Cristo es Señor del sábado - Recursos Escuela Sabática

RECURSOS ESCUELA SABÁTICA
Ministerio Hit the Mark (Dar en el blanco)
II Trimestre de 2015
El libro de Lucas
Lección 5
2 de mayo de 2015
Cristo es Señor del sábado
Finalmente ha llegado el tema de la lección en el que todos somos expertos. El tema
del que nos encanta hablar por encima de todos los demás. El sábado. Sí, puedes
poner a un lado tu Biblia y la Guía de Estudio ahora mismo, y dejar que comiencen a
fluir libremente los debates.
Puedo escuchar las conversaciones de las clases de Escuela Sabática en este momento: "Cuando yo era niño solíamos hacer esto y aquello en relación al sábado". Sí,
habrá muchos que rememoren la observancia del sábado de aquellos viejos tiempos.
Tal vez sugieran que los métodos de observancia del sábado de hace 30, 40 o 50
años eran las formas correctas en comparación con las formas con las que se guarda
hoy el sábado.
Otros sentirán la necesidad de expresar sus posturas acerca de lo que otros están
haciendo mal en cuanto a su observancia del sábado. No podemos tener una lección
de la Escuela Sabática acerca del tema del sábado sin analizar los "No", ¿verdad?
Algunos declararán con firmeza: "Se supone que no debes hacer esto o aquello".
Otra segura línea de debate será un recordatorio de que, debido a que "guardamos" el
sábado, somos realmente hijos especiales de Dios. ¿Puedo escuchar un "Amén" del
coro? No hay nada mejor que la oportunidad de debatir el indicador semanal de nuestra superioridad religiosa. Si no hay otra manera de distinguirnos de los demás, el
sábado será la estratagema a utilizar.
Pero, sólo tal vez, habrá alguien sentado en la clase de Escuela Sabática preguntándose lo que se habrá perdido al venir a la iglesia en sábado. La Biblia declara que
deberíamos llamar al sábado una "delicia". Pero para demasiadas personas el sábado
está lejos de ser una delicia, sólo es algo que se supone que debe hacer.
Pues sí, si la música en la iglesia es buena y el predicador es interesante y la comida
del sábado es sabrosa, el sábado estará bien. Pero si esos elementos están perdiendo
nuestro sentido de la satisfacción, el sábado está lejos de ser una delicia. ¿Ha sido
reducido el sábado a sólo disfrutar de los mejores eventos relacionados con nuestra
iglesia local?
Sólo puedo hablar por mí mismo, pero estoy convencido de que he saboteado mi relación con el sábado al ignorar un elemento principal: la comunión con Dios a través de
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la naturaleza. No estoy hablando de un mero paseo en el parque después de una gran
comida de sábado. Estoy hablando de un período devocional intencional en cada sábado donde empiece a ver y a apreciar el poder de Dios en la naturaleza.
“El sábado dirige nuestros pensamientos a la naturaleza, y nos pone en comunión con el Creador. En el canto de las aves, el murmullo de los árboles, la música del mar, podemos oír todavía esa voz que habló con Adán en el Edén al
frescor del día. Y mientras contemplamos su poder en la naturaleza, hallamos
consuelo, porque la palabra que creó todas las cosas es la que infunde vida al
alma” (El Deseado de todas las gentes, p. 248).
Necesito entender mejor quién es Dios para mi tránsito en la senda cristiana. Tengo
que llegar a un punto en mi relación con Él en el que confíe en que el mismo poder
que veo en la naturaleza está disponible para mí, mientras transito mis monótonos días
y, en muchas ocasiones, estresantes eventos diarios.
"Considerad cómo crecen los lirios. No labran, ni hilan. Y os digo, que ni Salomón, con toda su gloria, se vistió como ellos. Si Dios viste así a la hierba que
hoy está en el campo, y mañana se echa al horno, ¿cuánto más a vosotros,
hombres de poca fe?" (Lucas 12:27, 28).
Necesito entender mejor que el que hizo el santo sábado tiene el mismo poder de
hacerme santo. Guardar las reglas establecidas y la práctica de la conducta moral no
es suficiente. Necesito un cambio de corazón que está más allá de ser producido con
mis propias fuerzas.
"Di a los israelitas: Guardad mis sábados, porque el sábado es señal entre vosotros y yo por vuestras generaciones, para que sepáis que Yo Soy el Señor,
que os santifico" (Éxodo 31:13).
Aquí se plantean algunos interrogantes para “dar en el blanco” en el repaso de la
lección de esta semana:
» ¿Qué significa para ti la “observancia” del sábado?
» ¿Qué significa guardar el sábado santo?
» ¿Es posible guardar un día santo si la persona no es santa? ¿Por qué sí o por
qué no?
» ¿Es verdad que el principal propósito del sábado es el de reunirse para el culto? ¿Por qué sí o por qué no?
» ¿Qué quiso decir Jesús cuando declaró que Él era el Señor del sábado?
» ¿Qué quiso decir Jesús cuando declaró que el sábado había sido hecho para el
hombre y no el hombre para el sábado?
» ¿Qué es lo que –en caso de que haya algo– se puede aprender en la naturaleza que no puede ser aprendido en un culto de la iglesia?
» ¿Qué ha sido, en caso de que haber algo, lo que has aprendido acerca de Dios
a través de la naturaleza?
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Concluimos la lección de esta semana acerca de Cristo como el Señor del sábado con
Isaías 40:26-29:
«Levantad en algo vuestros ojos, y mirad. ¿Quién creó estas cosas?
Aquél que saca su ejército de estrellas, llama a cada una por nombre.
Tan grande es su poder y su fuerza, que ninguna faltará»
«¿Por qué dices, oh Jacob, y hablas tú, Israel: “Mi camino está encubierto al Señor, y mi derecho pasa inadvertido a mi Dios?” ¿No has sabido?
¿No has oído? El Señor es el Dios eterno, el Creador de los fines de la
tierra. No se cansa ni se fatiga, y su entendimiento es insondable. Él da
vigor al cansado, y aumenta la fuerza del impotente»
¡Hasta la semana próxima! ¡Continuemos dando en el blanco en la Escuela Sabática!
Curtiss Hall
Hit the Mark [Dar en el blanco]
Teaching Helps
Sabbath School Network (SSNet)
Traducción: Rolando D. Chuquimia
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