246 IWGIA – EL MUNDO INDIGENA – 2016 CHINA Oficialmente, China se declara un país unificado, con una composición multiétnica y donde todos los grupos son considerados iguales ante la ley. Además de la mayoría china han, el Gobierno reconoce 55 minorías étnicas dentro de sus fronteras. Según el sexto censo nacional de 2010, estos grupos ascienden a 113.792.211 personas, lo que representa el 8,49% de la población total del país. El “Proyecto de Identificación de Minorías Étnicas”, llevado a cabo desde 1953 hasta 1979, estableció el reconocimiento oficial de 55 grupos. Sin embargo, todavía existen en China “grupos étnicos no reconocidos”, que suman un total de 734.438 personas (cifra del censo 2000). La mayoría de ellos vive en el sudoeste del país, en las regiones de Guizhou, Sichuan, Yunnan y Tíbet. Las minorías oficialmente reconocidas tienen derechos protegidos por la Constitución. Esto incluye el establecimiento de regiones étnicas autónomas, la creación de su propio gobierno local administrativo y el derecho a practicar su propio idioma y cultura. Las “Regiones autónomas étnicas” constituyen alrededor del 60% de la superficie de China. El Gobierno no reconoce el término “pueblos indígenas”, y los representantes de las minorías étnicas de China no se autoidentifican inmediatamente como “pueblos indígenas”, y rara vez han participado en encuentros internacionales relacionadas con cuestiones indígenas. Por tanto, no ha sido claramente establecido cuál de los grupos étnicos minoritarios deben ser considerados de esta manera. El Gobierno de China votó a favor de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas pero, antes de la adopción de la misma, ya había declarado oficialmente que no existen pueblos indígenas en el país, lo que significa que, a su modo de ver, la declaración no es aplicable en el país. ASIA DEL ESTE Y ASIA DEL SURESTE 247 Endurecimiento de la represión y control de los medios de comunicación E n 2015, el Gobierno chino siguió aplicando estrictas medidas de seguridad, respaldadas por la fuerza militar y policial, para imponer su dominio en las regiones de los pueblos étnicos minoritarios. La opresión de las minorías étnicas en China es parte de la política del Gobierno, expresada en el eslogan político de “Unidad Nacional con todos los Pueblos Étnicos”, que el presidente chino y dirigente del Partido Comunista Chino, Xi Jinping, no deja de repetir. Se trata de un llamamiento al Gobierno y a los ciudadanos de la nación para luchar por la estabilidad y la prosperidad económica bajo la visión de Xi de lograr el “sueño chino”, no solo para la mayoría china han sino también para las minorías étnicas. En 2015, los observadores destacaron que la autoridad china ha adoptado un enfoque más duro y autoritario en sus relaciones con el Tíbet, con la Región Autónoma Uigur de Sinkiang y con otras regiones con contiendas y oposición étnicas contra las autoridades centrales. 248 IWGIA – EL MUNDO INDIGENA – 2016 Para hacer frente a los disidentes étnicos y a las acciones de protesta, el gobierno central ha implementado un control más estricto sobre la población local. Además de la situación de luchas internas de poder en el partido y de una serie de desastres naturales y otros causados por el hombre, el Gobierno chino ha impuesto más restricciones a los medios de comunicación durante el año 2015, introduciendo más censura en la prensa, además de limitaciones a la hora de generar noticias. Los observadores comentan que la principal razón ha sido que de este modo el mundo exterior recibirá menos informes sobre las manifestaciones y los disturbios cometidos por el pueblo Uigur, así como sobre la autoinmolación y demás formas de protesta de los tibetanos. El resultado ha sido una disminución de las noticias procedentes de China sobre lo que realmente está ocurriendo en esas regiones intranquilas. Esto significa que los asuntos étnicos y la disidencia política se han estado tapando para ofrecer la imagen de una mejora en la situación, con menos intensidad de los conflictos, cuando la realidad es muy diferente. Gran