Jacqueline Power Teories de l'espai interior Ambiente Espacio interior: representación, ocupación, bienestar e interioridad Arquitectura Autoría Desjerarquización Diseño Bienestar Diseño del espacio Interioridad Diseño integral Ocupación Disposición En este artículo repasaremos el concepto de espacio según se entiende y se trabaja en la disciplina del diseño interior/ arquitectura interior. En primer lugar describiremos el término “interior”. A continuación analizaremos el espacio como un concepto general antes de explorar qué es concretamente el espacio para la disciplina del diseño interior/arquitectura interior. ¿Cómo se entiende el espacio? ¿Cómo “ven” el espacio los diseñadores de interiores/arquitectos de interiores? Representación Distribución Espacio de trabajo Teorías espaciales Espacio urbano Estancias de la ciudad Hábitat estratégico Interactividad Luz Nuevos consumidores Prácticas experimentales Proyecto Retail Sociocultural Tecnología Tendencias Terreno doméstico Triple bottom line Introducción La teórica de diseño interior Joanne Cys ha escrito: “El diseño interior tiene una historia relativamente corta y es algo generalmente aceptado que todavía se está desarrollando como disciplina, como práctica profesional y como campo de investigación”.1 Esto es aplicable al diseño interior/arquitectura interior, no solo en el contexto australiano, sino en todo el mundo. Aquí no entraremos a discutir la nomenclatura de la disciplina y, conscientes de que es un debate abierto, utilizaremos por igual los términos “diseño interior” y “arquitectura interior”. Desde una disciplina en busca de su identidad, tenemos que reivindicar nuestro espacio propio, y para ello tenemos que definir qué entendemos precisamente por “espacio”, un término muy utilizado pero por cuyo significado o multiplicidad en un sentido concreto de la disciplina rara vez nos preguntamos. ¿Qué es el espacio interior? ¿Qué queremos decir Jacqueline Power “¿Qué es el espacio interior? ¿Qué queremos decir realmente cuando utilizamos la palabra ‘espacio’ en nuestros estudios de diseño?” La Dra. Jacqueline Power se dedica a la investigación en el campo de la arquitectura interior y a la investigación colaborativa en el campo del diseño de producto. La tesis que terminó recientemente se centra en el primero de estos campos, y concretamente en torno al espacio indígena en el sudeste de Australia. Jacqueline Power es profesora de diseño interior en la University of Tasmania. 1 Cys, J. “Developing a Discipline: Interior Design Education and Research”. En: Leydecker, S., Designing Interior Architecture: Concept, Typology, Material, Construction. Basilea: Birkhäuser, 2013, p. 62. realmente cuando utilizamos la palabra “espacio” en nuestros estudios de diseño? Empezaremos describiendo el “interior”. A partir del trabajo del historiador de la arquitectura Charles Rice, veremos cómo ha ido cambiando el uso de este término (en inglés) con el tiempo. Después introduciremos el concepto de espacio, para pasar luego a examinar su conceptualización dentro de la disciplina de interiores. Analizando el espacio interior desde tres enfoques principales —en su relación con la representación, la ocupación y el bienestar— obtendremos un “marco aplicado” que nos ayudará a trabajar tangiblemente con el espacio en un formato de estudio de diseño. Los diseñadores logran utilizar estos tres aspectos espaciales para crear y manipular el espacio, mejorarlo y producir espacios interiores significativos. Por último, nos centraremos en el concepto de “interioridad”. A diferencia de la representación espacial, de la ocupación y del bienestar, la interioridad se exime de la aplicación directa, llevando el espacio de lo real a lo posible o, dicho de otra forma, desvinculando el espacio de la forma arquitectónica. 11 30 ELISAVA Temes de Disseny El interior En la definición más sencilla, “interior” significa “dentro” y suele hacer referencia a un edificio o una estancia. En este sentido se lo asocia más con los límites del envoltorio de un edificio o las superficies presentadas por las formas arquitectónicas construidas. Un interior está inherentemente vinculado al espacio definido por la forma arquitectónica, y es al mismo tiempo parte de la estructura y lo que hay dentro de ella. Sin embargo, el uso del término inglés interior ha ido variando, aplicándose a contextos muy distintos a lo largo del tiempo. Charles Rice, de quien dicen que es “posiblemente el académico más publicado y respetado de Australia en el ámbito del diseño interior”, analiza el uso de esta palabra. 