"D. P. L. CON ISAPRE BANMEDICA", ROL N° 436-1610/95 Fecha de la Sentencia: 12-04-96 Materia: Preexistencia -término de contrato- (acogido) Doctrina: Un dato anamnéstico no constituye en sí mismo, un diagnóstico médico ni prueba el conocimiento del mismo por parte del paciente, así como tampoco prueba la fecha en que éste fue formulado, más aun cuando concurren circunstancias que no permiten al Tribunal formarse una convicción acerca de la preexistencia alegada. VISTO 1.- La demanda de fs. 1 a 3, presentada por la Sra. D. P. L., domiciliada en la calle Alonso de Rivera N° 6950, comuna de Maipú, Santiago, en contra de la ISAPRE Banmédica, domiciliada para estos efectos, en la Avda. Apoquindo N° 4499, sexto piso, comuna de Las Condes, Santiago. Manifiesta que ingresó a la ISAPRE en el mes de diciembre de 1993. En noviembre de 1994 se le diagnosticó una úlcera, extendiéndosele una licencia médica que se prolongó hasta el mes de febrero de 1995. Posteriormente, se le diagnosticó una hernia hiatal junto con una depresión, por lo que en el mes de abril de 1995 fue internada en la Clínica Santa Marta, por el cuadro depresivo. Agrega que, al extendérsele la licencia médica respectiva, la ISAPRE solicitó un informe complementario al médico tratante, Dr. Claudio Molina, quien informó que había sido tratada en 1993 por un psiquiatra. Sin embargo, afirma que eso no es así, puesto que por su estado depresivo sólo comenzó a tomar fluoxetina, medicamento que se vende sin receta médica. Posteriormente, al poner en conocimiento del médico tratante el término del contrato cursado por la ISAPRE, éste revisó nuevamente su ficha clínica y ratificó lo que ella le había señalado, en el sentido que no había estado en tratamiento psiquiátrico. Finalmente, expresa que no recibió la notificación del término del contrato cursado por la ISAPRE y que tomó conocimiento del mismo, al momento en que le fue denegado un bono de atención. Hace presente que su situación es especialmente difícil, ya que se encuentra embarazada. 2.- La contestación de la demanda que rola a fs. 13 y 14, en la que la ISAPRE señala que la Sra. D. P. L. se afilió a esa Institución en enero de 1994, adscribiéndose junto a un beneficiario al plan de salud "Antártico 27". Agrega que la reclamante no consignó ninguna patología al firmar la declaración de salud. Sin embargo, con motivo de la tramitación de una licencia médica y a partir de la documentación médica complementaria reunida, se pudo establecer que ésta había sido tratada por un psiquiatra por el diagnóstico de depresión, con anterioridad a su incorporación a la ISAPRE. En efecto, manifiesta que el informe médico complementario evacuado por el médico tratante, Dr. Claudio Molina Fraga con fecha 20 de abril de 1995, señala que la paciente, en el año 1993, fue tratada por un psiquiatra con Fluoxetina, durante cerca de un año, con diagnóstico de depresión. Hace presente que el artículo 7°, letra f), del contrato de salud, la faculta para poner término al mismo en caso que el afiliado no cumpla con su obligación de efectuar la declaración de salud o que la efectúe consignando información falsa o inexacta. Por lo anterior, agrega dicha Institución, puso término al contrato de salud de la demandante, fundada en que ésta omitió consignar en su declaración de salud que había estado sometida a un tratamiento psiquiátrico por depresión, en el año 1993. 3.- El escrito de observaciones a la contestación de la demanda, que rola a fs. 26 y 27. 4.- El escrito de la demandada, que rola a fs. 35 y 36. 5.- El certificado del médico tratante, Dr. Claudio Molina Fraga, que rola a fs. 6 y 7. 6.- El informe complementario enviado por el médico tratante, a la Contraloría Médica de la ISAPRE, que rola a fs. 8 y 9. 7.- El certificado del médico tratante, que rola a fs. 29, en el que aclara en qué antecedentes se fundó para emitir el informe complementario requerido por la ISAPRE. 8.- La ficha de la consulta de fecha 17 de abril de 1995, que rola a fs. 31 vta. 9.- La ficha clínica de la paciente, de la Clínica Santa Marta, que rola de 38 a 40. CONSIDERANDO 1.- Que el motivo que origina la controversia de autos, es el término anticipado del contrato de salud de la Sra. D. P. L. cursado por la ISAPRE, fundado en la no declaración de una enfermedad preexistente al momento de la suscripción del mismo. 