, a falta de viuda, en renta de orfandad a favor de las hijas solteras que deje a mi fallecimiento. También por esto, porque hemos de querer para los demás lo que para nosotros apetezcamos, yo me congratulé en aconsejar a mi cosultante que llevase a feliz término, en beneficio de sus empleados, el oportuno concierto con la Mutualidad de la Previsión. LEÓN LEAL RAMOS