2 Rice subraya que el uso del término interior en inglés ha cambiado varias veces a lo largo de los siglos y expone esa evolución temporal explicando que “[interior] empezó a utilizarse en inglés a finales del siglo xv para referirse a las divisiones básicas entre dentro y fuera, y para describir la naturaleza espiritual y más interior del alma. A partir de principios del siglo xviii, el concepto de interioridad se utilizó para designar un carácter más interior y un sentido de la subjetividad individual, y desde mediados del mismo siglo, interior se empezó a usar para señalar los asuntos propios de un estado, además de calificar el territorio que pertenece a un país o región. Pero no fue hasta principios del siglo xix cuando interior pasó a designar lo que el diccionario Oxford English Dictionary (OED) define como ‘el interior de un edificio o estancia, sobre todo en relación con su efecto artístico; también, una imagen o representación del interior de un edificio o estancia. O, en el ámbito del teatro, un decorado representando la parte interior de un edificio o una estancia’.” 3 Jacqueline Power Espacio interior Básicamente, el término “interior” describe algo que está dentro y, sin embargo, la descripción de Rice deja claro que históricamente ha tenido un uso mucho más amplio y se ha aplicado a ámbitos micro y macro por igual. Según argumenta el autor, “interior” ha sido utilizada para hacer referencia a conceptos muy diversos, desde edificios hasta personas y estados. Algunas definiciones de diccionario también mencionan la técnica literaria del monólogo interior con la que se transmiten los pensamientos privados de un personaje.4 Cabe señalar que la aplicación del término a estos conceptos divergentes se produjo en distintos contextos, y no específicamente dentro del paradigma de construcción de edificios utilizado por la arquitectura para expresar sus conceptos. Muchos de los usos de la palabra parecen estar históricamente vinculados a nociones de propiedad (de tierra, de espacio y de pensamientos). En todos esos usos, el término “interior” implica cierto grado de aislamiento, de dejar fuera a las personas y los conceptos para poder tener un mayor control y propiedad, y este aspecto subyacente del término revela cierta estrechez de miras históricamente asociada al nombre. 5 Dicho de otra forma, la idea de interior implica que algo queda fuera, excluido de lo de dentro, y el límite que distingue el interior del exterior es esencial para la definición de ese espacio interior. Como señala el filósofo Mark Kingwell, “el interior siempre queda definido por al menos tres agentes activos: dentro, fuera y —el más importante pero que se ve menos— el umbral que separa a ambos”.6 La creación de este umbral entre dentro y fuera es un interés común, un resultado de la reunión de la práctica del diseño interior/arquitectura interior y la arquitectura. Sin embargo, un interior no es simplemente algo formado por la arquitectura y luego adornado por el diseño interior/arquitectura 2 Cys, J. “[un]disciplined”. Interior Design/Interior Architecture Educators Association (IDEA) Journal (2006), p. 25. 5 Power, J. South-East Australian Indigenous Space and its Cosmological Origins (tesis doctoral). University of New South Wales, 2013, p. 60. 3 Rice, C. “Rethinking Histories of the Interior”. The Journal of Architecture, vol. 9, núm. 3 (2004), p. 276. 6 Kingwell, M. “Crossing the Threshold: Towards a Philosophy of the Interior”. Queen’s Quarterly, vol. 113, núm. 1 (primavera 2006), p. 91. 4 s.v. “interior adjective”. Oxford Dictionary of English, 3ª ed. Oxford: Oxford University Press, 2010. 