violencia y control de las prácticas religiosas en la Región Autónoma Uigur de Sinkiang En 2015, los medios de comunicación estatales chinos han informado de dos incidentes importantes en la Región Autónoma Uigur de Sinkiang: la explosión de una bomba en Kashgar el 22 de junio y el ataque a una mina de carbón en Aksu el 18 de septiembre. En la explosión de junio, los medios chinos y extranjeros informaron de que un grupo de uigures había asesinado a 18 personas en un punto de control policial a las afueras de Kashgar. Se dijo que los atacantes habían esquivado el control antes de que se desencadenara el conflicto con bombas y cuchillos. Durante la escaramuza, 18 personas fueron asesinadas, la mayoría de ellas (según las autoridades chinas), oficiales de policía. En el incidente de Aksu, las autoridades del Estado culparon a militantes uigur de haber perpetrado el ataque a las instalaciones de una mina de carbón y a la residencia de los trabajadores. Según los informes de los medios chinos, se trató de un ataque nocturno con explosivos y armas manuales que se saldó con 40 fallecidos, la mayoría de ellos trabajadores chinos han de la mina de carbón. Asimismo, decenas de personas resultaron heridas en ambos incidentes. Las autoridades les tomaron declaración durante la investigación que se llevó a cabo. En Xinjiang se han producido varios conflictos étnicos y enfrentamientos mortales. Durante 2015, y dado que 2014 había resultado ser el año de mayor incidencia ASIA DEL ESTE Y ASIA DEL SURESTE 249 de la violencia en la era moderna, el Gobierno chino impuso reglas más severas y controles más estrictos para la práctica religiosa de los uigures musulmanes en Xinjiang. Las medidas incluyeron la imposición de un jumah semanal (reunión de los viernes en la mezquita) bajo un estricto control y con la posibilidad de celebrarse solamente entre las 2 y las 3 de la tarde del viernes. Otra norma impuesta a todos los oficiales del Gobierno, funcionarios y estudiantes de fe musulmana fue la prohibición de participar u organizar actividades durante el Ramadán. Algunas autoridades del gobierno local emitieron, incluso, edictos para que los restaurantes y demás lugares en los que se sirven comidas gestionados por musulmanes tuvieran que mantener los horarios habituales durante el Ramadán. También se obligó a los estudiantes a regresar a la escuela un día a la semana durante las vacaciones de verano para asistir a clases, en las que se ofrecía el almuerzo gratis a modo de incentivo. Todas esas restricciones y reglas ponen claramente de manifiesto la falta de respeto y el desdén con que el Gobierno chino trata la práctica religiosa musulmana, por lo cual los problemas de conflicto étnico y de descontento de la población siguen prevaleciendo en la región autónoma de Xinjiang. Una visión superficial podría sugerir que ha habido menos incidentes violentos bajo ese gobierno autoritario intensificado, pero el temor y la falta de confianza continúan en una tensa relación entre las autoridades chinas y los uigures musulmanes. Según un informe publicado por el Proyecto de Derechos Humanos Uigur (UHRP por sus siglas en inglés) por la Asociación Uigur Americana de Estados Unidos en marzo de 2015,1 entre 656 y 715 personas fallecieron durante los enfrentamientos y los incidentes violentos entre uigures y otros grupos étnicos en la región en el periodo 2013–2014. De hecho, los fallecidos en 2014 casi doblaron la cifra de 2013, y dado que se trata de estimaciones basadas en información recogida de informes de medios de comunicación chinos y extranjeros, el número real de muertos puede ser mucho más elevado debido a la falta de información resultante de las restricciones aplicadas a los medios de comunicación en China. Acaparamiento de tierras en la región de Mongolia Interior Para la región de Mongolia Interior, el acaparamiento de tierras por parte de empresas y de agencias del Gobierno ha sido un enorme problema en 2015, junto con violentos incidentes en los que se han visto implicados grupos étnicos minoritarios. Los bosques de la montaña