2.- Que no resulta discutido por las partes el hecho que durante el año 1993, la reclamante ingirió el medicamento denominado fluoxetina. Sin embargo, es necesario determinar si su consumo le fue recetado por un psiquiatra, u obedece a una razón distinta. La reclamante señala que lo habría hecho a insinuación de su madre. 3.- Que si bien el médico tratante de la afiliada indica en su informe complementario que rola a fs. 8 y 9, que ésta fue tratada por psiquiatra con fluoxetina en 1993, durante cerca de un año, con diagnóstico de depresión, en el certificado que él mismo emite con posterioridad (fs. 6 y 7), señala que el diagnóstico de depresión fue establecido en abril de 1995, y que fue la madre de la paciente quien la aconsejó que tomara la fluoxetina. 4.- Que atendida la información contradictoria entregada por el Dr. Claudio Molina Fraga, este Tribunal le solicitó una aclaración respecto a sus dichos, lo que efectuó a través del documento que rola a fs. 29, en el que manifiesta que la información relativa al tratamiento psiquiátrico le fue otorgada por la paciente a su ingreso a la Clínica Santa Marta, sin perjuicio que fue ella misma quien le señaló, el día que fue atendida en su consulta, que en 1993, aconsejada por su madre, tomó fluoxetina, llegando a dosis de 100 mg. diarios. 5.- Que en la ficha de consulta de la paciente, de fecha 17 de abril de 1995, que rola a fs. 31 vta., el médico tratante consignó: "En 1993 "trat" (?) por estado depresivo con fluoxetina. Actualmente se automedica ¡100 mg. diarios! por consejo de su madre...". De ello, se desprende la existencia de una duda del facultativo respecto de un eventual tratamiento médico bajo la indicación de un profesional. 6.- Que el antecedente de ingestión de fluoxetina indicada por un psiquiatra, fue obtenido al momento de la hospitalización de la paciente, es decir, se trata de un dato anamnéstico anotado por el médico tratante- que sólo sirve de marco de referencia para evaluar la evolución del cuadro clínico, sin que a partir de ello se pueda concluir la existencia de un diagnóstico médico con anterioridad ni tampoco la intervención de un especialista, cuestión que pudo ser sólo una suposición del profesional que efectuó el interrogatorio, al conocer el medicamento ingerido por la paciente. 7.- Que, por otra parte, cabe tener presente que es de común ocurrencia entre la población, la automedicación, especialmente en aquellos casos que se relacionan con cuestiones de carácter psiquiátrico, lo que hace aún más probable que sea efectivo que haya sido la madre de la paciente quien le haya aconsejado el consumo de la fluoxetina. Además, también se debe tener presente que el mencionado medicamento es de fácil acceso en el mercado, toda vez que para su venta no se exige receta médica. 8.- Que en este sentido, este Tribunal considera que cobra importancia, lo aseverado por el médico tratante a fs. 29, relativo a que la dosis de fluoxetina que la paciente se encontraba ingiriendo (100 mg. diarios), era muy superior a la que comúnmente se indica para terapias psiquiátricas. 9.- Que por lo anteriormente expuesto, este Tribunal estima que los antecedentes acompañados en autos no son suficientes para crear la convicción de que la afiliada estuvo sometida a un tratamiento psiquiátrico durante el año 1993, y que por lo tanto, ésta tuviese un diagnóstico de depresión previo a su afiliación. 10.- Que atendidas las consideraciones anteriores y en virtud de las facultades que me concede el artículo 3°, n° 5, de la Ley N° 18.933, en el sentido de fallar según la prudencia y la equidad me aconsejen, RESUELVO 1.- Acoger la demanda presentada por la Sra. D. P. L. en contra de la ISAPRE Banmédica, por lo que ésta deberá dejar sin efecto en FUN N° 2 con el que se puso término al contrato de salud, debiendo además la Institución bonificar todas las prestaciones requeridas por la demandante en el período comprendido entre la fecha de término del contrato y la fecha de la notificación de la presente resolución, con el reajuste correspondiente. 2.Que la ISAPRE deberá informar a esta Superintendencia dentro del plazo de diez días hábiles contado desde la notificación de la presente resolución, el cumplimiento de ésta, acompañando todos los documentos respaldatorios correspondientes.