12 interior. Las superficies que presenta la arquitectura aportan un contenedor para el ornamento y el artificio, pero el espacio que queda dentro también es maleable y adaptable. Entonces, ¿cuál es este espacio creado, y a veces derivado, de la práctica de la arquitectura y el diseño interior/arquitectura interior? Espacio El concepto del espacio ha sido teorizado de diversas formas desde las disciplinas más variadas, incluyendo las ciencias, la geografía y, por supuesto, la arquitectura. En A History of Aesthetics and the Structuring of Space, Justin Wilwerding ofrece un esclarecedor repaso de las tres formas principales en las que se ha conceptualizado el espacio, y concluye diciendo que “el análisis filosófico del espacio tiene una historia larga y sólida, pero de esta historia podemos deducir el desarrollo de tres ideas pertinentes para nuestra cultura y para la práctica de los diseñadores que diseñan espacios: el espacio es una sustancia (perspectiva relativista; Aristóteles, Mach, Einstein); el espacio es un vacío (perspectiva absolutista; Euclides, Newton); el espacio es un constructo mental relativo (Leibniz)”.7 Las teorías del espacio están a veces vinculadas con conceptos de lugar y tiempo.8 Wilwerding también hace referencia a los modelos cosmológicos que precedieron a estas concepciones filosóficas y científicas del espacio.9 En mi investigación doctoral analicé una cosmología indígena australiana concreta y su creación de un efecto espacial.10 Veremos este modelo más adelante en relación con la interioridad. Pese a que el concepto de espacio tenga una historia tan larga, podríamos decir que, en la forma como 7 Wilwerding, J. “A History of Aesthetics and the Structuring of Space”. En: Vaikla-Poldma, T. Meanings of Designed Spaces. Nueva York: Fairchild Books, 2013, p. 69. 8 “Tanto Mach como después Einstein opinaban que el espacio, el tiempo, la masa y la energía estaban inexorablemente vinculados y que el espacio es una entidad”. Ibídem. 9 Ibid, p. 67. lo entienden los diseñadores, el espacio es una idea relativamente nueva. Charles Rice ha explicado que el espacio “como un concepto específicamente arquitectónico para significar un volumen tridimensional no fue conceptualizado hasta finales del siglo xix, y se podría decir que debe su conceptualización a la significancia cul- “Las superficies que presenta la arquitectura aportan un contenedor para el ornamento y el artificio, pero el espacio que queda dentro también es maleable y adaptable” tural del interior doméstico burgués”.11 Esto revela que el interior (= dentro) no solo se ha visto influido por las concepciones del espacio, sino que, hasta cierto punto, ha “conformado” a las teorías espaciales. Rice defiende que hay dos “grandes líneas de teoría espacial atribuibles al estudio del interior”.12 Según él, “la literatura sobre el espacio se divide entre lo arquitectónico y lo poético: el espacio arquitectónico es visto en su particular emergencia histórica de finales del siglo xix, y la poética del espacio doméstico es vista como perpetuamente disponible para experimentar con ella”.13 Esta definición que hace Rice de la teoría espacial centrada en el interior subraya la forma concreta en la que debería tratarse el concepto del espacio desde la disciplina. 10 Power, J. “Australian Indigenous Interiority and Cosmology”. En: Traditional Dwellings and Settlements Working Paper Series, vol. 224 (2010), p. 1-28. 11 Rice, C. The Emergence of the Interior: Architecture, Modernity, Domesticity. Londres: Routledge, 2007, nota 13, p. 122. 12 Rice, C. The Doubleness of the Interior: Inhabitation and Bourgeois Domesticity (tesis doctoral). University of New South Wales, 2003, p. 27. 13 Ibid, p. 28. 13 Jacqueline Power Espacio interior 30 ELISAVA Temes de Disseny Entonces, ¿cómo se entiende el espacio desde la disciplina de interiores? Espacio interior Como ya se ha comentado, el espacio es algo específico de cada disciplina; pero la disciplina de interiores aún tiene que reivindicar el espacio en sus propios términos. Wilwerding, por ejemplo, ha observado que “desde un punto de vista educacional y disciplinar han sido raras las iniciativas consagradas al estudio de un elemento tan importante [el espacio] en nuestra profesión”.14 Probablemente, el espacio interior es a la vez todas y ninguna de las cosas descritas por otras disciplinas. No es un espacio