Han Shan, bajo jurisdicción de Ar Horqin de Mongolia Interior, han sido designados área protegida por el Estado desde 1997, prohibién- 250 IWGIA – EL MUNDO INDIGENA – 2016 dose desde entonces el acceso al área a los pastores nómadas mongoles locales. De hecho, cuando los pastores traspasan sus límites son expulsados y se les imponen multas, con el resultado de que los pastores mongoles no pueden llevar a cabo su economía de sustento tradicional, lo que dió lugar a una enorme protesta en 2015. La región de Mongolia Interior es muy rica en recursos naturales, y el gobierno chino ha continuado reubicando a la fuerza a las personas para acceder a dichos recursos, otorgando licencias para la extracción de carbón y otros proyectos de minería. Todo ello ha provocado numerosas protestas y problemas legales por parte del pueblo Mongol en los últimos años. Las protestas y las situaciones de conflicto se han centrado en el asunto de la propiedad, ya que la ley otorga que los derechos de propiedad de las pasturas y los bosques pertenecen al Estado y, en ese marco legal, los oficiales del Gobierno a menudo aceptan sobornos de empresas privadas a cambio de permisos de desarrollo urbanístico, minería, tala y demás proyectos empresariales privados. Por su parte, las autoridades chinas han sido muy lentas a la hora de acabar con la corrupción y han fracasado en la gestión de los derechos de propiedad forestal y de terrenos de pastura. El resultado es que sigue habiendo violaciones de los derechos del pueblo Mongol a practicar sus modos tradicionales de sustento. Conflictos violentos en áreas minoritarias del suroeste de China En 2015 han tenido lugar problemas similares de acaparamiento de tierras y de expropiación ilegal para proyectos de “desarrollo económico” llevados a cabo con la complicidad de oficiales corruptos del Gobierno en otras zonas de minorías étnicas. Uno de esos incidentes ocurrió el 2 de abril de 2015, cuando varios cientos de aldeanos organizaron una gran manifestación contra el gobierno local de la provincia de Guizhou. La mayoría de los manifestantes pertenecían a minorías étnicas, dado que los poblados/aldeas se encuentran al suroeste de la provincia, en la prefectura autónoma de Quanxinan Buyi y Miao. Los pueblos étnicos minoritarios Buyi y Miao protestaban por los oficiales corruptos del gobierno que se habían embolsado grandes cantidades del dinero destinado a la compensación financiera de los poblados por las expropiaciones de tierras para la construcción de una presa hidroeléctrica en la zona. El 9 de junio, en la provincia vecina de Sichuane, en la prefectura de Mabian de la región de Leshan, varios cientos de aldeanos pertenecientes al pueblo Yi denunciaron a oficiales de alto rango de la provincia, exigiendo que el gobierno de la pro- ASIA DEL ESTE Y ASIA DEL SURESTE 251 vincia de Sichuan investigara el acaparamiento de tierras llevado a cabo por parte de oficiales locales que habían expropiado a la fuerza varios cientos de hectáreas de tierra y valles montañosos pertenecientes a los poblados con el pretexto de que se iba a construir una carretera. Los habitantes de la zona denunciaron también que oficiales corruptos no habían desembolsado la compensación económica de cerca de 700.000 Yuan (unos 114.000 de US$ en aquel momento) a los propietarios de las tierras, y que el dinero había ido a parar a las cuentas personales de los oficiales de la zona. También en el suroeste de China el pueblo étnico minoritario Yao se enfrentó a las autoridades locales y a la policía, resultando en un violento enfrentamiento el 19 de junio. El incidente tuvo lugar en el pueblo de Yao, en el municipio de Fuyang, donde la población local montó barricadas a las puertas del nuevo proyecto de fábrica que tenía previsto explotar el arroyo de la población para producir agua mineral embotellada. Los protestantes afirmaron que oficiales sin escrúpulos de la población habían vendido ilegalmente los terrenos para el proyecto de la fábrica, e interrumpieron temporalmente la construcción de la misma. Pero las autoridades enviaron