homogéneo que agrupe muchos conceptos diversos de todas las disciplinas, sino una entidad compleja que capta intereses concretos de la disciplina de interiores. Cuando el término “espacio” se utiliza en el contexto de las disciplinas de diseño, se entiende que “el espacio del que hablan los arquitectos (o los diseñadores de interiores/arquitectos de interiores) no es el espacio en general, sino una visión del mismo bastante específica de su profesión: una categoría inventada para sus fines propios”.15 La propia “profesión” de los arquitectos y los diseñadores de interiores/arquitectos de interiores puede hacer referencia a muchas conceptualizaciones diferentes del espacio. El término se puede utilizar con un sentido objetivo, refiriéndose a su capacidad de señalar la ubicación propia en el espacio utilizando la geometría cartesiana. Francis D. K. Ching, por ejemplo, cuyos artículos constituyen textos fundacionales en muchos cursos de arquitectura y de diseño, define el espacio como “el ámbito tridimensional en el que los objetos y los acontecimientos se producen y tienen una posición y una 14 Wilwerding, J. Op. cit., p. 66. 15 Forty, A. Words and Buildings: A Vocabulary of Modern Architecture. Londres: Thames & Hudson, 2000, p. 275. 16 Ching, F. D. K. A Visual Dictionary of Architecture. Nueva York: John Wiley & Sons, 1995, p. 217. 17 Edwards, C. Interior Design: A Critical Introduction. Oxford: Berg, 2011, p. 115. 14 dirección relativas, y en concreto una parte de ese ámbito puesto aparte en un caso concreto para un fin determinado”.16 El historiador del diseño Clive Edwards explica que el “enfoque estático” cartesiano del espacio era, por ejemplo, “la base del ideal decimonónico del Beaux Arts del siglo xix de planos interiores del espacio basados en ejes y en aberturas jerárquicas”.17 En cambio, desde la disciplina de interiores, el espacio también puede emplearse para “Desde la disciplina de interiores, el espacio también puede emplearse para encarnar tanto el entorno físico construido como el tejido social de dicho entorno” encarnar tanto el entorno físico construido como el tejido social de dicho entorno.18 Según el filósofo Gaston Bachelard, “el espacio habitado trasciende el espacio geométrico”.19 Hemos visto pues las distintas formas en las que los diseñadores de interiores/ arquitectos de interiores reflexionan sobre el espacio y desarrollan los constructos mentales, relativistas y absolutistas del espacio que hemos mencionado. Entonces, ¿cómo es el espacio interior? ¿Qué es el espacio para nuestra disciplina? Desde el diseño interior/arquitectura interior, el espacio se trabaja específicamente de varias maneras. En un sentido práctico, el espacio se entiende en su aplicación al diseño y en su potencialidad para ser manipulado de distintas maneras a través de la forma construida. Como he dicho al principio, soy consciente de que el espacio en la esfera interior genera debate en torno a los siguientes temas clave (sobre todo en su enseñanza): representación del espacio, ocupación y uso del espacio y bienestar de los usuarios en el espacio, tres categorías que se pueden agrupar más ampliamente en las áreas de “comunicación” del espacio (representación), “experiencia” del espacio (ocupación y uso) y “diseño” del espacio (bienestar). Es necesaria una cuarta categoría, un método teórico per trabajar con el espacio que sea propio de la disciplina, el de “reflexionar” sobre los atributos del espacio interior (interioridad). Aunque de entrada podrían parecer simplificadas, estas categorías tienen que ver con la forma en la que los diseñadores de interiores/arquitectos de interiores se implican activamente con el espacio, lo utilizan y lo teorizan. No obstante, las categorías generales aquí descritas no son del todo nuevas. Clive Edwards, por ejemplo, explicaba que “el entendimiento conceptual del espacio en relación con esta experiencia de movimiento, construcción y representación es importante para los diseñadores de interiores”.20 La novedad está posiblemente en que las categorías aquí adoptadas distinguen entre la dedicación práctica y la dedicación teórica a conceptos espaciales pertinentes al estudio de diseño interior. Entonces, ¿cómo se utiliza el espacio en la práctica? El espacio interior y su representación En la disciplina de interiores, la capacidad de representar el espacio interior es un tema recurrente. El prestigioso diseñador de interiores Ben Kelly ha escrito: “Diseñar es comunicar”.21 La representación mediante técnicas de dibujo ortogonal es esencial 18 Los “ajustes conductuales”, por ejemplo, comprenden el “espacio, lo que le rodea y lo que contiene, así como las personas y sus actividades”. Véase Lawson B. The Language of Space. Oxford: Architectural Press, 2001, p. 23. 20Edwards, C. Op. cit., p. 115. 19 Bachelard, G. The Poetics of Space (título original: La Poétique de l’espace). Boston: Beacon Press, 1994, p. 47. 22 Evans, R. “The Developed Surface: An Enquiry into the Brief Life of an Eighteenth-Century Drawing Technique”. En: Weinthal, L. Toward a New Interior: An Anthology of Interior Design Theory. Nueva York: Princeton Architectural Press, 2011, p. 304. 21 Kelly, B. En: McDermott, C. Plans and Elevations: Ben Kelly Design. Londres: Architecture Design and Technology Press, 1990, sin paginar. dentro de la práctica y se considera una aptitud vital que se enseña a los futuros profesionales durante su formación superior. La técnica ortogonal del “interior de superficies desarrolladas”, en palabras de Robin Evans, que permitió “invertir la arquitectura de dentro a fuera, para poder mostrar alzados internos en lugar de externos en relación con un plano de planta”, es un ejemplo de una aplicación del dibujo ortogonal específica para interiores.22 Y, hablando de la arquitectura, que comparte un mismo lenguaje de representación con la disciplina de interiores, el filósofo Henri Lefebvre dice: “Dentro de la práctica espacial de la sociedad moderna, el arquitecto se acomoda en su propio espacio. Tiene una ‘representación de ese espacio’, vinculada a elementos gráficos (hojas de papel, planos, alzados, secciones, perspectiva de fachada, módulos, etc.). Este espacio ‘concebido’ les parece ‘verdadero’ a los que lo utilizan, a pesar de que —o tal vez porque— es geométrico: porque es un medio para objetos, un objeto en sí mismo y un locus de la objetivación de planos”.23 Los dibujos ortogonales se perciben como si comunicaran espacio real, según argumenta Lefebvre. Tal vez el poché —la técnica de dibujo para ilustrar el espacio de construcción como un vacío que a veces está coloreado pero sin indicar ninguno de los materiales de construcción reales necesarios— es el que capta más claramente esta preocupación por la geometría. Al representar el espacio interior, el espacio de construcción suele considerarse innecesario para los dibujos de presentación, de manera que solo tienen el privilegio de la representación las superficies presentadas hacia el interior.24 Lógicamente, los dibujos ortogonales no transmiten todos los atributos asociados a un interior, por lo que tienen que com- 23 Lefebvre, H. The Production of Space (título original: La production de l’espace). Oxford-Massachusetts-Victoria: Blackwell Publishing, 1991, p. 361. 24 Loveday, T. “Construction, the Third Space of Architecture”. Ponencia presentada en el congreso anual de la Art Association of Australia and New Zealand (AAANZ), Monash University, Victoria, diciembre de 2006. 15 30 ELISAVA Temes de Disseny plementarse con renders y maquetas. No obstante, tienen la ventaja de mostrar a la vez tanto el interior como el exterior y el espacio de construcción. 25 La disciplina de interiores trabaja principalmente la representación del espacio antes de que se haga realidad, lo que hace que sea fundamental transmitir la totalidad de los atributos experenciales que puede llegar a comprender el espacio real que se va a habitar. Podríamos decir incluso que la representación interior del espacio falla si no hay imágenes renderizadas. Además de la representación técnica de las imágenes ortogonales que documentan los aspectos mensurables del espacio, para que tenga lugar una comunicación completa hay que transmitir el ambiente del espacio interior. Los montajes y renders que transmiten el ambiente y cierto sentido de la materialidad pueden no ser representaciones auténticas del espacio, pero