varias unidades de la policía para retirar las barricadas, con las consecuentes confrontaciones violentas que se saldaron con cifras elevadas de civiles heridos y arrestados. Protestas y enfrentamientos contra el acaparamiento de tierras en otras regiones En el norte de China también ha habido incidentes violentos, como en el municipio de Yueyahu, de la región autónoma de Ningxia Hui, el 19 de junio de 2015. El pueblo Hui, un grupo étnico minoritario musulmán, se enfrentó a la policía y a los oficiales locales que estaban llevando a cabo un traslado forzoso de las sepulturas del cementerio del pueblo. Se iban a desenterrar un total de 5.500 tumbas, que serían trasladas a otro lugar. Los oficiales locales habían garantizado la aprobación a varias empresas de supuestos proyectos de “ecoturismo” en una zona que comprendía el cementerio local y los terrenos adyacentes. En la isla de Hainan, al suroeste de China, el pueblo Li, del condado autónomo de Changjiang Li, se enfrentó a las autoridades en diciembre del año pasado. Cientos de habitantes de la minoría Li intentaron impedir incursiones por parte de oficiales de seguridad y la policía que habían sido convocados por los oficiales del condado. El gobierno local había iniciado un programa para “alquilar” las tierras agrícolas de la zona sin haber consultado ni haber obtenido el consentimiento de sus habitantes. En 252 IWGIA – EL MUNDO INDIGENA – 2016 la escaramuza resultante, muchas personas resultaron heridas y detenidas para ser interrogadas, mientras los habitantes de la zona seguían con su protesta contra lo que consideraban un acaparamiento ilegal de tierras por parte de oficiales del Gobierno. Desarrollo económico, problemas sociales y aspiraciones de libertad de las minorías étnicas En los últimos años, la expropiación forzosa y el acaparamiento de tierras, que han dado lugar a protestas y a enfrentamientos violentos, se han producido en muchos pueblos y municipios de zonas habitadas por minorías étnicas del país. En tácticas alternativas, el Estado chino casi lo ha denominado “cuestiones económicas y de desarrollo de la sociedad”, y el desasosiego y las acciones de protesta por parte de los pueblos étnicos minoritarios han sido clasificados de “problemas sociales”. La visión del Gobierno es que esos conflictos étnicos y la disidencia pueden eliminarse mitigando la brecha y las desigualdades cada vez mayores entre los ricos y los pobres de la sociedad. El Gobierno chino no reconoce las diferencias que existen a nivel de la cultura, religión y prácticas tradicionales de los pueblos étnicos minoritarios. Al contrario, la política del Gobierno ha consistido en reducir tales diferencias y en aplicar la misma legislación represora y las mismas medidas restrictivas en casi todos los casos. Los observadores externos y los activistas de los grupos étnicos minoritarios han expresado su preocupación por el impacto del desarrollo económico chino y los programas de “reducción de la pobreza”, e indican que tales programas llevarán a una asimilación aún más rápida de las minorías étnicas en la corriente general de la sociedad china han. Nota 1 Proyecto Uigur de Derechos Humanos de 2015. Legitimizar la represión: la guerra china contra el terror de Xi Jinping y la policía estatal del Turquestán Oriental (en inglés). http://docs.uyghuramerican.org/pdf/Legitimizing-Repression.pdf ASIA DEL ESTE Y ASIA DEL SURESTE 253 Huang Chi-ping es profesora del Departamento de Etnología de la Universidad Nacional Cheng-chi de Taiwán, donde enseña e investiga sobre el grupo yi perteneciente a los pueblos de minoría étnica de China. Su campo de especialización es Etnografía y Literatura Étnica. Asimismo, colabora como editora para la revista “Aboriginal Education World”. Su artículo fue traducido del chino por Jason Pan, director de la organización por los derechos indígenas TARA Ping Pu, y antiguo miembro ejecutivo del consejo del Pacto de Pueblos Indígenas de Asia (Asia Indigenous Peoples Pact, AIPP). Jason Pan es indígena pazeh del pueblo Liyutan, en la provincia de Miaoli, en Taiwan.