precisamente por eso permiten imaginar y conjurar el interior con los ojos de la mente. Un buen montaje ofrece la oportunidad de imaginar y además conserva la posibilidad de que ese espacio imaginado cambie con cada visión individual de la obra. El espacio interior y su ocupación La ocupación 26 y el uso del espacio por parte de las personas también es un aspecto muy importante en la práctica del diseño interior/arquitectura interior. Transciende la idea del cuerpo en el espacio ejemplificada por el Hombre de Vitruvio para abrazar la sutil política de la participación humana. Saber ver y comprender a las personas y sus deseos incide en la conceptualización del espacio por parte de los diseñadores de interiores/arquitectos de interiores, que piensan en el espacio desde el punto de vista de cómo podrán experimentarlo sus usuarios. En su Theory of Proxemics, 27 el antropólogo Edward T. Hall expone una idea importante para estas Jacqueline Power Espacio interior concepciones del espacio interior al establecer tres categorías: espacio fijo, espacio semifijo y espacio informal. El más pertinente para nuestro tema es el último, el espacio informal, que afecta a las “distancias mantenidas en los encuentros con otras personas”.28 Los cuatro niveles de espacio informal de “Visto desde la perspectiva del bienestar, el espacio no solo tiene en cuenta la inmediatez del espacio físico, sino que la prolonga en el tiempo para considerar los efectos inmediatos del espacio en los usuarios” Hall (distancia íntima, distancia personal, distancia social y distancia pública) varían según el grado de implicación sensorial con respecto a los demás usuarios del espacio. Cabe señalar cómo insiste Hall en que su descripción de la proxémica espacial varía culturalmente y que “la gente de distintas culturas no solo habla idiomas diferentes, sino que, lo que posiblemente es más importante, habita mundos sensoriales diferentes”. 29 El primer paso necesario para darle sentido a esos “mundos sensoriales” y a la implicación con los demás en el espacio es desarrollar la empatía con los usuarios del espacio interior. En una clase de proyectos de diseño les pedí a mis alumnos que trabajaran a partir del concepto de espacio informal de Hall. Para ello, los alumnos formaron grupos y representaron sobre la moqueta las cuatro distancias prescritas por Hall (con cinta aislante extraíble). Luego, de pie desde las zonas marcadas, se leyeron fragmentos del texto de Hall. Pedí a los alumnos que tuvieran en cuenta todos sus sentidos. ¿Qué podían oler a una distancia íntima? ¿Perfume? ¿Colonia? ¿Qué podían notar? ¿Un aliento cálido? Se les iban haciendo preguntas y se les pedía que grabaran sus observaciones al término de cada zona experiencial. Se recurrió a la empatía con el concepto espacial como herramienta para que los alumnos encontraran un sentido a la teoría y se implicaran con ella, esto es, para que experimentaran conscientemente su implicación con los demás en el espacio. El espacio del usuario es “vivido, no representado (ni concebido)”, según Lefebvre, lo que no deja de contrastar con los aspectos de representación antes comentados que interesan a la disciplina. 30 Lefe­bvre describe los términos “usuarios” y “habitantes” como “etiquetas torpes y peyorativas” que llevan a la homogeneidad y a la “marginalización a través de la práctica espacial”. 31 Pero, por cierto que esto pueda ser, no es fácil renunciar a ellos desde la conceptualización del espacio. Sin embargo, los usuarios (a falta de un término mejor) son un punto de interés central para el diseñador de interiores y el arquitecto de interiores, tanto los usuarios del presente como los del futuro. El espacio interior y el bienestar La idea del espacio y su impacto en el bienestar de los usuarios, tanto a corto como a largo plazo, es otra conceptualización formulada por la disciplina de interiores. Shashi Caan, diseñadora de interiores y actual presidenta de la Federación Internacional de 30Lefebvre, H. Op. cit., p. 362. 31 Ibidem. 25 Ibidem. 26 Preferimos utilizar el término “ocupar” antes que “habitar” porque somos conscientes de que no todos los espacios interiores son para vivir. 27 Hall define “proxémica” como “el término que he acuñado para las observaciones interrelacionadas y teorías del empleo que el hombre hace del espacio como una elaboración especializada de la cultura”. En: Hall, E. T. The Hidden Dimension: Man’s Use of Space in Public and Private. Londres: Bodley Head, 1969, p. 1. 28 Ibid, p. 105. 32 Caan, S. Rethinking Design and Interiors: Human Beings in the Built Environment. Londres: Laurence King Publishing, 2011, p. 76. 33 Ibid, pp. 76-78. Arquitectos/Diseñadores de Interior (IFI), ha afirmado que “el bienestar humano es la finalidad última del diseño”.32 Caan sugiere que el bienestar se puede ver influido por el uso de determinados elementos y principios de diseño en un espacio, así como por resultados más subjetivos como pueden ser algunos espacios inspiradores.33 El color es un ejemplo de cómo los elementos y los principios de diseño se pueden aplicar al diseño espacial y desencadenar cambios emocionales y conductuales en los usuarios. Una estancia azul, por ejemplo, puede hacer sentir que el tiempo se alarga, en tanto que los espacios rojos y amarillos estimulan la actividad y el apetito.34 El planteamiento del espacio desde el punto de vista de la salud y el bienestar llega al punto de incluir propiedades de calidad de aire interior (IAQ).35 La calidad IAQ de un espacio puede tener efectos inmediatos en los usuarios del mismo, así como consecuencias a largo plazo sobre la salud. Visto desde la perspectiva del bienestar, el espacio no solo tiene en cuenta la inmediatez del espacio físico, sino que la prolonga en el tiempo para considerar los efectos inmediatos del espacio en los usuarios. Y, sin embargo, el bienestar no está confinado al individuo en el espacio. También se puede concebir en términos sociales, y la sostenibilidad nos da la llave para entender ese bienestar. Así planteado, el espacio combina muchos elementos independientes pero que se integran entre sí y ejercen una influencia tanto en el espacio físico como a través del espacio temporal. Estamos ante posiblemente la elaboración del espacio más difícil de trabajar, porque es abstracto y no se ve, si bien es cierto que también puede ser cuantificable. En la formación de los futuros diseñadores, es fundamental elaborar el espacio en términos de bienestar. En el proceso de diseño, los usuarios del espacio y su bienestar tienen que ser siempre una prioridad absoluta. Así concebido, el espacio combina varios aspectos diferentes: la selección de la materia que ocupa el espacio interior, los efectos psicológicos del espacio interior en la interioridad de cada cual 34Ibid, p. 111. 35 Véase por ejemplo Siegel, J. A. “Engineering the Indoor Environment”. En: Weinthal, L. Op. cit., p. 349. 29 Ibid, p. 2. 16 17 30 ELISAVA Temes de Disseny y un concepto del espacio espacio-temporal, en términos del impacto del interior en las generaciones futuras más allá de la inmediatez del interior físico. En cierto sentido, la conceptualización del espacio a través del bienestar combina aspectos de teorías más antiguas sobre el espacio, basadas en constructos espaciales mentales, absolutistas y relativistas. El espacio se revela como el puente que conecta la teoría y la práctica. Entonces, ¿cómo se plantean el espacio los diseñadores de interiores en un sentido teórico? Interioridad Ningún análisis del espacio interior sería completo sin un análisis de la interioridad. Es un concepto sobre el que se ha escrito mucho y que se ha descrito a menudo, pero su aplicación suele quedarse siempre en la teoría. El teórico de la arquitectura Michael Benedikt describe lo que él llama “la sensación de interioridad” como “estar sumergido, rodeado, encerrado”. Sin embargo, esa sensación “sale de las estancias y de otros entornos interiores y se extiende a los entornos exteriores (calles, plazas y parques rodeados de árboles y edificios)”.36 Como hemos dicho antes, interior = dentro, pero la interioridad se libera de su armazón arquitectónico. La interioridad es un sentido de lo interior que existe en situaciones en las que puede que no haya ningún interior (= dentro). Como explica Christine McCarthy, por ejemplo, “la interioridad no es ninguna garantía de una ubicación interior”.37 La interioridad es un concepto del espacio que cada vez se reivindica más desde la disciplina de in- 36Benedikt, M. “Environmental Stoicism and Place Machismo”. Harvard Design Magazine, núm. 16 (Invierno/ Primavera 2002), p. 2. 37 McCarthy, C. “Toward a Definition of Interiority”. Space and Culture, vol. 8, núm. 2 (mayo de 2005), p. 116. 38 Massola, A. Bunjil’s Cave: Myths, Legends and Superstitions of the Aborigines of South-East Australia. Melbourne: Lansdowne Press, 1968, p. 105. Jacqueline Power Espacio interior teriores. Mi tesis doctoral explora esta idea en relación con el espacio indígena australiano y con un modelo cosmológico concreto que ha sido descrito por el antropólogo Aldo Massola en los siguientes términos: “En resumen, la tierra era un cuerpo circular plano, cubierto por un cielo abovedado cóncavo y sólido que se extendía hasta el horizonte. Se podría describir, quizás, como un plato tapado con un cubreplatos. Al otro lado de aquella cubierta sólida había una tierra bella llena de cosas buenas para comer y en la que nunca faltaba el agua. A aquel lugar iban a parar los espíritus de todos los muertos…”.38 “El concepto real de interioridad supone una importante manera de trabajar el espacio interior que no está dentro pero sin embargo posee los atributos propios de ‘lo interior’” Esta visión cosmológica era predominante en partes del sudeste de Australia en la época de la colonización europea, aunque también se seguía en otras partes del continente. La antropóloga Dianne Johnson, en su texto Night Skies of Aboriginal Australia: A Noctuary, se refiere a la bóveda cóncava descrita por Massola con la descriptiva expresión “skydome” (bóveda o cúpula celeste). 39 La nomenclatura de Johnson para el modelo cosmológico subraya la creación del espacio con reminiscencias arquitectónicas formada por la presencia de una bóveda astral. El modelo cosmológico de la bóveda celestial constituye una forma evocadora de comprender la interioridad. Este modelo cosmológico presenta una disposición espacial que está claramente definida, con una parte de dentro (el paisaje terrestre debajo de la bóveda), una de fuera (el mundo celestial al otro lado de la bóveda) y una frontera que separa ambas partes (el cielo). En esta disposición, la totalidad del paisaje terrestre que hay bajo la bóveda presenta un interior, que no está definido por una forma arquitectónica. La bóveda celeste es un ejemplo de interioridad, que no queda confinada a una descripción teórica, como sí ocurre en la literatura al respecto. El concepto real de interioridad supone una importante manera de trabajar el espacio interior que no está dentro pero sin embargo posee los atributos propios de “lo interior”. Conclusiones En este artículo hemos repasado el concepto de espacio según se entiende y se trabaja en la disciplina del diseño interior/arquitectura interior. El artículo defiende que el espacio para esta disciplina gira en torno a los siguientes temas clave: la representación del espacio, la ocupación y el uso del espacio y el bienestar de los usuarios del espacio. Estas tres categorías que se relacionan con el uso práctico quedan más ampliamente agrupadas en la “comunicación” del espacio (representación), la “experiencia” del espacio (ocupación y uso) y el “diseño” del espacio (bienestar). El artículo sugiere que estas tres formas de trabajar el espacio aportan un “marco aplicado” que hace posible una implicación tangible con el espacio en un formato adecuado para un proyecto de diseño. Por el contrario, la interioridad presenta un medio teórico de implicarse con el espacio, que hace frente a los tres planteamientos anteriores ofreciendo una forma concreta interior de “reflexionar” en torno a los atributos del espacio interior en casos en los que este espacio puede no estar dentro. La complejidad del espacio como concepto teórico y como producto primario generado por la práctica interior subrayan la necesidad de que desde la disciplina de interiores reivindiquemos nuestro espacio disciplinar, a saber, el Espacio Interior. 39 Johnson, D. D. Night Skies of Aboriginal Australia: A Noctuary. Sídney: Oceania Publications, University of Sydney, 1998, p. 13-14. 18 19